lunes, 14 de abril de 2014

FORO 18 : Las prácticas docentes: opiniones y experiencias para innovar

 Adjuntamos el documento elaborado por un alumno del Master (mestrado) de Educación Secundaria de Valencia (Santiago Herrero). Nos gustaría que otras personas, tanto profesores  en activo como futuros docentes de Educación Primaria (Ensino fundamental, básico) y Secundaria (Ensino médio) puedan contribuir con sus opiniones e ideas a mejorar la relación entre docentes en activo y futuros profesores/as.



EXPERIENCIAS Y OTRAS CIENCIAS. 
SOBRE EL PRACTICVM Y LA PROFESIÓN DOCENTE 

Santiago Herrero Gea 

Este es un tema abierto especialmente para todos aquellos alumnos de los distintos Másters de Educación que, habiendo pasado -o estando en pleno proceso de hacerlo- por las prácticas en los distintos centros educativos, quieran exponernos sus impresiones al respecto (no es, insisto, un tema abierto únicamente a los licenciados o graduados en Ciencias Sociales). Ello no quita que, por supuesto, el debate pueda ser muy 
enriquecido por las aportaciones de actuales profesores, tanto del Máster como de cualesquiera centros educativos, que podrán mostrarnos su propia experiencia profesional. 

La idea es responder libremente, siguiendo la propuesta de las siguientes preguntas-modelo, que no cabe tomar por las únicas opciones a debatir aquí: 

1- ¿Qué vemos en los institutos o colegios en los que estamos ejerciendo como profesores en prácticas? ¿Se parece a lo que esperábamos ver, tras acercarnos al mundo de la educación a través de nuestro Máster? ¿Es factible, por lo que hemos apreciado estos meses, aplicar una docencia innovadora, que llegue a todos y responda a las expectativas sociales puestas en el sistema educativo? 
2- ¿Qué sentimos como futuros docentes? ¿Nos animan las dificultades que vemos se afrontan en el día a día educativo de los centros? ¿Cuál sería el rol del docente en el actual contexto? 
3- ¿Qué papel puede darse hoy a las asignaturas de ciencias sociales en las aulas? ¿Pierden o ganan importancia en el actual contexto? ¿Cuál sería el enfoque mejor? ¿Hasta qué punto conviene una "intromisión" crítica en los conocimientos que como profesores la sociedad pretende que transmitamos a sus futuros ciudadanos? 

Además de esto, y siguiendo el consejo de un profesor relacionado con el Geoforo, podríamos hablar también sobre la naturaleza de la conexión entre el profesorado de las educaciones medias y superior; sobre la brecha que parece existir, en muchos casos, entre la teoría y la práctica. Como alumnos del Máster hemos estado en contacto con ambas ramas (algunos de nuestros docentes se mueven en ambas, claro 
está), y podemos añadir nuestro granito de arena al debate. 

Les animo a participar, sean de donde sean, teniendo en cuenta que sus aportaciones serán leídas y enriquecidas por futuros alumnos que en años venideros estén, como hoy nosotros, preparándose para ser docentes. 

Pues bien: por aquello de predicar con el ejemplo, empezaré yo. Licenciado en Historia por la Universitat de València, y estudiando el Màster de Professor d'Educació Secundària por la misma universidad, he realizado las prácticas en el IES Luís Vives, el más antiguo del Cap i Casal. Al comienzo tenía los evidentes 
temores, que podrían resumirse en a) ¿estaré a la altura de las circunstancias? y b) ¿me gustará la experiencia? Doy positivo en ambos casos (disculpen la autoevaluación) y con ello paso a tener muchas ganas de poder vivir de esta profesión, a pesar de los pesares que hoy nos pesan. 

Pude dar una Unidad Didáctica y media, además de alguna clase esporádica, lo que no está nada mal y habla muy bien de mi tutora en el instituto (es ridículo, además de poco ético, ser tutor y no estar dispuesto a pasar algo de responsabilidad a los alumnos en prácticas). Mi planteamiento metodológico estuvo lejos de las más atrevidas propuestas innovadoras que hemos visto a lo largo del Máster, aunque tampoco se 
limitó a las clases magistrales de manual. Usé el programa de presentaciones prezi de manera alternativa con la pizarra (lo que me llevó a percatarme de la impertinencia de los problemas técnicos cuando apenas cuentas con 50 minutos de clase), lancé preguntas a discreción, atendí a las dudas, realicé un debate... La participación fue buena y la comprensión, a juzgar por las aportaciones en clase y los resultados de los exámenes, también. 
¿Conflictos con el alumnado? No tuve, por suerte, más que llamar la atención ante los comunes murmullos, totalmente comprensibles cuando juntamos la adolescencia con horas de posición sedente. Cuanto a las preguntas que planteaba más arriba, veo en mi IES particular aquello que esperaba ver, esto es, profesionales que se toman más o menos en serio su trabajo (y más que menos) aún cuando en ocasiones se laven las manos más de lo debido respecto a "este o aquel" alumno. La docencia innovadora es posible, pero como ya concluimos en otros foros, requiere del trabajo en equipo y de la disposición del profesorado para trabajar más duro en la preparación y gestión de sus clases (los libros de texto son sin duda espacios de confort que anulan la creatividad docente al menor descuido). 
Las dificultades que he visto, aun siendo consciente de que el IES Luís Vives no presenta ni de lejos las dificultades que encontraría en otros centros, sí me animan a lanzarme a la profesión docente, cuyo rol no es otro que activar (o afilar, en el mejor de los casos) la conciencia crítica de nuestro alumnado, algo vital para su libertad Individual en la actual sociedad de información y consumo basura. Me parece ésta una función mucho más importante que la clásica, consistente en disciplinar y formar a los alumnos de cara a su futuro laboral y ciudadano, a cuál más negro. Creo que con esto queda claro que apuesto por la no-neutralidad del profesorado respecto a la realidad en que vivimos. Una cosa es adoctrinar, que es mal extremo, y otra que nuestra función se limite a acostumbrar a nuestros estudiantes a las jerarquías y a las frías "cifras de valor" 
evaluadoras. 
Hasta aquí mi aporte personal. Ahora les toca a ustedes. 
Saludos 

EXPERIÊNCIAS E OUTRAS CIÊNCIAS SOBRE A PRÁTICA E A PROFISSÃO DOCENTE
   Santiago Herrero Gea

Este é um tema aberto especialmente para todos aqueles alunos dos diferentes Mestrados em Educação que, tendo passado – ou estando em pleno processo de o fazer – pelas práticas/iniciação profissional nas diferentes escolas, queiram expor as suas próprias impressões (não é, insisto, um tema aberto unicamente aos licenciados e diplomados em Ciências Sociais). Tal não implica que, por exemplo, o debate possa ser muito enriquecido pelas contribuições dos atuais professores, tanto do Mestrado como quaisquer escolas, que poderão mostrar-nos a sua própria experiência profissional.
A ideia é responder livremente, seguindo a proposta das seguintes perguntas-modelo, que não cabe tomar como as únicas opções a debater aqui:
1. Que vemos nas escolas em que estamos a exercer como professores em prática profissional? É semelhante aos que esperávamos ver, ao aproximar-nos do mundo da educação através do nosso Mestrado? É possível, pelo que temos apreciado estes meses, aplicar uma docência inovadora, que chegue a todos e responda às expetativas sociais colocadas no sistema educativo?
2. Que sentimos como futuros docentes? Estimulam-nos as dificuldades que vemos colocarem-se no dia a dia nas escolas? Qual seria o papel do docente no atual contacto?
3. Que papel pode dar-se hoje às disciplinas de Ciências Sociais nas aulas? Perdem ou ganham importância no atual contacto? Qual seria o melhor enfoque? Até que ponto convém uma “intromissão” crítica nos conhecimentos que, como professores, a sociedade pretende que transitamos aos futuros cidadãos?
Para além disto, e seguindo o conselho de um professor relacionado com o Geoforo, poderíamos falar também sobre a natureza da conexão entre os professores do ensino médio e superior; sobre a brecha que parece existir, em muitos casos, entre a teoria e a prática. Como alunos do Mestrado temos estado em contacto cm ambos os domínios (alguns dos nossos docentes movem-se entre ambos, claro está) e podemos trazer o nosso grãozito de areia para o debate.
Apelo a vossa participação, venham de onde vierem, tendo em conta que os vossos contributos seriam lidos e enriquecidos por futuros alunos que, em anos vindouros, estejam, como nós, a prepararem-se para ser docentes.
Pois bem: por defender um exemplo, começo eu.
Licenciado em História pela Universidade de Valência, e estudando no Mestrado de Professor de Educação Secundária pela mesma universidade, realizei as práticas/iniciação profissional no IES/Escola Secundária Luís Vives, a mais antiga do Cap i Casal. No começo tinha evidentes receios, que poderiam resumir-se em a)estarei à altura das circunstâncias? gostarei da experiência? Dou avaliação positiva em ambos os casos (desculpem a autoavaliação) e passo a ter muita vontade de poder viver esta profissão, apesar dos problemas que hoje nos afetam.
Pude dar uma Unidade Didática e meia, para além de alguma aula esporádica, o quenão está nada mal e fala muito bem de mim a orientadora da escola (é ridículo, para além de pouco ético, ser orientador e não estar disposto a passar algo deresponsabilidade aos alunos nas aulas). O meu posicionamento metodológico estevelonge das mais atrevidas propostas inovadoras que temos visto ao longo do mestrado,mas tão pouco se limitou a classes magistrais de manual. Usei um programa deapresentações prezi de maneira alternativa com o quadro (o que me levou a prevenirmeda impertinência de problemas técnicos quando apenas contas com 50 minutos deaula), lancei perguntas à vontade, atendi a dúvidas, realizei um debate… la participação foi boa e a compreensão, a julgar pelos contributos dos alunos e os resultados dos exames, também.
Conflitos com os alunos? Não tive, por sorte, mais do que chamar a atenção perante os comuns murmúrios, totalmente compreensíveis quando juntamos adolescentes com horas de posição sedentária.
Quanto às perguntas colocadas mais acima, vi na minha Escola Secundária o que esperava ver, isto é, profissionais que tomam mais ou menos a sério o trabalho (e mais que menos), ainda que nalgumas ocasiões lavem as mãos a propósito “deste ou daquele” aluno. A docência inovadora é possível, mas como já concluímos noutros foros, requere trabalho em equipa e a disposição dos professores para trabalhar mais
na preparação e gestão das aulas (os manuais são sem dúvida espaços de conforto, que anulam a criatividade docente ao menor descuido).
As dificuldades que temos visto, ainda que estando consciente de que a Escola Secundária Luís Vives não apresenta, nem de longe, as dificuldades que encontraria noutras escolas, estimulam-me a lançar-me na profissão docente, cujo papel não é outro que o de ativar (ou afinar, na melhor das situações) a consciência crítica dos nossos alunos, algo vital para a sua liberdade individual na atual sociedade de informação e consumo. Esta parece-me ser uma função muito mais importante que a clássica, consistindo em disciplinar e formar os alunos a enfrentar o seu futuro laboral e cidadão, qual deles mais negro. Creio que com isto fica claro que aposto por uma não-neutralidade dos professores a propósito da realidade que vivemos. Uma coisa é doutrinar, que é o mais extremo, e outra, que é a nossa função, limita-se a acostumar os nossos estudantes e hierarquias aos frios “números” da avaliação. 
Até aqui vai o meu contributo pessoal. Agora passo a vós.

Saudações.

En el siguiente enlace podéis encontrar las opiniones de Juan Salvador Ferrer. Creemos que son muy valiosas y nos gustaría que más personas pudieran participar en este mismo sentido.

https://drive.google.com/file/d/0B_IuEakR7Q8KRkctVXRDVHdGWTJNSTV0ZkRTV2oxZUR0VGpj/view?usp=sharing




251 comentarios:

  1. Mi nombre es Olga Romero, Soy docente de Ciencias Sociales en colegio público y en universidad pública, formada en la Universidad Pedagógica Nacional, siempre tuve el ideal de enseñar críticamente la geografía con la ayuda de herramientas didácticas. Pero solamente tres años después (cuando realice mis estudios de maestría) fue que realmente logre mi objetivo y fue porque: En la maestría me enseñaron a investigar en el aula y no a reproducir El equipo docente que me formó siempre me inculcó la importancia de ser humano Me gozo mi profesión por el proceso formativo que esta implica Hoy día como docente de la universidad (UPN) me acoge la preocupación de ver que la gran mayoría de quienes se están formando como docentes no se interesan por la disciplina geográfica conciben las ciencias sociales tan integrales que invisibilizan sus componentes; no quieren ir al aula porque ahora son investigadores; critican la reproducción del sistema pero no crean su propio material didáctico a la espera de lo que digan las editoriales; consideran la profesión docente como un campo de desesperanza. Si nos enamoramos de lo que hacemos, investigamos e innovamos teniendo en cuenta los contextos, podemos formar críticamente desde diferentes enfoques (hay que romper la lógica que para ser crítico se debe estar inconforme con todo y culpara al “sistema”)

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    1. Me encanta tu comentario y me da muchas esperanzas para cuando tenga que empezar a dar clases.

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    2. Buenos días, mi nombre es Janina Craviolatti y soy estudiante de pedagogía en historia y geografía de la Universidad de La Serena. Concuerdo en gran medida con el comentario de Olga Romero, puesto que en muchas ocasiones cae en el profesor la responsabilidad de realizar una enseñanza geográfica innovadora y critica que signifique un aprendizaje significativo para los estudiantes. Para ello el docente debe tener la voluntad primero de planificar bien sus clases y a su vez de contar con las estrategias metodologías y materiales didácticos que facilite el aprendizaje de los estudiantes como protagonistas activos de su proceso de enseñanza-aprendizaje. No obstante, no se puede obviar las limitaciones que existen en los contextos escolares, como por ejemplo, la permanente dependencia hacia el currículo nacional que cada vez le quita más espacio a la geografía lo que dificulta aún más una enseñanza geográfica critica. Por otro lado, del mismo comentario de Olga se desprende otra limitante que recae en las mismas instituciones que forman a los profesores, cabe preguntarse por qué las universidades no enseñan lo suficientemente a los futuros profesores a investigar en el aula y no sólo a reproducir los contenidos tanto así que se tiene que aprender en otras instancias como diplomados, magister o master en el caso de Olga Romero. Es preciso,por tanto, que en la formación inicial de los profesores se refuerce la enseñanza crítica, innovadora y sobre todo potenciar el rol del docente como investigador.
      Saludos Cordiales.

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    3. Buenas tardes, antes que todo quisiera agradecer a Olga por poner en la palestra la preocupación que nace a raíz de la imperiosa necesidad de innovar y dinamizar los procesos referentes a la educación geográfica. Mi nombre es Esteban Rojas y soy estudiante de pregrado en la Universidad de La Serena, Chile. El éxito de todo proceso educativo reside en la manera en que las temáticas a trabajar logren conformarse en un aprendizaje significativo para cada uno de los agentes involucrados en el aula, es por tanto que la elaboración de las herramientas didácticas debe surgir luego de una previa investigación y reconocimiento de las realidades y necesidades contextuales del establecimiento educacional en que tales herramientas serán aplicadas, ¿Para qué me sirve la geografía? Es la pregunta que desde mi perspectiva todos los docentes debiesen realizar antes de comenzar el proceso educativo (en el marco de la educación geográfica). Finalmente será tarea de los docentes investigadores, que participen activamente en sus aulas, el plantear esta pregunta de una manera correcta y dotar a los alumnos de las herramientas necesarias para significar los contenidos de la disciplina geográfica en pos de un desarrollo integral como individuos participantes de una sociedad. Saludos.

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    4. Compañero esteban, mi nombre es Álvaro Castillo, y realmente quería concordar contigo sobre la utilidad de encontrar una utilidad a los contenidos. Considero que para los alumnos, el aprendizaje adquiere un valor excepcional al momento de encontrarle una utilidad en la vida diaria, pues de esta manera se logra aplicar a su contexto, es por esto que creo que es responsabilidad de todos los docentes establecer una conexión entre el contenido que estamos enseñando y el uso que puede poseer este y explicitarlo antes de comenzar la clase.

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  2. Saludos desde Colombia, Mi nombre es Johan Camilo Lombo Ayala, soy Licenciado en Educación Básica con Énfasis en Ciencias Sociales de la Universidad Pedagógica Nacional de la ciudad de Bogotá, soy graduado hace 8 meses, he inicie mi hacer docente desde la educación informal colombiana, pero en la actualidad me encuentro en un colegio del Municipio de Sibaté Cundinamarca, que a su vez hace parte de la sabana sur de Bogotá.
    Para llegar a reflexionar sobre las prácticas que se han realizado en el colegio en donde trabajo, creo que es importante como primera medida hablar de las asignaturas que oriento en este, pues no solo soy docente de ciencias sociales, si no que oriento áreas en la educación media como lo son: economía política. Ética y valores y educación religiosa. Esto no solo me hace estar constante en todos los salones del colegio, sino que estar permanente mente en las actividades escolares, pues creo que es importante, que siendo docente debo educar para ser personas de bien para la sociedad.
    Hablar de formar personas desde la educación escolar colombiana es un reto, ya que no es solo encontrarse con alumnos que no les gustan las ciencias sociales, sino con los contextos familiares que cada uno de ellos tienen, por esto creo que es pertinente el diálogo con los estudiantes y un proceso en donde lo académico esta fuerte mente vinculado con la ayuda familiar. Enseñar y formar son aspectos que vienen desde la casa y que en el colegio deben ser reforzados para convivir en paz.
    Creo que la innovación en la educación en ciencias sociales en Colombia desde mi poca experiencia debe radicar en los siguientes numerales:
    1. Una reconfiguración a los planes curriculares de ciencias sociales en donde las temáticas de la relación tiempo, espacio y sociedad sean cercanos y compatibles con el uso de nuevas didácticas, medios interactivos virtuales, y la vida cotidiana de los estudiantes (sin perder importancia las temáticas académicas)
    2. El diálogo con los estudiantes debe ser una constante sin perder el rol del docente, pero si siendo un orientador cuando sea necesario, de esta manera considero que al momento de planear clase se hace más sencillo crear didácticas para un curso en específico, pues se conoce las necesidades desde una lectura amplia.
    3. Los estudiantes deben ser críticos no criticones, por eso ellos también deben tener la responsabilidad de organizar clases en donde el docente fomente un juego de roles, así la docencia se hace democrática en la práctica y en la formación de ciudadanos.
    4. El trabajo docente debe ser interdisciplinario, por ello debe haber un constante diálogo en los colegios de los profesores de todas las asignaturas, para trabajar en equipo en las actividades programadas.
    5. La innovación es una triada entre docentes, el colegio y la familia.
    6. Las clases de ciencias sociales deben involucrar observaciones y consultas, es decir ampliar el salón a diferentes espacios aledaños o no al colegio.
    7. La imaginación en todos los cursos debe ser una constante, tanto en los estudiantes como en los docentes, pues si nosotros no somos capaces de imaginar, como vamos a pretender conocer espacios lejanos, por esto es importante la lectura amigable en las clases.
    Agradeciendo la lectura de mi aporte, espero que continuemos en esta discusión tan importante en nuestros papeles como docentes.

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  3. Mi nombre es Carina Ruiz y realicé las prácticas docentes en la Escuela Secundaria Básica (ESB) N°2, con domicilio en la calle Villanueva 175, de la ciudad de Punta Alta, provincia de Buenos Aires.
    En la escuela designada para realizar la Práctica Docente correspondiente al 3º año de la carrera del Profesorado de Geografía, pude observar desde el aspecto institucional, un gran apoyo, muy predispuestos a orientar y despejar dudas del practicante.
    La docente orientadora, cuyos consejos constituyeron una guía importante para desarrollar la labor durante la residencia, demostró una buena predisposición durante toda la práctica.
    Desde lo edilicio, la secundaria compartía sus instalaciones con la escuela primaria, debido a esto los recreos se realizaban en horarios alternados.
    La ESB 02 es una institución secundaria recientemente formada, donde los cursos albergan poca cantidad de alumnos. El curso asignado para realizar las prácticas estaba integrado por 18 alumnos, los cuales se caracterizaban por una moderada conducta pero con serios problemas para realizar las tareas, lo que constituyó un desafío en el planteo de las distintas clases.
    En cuanto a que si es factible una docencia innovadora, considero que es posible. Para ello se requiere de un mayor trabajo por parte del docente, que muchas veces debe enfrentarse a varios obstáculos para poder implementarla. Por ejemplo: si la institución no cuenta con determinados tecnológicos, es el docente quien debe ingeniárselas para poder utilizar las TIC en el aula.
    Como futura docente tengo una gran expectativa con la realización de la práctica docente en la secundaria superior. Considero muy importante la constante formación del profesor, ya sea a partir de la realización de cursos de capacitación docente, de la participación en congresos o seminarios, altamente enriquecedores para nuestra labor diaria.
    El contexto actual requiere de una mayor preparación, tener los pies sobre la tierra y adentrarnos en las distintas problemáticas que hoy vive la escuela, por ejemplo, la falta de interés de los adolescentes, la indisciplina, la pérdida de valores, etc.
    En cuanto a la enseñanza de la Geografía, sin descartar una base física, la misma permite abordar diversas problemáticas que vivimos a diario, y a partir de allí, lograr que los alumnos desarrollen un espíritu crítico y creativo en la elaboración de sus propias conclusiones, fundamentadas en el accionar diario del docente como orientador y creador de las distintas situaciones de aprendizaje.

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    1. Un gran Saludo a todos, mi nombre es Silvana Núñez Thompson Profesora Practicante de la Universidad de La Serena de la carrera de Pedagogía en Historia y Geografía, Chile.

      Concuerdo absolutamente con las opiniones que Olga, Johan y Carina han esgrimido en este debate. Creo también, que más allá de que provengamos de diversos países tenemos ciertas concepciones e ideas muy similares con respecto a nuestro "rol docente". Un rol tremendamente importante y lleno de responsabilidades que van cambiando a un paso acelerado y que no todos pueden seguir.

      Me gustaría opinar a partir de las tres grandes interrogantes que plantea Santiago Herrero.

      1.- La experiencia que he tenido en el aula en estos meses, ha sido lo que esperaba en mi nueva vida como docente y se asemeja mucho al escenario que se me presentó desde Universidad. Pero debo señalar también, que hay ciertas situaciones que escapan a cualquier "teoría" expuesta por un profesor universitario o un erudito en educación, son esas situaciones las que nos ponen a prueba, eso es uno de los grandes desafíos de nuestra profesión. Hablando de desafíos, creo que una educación innovadora es factible (cuando uno quiere, puede), pero no sólo necesita de nuestro entusiasmo sino que también, de un trabajo integrado en el establecimiento educacional, un trabajo mancomunado entre todos los actores participantes del proceso enseñanza- aprendizaje de los estudiantes.

      2.- Como ya comenté en el punto anterior, a mi me anima muchísimo ser Profesora y todo lo que conlleva ese título. La vida es un constante devenir de experiencias, recuerdos y anhelos, ¿Qué mejor vida que participar en la formación de otras vidas? . Creo que el rol de un Profesor de Historia y Geografía, aquí en Chile, es formar estudiantes con un espíritu crítico y cómo decía muy bien Olga "no criticones". Los estudiantes deben poseer la información necesaria para afrontar el día a día y participar de la vida en comunidad de manera responsable, asertiva y tolerante, conociendo su contexto social, económico y Geográfico, la importancia de éste último ya fue abordado muy bien por Carina.

      3.- En el caso de Chile, las Ciencias Sociales han perdido cada vez más terreno. Les comento que aquí Historia, Geografía y Ciencias Sociales es un sólo curso o asignatura y se imparte sólo 4 horas a la semana, siendo los contenidos de Geografía los que quedan reducidos a la nada. Algo que obviamente estoy en absoluto desacuerdo, ya que nuestras asignaturas, como su nombre lo dice. estudian al hombre en sociedad, ¿Qué más importante que eso?. No pretendo hacer una apología a las Ciencias Sociales, pero forman personas pensantes, responsables, conscientes y ciudadanos. Como enfocar su enseñanza, creo que es algo muy propio de cada estilo docente, pero en general se cumple con los objetivos que ya todos hemos expuesto en este debate.

      Para finalizar, les mando un gran saludo a todos y los animo a que sigamos con alegría y perseverancia esta camino docente, formando sobretodo personas íntegras, no sólo en el manejo de contenidos propios de cada especialidad, sino que felices.

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    2. Silvana, que bonita conclusión, es verdad a la educación nos hace falta humanizarla, llevarla al proceso de formación integral de las personas y sobre todo volverla atractiva para que no sea vista con repudio ni mucho menos lejana al los contextos cotidianos de cada uno de los estudiantes y del profesor.Es por esto que creo que una práctica que debemos llevar constante mente a las aulas es el diálogo de saberes, premisas o la simple pregunta ¿Cómo amanecieron hoy? con esto creo que el docente es profesor, maestro y alumno de los múltiples saberes que un aula de clases puede ofrecer. Un saludo.
      Johan Camilo Lombo Ayala

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  4. Soy Liliana Peralta y realicé las prácticas docentes en la ESB 17 de la ciudad de Punta Alta.
    En la periferia de la ciudad se observan escuelas contenedoras, limitadas en cuanto a posibilidades para desarrollar lo que propone el diseño curricular, ya que carecen de espacio, libros, recursos tecnológicos, entre otros. Estos son algunos de los obstáculos que impiden al docente estar al corriente con las nuevas tecnologías.
    Implementar una docencia innovadora, se podría lograr siempre y cuando el docente esté involucrado por completo en su rol. Muchas veces esta situación se desdibuja ya que la escuela debe responder a diferentes situaciones sociales (comedor, vestimenta de los alumnos, entre otros) en las que el docente debe desenvolverse.
    Al observar la realidad como futura docente, se percibe poco respaldo por parte del estado. Debido a la situación actual del país, las escuelas no están totalmente equipadas para poder trabajar en el aula ya que muchos docentes deben afrontar los gastos para insumos básicos como tizas, pizarrón, fotocopias .Por otro lado el apoyo familiar ya no es el mismo que en otras épocas, en la actualidad se desvaloriza el rol del docente.
    En el aula y desde la geografía, se pueden fortalecer pilares para orientar el futuro accionar de los alumnos. Puede ser por medio de actividades que ayudan en la concientización del cuidado del medio ambiente o a través de salidas paseo que permitan valorizar el espacio geográfico local, además de pasar un momento agradable entre alumnos y docentes.
    Considero que el mejor enfoque para la enseñanza de la geografía hoy, se fundaría en una escuela para todos, donde la unión haga la fuerza (trabajo en equipo), donde se recuperen los valores perdidos, donde el avance tecnológico sea detonante para nuevas alternativas, nuevas oportunidades y no para un retroceso o estancamiento.


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  5. Buenas tardes, me llamo MªJosé Alapont y durante las prácticas del Màster de Professor d'Educació Secundària de la Universidad de Valènca, he estado en el IES Berenguer Dalmau del municipio de Catarroja (València).
    Durante mis prácticas, he tenido la oportunidad de sacar mis propias conclusiones al respecto de la profesión docente. En primer lugar, nos encontramos con un ambiente de grupo totalmente heterogéneo, donde cada alumno tiene unas características, necesidades y dificultades concretas. Frente a este panorama, como docentes o futuros docentes, tenemos que intentar saber reconocer estas necesidades e intentar adaptar nuestra manera de dar la clases a estos factores, pues de ello depende que el proceso que nosotros empezamos, el proceso de aprendizaje, sea el adecuado y obtengamos unos buenos resultados, no ya para nosotros, sino para nuestros alumnos.
    Toda esta variedad que encontramos en el aula dificultaría la aplicación de una metodología innovadora en nuestras clases si no responde con lo que necesitan los alumnos. No obstante, pienso que sí se puede utilizar una docencia innovadora, pues puede plantear los conocimientos que se encuentran dentro del currículum establecido des de otro punto de vista, mucho más accesible y actual para los alumnos, haciendo que sea más fácil entender y asimilar esos conceptos o problemas.
    Respecto a los problemas o dificultades que nos encontramos como futuros docentes de ciencias sociales, está el del poco reconocimiento que sufre en el contexto actual. Se suele dar mucha más importancia a otras asignaturas, como las matemáticas o la biología, y parece que se menosprecia a aquellas que no trabajan con únicas respuestas ni con números. Las ciencias sociales son clave para comprender cómo funciona nuestro mundo, en concreto cómo se organiza nuestra sociedad. Los problemas actuales, las relaciones entre países, el movimiento de personas de un lado a otro, las características y problemas de diferentes territorios, son cuestiones de las que se encargan las ciencias sociales. Realmente, pienso que son importantes que estén presentes para ayudar a los alumnos a comprender su entorno y resolver las dudas que le puedan surgir.
    Por último, me gustaría añadir que actualmente el docente es mucho más que una persona que te llena la cabeza de conocimientos y conceptos de determinado tipo. Se trata de una persona que trata con futuras personas adultas, y como tal, pueden tener problemas que nada tienen que ver con las asignaturas. Por tanto, nuestra profesión se convierte en algo más que entrar, dar nuestra clase, y salir del aula. En algo que va mucho más allá.


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    1. Buenas Tardes, mi nombre es Alain Monárdez, estudiante de cuarto año de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, Chile. Tras leer el comentario de MªJosé Alapont, teniendo en cuenta la diferencia de contextos que puede existir entre España y Chile he concordado con varios de los puntos que menciona al reflexionar sobre sus experiencias de practicas en aulas puesto que se asemejan a las personales, es así como me gustaría poder compartir algunas reflexiones sobre determinados tópicos que menciona:

      Es cierto que dentro del aula nos encontramos con una variedad de alumnos que presentan maneras diferentes de recibir la información que como profesores queremos entregarles (y que el curriculum nos exige entregar) volviéndose nuestra labor adaptar metodologías diversas a la hora de enseñar (Geografía en este caso particular, pero sin duda es una acepción que engloba a la mayor parte de las asignaturas que se cursan durante la enseñanza media o en general) aquí es donde me parece bastante importante tomar en cuenta la importancia que tiene la teoría de las Inteligencias Múltiples ofrecida por Howard Gardner ya que nos ayuda a comprender como cada persona tiene diferentes formas de procesar y retener la información, siendo una herramienta útil para los docentes que tenemos por lo general a más de 20 individuos (con características e intereses diversos) a los que enseñar.

      Hoy en día son tantas las herramientas que tenemos a mano para aplicar en nuestras clases, que en ese sentido no debería ser un problema el poder adaptar nuestras metodología volviéndolas innovadoras, atractivas y por sobre todo útiles para nuestros alumnos. Quizás hace falta que como profesores nos desprendamos de la manera en que a nosotros nos enseñaron y utilicemos de manera consciente las ofertas de la tecnología, que sin duda se constituye como una o sino, la herramienta más importante y completa a nuestra disposición.

      Y por último, me parece interesante saber que en otros países la enseñanza de la Historia, la Geografía y las Ciencias Sociales tampoco tiene la valoración que se merece, y tiende a ser subyugada bajo otras ciencias (quizás ante la misma presión que ejerce el curriculum), la historia y la geografía que en la gran mayoría de los casos funcionan como asignaturas que se complementan una a la otra, tienen mucho que entregar a la formación de ciudadanos responsables, que comprendan la importancia que tienen como miembros de una sociedad con derechos y deberes. Quizás si desde nuestra posición como docentes se nos dieran más oportunidades para formar en estos ámbitos (y no solo en coyunturas) a los estudiantes el panorama podría ir cambiando.

      Saludos cordiales.

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  6. Hola, soy Iris Ruiz Marqués estudiante del Máster Universitàri de Professor/a d'Educació Secundària de la Universitat de València.

    Como bien ha comentado mi compañero Santiago Herrero hace pooco que hemos acabado las prácticas, en mi caso en el IES La Garrigosa de Meliana. Mi experiencia ha sido también muy buena. En el centro hemos estado muy a gusto con los profesores, con el alumnado y también con el PAS (personal administrativo del centro).
    En mi caso he tenido la oportunidad de dar clase de Geografia a Segundo de Bachillerato (unas tres sesiones) y de Historia a 4 de ESO ( 5 sesiones). Yo también tenia miedos e inseguridades a la hora de enfrentarme a las clases, pero ha resultado ser una muy buena experiencia. Los alumnos han respondido muy bien a las actividades propuestas y al examen final, lo que demuestra que la manera de dar clase no ha ido tan mal. Aunque haciendo una atuoevaluación quizá me hubiera gustado meter más innovación y obtener más participación del alumnado. Sin duda, creo que la participación de los almunos responde a la motivación que el profesor consiga en ellos y creo que no he llegado a conseguirla del todo. Pero bueno, después de reflexionar creo que es muy dificil en una primera toma de contacto llegar a dar las clases tal y como las pensamos o creemos que van a funcionar, por eso en cierta manera estoy tranquila.
    Para lo que me ha servido esta experiencia es para saber lo que funciona y me siento cómoda, y también aquellas cosas que he de mejorar y trabajar para lograr una interacción mayor con el alumnado y conseguir que se motiven más. En mis clases he utilizado mucho material audiovisual y textos complementarios, pero creo que en ciertos momentos la clase funcionaba demasiado a partir de mi explicacion.
    No he tenido ningun conflicto, ni con mis tutores, ni con los alumnos y creo que todos hemos queedado bastante satisfechos, asi que valoro la experiencia de manera muy positiva.

    En cuanto a las preguntas que ha planteado Santiago me voy a centrar en el papel que creo que deben tener las Ciencias Sociales en la Educación. Como ya hemos debatido más de una vez en las clases del Máster, creo que hay un desfase entre el planteamiento de las Ciencias Sociales y las necesidades de la sociedad (que a mi parecer va mucho más rápida que los cambios que se producen en la escuela). Las Ciencias Sociales, y entre ellas la Historia en concreto, creo que estan planteadas de una manera demasiado teórica y que se enseña de una manera que realmeente no sirve de nada al alumno porque no se ve implicado ni reflejado en los contenidos. Deberian sevir de manera que los alumnos las puedieran applicar para entender el presente y su entorno, saber por què ocurren ciertas cosas o como esta organizada la sociedad, etc. La escuela en general deberia servir para formar ciudadanos que entiendan su organización social y que al salir por la puerta de su casa puedan desenvolverse de una manera consciente con los problemass que le rodean y saber tomar decisiones por si mismos y no ipuestas por otros. Se deberian trabajar (segun mi criterio) cuestiones más locales que les toquen y que entiendan y que les susciten inquietudes (problemass politicos y sociales en su pueblo o barrio, problemas medioambientales de su zona, organizaciones de su entornoo, etc).

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    1. Se me ha publicado el comentario sin acabar. Para terminar mi comentario, añadir que creo que es posible actualizar el papel de la Historia en las clases aunque ello requiera mucho trabajo, pero para ello contamos con muchos proyextos de innovación educativa y de investigación de los que podemos nutrirnos para tomar ejemplos y ponerlos en prátctica.

      Saludos!

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  7. Mi nombre es Esperanza, realicé las prácticas docentes en la Escuela Secundaria N° 2, en el curso 2º 2º, integrado por alumnos con muy buena conducta, trabajadores y muy interesados en la geografía.
    Desde lo edilico esta escuela se encuentra en muy buenas condiciones , pero tiene una patio cerrado muy chico, por esta razón, se suele colocar música como entretenimiento durante los recreos. Todos los docentes y preceptores están muy pendientes de los alummnos.
    Es posible una docencia innovadora a partir del uso de las TICs, el objetivo es lograr que los alumnos aprendan a utilizar las diferentes herramientas que provee la red y a la vez enriquecer las habilidades de la lectoesritura y reafirmar los conocimientos específicos de la geografía. Es decir que el alumno debe hacer uso de las nuevas tecnologías, la informática e Internet como parte esencial para su desarrollo intelectual.
    Como futura docente, siento que nos tenemos que capacitar de forma continua en lo que respecta a las TICs y estar actualizados en temas políticos, económicos, no solo de nuestra región, de nuestro pais, sino del mundo ya que vivimos en un entorno complejo y cambiante. Además, la geografía requiere del apoyo de recursos cartográficos y visuales, como mapas y todo tipo de elementos gráficos (imágenes, fotografías).
    En el aula la geografia ocupa un lugar importante porque ayuda a los alumnos a conocer el lugar donde viven. La geografía no se limita a describir los territorios, sino que los analiza, interpreta su funcionamiento y detecta sus problemas. Además se ocupa del paisaje que representa nuestro entorno, de los alimentos que consumimos, de los combustibles que utilizamos y del trabajo que realizamos. Los alumnos forman parte de estas actividades y el conocimiento geográfico es clave, porque les permite interpretar los problemas que existen en la actualidad.
    Desde mi un punto de vista el alumno debe comprender los efectos de la interacción del hombre con el ambiente y con él mismo, creando paralelamente, la idea de que él forma parte de ese proceso dinámico, es decir que desempeña un papel importante como ciudadano partícipe y transformador del medio.

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  8. Muchas gracias a todos por vuestros comentarios: son muy interesantes y aportan puntos de vista variados pero que dejan ver cómo los problemas educativos a los que nos enfrentamos no distan tanto a ambos lados del Atlántico.

    La compañera Iris ha hecho una autocrítica de su período de prácticas, y me parece interesante.
    Yo mismo me di cuenta durante las mías de lo fácil que es caer en la falta de acomodar tus clases a aquello que proyectas impartir o transmitir a tus alumnos (lo cual es normal, naturalmente) respaldándote en aquella porción del alumnado que muestra interés, te sigue, y participa de tu clase. Estos chicos y chicas suelen existir en casi todas las aulas, pero no son todos, y muchas veces ni siquiera son mayoría. Mas con que uno solo de los alumnos no estuviese atento, motivado, o siguiendo tu clase, ya deberíamos de tener un problema al que enfrentarnos con todas nuestras armas.

    Observaréis en la práctica de la docencia que algunos alumnos y alumnas se refugian en el anonimato, en el pasar desapercibidos. A menudo no son alumnos problemáticos, no estorban a la realización de la clase, pero callan, entran en su mundo, están, como se dice por aquí, de cuerpo presente y alma ausente. Ello responde, en mi opinión, a una falta de motivación junto a una falta de seguridad en sí mismos: piensan que no tienen nada interesante que aportar al conjunto de la clase, que hacen mejor en estar callados, etc., y optan por lo más confortable para ellos: mimetizarse. Esto es, por duro que sea decirlo, efecto del propio sistema educativo. Debería extrañarnos más que haya alumnos que aún tengan una motivación interior para aprender, dadas las características del sistema. Hablo de lo que decía Herbert Spencer, en una frase que leí hace poco: "Los sistemas de educación reconocidos, sean los que sean, están fundamentalmente viciados en su forma. Propugnan una receptividad sumisa en lugar de una actividad independiente". Como bien dice Iris, debemos andar ojo avizor, día a día, sin darnos respiro, para no caer en este error que tiene nuestro sistema educativo, pues resulta lo más cómodo también para el profesor, es el camino fácil y, en cuanto bajemos la guardia, nos inclinaremos hacia ese lado, nos llevará la corriente.

    No debemos sentirnos satisfechos con nuestra labor docente mientras tengamos una porción del alumnado que se vea así mismo incapaz y desmotivado.

    Podríamos entrar en el tema de la responsabilidad que tienen las notas numéricas (equivalente preparatorio al futuro salario de los futuros trabajadores) a la hora de anular el interés por el proceso mismo de aprendizaje, esto es, la motivación interna. A ver si alguno de los compañeros quiere decir algo sobre la cuestión.

    Saludos

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  9. Me llamo Angélica Alberto y realicé mis prácticas en el espacio curricular de Ciencias Sociales, en el curso 1° 2° turno tarde de la EES N° 5, establecimiento ubicado en la calle Villanueva 277 de la ciudad de Punta Alta, provincia de Buenos Aires.
    Mi experiencia la realicé con alumnos preadolescentes y al comenzar con el período de residencia, pude observar que los alumnos no estaban muy “conectados” con el aprendizaje y que los saberes previos eran escasos.
    Dentro del aula existen realidades sociales que uno no imagina. Cuando la docente orientadora informa sobre cada caso en particular, recién uno comienza a entender a ese niño que se mantiene callado en el fondo del aula o al otro que reacciona de forma violenta con sus compañeros cuando éstos hacen algún comentario con respecto a él.
    Muchas veces el grupo no permite llevar a cabo estrategias innovadoras por razones de interés. Pero resultaría muy enriquecedor presentarles a los alumnos los contenidos desde una visión diferente. En el caso de la geografía es importante el trabajo de campo, aunque éste no suele ser tenido en cuenta, por todos los trámites que hay que realizar para concretar esta actividad. Lo más apropiado sería realizar pequeñas salidas con los alumnos para que se den cuenta que la geografía no es un libro o un juego de fotocopias, sino que comprendan que la realidad que los rodea puede ser entendida desde lo geográfico.
    La docencia es una tarea que conlleva mucho amor. No se trata solo de aprender para aprobar exámenes y obtener un título. Ser docente para mí es lograr que los chicos aprendan a utilizar en la vida diaria lo que uno les enseña en la escuela.
    El rol del docente en la actualidad es más que complicado. Hoy un docente se enfrenta a problemáticas sociales que no solo están presentes en el aula, sino que trascienden las paredes de la escuela. El docente no solo enseña, su labor va más allá de su preparación, tal vez por la falta de políticas educativas y sociales que se apliquen en conjunto.
    Un niño es un ser en formación y nosotros somos parte de ella. Quizás seamos pequeños actores en esta etapa de su vida, que lo guiamos en ese proceso de aprendizaje, pero nuestra huella formará parte de su historia. Esa debe ser la sensación que un docente debería tener todos los días cuando finaliza sus clases. Y que al terminar el día de trabajo estemos convencidos de nuestra “Misión”.
    Considero que no existe un enfoque específico para la enseñanza de la geografía en el aula. Pero es una realidad que la geografía ambiental es un paradigma moderno que analiza problemáticas actuales, derivadas de la relación del hombre con el medio. Sin embargo, es necesario a su vez, que los alumnos sean capaces de abordar conceptos específicos de la geografía física que también son importantes.

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  10. Hola, mi nombre es Sofia Grimaltos, soy compañera de Santiago, el autor de este foro 18. Yo, más que contar toda mi experiencia, solo me gustaría nombrar algunos aspectos que me llamaron la atención del centro donde hice mis practicas, más concretamente de la que fue mi tutora i su forma de enseñar. En general el centro era bastante innovador, su seña de identidad principal es aquella que muchos centros nuevos están acogiendo, una forma de actuar, unos valores y el lema es: actuar, planificar, revisar y hacer. Por lo que pude observar había algunos profesores bastante innovadores, y es un centro que cuenta con muchos proyectos educativos que llevan a cabo los mismos alumnos como: una radio, un grupo que se dedica a reciclar en el centro, un grupo que media los conflictos entre los alumnos, una revista, etc.
    Pero ya entrando en materia, las clases que pude observar eran todas muy magistrales, siguiendo en exceso el libro de texto, haciendo solamente los ejercicios propuestos en el libro de texto, y lo que me parece peor es que se motivaba muy poco la participación oral de los alumnos, éstos nunca trabajaban en grupo, y cuando por parte de los alumnos surgía algún tipo de debate fruto de una duda o opinión, este debate se interrumpía rotundamente no dejando lugar a que los alumnos expresaran su opinión. Yo por mi parte intente que en mi sesión los alumnos participaran más, que fueran participes de la explicación junto conmigo, sin hacerles preguntas que puedan intimidar-los si no saben contentas, solo haciendo preguntas en las que tienen que reflexionar o observar i contestar que piensan, que ven.
    Para terminar, compartir con todos vosotros una frase que se quedo grabada en mi cabeza, una frase que la que fue mi tutora de practicas dijo a unos alumnos ante la incertidumbre de si estudiar Historia o no en la Universidad. Cito "no os preocupéis, porque la historia no es como otra materias en las que hay diferentes caminos, la historia es exacta, lo que pasó, pasó, así que es más fácil". Bueno, después de toda mi sorpresa al oír esto, más me reconcomió la frase cuando me pare a pensar que esta profesora no considera la historia como una ciencia social.
    Mi pregunta para quien la quiera responder es ¿Crees que es posible innovar en la educación sin considerar la historia, la historia del arte ni la geografía como ciencias sociales?

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    1. Ximo ;D
      Me encanta tu comentario. Lo de tu profesora no es tan extraño, habrá que pensar en la formación que recibió y en su disposición para recibirla. Hace poco oía a estudiantes de Historia, en último curso, decir algo parecido.
      Respecto a tu pregunta, creo que si, que innovar pueden ser muchas cosas. Y que lo de ciencias sociales es una etiqueta. Es más, la historia podría no ser una ciencia, y no por ello resultaría menos interesante para comprender los asuntos humanos. La clave está en lo social, si no es social (humana), no hay historia.

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  11. He leído opiniones interesantes aquí, recalcar la reflexión de Santiago sobre los alumnos "de cuerpo presente pero de alma ausente" que tan bien ha reflejado con sus palabras, y es que como comentó mi compañera Iris "la participación de los alumnos responde a la motivación que el profesor consiga en ellos". El hecho de que continuemos generación tras generación con los mismos problemas evidencia que las cosas en materia educativa no están funcionando de manera óptima.

    En cuanto a mi periodo de prácticas fue muy positivo. Tuvo lugar en una localidad cercana a Valencia. Disipó mis dudas sobre si quería dedicarme o no a esta profesión, comprobé de primera mano el funcionamiento de una clase que, bajo mi punto de vista, estaba dirigida por un profesor (mi tutor) bastante innovador y me ha hecho ilusionarme de nuevo con el futuro que me -nos- espera.

    Me chocó la ausencia del libro de texto como material fundamental en el aula. Me sorprendió porque pese a que habíamos visto en el Master que esto era posible, aún no había visto con mis propios ojos el día a día sin él. La utilización de otros materiales (fotocopias, presentaciones multimedia, videos, etc.) todos ellos seleccionados con el buen criterio que otorga la experiencia, conferían a las clases un carácter ameno y evidenciaban que mi tutor era un profesor querido a la par que respetado.

    Mi compañero de prácticas y yo pudimos dar clases en grupos variados como tercero de ESO o PCPI, pero sin duda, la experiencia más gratificante tuvo lugar en primero de ESO, grupo para el que creamos y desarrollamos una Unidad Didáctica, del mundo romano para ser más exactos. La marcha de las clases tuvo una tendencia ascendente en cuanto a satisfacción personal. La primera de ellas fue bastante poco reconfortante, pues veía las caras de los chavales, quienes parecían no entender demasiado aquello que yo quería expresar, no obstante, rápidamente me adapté a sus necesidades y rebajé el nivel de exigencia. Recordé lo primero que debe tener en cuenta un profesor: unos objetivos realistas, aquello que quiere que el alumno comprenda, no importa si a fin de cuentas no es todo lo que se tenía programado, pero desde luego debemos esforzarnos porque aquello que se adquiera se comprenda de verdad, y no pase a ser un contenido efímero en sus aún jóvenes mentes.

    Por otro lado y comentando el aspecto negativo de las prácticas destacaría la desilusión de algunos de los miembros del instituto. No era una desilusión expresada directamente, pero se palpaba. Me entristece leer las líneas que mi compañera Sofía escribía acerca de ese "consejo" que recibieron los alumnos de su centro. Opino que en todos los trabajos la motivación suele seguir una tendencia decadente conforme las personas se van acercando a edades más altas o cuando otras preocupaciones rondan sus cabezas, sin embargo creo que se podrían tomar medidas para combatir esto: incentivos, años sabáticos u otras medidas como adelantar la jubilación (como ocurre en muchos otros sectores) para que se rejuvenezca el cuerpo docente podría ser conveniente tanto para nosotros, futuros profesores, como para el sistema, ya que todos los que hoy nos estamos formando contamos con una base pedagógica superior a la que se venía exigiendo hasta hace poco.

    Sé de primera mano que hay docentes próximos a su jubilación a quienes poca gente podrá superar en ilusión, pero creo que nadie podrá discutir que, por regla general, a medida que los profesionales van sumando años de experiencia se van cansando paulatinamente de la rutina que les ha rodeado durante décadas. Creo que la entrada masiva de personas como nosotros, ansiosos por desempeñar el trabajo por el cual nos hemos venido formando duramente durante tantos años, sería un acierto pleno, pero sé de la dificultad que conlleva.

    José P. Baviera
    Master de Professor en educación secundària.

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  12. Hola, soy Joaquín Manjón, estudiante del Máster de Secundaria de la U.V. y voy a reflexionar sobre algunas preguntas que plantea Santiago.
    En cuanto a mis expectativas durante las prácticas, esperaba ver unos alumnos con un trato y una conducta más educada, porque esperaba encontrarme algo parecido a lo que yo viví en el instituto (tengo 34 años). También esperaba ver una relación profesor-alumno más cercana, como yo la tuve. Creo que la distancia profesor-alumno ha crecido a causa del nuevo marco de relaciones sociales, en el que las reglas y los valores son más difusos, menos homogéneos y son percibidos de forma más individualista. Creo que la relación profesor-alumno es fundamental, porque muchos alumnos se implican en una materia sólo porque les seduce lo que dice el docente y porque les importa lo que piensa de ellos. La función docente es mucho más efectiva si el docente resulta una persona significativa para los alumnos, pero también funciona a la inversa. Creo que habría que reflexionar como sociedad sobre las relaciones sociales que construimos y los valores que fomentamos.
    Respecto a si es posible innovar atendiendo a las demandas sociales, habría que clarificar cuáles son en una sociedad compleja. También deberíamos reflexionar sobre quiénes forman parte de esa sociedad, cuál es el sujeto colectivo relevante a tener en cuenta para decidir esas demandas. ¿Es la nación, la región/Comunidad Autónoma/Estado, la provincia, la localidad, o debe ser una decisión global? Desde mi punto de vista, creo que no sabemos qué es lo que la sociedad demanda, sabemos lo que hay escrito en las leyes. Y no tengo muy claro a quien se tiene en cuenta para elaborar las leyes. De todas formas, como persona crítica, no me preocupa tanto innovar como ser capaz de desarrollar mi acción docente de la mejor manera para lograr mis objetivos. Creo que en una sociedad democrática, es importante que los alumnos puedan recibir influencias diversas y útiles para tomar decisiones sobre su vida consciente y coherentemente, sabiendo que no hay una solución perfecta, pero que ellos eligen y tienen que hacerse responsables de sus decisiones y sus consecuencias, sabiendo rectificar para vivir lo mejor posible en sociedad. Para mí, innovar sería, por ejemplo, no reproducir inconscientemente conductas o discursos incoherentes con los valores que guían mis objetivos.
    Las dificultades no me han animado en mi tarea docente, son la razón de que quiera ser docente. Las relaciones sociales en mi entorno me parecen cada vez más problemáticas. Tengo la sensación de que el grupo humano del que formo parte no está satisfecho con la manera de gestionar los asuntos colectivos, las relaciones entre ellos ni con el medio ambiente. Creo que un docente debe dar herramientas a los alumnos para buscar soluciones a esa insatisfacción utilizando la experiencia social que acumula, mediante su vida personal y su formación académica. La formación en Geografía, Historia, Historia del Arte, Sociología, Filosofía, etc., es idónea para ayudar a plantearse problemas humanos y para tratar de resolverlos, y en el contexto actual, como siempre, son del mayor interés.
    El mejor enfoque, a mi juicio, es el que mejor responda a los objetivos que nos planteamos. En nuestras prácticas hemos intentado que los alumnos aprendan ríos, montañas, estados, etc. sin problematizarlos, sin detenernos a cuestionar que son también construcciones sociales. Pero no debemos renunciar a ser críticos o plantear diferentes visiones sobre una cuestión concreta si creemos que ello es importante, si queremos cambiar una percepción de los alumnos que nos parece inadecuada.

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    1. Sigo siendo Yo, permitidme que acabe...
      Desde mi punto de vista hay que ser crítico en todo momento, sobre todo con uno mismo. Criticar es evaluar una forma de ver o hacer las cosas, y a veces resulta difícil ponerse a prueba desde el propio punto de vista. Por ello resulta útil tener otros puntos de vista alternativos, porque ello puede enriquecer nuestra comprensión. Así mismo, aprender a ser crítico también es aprender a plantear la crítica de manera aceptable, de manera que no ofenda a los otros ni les cree inseguridad. En una sociedad democrática debemos aprender a aceptar otros puntos de vista e intereses legítimos. Exponerse a la crítica puede resultar doloroso, pero es imprescindible para mejorar como personas y como ciudadanos. En esto también debemos educar y ser educados.
      Respecto a la distancia que existe entre la teoría y la práctica, mi impresión es difícil de describir. Hay una gran cantidad de teoría, tanto en las disciplinas de referencia como en las didácticas específicas, susceptible de ser usada para mejorar la acción docente. Mi impresión es que la mayoría de los docentes (y de los futuros docentes) no conocemos, o lo hacemos superficialmente, el corpus teórico. Seguramente es consecuencia de una educación inadecuada en la que se nos ha metido prisa para alcanzar unos objetivos o resultados traducibles en una nota. Mientras, se perdía la oportunidad de enseñarnos (no sólo en la escuela) a responsabilizarnos y disfrutar con nuestro propio aprendizaje y a incorporarlo a nuestras vidas. Creo que, en parte por esto, ni siquiera la teoría que se conoce, se aplica.

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  13. Daiana Biancucci23 de mayo de 2014, 5:27

    La práctica docente la realicé en la Escuela Secundaria Básica 307 en un cuarto año del turno mañana. Esta experiencia fue muy significativa. Acepté realizar las observaciones áulicas en la escuela de mi barrio porque pensé que mi participación iba a ser más activa ya que la mayoría de los alumnos me conocían.
    Dentro del curso podía identificar claramente tres grupos de alumnos: los repetidores, los interesados en la asignatura y los que no tenían interés en realizar las actividades propuestas por la docente. Lo que realmente me llamó la atención fue la presencia de dos alumnos, muy molestos durante la clase, con una importante diferencia de edad con respecto al resto del grupo (una alumna de 21 y otro alumno de 18 años).
    Considero que la elección de la escuela de mi barrio para realizar las observaciones fue equivocada porque el alumno mencionado anteriormente dificultaba bastante el desarrollo normal de la clase, no aceptó mi presencia dentro del aula y comenzó a realizar comentarios incómodos hacia mi persona. La profesora del curso no registró esta situación por estar ocupada con el resto de los alumnos, ya que no eran muy tranquilos en cuanto a conducta.
    Me pareció muy interesante que los alumnos investiguen sobre los problemas ambientales en Argentina y en el mundo. Aunque siempre eran los mismos los que buscaban la información y participaban en la clase. Además pude darme cuenta de la concordancia existente entre los temas desarrollados en la escuela con los que estudié en el transcurso de la carrera.
    A pesar de la situación vivida, en unos años me veo como una profesora totalmente comprometida con mi trabajo.

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    1. Estimada, muchas gracias por compartir tu experiencia. Considero que es muy enriquecedor poder reflexionar sobre experiencias que confrontan nuestra labor docente puesto que nos desafían a preguntarnos si realmente estamos preparado para la difícil tarea de enseñar en diferentes contextos educativos.
      Es importante recalcar que la mayoría de los docentes no se desempeña en contextos ideales donde en su mayoría los estudiantes prestan atención a la materia, son participativos y respetuosos. Al contrario, son muchos los escenarios parecidos a lo que le sucedió a Daiana donde los estudiantes sinceramente no les interesa nuestra asignatura, y es ahí donde los docentes deben enfocar sus métodos y estrategias didácticas en que esos estudiantes indiferentes puedan aprender algo, y hay que ser bien realista en ese sentido, es poco lo que realmente los estudiantes pueden aprender y aprehender en unas horas de clases. Y no hay que culpar a los estudiantes por ello, en su mayoría las realidades que viven son mucho más complejas de lo que pensamos, por lo que muchas veces el colegio para ellos es verdaderamente insignificante. Frente a eso, ¿cómo llamar su atención?. Es necesario que en la formación inicial los futuros docentes se familiaricen con estas situaciones.

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  14. Buenas, yo soy Silvia Temprado, estudiante del Máster de Profesor de Secundaria de la Universidad de Valencia.

    Para mí el período de prácticas ha sido de lo más útil y rico. En primer lugar porque la llegada al centro dónde las has de realizar y tu visita a las primeras clases rompe con dos cosas, por un lado con el prejuicio que todos llevábamos dentro sobre la dinámica que creíamos que tiene un centro de Secundaria, y por otro te das cuenta de lo mucho que han cambiado las cosas con respecto a tu etapa de alumno pese a que seas relativamente joven.

    En mi caso enseguida vi en los primeros días la dinámica de las clases a las que asistía; vi que la composición de cada grupo es única y diferente a la del resto de clases o grupos por mucho que sean del mismo curso, y que hay mucha variedad entre el propio alumnado de cada grupo. Es un alumnado, además, con mucho potencial. Por lo general, y pese a que no sea realista generalizar, el alumnado se muestra muy dispuesto a participar e interactuar con el profesor y la materia, a pesar de que se resista a lo que supone la autodisciplina del estudio individual en casa y especialmente a hacer tareas y deberes en casa encargados por e profesor. Pero lo que es en sí en el aula, había mucha predisposición en mis alumnos a responder a preguntas y a reflexionar a partir de las explicaciones orales que daba el profesor, los vídeos o imágenes que les mostraba, y esto creo que es muy positivo. Contradice la idea de que no quieren hacer nada. Si se les incluye y se les interpela, mediante actividades didácticas y motivadoras, en su propio proceso de aprendizaje, reaccionan dinamizando, opinando, argumentando o sugiriendo.

    También me he dado cuenta en las prácticas de lo fácil que es que como profesores nos queramos convertir en el centro del proceso educativo, y hay que permanecer muy consciente de no derivar uno mismo hacia éste planteamiento equívoco, y recordar, que, en mi opinión, somos medios y el alumno es el verdadero centro del proceso de enseñanza-aprendizaje. Y con esto me refiero a que todo lo que no sea adaptar la metodología de enseñanza, el ritmo, etc, a las características de nuestros alumnos, no constituye un proceso educativo. Constituye otra cosa pero no esa. En mi opinión hemos de atender en todo momento a cómo evoluciona el proceso de aprendizaje preguntándoles, testeándoles, y en muchos casos, afortunadamente, ellos mismos tendrán la iniciativa de decir, no entiendo esto, repite esto o ves mas lento, por favor. Éste nivel de conexión, confianza y comunicación con ellos es crucial para que que su aprendizaje se produzca con éxito.

    Por otra parte, es cierto que hay algunos alumnos en los que claramente ves absoluto desinterés, pero en mi caso, la mayoría, con cierta motivación, mostraban ganas de aprender y de trabajar por ello. Prueba de ello era que me pedían repetir conceptos que no habían quedado claros, desarrollar el tema más despacio, o incluso cuestionaban argumentos que daba yo para explicarles de la materia. Esto es lo motivador y lo exitoso para mí como docente.
    El elemento que me limitaba y que me disturbaba, y que considero la antítesis de un proceso de enseñanza adecuado era el factor tiempo y el extensísimo contenido del currículum que tenía que impartir.

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  15. (2a PARTE DE MI COMENTARIO -Silvia Temprado De Las Heras). CONTINÚA:)
    Por otro lado, he de decir que mis mejores experiencias dando clase fueron en Historia de primero y segundo de bachillerato. Mi metodología fue, en primero (Historia del mundo contemporáneo) la realización de esquemas con las ideas básicas en la pizarra que los alumnos anotaban, y su desarrollo oral, de lo cual surgían siempre dudas y preguntas por el alumnado acerca de los procesos históricos que yo planteaba. Junto a esto veíamos gráficas de datos o mapas explicativos concretos del libro de texto. También empleé, para que las clases fueran variadas y no se aburrieran, el visionado de un documental y su posterior comentario escrito por el alumnado. Ellos mismos me dijeron que les había servido para ver desde otra perspectiva el proceso histórico que veíamos en forma teórica y para fijar las ideas básicas.

    Por otra parte en segundo, mis clases se centraron también en la realización de esquemas del tema que estábamos dando, que el alumnado anotaba, junto con la proyección de mapas y gráficas y su análisis en clase (preguntando a los alumnos) y la lectura de fuentes y textos históricos que constituían otra perpectiva diferente a la que les daba yo para explicarles los procesos. Esto favorecía su participación e interés por las cuestiones del tema.

    En definitiva, me han quedado varias cosas claras después de la experiencia docente del prácticum: que es cierto que los alumnos, como personas que son, igual que los profesores, son despiertos, hablan, se socializan en en centro, y es inevitable que esto ocurra en clase cuando son muy numerosos, pero también es cierto que esto se puede sortear para lograr que aprendan cosas, e incluso utilizar en propio beneficio, formando grupos de trabajo. En conclusión, mediante cualquier dinámica metodológica que emplees, lo positivo es que aprenden, ya sean contenidos de la materia o competencias varias, que es el sentido de la educación: no siempre aprenden lo que quieren los profesores, pero siempre aprenden algo. Mi reto como profesora, ahora que me ha quedado totalmente claro que es aquello a lo que me gustaría dedicarme, es que, entre todo eso que aprenden, aprendan cosas que les sean útiles en su vida diaria, cotidiana y futura, en el tipo de mundo en que vivimos, y que les abran posibilidades para que realmente sean lo que quieran ser, y comprendan cómo funciona el mundo y se comprometan a cambiar aquello que no les guste, e importantes elementos que yo personalmente creo que no son como deberían ser.

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  16. Hola soy una estudiante del profesorado de geografia realicé las prácticas docentes en la E.E.S Nº 306 de la ciudad de Punta Alta, provincia de Buenos Aires, Argentina.
    A las mismas las realicé en un 2do año división B turno tarde, desde el día 03 de junio al 05 de agosto de 2013.
    El primer día de práctica llegué a la institución 15 minutos antes ya que debía realizar un reconocimiento visual del establecimiento educativo y presentarme con la profesora orientadora.
    El curso estaba compuesto por doce alumnos en total, de los cuales cinco eran mujeres y seis eran varones. El grupo de alumnos era bastante disperso y de difícil conducción debido a problemas sociales, económicos y familiares.
    Cuando comencé las prácticas la profesora me presentó a los alumnos, los cuales me recibieron de manera agradable. Ya dentro del salón se pudo denotar una sensación de exaltación por parte de los mismos ya que tenían a una persona extraña dentro de su ámbito de estudio.
    En dicho curso, se presentaron algunas dificultades ya que había alumnos difíciles por condiciones sociales y familiares pero la docente con su gran profesionalismo supo manejar las situaciones complicadas en todo momento.
    Los alumnos no demostraban interés en la materia, pero de igual manera realizaban los trabajos prácticos.
    Para concluir quiero destacar la gran predisposición de la docente orientadora ya que en todo momento me explicaba la situación de cada alumno y los temas que iba a enseñar cada clase.
    Espero en un futuro poder desempeñarme de manera correcta y adecuada como profesora de geografía, me siento capacitada para dicho trabajo ya que me gusta trabajar con personas, teniendo en cuenta que detrás de cada una hay una historia diferente.

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  17. Mi nombre es Cinthya Paola Valdés, alumna del 3° año del Profesorado en Geografía que se dicta en el Instituto Superior de Formación Docente N° 79 de la ciudad de Punta Alta provincia de Buenos Aires, Argentina. El año pasado, para el espacio de la Práctica Docente II, realicé mis observaciones en la Escuela Secundaria Básica N°304. El curso que me destinó la profesora para desarrollar las observaciones fue 3° 7°.
    La primera impresión que tuve al ingresar por primera vez al aula no fue tan buena, y esto fue así por varios motivos; primero porque los alumnos tardaban en ingresar a la sala y era muy difícil que hicieran silencio para que la docente pueda presentarme frente al curso. Una vez captada la atención de los adolescentes, pude saludarlos y comentarles la causa de mi presencia durante las clases y el tiempo que estaría acompañándolos. Otro de los motivos por los cuales no me agradó tanto mi primer día de prácticas, fue la cantidad de integrantes del curso, muy numeroso, y enseguida pude notar la presencia de tres alumnos conflictivos, que distraían y molestaban a los demás compañeros y se mostraron indiferentes cuando realicé mi presentación.
    A medida que fui avanzando en mis observaciones pude notar que la mayoría de los alumnos participaban activamente en las clases, aunque muchas veces se dispersaban. La estrategia utilizada por la docente consistía en no darles tiempo para pensar en otros temas que no fuera la geografía. Así, a través de exposiciones dialogadas fomentaba la participación de los alumnos. La idea era tenerlos continuamente ocupados porque se trataba de un curso numeroso y con alumnos que se dispersaban fácilmente. A la explicación del tema le seguía la resolución de actividades y por último la puesta en común de las mismas. Los alumnos que no hacían intervenciones y mostraban desinterés en la materia eran siempre los mismos. Se trataba de repitentes con mala conducta. El resto de los estudiantes participaba muy bien en las clases.
    Al finalizar mi período de observaciones noté que la primera impresión que había tenido con respecto al curso había cambiado. Si bien el grupo seguía siendo numeroso y revoltoso no era tan grave como para que una estrategia adecuada, recursos innovadores, actividades creativas y una buena predisposición no pudieran solucionar. Pude darme cuenta de las necesidades del grupo y llegué a la conclusión que la incorporación de “algo nuevo” era lo que hacía falta, ya que en una de las clases, (a la que personalmente calificaría como muy buena y productiva) la profesora proyectó un documental del tema “Eras geológicas” y los estudiantes demostraron un gran interés y respondieron muy bien a las consignas que debían realizarse a partir del video.
    La inclusión de la tecnología es imprescindible para la enseñanza de la geografía. Así, por ejemplo, con tan solo un “click” podemos acercarnos a cualquier país o lugar del mundo, descubrirlo, explorarlo, conocerlo. Sin la ayuda de la tecnología esto no sería posible. Hoy podemos estudiar lugares remotos sintiéndolos cerca, conociéndolos sin la necesidad de estar ahí gracias a las distintas aplicaciones tecnológicas disponibles.

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  18. Saludos a todos, me llamo Thais Fitor Palmer y durante las prácticas del Màster de Professor d'Educació Secundària de la Universidad de València, he estado en el IES Pare Arques del municipio de Cocentaina (Alicante).

    Mi experiencia en el prácticum ha sido realmente provechosa y satisfactoria, ya que al cursar en un primer momento el máster como respuesta a una necesidad, más que por una vocación docente, he comprobado que me gusta y desearía poder ser profesora algún día. Bien, en mis prácticas pude da una Unidad Didáctica completa a un curso de 2º de bachillerato, y varias clases esporádicas en todos los niveles, desde 1º de la Eso a 1º de bachillerato, cosa que me hizo ver las diferentes necesidades de los alumnos, ya que no puedes dar estáticamente tus clases, sino que cómo hemos aprendido es el alumno quien te proporciona las vías para desarrollar sus necesidades.

    El planteamiento que hice de las diferentes clases fueron varias, intenté innovar, dentro de mis límites, a la hora de dar la U.D. con recursos TIC intentando debatir aquello que veíamos en las sesiones, pero también intenté trabajar de diferentes formas, como por ejemplo trabajar con el libro de texto, o con esquemas en la pizarra.
    No tuve ningún problema con los alumnos, tuvieron una gran recepción a que me incorporara a sus clases, e incluso los más pequeños cuando me encontraban por los pasillos, me reprendían por si podía darles otra clase, cosa que me ilusionó.

    Cómo algunos compañeros del geoforo han comentado, hay docentes en los centros desencantados, que o no quieren entrar en el “mundo del IES” o creen que su misión en el instituto es dar las clases e irse a sus casas, pero he tenido la suerte de ir a un centro donde los profesores se veían ilusionados aún con su trabajo, y sobre todo aquellos más veteranos. Se respiraba en el instituto un ambiente de querer construir una comunidad dentro de las paredes del centro, preocupándose por los alumnos, cosa que pude comprobar al ver que en el nuevo equipo de mediación del centro había un gran número de docentes apuntados.

    Quizás la pega más importante que haya visto en las prácticas sea que la incorporación de la innovación en las aulas no se puede hacer sin conocer el grupo, cómo trabaja, qué les motiva, ya que no todas las fórmulas funcionan si los patrones son distintos. Así pues, creo que la experiencia de prácticas es necesaria y incluso debería ser más larga para poder disfrutar y aprender en el “campo de batalla” qué es la profesión docente.

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  19. Hola a todos. Me llamo Rubén Canet Martínez y soy alumno del máster de educación secundaria en la comunidad valenciana. Hasta hace poco estuve realizando las prácticas en Instituto, en mi caso ,el IES Clot del Moro, Sagunto.
    Como dicen en algunos comentarios, mis compañeros, es la MOTIVACIÓN del alumnado lo que nos ayuda a poder desarrollar y potenciar mejor la asignatura. Pero ¿cómo lo logro?, soy yo quien lo fomento?, el alumno?, la educación pienso que es como una función de teatro, en la cual actores y espectadores deben sumergirse en esta gran obra que es la educación. Crear un ambiente idóneo, entretenido y asimilable para todos. Como dice Thais, para dar inicio a la innovación es primordial conocer primero al grupo para ver como interactuar con ellos y dar inicio a cada clase, no sirve con ponerles un PowerPoint o usar un ordenador para decir, ya estoy innovando.
    En mi paso por el instituto como "profe" he estado en primero de la ESO, cuarto de la ESO, primero y segundo bachiller. Siendo los grupos de la ESO los que más curiosidad tenían sobre su pasado histórico. El resto, los más mayorcitos tenían otros interés o no consideraban realmente importante el conocer la Historia.
    La forma de los alumnos con unos profesores u otros era muy variable, mientras que a unos los tenían por las nubes, a otros los tenían como los profesores/as cansinos, los que como antes dicen por aquí detrás, que iban a dar la clase de cualquier manera y para casa. Esos mismos alumnos, conmigo mostraban interés (espero que verdadero y no falso para subirme la moral como becario), que diferencia a unos docentes de otros?.

    Como conclusión final escribiré casi calcado lo del comentario anterior, la experiencia que obtenemos con las prácticas es de la que más hemos aprendido y debería de ser más larga en el máster para cultivarnos más en la actividad docente.
    Finalmente diré, que Clot del Moro fue mi instituto como alumno, y he podido regresar como "profesor" aunque solo fuese por un par de meses, ha sido en esta última etapa cuando más he aprendido gracias a él ya que jamás dejamos de ser alumnos y aprender de las cosas.

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  20. Muy buenos días.
    Soy Dani Ballester, estudiante del Máster de Profesor en Valencia y voy a realizar un par de reflexiones sobre el periodo de ``practicum´´ y su relación con las clases del Máster.
    Cuando uno se enfrenta a las prácticas, sus expectativas vienen generadas por dos lados: la primera, la experiencia propia como alumnos, pues no es raro establecer una similitud entre nuestro pasado (reciente) como alumnos y lo que sucede hoy día en las aulas. Evidentemente hay que tener en cuenta el cambio de ``lado´´ que hemos dado. La segunda, son las clases que hemos recibido en el Máster y que de alguna manera te ponen en la tesitura de qué pasa y qué se debe hacer. Esta última tiene más peso en la creación de nuestras expectativas por reciente y porque es formación ``ad hoc´´. Sin embargo, la realidad vivida creo que se representa mejor recuperando nuestra vida como alumnos y tratando de ponernos en nuestra nueva posición.
    A lo que me refiero es que la correlación entre lo que se habla en las clases teóricas del Máster y la realidad en los IES es casi casual. Sin menospreciar el Máster, de hecho, lo considero fundamental y básico. Voy a poner un ejemplo que plantea lo que digo. Todos hemos recibido una misma información y una misma formación, después cada uno ha tenido una experiencia totalmente diferente y aquí se ve como lo que se ha visto en las aulas no abarca todas las variables y esto, es extensible a las circunstancias a las que puede enfrentarse un docente en un aula y en otro o incluso en el mismo aula, un día u otro. Con esto quiero decir que la formación que se da es casi siempre insuficiente porque hay situaciones, hay alumnos o alumnas con quienes las 4 técnicas que tenemos para tratar con gente más conflictiva no son suficientes para encauza cualquier problema. La adaptación curricular individual no cubre las necesidades que pueden llegar a tener muchos de los alumnos y las necesidades educativas especiales son demasiado amplias como para identificarlas individualmente. No creo que tengamos formación suficiente como para estar cubriendo las necesidades de muchos alumnos, otra cosa es que les ofrezcamos una actividad más sencilla o más complicada de lo ``normal´´ y nos quedemos más tranquilos.
    Pero decía que no hago la crítica menospreciando el Máster, creo que es necesario tener unos conocimientos básicos sobre pedagogía, para tener un mínimo recurso de reacción, pero al final, será la experiencia y las habilidades sociales del profesor los que le den a uno más capacidad para tratar con el alumno conflictivo y para desenvolverse en situaciones complicadas.
    En otro orden de cosas, como ya ha comentado mi compañero José Pascual, durante las prácticas tuvimos suerte de poder trabajar con un tutor bastante involucrado con nuevas metodologías, con materiales alternativos y diversos, dejando de lado casi totalmente el libro de texto. Además, también pudimos estar con otra profesora del departamento y ver dos modelos docentes diferentes. Ésta tenía una metodología más cercana a la clase magistral, pero magistral de verdad, de hecho es de los profesores del centro que más consideración tiene entre los alumnos. Así, ha sido interesante observar cómo se prepara una clase buscando materiales de distinto tipo, textos, mapas, vídeos, gráficas, etc. Pero también ha sido interesante observar una clase magistral bien dada, por no descartar en cierta manera esta metodología. No como algo normal, pero dependiendo del tema y de las características de uno, también puede ser una dinámica buena y que interese al alumno, a las pruebas me remito. En cuanto a mis prácticas frente a los chicos y chicas, creo que pequé de tradicional, al menos, viéndolo ahora, me gustaría haber sido algo más innovador, sobre todo, trabajar aspectos más procedimentales y actitudinales. Aún así, valoro positivamente la experiencia desde el punto en que me ha permitido observar esta tendencia y tener cierto cuidado de antemano para plantearme nuevas Unidades Didácticas a desarrollar.
    Saludos a todos.

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  21. Em primeiro lugar, uma saudação a Santiago Herrero e a todos os seus colegas que têm dinamizado o Foro 18.
    Sou docente do curso de formação de professores de História e Geografia, na Universidade de Lisboa. A alteração do curso de Mestrado de Formação de Professores (em Portugal, só se é professor com o Mestrado, qualquer que seja o nível considerado), foi aprovada em 14 de maio de 2014. Está agora a ser discutido o novo modelo de formação de professores de Geografia na Universidade de Lisboa (retomou-se a formação autónoma em Geografia, em grande medida em resultado da luta que levámos a cabo nesse sentido).
    A formação de professores, de Geografia ou de outras áreas, é e será questionada pela articulação entre a formação teórica e prática, tão presente no Foro 18. E as acusações serão sempre a as de que a formação inicial é excessivamente teórica e não responde aos desafios “reais” em sala de aula. Na base dessa diferenciação, estão a separação entre os espaços de formação e de aplicação prática. Enfim, todos reconhecemos nesse diálogo/conflito os modelos de racionalidade técnica e da racionalidade prática.
    Uma nota para dizer que concordo com todo os testemunhos anteriores de que atitude do professor que está na escola como tutor e a própria dinâmica da escola são determinantes na experiência formativa do futuro docente.
    Penso que em Portugal se tem dado uma atenção à formação inicial de professores superior àquela que se observa nalguns outros países. Simplificando (simplificando!), há 3 anos de formação científica específica, uma ano de formação em didática e em ciências da educação e, finalmente, um ano numa escola, com ligação à universidade.
    A formação científica específica é importante. Dificilmente um aluno com reduzida preparação numa área se revela, depois, um bom professor – sendo igualmente verdade que um “bom aluno” de um curso universitário de Geografia não se converte, por isso, num bom docente.
    Sobre a formação em Ciências da Educação. Aqui tenho uma posição dupla. Por um lado, quando eu próprio fiz a minha formação inicial (18983/85), já se verberava a componente teórica da mesma, com o que eu não concordava. A componente teórica e reflexiva é importante e faz-me imensa impressão dizer-se que se trata de falar de coisas sem interesse; muitos docentes morrerão com este discurso. Por outro lado, lidando todos os anos com alunos em formação, não percebo o desfasamento entre a preparação teórica e prática em muitas cadeiras de Ciências da Educação.
    Na discussão que estamos presentemente a ter, há uma dimensão a que sou sensível. A da investigação em Ciências da Educação. Investigar as reações dos alunos na sala de aula, dos próprios professores, é uma dimensão que dominamos mal e que deve ser aprofundada. E o contributo das Ciências da Educação pode ser importante, o contributo de quem quer que seja que tenha experiência neste domínio.
    Por outro lado, na Universidade de Lisboa, o modelo implementado a partir de 2008 previu que, ao longo dos dois anos do curso de formação inicial, existisse uma constante deslocação dos alunos às escolas, a fim de quebrar a dicotomia inicial, entre formação teórica e prática. Com esta deslocação constante à escola, desde o início do curso, a começar pela observação da escola, no segundo ano os alunos deixaram de ter o tempo curricular disponível para “estarem na escola”, acompanharem o percurso de uma turma ao longo de um ano letivo e isso foi muito mau. Visivelmente, o seu desempenho como docentes piorou.
    Neste momento, estou a tentar que se retome, na Universidade de Lisboa, a continuidade de permanência na escola dos futuros professores a longo do segundo ano de formação, eventualmente iniciando estes um contacto mais formal com a escola no primeiro ano.
    Veremos. E continua a ser verdade que muitas decisões sofre a formação inicial de professores continuam a ser tomadas por quem não tem contacto direto com as escolas enquanto espaços de formação.
    Sérgio Claudino, Instituto de Geografia e Ordenamento do Território da Universidade de Lisboa

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  22. Buenas tardes, me llamo Iris Cuevas Gutiérrez y soy estudiante del Máster de Profesor de Secundaria en la Universidad de Valencia.

    Quisiera daros las gracias por compartir las dudas e inquietudes que habéis sentido previo a la experiencia de enfrentarse a las aulas; tanto el tema del foro como todas vuestras aportaciones han sido reveladoras.
    En cierta manera es un alivio saber que tus dudas e inquietudes han sido y son compartidas por otros que se enfrentaron o se enfrentan a la misma situación.
    Sin duda hay muchos temas interesantes en el Blog pero este en concreto ha sido para mi una herramienta para poder tener una visión mas clara y de primera mano de aquello que es el practicum.
    El hecho de ver que tan satisfactorio ha sido la experiencia para todos vosotros es una motivación añadida y aun más poder tener en cuenta vuestras valoraciones y aportaciones.

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  23. Muy buenos días,
    Soy Silvia Martínez Serna, estudiante del Máster de Profesor de Secundaria en la Universidad de Valencia.

    Considero que el termino educación es complicado de definir. Entender la educación para mi es ver la realidad que se vive, es llevar a tu práctica esas herramientas que de antemano sabes que son a las que tus alumnos tienen acceso, tener en cuenta los cambios tecnológicos e intenta preparar al individuo para la vida, no sólo para el momento que vive, es darle una formación integral, es decir abarcar todas sus dimensiones: personal, social….
    En la actualidad la práctica docente se ha vuelto una rutina, porque determinada metodología es la que siempre se ha aplicado, pero hemos llegado a un momento en el que el Maestro debe cuestionarse sobre su desempeño en el aula , cambiar ciertos aspectos de la metodología usando practicas y técnicas nuevas que ayuden al alumnado, capten su atención y aprendan.

    Me han gustado las aportaciones de los compañeros ya que dan sus visiones acerca de sus experiencias en el aula y eso me puede ayudar a la hora de introducirme yo en ellas este año. Durante la carrera tuve la oportunidad de realizar prácticas en un instituto de Valencia llamado Joanot Martorell. Acudí a varias aulas de distintos niveles: 3º E.S.O, 4º E.S.O y 2º de Bachiller y noté estas deficiencias de las que os hablo. El profesor imparte las clases como se han dado durante años, una clase tradicional y magistral donde los alumnos son espectadores de una película, limitándose únicamente a escuchar y mirar, sentados en sus pupitres. Esta manera de impartir clases debería de modificarse y adaptarse al siglo en el que nos encontramos.
    Cuando pasé por las distintas aulas me pude dar cuenta de una gran diferencia en cada una de ellas que me gustaría exponer aquí y es que su relación con el rendimiento y el clima emocional dentro del aula se veía afectado por un factor importante, que era el número de alumnos por curso que se encontraban en 4.E.SO. A diferencia de los alumnos en 3. E.S.O y 2 de Bachiller, los alumnos de 4.E.SO tendían a despistarse más, hablar entre ellos, reírse, hacer chistes, levantarse y no podían estar sentados durante una hora en el aula escuchando al profesor. Considero que este es un problema grave que habría que intentar solucionar.
    Podría mejorarse o apaliarse con un cambio en el sistema educativo, no sólo disminuyendo el número de alumnos por curso, como factor importante para elevar la calidad de la educación, sino también cambiando la metodología aplicada por una más moderna e innovadora.

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  24. Buenos días. Soy Carlos Fuertes Doñate, alumno del máster para formarse como profesor de Secundaria en la Universidad de Valencia. En primer lugar, no sabía si participar en este foro 18 pues todavía no he realizado las prácticas, aunque finalmente me he decidido a hacerlo.
    Las expectativas que tengo en torno a las prácticas, según lo comentado en nuestras clases, son confusas. Mi experiencia como alumno de Secundaria ya me queda algo lejos y quizá ello complique mi estancia en las prácticas. Unas prácticas, por otra parte, que veo muy reducidas en tiempo (sólo 2 meses en contraposición a tantísimas horas lectivas y, además, insertas en medio de dicha teoría) a la par que escasamente preparadas.
    Pero, aparte de esto, tengo esperanzas en intentar aplicar algunas de las ideas que llevo en mente y que hemos preparado en algunas clases como la dedicada a innovación, siendo éstas no solamente las relacionadas con las TICs, sino a los planteamientos y enfoques que le demos a nuestras clases. Si algo hemos leído y extraído de todas las horas lectivas que llevamos, es que el aprendizaje debe ser significativo y vivencial, de forma que debemos aproximar a las realidades del alumnado los conocimientos escolares, siendo éstos la conjugación de los conocimientos denominados vulgares, y los académicos. Teniendo en mente todas estas perspectivas y sobretodo, ganas de plantear problemas sociales vinculados a la geografía, tengo esperanza en la participación del alumnado, en ver sus puntos de vista y poder, mediante la contraposición del ya mencionado conocimiento académico y sus ideas previas, ver qué reacciones surgen en ese proceso de enseñanza aprendizaje.
    Sin embargo, como digo, estas ideas son previas a las prácticas; el trabajo de campo supongo que me cambiará ciertas perspectivas o ideas (dicen que al final aprendemos más los profesores de los alumnos que viceversa) y espero poder contar en los términos planteados mi experiencia en este mismo foro. ¡Muchas gracias y un saludo a todos/as!

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  25. Soy Lucía, alumna del máster de la Universitat de València, actualmente haciendo prácticas en un IES de la misma ciudad.

    En primer lugar felicitar a los participantes en este hilo. Los compañeros han propuesto un gran número de cuestiones muy sugerentes que merecen un debate amplio y profundo. Lamentablemente, no es ese el objeto de este comentario. Me dispongo a plantear un problema que me preocupa hoy, y me temo me va a preocupar el resto de mi vida profesional, cuando ésta exista.

    En las prácticas, como todos mis compañeros, estoy viendo de todo. Cosas muy positivas, problemas muy graves, actitudes que comparto y que desapruebo… En definitiva, está siendo una toma de contacto increíblemente constructiva, de la que salgo enriquecida tanto a nivel profesional como personal todos los días.
    Dentro de todas las cosas que me interesaría comentar, elijo la cuestión de la coordinación docente. Que cada lector o lectora le dé la importancia que considere, en función de su experiencia. Para mí, es un problema fundamental que está en la base de otros muchos problemas de los muchos más que hay en un instituto público actualmente. Aunque tengo entendido que estoy en un IES en el que la convivencia es buena y no hay conflictos graves entre el profesorado, el cuerpo docente se reúne poco y, cuando lo hace, parece que el objetivo de la reunión es justificarse y buscar culpables en lugar de reconocer problemas y aportar soluciones. Nadie entiende el punto de vista del compañero, ni los problemas de otros departamentos, ni hay intento de buscar respuesta a las necesidades del alumnado de una manera conjunta, más allá de lo que dicta la legislación y, en ocasiones, la junta directiva. Los profesores, tristemente, no ven la comunicación como una herramienta de su profesión, sino como un peligro del que se tienen que defender.

    En cuántos sentidos esto es negativo para la institución y para los alumnos, eso lo dejo para la reflexión del lector o la lectora.

    Tras enunciar el problema, se me ocurre una propuesta pequeña y concreta para solucionar una cuestión tan grave que evidentemente va a necesitar más que esta propuesta pequeña y concreta para solucionarse. Resulta evidente que los profesores del Máster reconocen la importancia que tiene para el docente la comunicación y el trabajo en equipo, y por eso entiendo que hayan reforzado tanto en estos meses los trabajos en grupo, las exposiciones en público y otras prácticas con objetivos similares. Sin embargo, en línea con la reflexión anterior, considero que hay una carencia a que no se está dando respuesta: los alumnos del máster permanecemos totalmente aislados respecto al resto de especialidades en absolutamente todas las asignaturas, aunque tenemos un programa que cuenta con asignaturas comunes a todas las ramas. ¿Dónde queda la comunicación entre docentes de distintas especialidades? ¿Cómo vamos a entender otros puntos de vista en el futuro si no nos dan la oportunidad de conocernos largo y tendido ahora, en un entorno constructivo y que favorece el aprendizaje?

    Dejo la pregunta en el aire, con ánimo de que el máster siga mejorando igual que lo hacemos todos sus alumnos.

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  26. Hola a tod@s, mi nombre es Cristina Platero, alumna del máster, y hace pocos días terminaba el periodo correspondiente a las prácticas. Bien, en mi opinión interrogantes en torno a la tarea educacional hay muchos -como bien han sabido plantear mis compañeros- y por desgracia estos siguen muchas veces sin tener una respuesta clara y concisa. Muchos factores (profesionales y personales) entran en juego, y nos hacen preguntarnos el porqué de cosas tan obvias y necesarias como por ejemplo, la no existencia, en el groso de los centros, de más equipos de docencia colaborativa, de trabajo interdisciplinar. Y no vengo a referirme única y exclusivamente a esa clase de colaboración, que da como resultado envidiados planes de estudio “sin exámenes” o de “evaluación por competencias”, que ya empiezan a hacerse realidad en algunos centros de carácter privado, como los los Jesuitas; o a novedosos e innovadores proyectos coordinados entre varias áreas. En lo que quería centrarme, ya no es tanto en las actuaciones transversales de los profesores, sino en las propias relaciones entre ellos, en cuanto a vínculos y trato.
    Se puede tener mayor o menor afinidad con una persona, simplemente porque ambos carácteres o personalidades chocan, pero aún así, creo que no es excusa. Como venía diciendo más arriba mi compañera Lucía, los profesores, en algunos casos, parecen tener miedo unos de otros; miedo en el sentido de que existe una especie de competitividad profesional (¿competitividad? ¿aquí?), del “uno hace más que el otro”. Ese "recelo", ese evitar inmiscuirse mucho en los asuntos del otro porque yo no querría que metiesen las narices en los míos, porque “yo lo hago de esta manera y el tiene aquella otra”, porque cada maestrillo su librillo, y en definitiva y por defecto, esa especialidad que permanece estanca año tras año.
    Me molesta mucho que se tire por tierra el trabajo de un compañero sin apenas pararse a valorarlo desde un enfoque objetivo, simplemente porque exista una riña profesional entre medias. Si esto pasa en una empresa, donde lo importante es la productividad, las ventas y un determinado objetivo a alcanzar a final de mes, tú te puedes encerrar en tu cubículo y no preocuparte más que por los números de ese día. En el caso de para con los alumnos, de manera indirecta pero directamente proporcional, van a recibir tu “mal hacer”; tus encontronazos departamentales, y a la postre van a verte a ti; tú como persona adulta que te estás comportando así y hablando asá.
    Si existe un mal clima en el claustro, y dentro de lo posible está en tu mano solucionarlo, por favor inténtalo y no lo extiendas en el tiempo y que éste acabe por concernir e influir en quienes no tienen la culpa de él. Si tú eres propenso/a a esto el peor sitio que puedes escoger para trabajar, es un sitio donde hay niños ¿qué ejemplo pretendes darles?
    Pienso que aunque los rifi-rafes suelen ser a veces (más y menos) inevitables, si estos llegasen a darse, debemos intentar llegar a un acuerdo; no por un bajarse los pantalones, mostrar nuestra debilidad ante el otro; no se trata del “porqué tengo que ceder yo y no él” (¿Pero qué se está disputando algo? ¿Hay alguna especie de premio o condecoración? ¿Estamos discutiendo acerca de las necesidades de un niño o demostrando nuestras propias necesidades de autoestima, de quedar victoriosos ante el otro, de tener la última palabra?). Si uno tiene que ser condescendiente que lo sea en pos de un trabajo donde no le estás dando a una manivela o presionando las teclas de un ordenador, estás en un “puesto de trabajo” donde tienes que lograr que ese alumno pueda extraer de ti valores, actitudes, comportamientos, sentimientos…si es que alguno de ellos merece la pena. Si estás pensando en ser profesor/a estarás de acuerdo conmigo en la necesidad de favorecer que cada curso escolar sea especial y beneficioso, tanto para los alumnos como para ti mismo/a; pues son años de unas vidas que no regresan, ni en las suyas ni en la tuya.

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    1. Comparto las opiniones de Lucía y Cristina y ello me reafirma en la necesidad de re-pensar la profesión docente en Secundaria Obligatoria en los primeros decenios de este milenio.
      Ya no llega con saber la materia (en este caso geografía e historia), sino también conocer sus representaciones sociales en el mundo cotidiano donde se mueven las personas (alumnos y docentes), pero también tener la competencia personal de saber escuchar y trabajar en equipo.
      Mal podemos promover la participación y el trabajo en equipo si no lo ejercitamos. Los ejemplos de estas intervenciones me parecen muy positivas para replantearnos cómo se está desarrollando la docencia de las ciencias sociales. O sea, ¿cómo valoramos las voces, gestos, imágenes que generan los alumnos en clase? ¿Cómo buscamos consensos para determinar la incidencia del contexto social que influye en la personalidad del individuo que está en clase? ¿cómo puede ayudar la geografía e historia a desvelar los factores que están ocultos en la superficialidad de las noticias de los medios de comunicación? ¿qué expectativas temporales y espaciales surgen en la tecnología de las comunicaciones?
      Son preguntas que pretenden re-pensar la profesión docente en este nuevo contexto.
      Un saludo
      Xosé m

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  27. Olá, meu nome é Mariana, acabei de me formar em Ciências Sociais na modalidade de Licenciatura na Unesp. Tive contato com a escola básica durante dois anos dos quais participei do Programa Institucional de Bolsas de Iniciação à Docência (PIBID), financiado pela Capes. Muito importante foi para mim participar deste programa, pois me colocou em contato direto com a sala de aula, seja com observações, planejamento de aulas e regências destas. Vejo que se tivesse feito apenas o estágio obrigatório chegaria a sala de aula ainda menos preparada.
    A primeira vez que cheguei em uma sala de aula levei um choque, pois não era nada do que eu esperava, percebi que nem toda teoria vista na Universidade se encaixava com aquela realidade, foi então que pensei se era essa profissão mesmo que queria para mim. Com o tempo fui tendo a certeza de que ser professora era realmente o que queria.
    Nas salas de aulas percebi que não era apenas a minha disciplina, o conteúdo específico de cada série que eu deveria ensinar, pois esses alunos vinham com deficiências de aprendizagem ao longo do tempo, assim era preciso pensar em atividades inovadoras que suprisse a necessidade desses alunos e fizesse-os avançar com o conteúdo a ser estudado.
    Grande é a importância das disciplinas de Ciências Sociais nas escolas, elas são responsáveis pela desnaturalização do senso comum e a formação de sujeitos críticos. O papel do professor é de fundamental importância nesse processo, pois oferece ferramentas para que estes sujeitos cheguem ao objetivo proposto em cada disciplina. Acredito que o professor deva apontar aos alunos diferentes pontos de vistas, deixando-os livres para escolher o que melhor lhes satisfaça. Exemplo disso foi uma atividade realizada, quando eu ainda participava do Pibid, com os alunos da 3ª série do ensino médio em uma escola pública na cidade de Marília. Trabalhando a temática dos Movimentos Sociais, especificamente Movimento dos Trabalhadores Rurais sem Terra (MST), além de todo conteúdo de base teórica, foi apresentado aos alunos diferentes vídeos de reportagens (cada um de uma emissora de televisão) sobre o MST e a cada vídeo era apontado para termos que cada uma utilizava e então foi discutido com os alunos a manipulação da mídia. Ao final de toda a sequência didática para trabalhar esse tema, os alunos foram visitar um assentamento do MST, por fim foi perceptível a mudança de visão que os alunos tinham no começo acerca do movimento, visão essa carregada de preconceitos. Não foi preciso o professor “doutrinar” sobre a melhor opinião, mas ele ofereceu recursos para que os alunos chegassem por si só na desnaturalização.
    Por fim, por mais difícil que pareça estar de resolver o problema da educação no Brasil, eu ainda acredito que seja possível aplicar uma docência inovadora. Quando o professor chega em sala com o brilho nos olhos demonstrando o quanto ama fazer o que está fazendo e oferece aos alunos atividades diferenciadas do que viram até então, estes se entregam à ele, é possível então atingir os principais objetivos.
    Mariana Bueno de Oliveira
    Unesp

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  28. Soy Olga Lajara, estudiante del máster de la Universidad de Valencia, y me gustaría compartir con todos mi experiencia en el IES Carles Salvador de Aldaya. Cuando empecé las prácticas estaba entusiasmada pero a la vez temerosa, no sabía con que iba a toparme, como sería el centro, el tutor, los alumnos, etc. Además me daba mucho miedo el tener que hablar en público, pues siempre me ha costado. Pero la oportunidad que me han dado estas prácticas me han hecho ver que me siento cómoda dando clases, y que me encanta la docencia. Además tuve una buena acogida, tanto por parte de los profesores como por parte de los alumnos, y del PAS (Personal Administrativo del Centro).

    El primer mes de prácticas me dediqué a la observación crítica y activa de cómo mi tutor impartía la clase, las metodología que utilizaba, las técnicas para mantener el orden, etc. Y el segundo mes cambie de rol, empezando a impartir clases. El tutor me dejó escoger el grupo que quisiera, y yo elegí dos grupos de 2º ESO, uno de 30 personas y otros de 15, para poder ver la diferencia que hay entre dar clase a un grupo reducido y a uno más grande. En total fueron 8 maravillosas sesiones con cada grupo, en las que aprendí mucho, no solo de metodología, sino de como tratar a los alumno. Cada uno es diferente, con sus problemas y sus virtudes. Son personas a las que se les debe escuchar y tratar con amabilidad, no solo son alumnos a los que les das la charla y te vas a tu casa. Tienes que transmitirles unos conocimientos, pero también unos valores, y para ello debes de dar ejemplo. Para mí una de las mejores cosas de las docencia es el acercamiento a los alumnos, el ser una figura de apoyo.

    La verdad es que las prácticas han sido una experiencia maravillosa, que repetiría de nuevo sin pensarlo. Me han aportado muchísimo, ya que estaba acostumbrada a verlo desde el lado del alumno, y ahora he podido verlo desde el lado del profesor. Sin lugar a duda a los futuros alumnos del máster les diría que no tengan miedo, que las prácticas son una experiencia muy gratificante, donde aprenderán mucho y verán realmente si esto les gusta o no.

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  29. Soy Raquel Miralles Gilabert, alumna del Máster de Profesor/a de Educación Secundaria en Valencia.
    En mi experiencia en las prácticas, pude observar que los alumnos perciben las CCSS como un "rollo" que no les interesa, no les sirve, etc. No saben por qué estudian los contenidos que se les presentan, y pasan las horas de clase contando los minutos para salir de la clase. La participación era por pura obligación, y era una participación de muy bajo nivel, los alumnos se limitaban a leer las lecciones y a responder las preguntas buscando una frase que, leyéndola literalmente contestase al enunciado.
    Delante de este desinterés, cuando pude impartir una UD, aprovechando que me habían dado vía libre, realicé un repaso de aquello que habían estudiado recientemente, pero aplicándolo al entorno directo de los alumnos, su pueblo.
    La actitud de los alumnos cambió notablemente, se interesaron más, realizaron preguntas, participaban voluntariamente cuando lo solicitaba, etc. Con esto quiero decir que la visión que tienen los alumnos de las asignaturas depende en gran parte al enfoque que le dan los docentes, y que si nos esforzamos, podemos conseguir que los alumnos se interesen realmente por las CCSS, mejorando tanto el ambiente como los resultados.
    En nuestras manos está la posibilidad de mejorar la calidad de nuestras clases y aumentar el interés de los alumnos. Todo dependerá del interés y esfuerzo que le dediquemos los profesores (y futuros profesores).

    Sin duda estas prácticas me han ayudado a reafirmarme en mi decisión de estudiar este máster y me han dejado con ganas de más.

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    1. Mi nombre es Alain Monárdez estudiante de cuarto año de la carrera Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile.

      He decidido comentar la reflexión realizada por Raquel Miralles sobre las prácticas que ha realizado durante su formación, puesto que concuerdo bastante con su planteamiento en el punto que las Ciencias Sociales tienden a volverse tediosas para los alumnos en una gran mayoría de casos, y por sobre todo para aquellos que prefieren las Ciencias Naturales o "duras" por la exactitud que estas poseen y otros factores que no estaría en condiciones de determinar, sin embargo, lo que si se vuelve evidente es la manera en que se resta importancia a asignaturas como Historia y Geografía (entre otras) cuando estas ofrecen importantes herramienta para que el estudiante pueda formarse no solo en el ámbito académico (muchas veces memorista y repetitivo) sino más bien como una persona integral con capacidad critica, favoreciendo sus relaciones sociales una vez que estén fuera de contexto escolar, siendo necesario quizás un replanteamiento de las asignaturas para dejar de enseñar solo fechas, personajes, lugares o climas e integrar otras áreas de las ciencias sociales brindando así de un sentido que el estudiante sea capaz de comprender.

      Por otro lado, el planteamiento de acercar la enseñanza de las Ciencias Sociales a la realidad de los estudiantes considero es una de las mejores metodologías para capturar su atención, puesto que no se está hablando de la historia o la geografía de otros pueblos sino que corresponde al propio, el de sus abuelos, hermanos y padres, provocando con ello que la fuente de información sea cercana y accesible. Creo que esta técnica es por sobre todo la perfecta aliada de la geografía, puesto que a partir desde lo micro a lo macro (desde lo local a lo global) el estudiante será capaz de reconocer que todo lo que le rodea en los sitios que recorre a diario o regularmente son elementos que conforman un sistema geográfico, sin que sea necesario enseñar grandes extensiones de territorio para obtener un conocimiento valioso. Esto puede resultar mucho más agradable y ligero, lo que debería de agradar a los niños.

      Ahora bien, es cierto que como profesores somos los que tenemos un grado de responsabilidad mayor en cuanto a la formación de los estudiantes, sin embargo no todo recae en nuestras manos puesto que en muchos casos la labor se limita por diversos factores, ya sean las exigencias del curriculum, las exigencias por parte de los superiores, el escaso tiempo que se determina para la enseñanza de las CCSS o inclusive en varias ocasiones hasta el contexto de nuestros alumnos. Aun así, esto de ninguna manera significara la imposibilidad de intentar generar cambios de perspectivas, quizás no a grandes escalas como los sistemas educativos de cada país, pero si en los lugares donde nos desenvolvamos como profesionales.

      Saludos cordiales

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  30. Buenas tardes, soy María Isabel Martínez Carrió, alumna del máster de Secundaria de la UV y voy a realizar un par de reflexiones sobre mi experiencia en el practicum y su relación con las clases del máster. En mi caso, hice las prácticas en el instituto Francesc Ferrer y Guardia de Benimaclet, en Valencia, y me gustaría dejar constancia de la buena relación o coordinación existente, en todo momento, entre mi tutora y yo, incluso con otra compañera mía de clase que también estaba allí o con los demás profesores y miembros del departamento de Geografia e Historia del instituto. Una apreciación que considero de primer interés porque de no haber sido así no podría haber realizado ni disfrutado de esta experiencia.
    El caso es que cuando uno se enfrenta a esta nueva actividad, diferente a la de ser alumno/a, no sabe a qué ni a quién va dirigirse, de ahí mi incertidumbre sobre cuál sería el resultado final de mi experiencia. En cierta medida, las clases del máster te ponen en la tesitura de qué pasa y como actuar delante de esta oportunidad. El hecho es que la correlación entre lo que se habla en las clases teóricas del máster y la realidad del instituto no se puede poner en práctica y un ejemplo seria el no poder realizar, en toda su totalidad, esa repetida innovación o creatividad que se nos ha dicho tantas veces en clase. En mi centro, concretamente, los dos grupos de primero de ESO que se le habían asignado a mi tutora, eran muy diferentes. Por un lado, uno con un hábito de trabajo prácticamente nulo y con alumnos muy flojos o pocas capacidades o habilidades básicas para realizar una simple actividad de lectura y identificación de sus ideas principales, y otro con un nivel académico muchos más elevado que si permite llevar otra dinámica de clase mucho más creativa y de aprendizaje significativo. En este caso, la adaptación curricular individual no cubre este tipo de carencias que se convierten, ante todo, en necesidades inmediatas. Si bien es cierto que la profesora no puede abarcar todas y cada una de las variables o casos particulares, también creo que este no el mejor momento para la resolución de situaciones como esta. Para eso es importante entender esta realidad desde el colapso y retraso administrativo que se adaptan nuestros centros y cuerpos docentes públicos.
    No obstante, ha sido interesante ver y participar en la preparación de una sesión y el recurso de materiales de todo tipo como textos, mapas, vídeos, gráficas, para llevar a cabo, en cierta mesura, una metodología constructivista que propicie un aprendizaje significativo entre los alumnos. En todo caso, considero productivas e interesantes las prácticas, sobre todo de cara a nuestra futura tarea docente.

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  31. Buenos días, mi nombre es Rebeca Catalá Romero actual alumna del Máster de Profesor en Educación Secundaria de la Universidad de Valencia, España. Después de haber leído algunas de vuestras aportaciones en este foro me gustaría aportar mi granito de arena. Mi experiencia de las prácticas la resumiría en una frase “involúcrame y aprendo”. Mi tutor de prácticas, desde un primer momento, me hizo participe de las tareas docentes y durante los dos meses del Practicum no ha dejado de hacerlo. Considero que la experiencia que me ha aportado ha sido totalmente enriquecedora y positiva.

    A nivel personal he aumentado la confianza en mi misma a la hora de hablar en público, he podido experimentar que soy capaz de mantener el control del aula, he sido capaz de conectar con los alumnos manteniendo el rol de profesor, he sido capaz de despertar el interés por la geografía y los alumnos han demostrado mejorar y aprender, sobretodo, en la elaboración e interpretación de mapas.

    A nivel académico he conocido como se organiza un centro escolar, la cantidad de personal implicado en el centro, la diversidad de instalaciones que puede disponer, he podido asistir a clases donde los tipos de metodología didáctica eran diferentes (desde la postura clásica de profesor habla, alumnos escuchan, toman nota y hacen ejercicios del libro a trabajar por proyectos alguna unidad didáctica), como actuó el equipo docente en la resolución de algunos conflictos que detectaron en nuestro periodo de prácticas.

    Así que ánimo para los próximos estudiantes del Máster, dejad de un lado cualquier miedo, disfrutar de esta oportunidad y se convertirá en una experiencia gratificante.

    Asimismo, me gustaría comentar algo más sobre mi experiencia en las prácticas y es el funcionamiento del Aula Materia.

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  32. (2º parte)
    Para quien desconozca este término. Las aula materia es una manera de distribución diferente de las aulas del centro. Las aulas se distribuyen según profesor o asignatura (Geografía – Historia, Castellano, Inglés, Matemáticas,...), en vez de que la distribución de las aulas sean por cursos y grupos (1ºA, 1ºB, 1ºC, 2ºA,...). Es decir, cada pasillo corresponde a un curso, en la medida de lo posible, y cada profesor tiene asignado un aula y son los alumnos los que se van desplazando dependiendo de la materia que les toque. Esto tiene ventajas y desventajas.

    Las ventajas: son que cada docente tiene un sitio “fijo” de trabajo lo que genera que el docente ambiente la clase con elementos de su materia, que tanto docente como alumnos tengan accesibilidad a materiales, herramientas y recursos propios de la disciplina en el mismo espacio de trabajo, los profesores ya no necesitan tanto espacio en la sala de profesores para guardar materiales y también, el hecho de que los alumnos se vean obligados a desplazarse sirve para que entre clase y clase se muevan con un fin, se despeguen y se activen al entrar en un nuevo espacio de trabajo.

    Desventajas: se requiere de presupuesto para inmobiliario como taquillas en cada pasillo o equipamiento más preciso en las aulas, la sala de profesores deja de ser el un punto central donde los docentes se cruzan e intercambian opiniones entre clase y clase, aunque sí seguirá siendo el punto de encuentro en los descansos más prolongados. o el hecho de que sean lo alumnos los que deban desplazarse implique que se pierda tiempo de clase.

    En mi experiencia, en un centro donde se trabaja con aulas materia, nunca percibí esa distracción por parte de los estudiantes entre clase y clase, siempre, todos acudían a su hora al aula correspondiente. Tampoco presencié que se educara la puntualidad con amenaza de sanciones o castigos al alumno que no llegará a su hora. Los estudiantes eran puntuales. Por otro lado, el hecho de salir del aula con un motivo: ir a la taquilla coger el material y acudir a otro aula les mantiene ocupados y no da pie a perderse en los pasillos por pura distracción. El hecho de que tanto profesores como alumnos tengan en el mismo espacio de trabajo tengan herramientas, materiales y otros recursos de su materia era genial. En mi caso el aula era de Ciencias Sociales (Historia y Geografía), en las paredes del aula colgaban mapas de muchos tipos y escalas, actuales y antiguos, imágenes de personajes históricos, murales de cuadros relevantes y trabajos de su asignatura de los propios alumno. Una estantería con enciclopedias, atlas, bibliografías, películas y documentales históricos para uso y consulta pública. Y los profesores seguían teniendo contacto diario en los descansos (hora del almuerzo o la hora de comer).

    Antes no hubiera sido partidaria de esta organización del centro, ahora si lo sería, he comprobado que funciona y valoro que eran más las ventajas que las desventajas de esta organización. Invito a todos los lectores del foro a leer mi experiencia y valoración sobre las aula materia y aportar vuestras experiencias y valoraciones de esta organización del aulario del centro.

    Un saludo a todos los lectores del Geoforo.

    Rebeca Catalá Romero

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  33. Bom dia,
    Meu nome é Thais A. C. de Azevedo, eu sou professora dos anos inicias do ensino fundamental, na cidade de Ribeirão Preto, no estado de São Paulo, Brasil. Também sou aluna do programa de pós-graduação (mestrado) em Educação da Universidade de São Paulo.
    Minha área de interesse e pesquisa são o ensino de Geografia, assim como a formação de professores.
    Venho aqui compartilhar minha prática docente, pois ao ler o comentário da Rebeca Catalá Romero, me identifiquei alguns pontos na organização escolar apresentada por ela e desafios a serem superados.
    Na escola onde eu trabalho, a organização das “matérias” (por nós chamadas de disciplinas) é semelhante as que a Rebeca descreveu, isso é, História, Geografia, Língua Portuguesa e Matemática, cada uma delas, com seu professor responsável. É importante salientar que essa organização, não é o unanime na organização dos anos iniciais no Brasil. O mais comum é um professor, o pedagogo, que é polivalente, leciona todas as disciplinas, do 1° ao 5° ano escolar. (Esse mesmo profissional atua também na Educação Infantil e Gestão Escolar.).
    Assim como a professora Rebeca, irei apontar as vantagens e desvantagens desse estilo de organização escolar, sob a minha perspectiva.
    As vantagens:
    Os professores ao se dedicarem as disciplinas específicas preparam suas aulas com maior segurança, com materiais mais inovadores.
    Além de garantir que tal aula será realmente desenvolvida. (Aponto esse aspecto, pois muitas vezes, por diversos motivos, a disciplina consta na grade curricular, porém não está realmente presente em sala de aula).
    Desvantagens:
    A maior dificuldade do desenvolvimento de práticas que contemplem a INTERDISCIPLINARIEDADE, o que considero muito importante, pois de ser capaz de proporcionar práticas de ensino mais contextualizadas e reflexivas para o estudante.
    O tempo “engessado”, isso é, nos anos iniciais do ensino fundamental, muitas vezes, a adaptação pedagógica do tempo estipulado para cada atividade é essencial para o seu sucesso. Algumas turmas de alunos tem grande avanço se pudessem se manter por mais algum tempo na mesma atividade, o que se torna inviável, nesse modelo apresentado, pois o outro professor, de outra disciplina, iniciará a respectiva aula, logo em seguida.

    Considero importante ressaltar que as observações realizadas acima, são reflexões da minha prática docente, diante apenas do contexto escolar onde leciono. (Escolar da rede Privada da cidade de Ribeirão Preto.).
    Acredito que a organização escolar/curricular sob qual estamos refletindo pode nos proporcionar alguns avanços, se conseguirmos superar desafios, como o da interdisciplinaridade. O dialogo e a formação docente em equipe de trabalho, podem ser grandes aliadas nesse processo.
    Abraços
    Thais Angela Cavalheiro de Azevedo
    Mestranda pelo Programa de Pós-Graduação em Educação na Universidade de São Paulo (FFCLRP-USP)
    Licenciada em Pedagogia (FFCLRP-USP)
    Membro do Grupo de Estudos da Localidade – ELO
    Professora do Ensino Fundamental – Anos Iniciais
    Ribeirão Preto – São Paulo - Brasil

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  34. Boa noite!
    Diante da leitura do fórum e dos apontamentos trazidos pelos colegas de área gostaria de trazer alguma contribuição sobre a temática. Sou mestranda do programa de pós-graduação em Educação da Universidade de São Paulo (Ribeirão Preto - São Paulo – Brasil) e professora das séries iniciais do Ensino Fundamental, atualmente leciono em uma turma de 1º Ano na rede municipal de ensino da cidade de Altinópolis, no estado de São Paulo, Brasil. Em anos anteriores lecionava nas séries finais do Ensino Fundamental na disciplinas de Geografia e História.
    Pensando na questão levanta por Thaís sobre a interdisciplinariedade, relembro quando lecionava para as séries finais do Ensino Fundamental a interdisciplinariedade só era possível de ser realizada com a ajuda de um professor que se interessava em trabalhar temas presentes nas disciplinas de História e Geografia em conjunto. Nas minhas aulas de Geografia fazia relações com os temas que o professor de História também estava trabalhando e vice e versa. Nas salas em que eu ministrava ambas as disciplinas o link era mais fácil, obviamente.
    Na condição de professora polivalente se torna mais fácil trabalhar os conteúdos que abarcam as disciplinas Geografia e História e, de tal forma, a interdisciplinariedade está presente em sala de aula. Muitas vezes é possível relacionar a disciplina de Ciências em alguns temas do currículo. O grande problema é o número de aulas destinado para tais disciplinas. Tenho 4 horas/aula semanais para ministrar as 3 disciplinas. Como este ano leciono para uma turma de 1º ano, o enfoque é a alfabetização e não há material didático de tais disciplinas. Muitas vezes considero um fator positivo, pois conduzo as aulas de acordo com meus conhecimentos, minha formação, por outro lado, fica explícito o lugar secundário que tais disciplinas ocupam no currículo, principalmente as disciplinas de História e Geografia. Não perceber a importância das duas disciplinas nas séries iniciais é conceber a alfabetização como uma decodificação do código escrito, é não pensar o letramento, e letramento requer conhecimento de mundo, do espaço e tempo que o educando vive. Relacionar o conhecimento de mundo, a realidade do aluno com o ambiente escolar e seus conhecimentos cabe às referidas disciplinas. Este é o devido lugar das ciências sociais na escola, deve ser abordada e discutida desde as primeiras séries do ensino fundamental numa perspectiva central na ampliação dos horizontes e entendimento da realidade do aluno.
    Abraços e até logo!
    Rejane T. Guimarães
    Mestranda pelo Programa de Pós-Graduação em Educação na Universidade de São Paulo (FFCLRP - USP)
    Bel. e Licenciada em História (FCHSF - UNESP)
    Licenciada em Pedagogia (FFCLRP - USP)
    Membro do Grupo de Estudos da Localidade - ELO
    Professora do Ensino Fundamental - Anos Iniciais
    Ribeirão Preto - São Paulo - Brasil

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  35. Buenos días, mi nombre es Patricia Torres alumna del Master de Profesor de Secundaria de la UV. Quería aportar algunas reflexiones sobre lo observado en las prácticas. En mi caso, y gracias al compromiso de mi tutor, pude dar clase a tres niveles diferentes (3º ESO, 4ºESO Y 2º Bachillerato), con esta oportunidad pude detectar algunas cuestiones que me gustaría comentaros.
    Durante la primera semana de “aclimatación” ya pude observar las diferencias que había entre el clima de aula de los grupos de ESO y el de bachillerato, en los niveles más bajos la clases eran mucho más abiertas, flexibles, dialogadas, proactivas, sin embargo en bachillerato y con la temida PAU como telón de fondo las clases se convertía en un monologo del docente. Los alumnos se mostraban totalmente pasivos, no mostraban ninguna curiosidad por los temas, podríamos decir que se limitaban a absorber la información que el docente les mostraba. La actitud que se generaba en este nivel respondía en gran medida al diseño de este nivel educativo, en mi opinión. Creo que la presión que ejerce una prueba como la PAU tanto en los docentes como en los alumnos obstaculiza un aprendizaje significativo y como consecuencia se desarrolla lo que algunos expertos denominan educación bulímica, es decir, los alumnos almacenan una gran cantidad de contenidos que una vez superada la prueba son desechados. Comente mi observación con mis compañeras de práctica, tutor y otros docentes lo que nos hizo reflexionar sobre la idoneidad de este tipo de pruebas. Esta es la primera reflexión que os planteo.
    Por otro lado también me gustaría comentaros otra de las situaciones que más me impacto durante mis prácticas. En varias ocasiones tuve la oportunidad de dar el mismo contenido para dos grupos diferentes del mismo nivel y para mí fue sorprendente comprobar como tratando la misma materia mi explicación y los recursos que utilizaba debían variar para cada grupo. La flexibilidad que debe mostrar el docente para adaptarse a cada ambiente me parece clave. Sabemos que trabajamos con sujetos y no con objetos por lo que la retroalimentación durante las clases es clave para que el docente pueda guiar a los diferentes grupos según las necesidades de estos. Esto supone un trabajo, especialmente intelectual, para el docente que debe modelar sus estrategias para responder a las necesidades de cada grupo. Flexibilidad, empatía y capacidad motivadora son rasgos esenciales para poder superar estas variables por parte del docente, en mi opinión.
    Creo que la experiencia que nos aportan las prácticas son esenciales para nuestra formación, como ya han comentado algunos compañeros es el momento de enfrentarnos con la realidad y poder observar nuestras propias capacidades. Para mí fue una experiencia estupenda de la que llevo un estupendo sabor de boca.
    Un saludo
    Patricia Torres Ortega.

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  36. Buenas, soy alberto irueste de primero de magisterio, de la universidad de valencia, y he estado dos semanas de prácticas en un colegio público, de un pueblo pequeño, Algimia.
    Querían destacar, que me ha gustado mucho realizar estas practicas, y que dichas prácticas me han servido para afianzar que sé que lo que estoy haciendo me gusta, y que no me equivoqué de elección al elegir magisterio. Un detalle que queía comentar, es que en este colegio que he estado, el aprendizaje funciona fantásticamente, y en mi opinión ello se puede deber a que hay pocos niños en clase y esto facilita la rapidez de la enseñanza.También quiero destacar que en este colegio, se realizan las tertulias literarias dialógicas, y grupos interactivos, estas dos actuaciones de éxito me parecen muy beneficiosas a la hora del aprendizaje de un niño y que realmente tienen una finalidad útil.
    Quiero destacar también las tecnologías de dicho centro me parecen muy buenas,los ordenadores, pizarras digitales, proyectores, muy actualizados.

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  37. Quizá el éxito de este colegio se deba, en parte, a la buena gestión que se realiza por el claustro y por equipo directivo. Sería importante que en el análisis de las prácticas escolares podamos discernir cómo influyen los factores organizativos y cómo los metodológicos en la comunicación entre las personas del centro.
    Las experiencias de tertulias dialógicas, grupos inclusivos y bibliotecas tutorizadas son ejemplos de actividades innovadoras que dependen de la organización escolar
    Un saludo
    XM

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  38. Hola, soy Gonzalo Bolos, y he estado haciendo las practicas escolares correspondientes al primer año de Magisterio en el colegio público de la localidad de Algímia.

    Desde los primeros días de estas practicas me he dad cuenta de lo gratificante de esta profesión, como cambia y se renueva cada día y las exigencias que impone a nivel de intervención por parte de los docentes.

    Así pues, quería destacar que puede conocer en primera persona como se realizan los grupos interactivos en diferentes asignaturas. Ya que no había podido asistir a ninguna fue una grata sorpresa lo que me encontré. En ellos puede observar como entre los propios alumnos consiguen crear un conocimiento colectivo, el cual, a mi parecer es mucho fructífero y duradero, ya que son ellos mismos los creadores de dicho contenido. Además se consigue fomentar valores en ellos como pueden ser la solidaridad con el compañero que no lo comprende, el respeto hacia los otros integrantes de su grupo, la amabilidad, etc.

    Por otro lado, también puede observar como se realizan las tertulias literarias pedagógicas, ya que en dicho centro le dan mucha importancia a ambas actuaciones de éxito. Lo que mas me fascino de ellas, es como a raíz de la lectura de un libro, surgen por iniciativa propia de los alumnos temas mas o menos actuales sobre los cuales los alumnos dan su propia versión y de los que surgen argumentos muy positivos para el grupo. Además, pienso que es una gran opción a la hora de que los alumnos aprendan nuevo vocabulario que quizá ya no se use en el día a día.

    Por último, quería aportar que he podido observar los cambios que se han producido desde que ya no asisto a la escuela, y como esta ha mejorado en cierto modo sus técnicas de aprendizaje. Esto es una de las razones por las que quiero seguir formándome como docente, para poder aplicarlas de la mejor manera posible.

    Un cordial saludo.

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  39. Hola buenos días soy Víctor López, alumno de la Universidad de Valencia y estudiante del grado de magisterio de educación primaria. Tuve la oportunidad de realizar el prácticum 1 en el colegio Eres Altes de Riba roja de Túria una localidad situada a unos 20 minutos de la ciudad de Valencia.

    Tuve la oportunidad de observar el funcionamiento de una tertulia dialógica en alumnos de primero de primaria, en mi opinión una edad muy temprana para hacerlas ya que los alumnos en esas edades no tienen la suficiente comprensión lectora como para hablar sobre el libro. Tal vez el mal funcionamiento de la tertulia fuese por el libro que estaban leyendo ya que trataba de una historia en teatro y para ellos era todavía más complicado comprenderlo.

    Otra de las cosas que tuve la oportunidad de observar fueron los grupos interactivos en el aula. Este tipo de actividad sí que la vi adecuada para la edad y una forma muy interesante de realizar las clases ya que los alumnos están toda la sesión prestando atención cosa que en una clase ordinaria no se consigue ya que siempre se van a distraer en algún momento de la clase. Además este tipo de trabajos en grupo fomenta la cooperación y autonomía del alumnado ya que empiezan a trabajar en grupo, de esta manera en un futuro cuando les pidan trabajos en grupo ya tendrán algo de experiencia para realizarlos.

    Un saludo.

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  40. Buenas noches, soy Esther Monzó alumna de la Universidad de Valencia y estudiante de magisterio de educación primaria. He realizado el Practicum I en la escuela Mas d’Escoto situada en el municipio de Riba-roja de Túria.

    Durante las prácticas, he tenido la oportunidad de sacar mis propias conclusiones sobre la profesión docente, y saber sin duda alguna que quiero dedicarme plenamente a la educación.

    En primer lugar, pude apreciar las distintas actividades que se realizaban en las clases de primaria ya que durante la estancia en el centro he podido observar una clase de cada ciclo; segundo, cuarto y sexto. Concretamente desarrollaban en las clases de primero y cuarto los grupos interactivos, en el segundo ciclo las tertulias literarias y en el tercer ciclo tenían lugar las “Mate-Caixa”. En todas estas actividades la cooperación y el autoaprendizaje constituían los ejes fundamentales para descubrir, aprender e investigar. La metodología empleada para impartir las clases se orientaba para que el alumnado fuera partícipe en la construcción de su propio aprendizaje combinando varios aspectos de diversas asignaturas obteniendo así un conocimiento más global, trabajo por proyectos. Bajo mi punto de vista esta metodología permite a los niños y niñas poner en práctica sus conocimientos, de manera autónoma e involucrada, les ayuda a aprender a aprender ya sea de los docentes así como de los compañeros que pueden ayudarse mutuamente consiguiendo que los que más sepan ayuden al resto, les anima a participar y lo más importante, logra un aprendizaje significativo.

    Además, se realizan una serie de talleres de inteligencia múltiple, los cuales pueden ser llevados a la práctica en su vida diaria, y el taller de nutrición con el fin de que los alumnos coman de forma saludable.

    Cabe destacar el compromiso que Mas d’Escoto adopta hacia la naturaleza y hacia el Parque Natural del rio Túria donde se les hace partícipes en la adquisición de los contenidos y en el desarrollo aprendizaje de los alumnos. La directora del centro afirma que el taller de jardinería está conectado a uno de sus proyectos globales Ecociència, Ecoconciència donde se lleva a cabo el apadrinamiento de la parcela del Parque Natural del rio Túria. Con este proyecto y el taller de jardinería se quiere fomentar el contacto permanente con el medioambiente y el respeto hacia el mismo.

    Por otro lado, este periodo de prácticas me ha dado la posibilidad de poder observar y reflexionar sobre las destrezas, habilidades y capacidades que todo maestro y maestra debe presentar ya que debe ser una persona capaz de transmitir unos conocimientos y valores, saber atender y entender las necesidades, comportamientos e inquietudes pero sobre todo debe transmitirles mucho cariño y respeto animándolos y motivándolos en todo momento, para que desarrollen un crecimiento tanto a nivel personal como curricular convenciéndoles que valen mucho como personas, ya que me he dado cuenta que un excelente docente es aquel que va más allá de transmitir unos conocimientos establecidos por la ley.

    Un saludo.

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  41. Buenos días a todos. Soy Nerea Bautista Serrano, estudiante del Máster de Profesor/a en Educación Secundaria de la Universidad de Valencia. El pasado mes de marzo finalicé las prácticas en un instituto de Valencia.
    Tras leer varios de los comentarios realizados por los compañeros veo que las situaciones y los problemas encontrados se asemejan a los que viví yo. Entrando en mi experiencia personal, he de decir que las prácticas me dejaron un sabor agridulce. Tenía muchas esperanzas, quería ver de primera mano lo que era “ser una profesora” y esa experiencia se vio reducida a 1 semana de 2 meses que duraron las prácticas.
    Anteriormente comentaba José P. Baviera que en sus prácticas, a pesar de ver innovación por parte de su tutor, fue capaz de ver la desilusión que rondaba entre los docentes. Esa desilusión o falta de ganas es la que yo pude ver en mi tutora. Ella misma nos afirmaba que no tenía ganas de complicarse la vida a estas alturas y que lo de la innovación y los proyectos lo veía inservible, que el alumno que funciona lo hace de todas formas y el que no, no lo va a hacer por mucho que cambies de método.
    Ante aquella afirmación quedé bastante descolocada, ya que con esta predisposición era difícil que sus clases fueran algo de lo que maravillarse. Coincidiendo con Sofía Grimaltos, las clases eran las típicas donde el libro es el centro, con la profesora como oradora que, aunque variando las palabras, acababa diciendo lo mismo que el libro. Eran clases aburridas, monótonas, donde la participación del alumnado brillaba por su ausencia. Es cierto que los alumnos raramente hablaban y que no solían dar guerra, pero fue esto lo que más me deprimió. Estuve con alumnos de 4º de ESO en la asignatura de Historia y en 2º de Bachiller con Historia del Arte. Veía que ya estaban totalmente sometidos al método unidireccional impuesto por la profesora, donde apenas había preguntas y cuando las había, las respuestas eran bastante cortantes.
    Otro de los aspectos que me gustaría comentar respecto a las observaciones que realicé fue la falta de imaginación y de interés a la hora de realizar las actividades que pedía la profesora. De esto habla la compañera Raquel Miralles, cuando dice “los alumnos se limitaban a leer las lecciones y a responder las preguntas buscando una frase que, leyéndola literalmente contestase al enunciado.”En el día a día, veía que las respuestas eran las típicas de “copia y pega”, tal cual lo ponía en el libro de texto. Es por eso que cuando fue mi turno de dar las clases, les propuse dos textos cada día, de los cuales después tenían que responder a una serie de preguntas. A pesar de haber comentado los textos previamente en clase, cuando me dieron las libretas para corregirlos, la mayoría había puesto respuestas extraídas del libro de texto o incluso copiadas del texto, de manera que había casos en que la respuesta no tenía nada que ver con la pregunta realizada. En otros ejemplos, se veía que intentaban razonar la respuesta, pero que lo hacían sin ninguna base, diciendo cosas que en ningún momento yo les había dicho en las clases. Hubo una minoría que sí hizo lo que se les pedía y dieron respuestas propias y razonadas, pero fueron los menos.
    (Continúa en el siguiente comentario)


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    Respuestas
    1. (Continuación)

      A pesar de todo lo negativo que pude ver, hubo un día que mi compañero y yo pudimos asistir a una clase de 1º de ESO que trabajaba por ámbitos. Eran clases de 2 o 3 horas, con 2 o 3 profesores (3 cuando estaba el PT) y aquello era otro mundo. Aquel día, la primera parte de la clase los alumnos realizaron diferentes exposiciones sobre parejas amorosas de la mitología griega. Los alumnos habían preparado PowerPoint e hicieron sus exposiciones de 5-10 minutos en grupos de 4. Es cierto que tenían muchas cosas que mejorar, pero considero que el hacerles hablar en público y preparar sus propias presentaciones era muy enriquecedor cara al futuro. Después de cada exposición, sus propios compañeros hicieron valoraciones críticas sobre las exposiciones. Ellos mismos eran los que se ayudaban a mejorar, ya que todas estas anotaciones siempre eran respetuosas y argumentadas. Después de esto, hicieron una charla sobre un libro que estaban leyendo, “Momo”. Se colocaron en círculo y fueron uno a uno diciendo que les estaba pareciendo el libro y que impresiones tenían. A continuación, cada uno dijo una frase que le había gustado del libro y porqué. A partir de esas frases, los compañeros iban diciendo lo que les hacía pensar esa frase, que les hacía sentir, reflexionaban.
      Aquella sesión fue muy rica e interesante y pensé que ese método me parecía mucho más adecuado a los alumnos, huyendo del libro de texto para pasar a unas clases mucho más amenas donde los alumnos son los protagonistas y los profesores quedan como aquellos que les guían y les dan las herramientas para construir su conocimiento, fomentar su espíritu crítico y a fin de cuentas, enseñarles a ser personas con criterio.

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    2. Me ha gustado el comentario de Nerea, pues manifiesta dos cuestiones que me parecen importantes:
      a)la importancia de las actitudes docentes para mejorar o no las clases. Es decir, la representación social que tenemos del aula, los prejuicios sociales y las emociones influyen de manera decisiva en la forma de trabajar en las aulas
      b)la posibilidad de esperanza en la heterogeidad de situaciones que existen en un centro docente, lo que implica saber adapatrase a la diversidad de situaciones sin pretender imponer una determinada racionaldiad.
      Con ello se evidencia que una de las mejores formas de innovar es constatando la existencia de personas y grupos que tienen ideas semejantes sobre la eeducación y su influencia de la comunicación de las personas para comprender meior el mundo en que vivimos. Y en este sentido la geografía e historia, como ciencias sociales que son, pueden ayudar a conformar una visión alternativa a la cultura hegemónica de manaules escolares y la visión del canon escolar.

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  42. Mi nombre es María Grueso. Soy Historiadora del arte por Universitat de València y también alumna del Máster de Educación Secundaria de esta misma universidad.
    Me gustaría comentar que estoy bastante de acuerdo contigo en todos los puntos y después de mi experiencia práctica, me veo en posición de responder a tus preguntas.
    En primer lugar, lo que hemos estudiado en el máster dista bastante de la realidad. Todos esos intentos de renovación pedagógica y de innovación se han quedado como una mera utopía en mi experiencia. He visto la desmotivación general que hay en las aulas en todas las asignaturas, y esta es debida a que en todas (salvo alguna excepción) se dedican a leer y subrayar el libro, a escuchar lo que dice el profesor y a no participar en las clases, salvo para hacer la corrección de los ejercicios. Por tanto creo que mi respuesta es un rotundo SI, se necesita la innovación para mejorar y hacer que los alumnos participen y sobre todo se motiven que al final es lo que les va a hacer aprender.
    Esta coyuntura un poco complicada aun me motiva más a querer ser docente e intentar al menos en mis clases cambiar la situación en todo lo que se pueda. Desafortunadamente, en mis prácticas sólo he podido dar 4 clases y por tiempo y sobre todo por limitaciones tecnológicas no he sido demasiado innovadora o no tanto como me hubiera gustado (más aun que tres de esas clases fueron de historia del arte en 2º de Bachillerato y la preparación para el selectivo te limita al infinito), pero la participación y el debate siempre estuvo abierto en las clases y funcionó muy bien.
    La experiencia con los alumnos y el trato por parte del centro y su personal han sido excelentes, por ello también estoy bastante satisfecha con el resultado del prácticum.
    Pero si algo tengo que subrayar y contestando a tu tercera pregunta, creo que el papel de las ciencias sociales (de suma importancia en mi opinión), no se valora tanto como debería. Siempre van por encima las asignaturas de tipo "instrumental" como las matemáticas y las lenguas. Esas asignaturas son de grandísima importancia, pero también lo es historia y geografia, que en muchos casos están en segundo plano o incluso como asignaturas optativas.
    Y sí, creo conveniente una pequeña "intromisión" crítica en lo que enseñamos, saber seleccionar los contenidos y enfocarlos de forma útil para formar a los alumnos como ciudadanos críticos.
    Después de mi experiencia, solo me quedan muchas ganas de poder alcanzar mi meta y llegar a ser una buena docente y sobre todo estar implicada en una renovación más que necesaria de las metodologías de enseñanza y de la innovación como instrumento de cambio.

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  43. Muy buenos días, mi nombre es Pablo Aznar Ruiz, alumno del Máster de Educación Secundaria por la Universidad de Valencia. Hace un mes acabó mi labor en el Practicum en el Instituto de Educación Secundaria Juan de Garay, localizado en el barrio de Patraix, Valencia.
    A destacar de ese centro el buen ambiente que hay entre el profesorado, incluido en el propio departamento de Geografía e Historia del centro, con una buena organización y disposición por parte de todos los miembros de su comunidad educativa, lo cual nos permitió, a mis dos compañeros en prácticas y a mí, poder participar en el proceso educativo desde el primer día, dando un número de sesiones bastante más alto del que yo mismo esperaba. Ser un sujeto activo desde el primer día me permitió recoger información desde el primer día para preparar mi TFM.
    El centro además cuenta con un buen número de ordenadores y proyectores, que le permiten el uso de las TIC, no obstante el centro se ha adaptado al nivel tecnológico en estos últimos dos cursos escolares y la calidad de internet impide su uso adecuado y a veces se convierte más en un obstáculo para acercar las ciencias sociales a los alumnos. En las aulas, creo que este es el aspecto más positivo, comprobé que hablarles de problemas que surgen en el mundo, fechas históricas que han acontecido o efemérides como el 11-M, convirtieron a esas sesiones en las más interesantes de todo el Practicum.
    Hasta aquí la parte positiva, la otra cara del IES Juan de Garay la situamos en varios frentes: el primero de ellos es una desmotivación generalizada, muchos de los alumnos de 4º de ESO y Segundo de Bachillerato ven la enseñanza de la Historia como algo que no tiene utilidad, una materia con un contenido muy grande para ellos, cuyos libros ocupan demasiado en sus mochilas. Otro frente es la monotonía que se ha instaurado en la mayoría de los profesores, que no salen del manual como elemento central y no hacen más que repetir y repetir el contenido ante sus alumnos. La novedad llegó con nosotros cuando aplicamos los recursos audiovisuales e hicimos de la clase unas sesiones en las que se les motivaba a pensar y reflexionar sobre los contenidos, saliendo del enfoque de lectura y subrayado. Y hablando de esto último, al parecer el alumnado del IES Juan de Garay, sobre todo el de 4º de ESO está totalmente acostumbrado física y mentalmente a la técnica del subrayado y de ahí no salen, necesitan de ella como agua de mayo, no obstante en vez de destacar el fosforito los términos o partes más importantes del temario, se dedican a “colorear” toda la página, repitiendo el proceso que hace el profesor de leerlo todo, sin sintetizar y dificultando así el proceso de aprendizaje, porque luego lo que se dedicarán a leer es lo mismo que antes estaba sin subrayar.
    (continuación en el siguiente comentario)

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  44. Continuación del comentario.
    Al inicio del período de prácticas se comunicó a los alumnos que debían realizar un trabajo de investigación, algunos se tomaron en serio la tarea, llegando a buscar la información de foros de debate, otros manuales – no se sabe si ha intervenido la mano de un adulto para ayudarles –, sin embargo otros optaron por hacer un íntegro copia y pega de la Wikipedia que rozaba el ridículo, pues aparte de que lo hacían aprisa y corriendo cometían faltas de ortografía que en la Web no se producen y prácticamente no asimilaban nada de lo escrito. Y en parte, esa manera de hacer el trabajo viene dado porque muy pocos docentes dedicaron una sesión o parte de ella a explicar en qué consistía ese trabajo o darles una serie de patrones, por lo tanto los alumnos se decantan por la Ley del Mínimo Esfuerzo y se dedican a copiar la información sin leerla antes y hacer un juicio de lo que están escribiendo. Con todo, es difícil motivar a un alumnado que no quiere o no sabe cómo afrontar una asignatura, pues están anclados en ese viejo tópico de que la historia es una de las asignaturas más difíciles que hay, cuando entre los dos (alumno y profesor) pueden hacerla más fácil.
    Dando por finalizada mi aportación en este foro añado que cambiar el enfoque de la enseñanza de la Geografía y la Historia es algo que atañe a todos los componentes del departamento del centro educativo, no solo a uno que aplique métodos innovadores, pues si al pasar de curso el siguiente profesor vuelve a usar el libro de nada ha servido lo aprendido anteriormente.

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  45. Buenos días a todos. Mi nombre es Ferran Laparra Perez-Muelas, licenciado en Historia del Arte y alumno del Máster en Profesor/a de Educación Secundaria de la Universidad de Valencia, en la especialidad de Geografía e Historia. En el siguiente comentario sintetizaré las principales conclusiones extraídas de mi periodo de prácticas en el IES Molí del Sol de Mislata, Valencia. Además, compararé esta experiencia con la vivida en el IES Isabel de Villena, donde también tuve la suerte de trabajar durante unas semanas, pero esta vez, con una metodología completamente diferente a la experimentada en el IES Molí del Sol.
    A diferencia de lo que he podido leer en algunos comentarios, yo sí que tuve la suerte de preparar mis propias clases al completo y trabajar con total libertad, respetando siempre la temporalización planificada por el profesor titular.
    Al llegar al instituto y ver como trabajaba mi tutor, comprendí que existe una gran diferencia entre las clases que aún hoy se imparten, y las innovaciones que trabajamos en el Máster. Sus clases eran básicamente magistrales, y los alumnos iban leyendo el libro, concretamente el capitulo que el iba explicando. A pesar de esto y como he mencionado anteriormente, el tutor me dio total libertad para aplicar lo aprendido durante el Máster y he de decir que en muchos casos el resultado fue realmente positivo. Aplicar nuevas metodologías trabajando con Atlas de Geografía, videos, capítulos de series (The Simpsons) e incluso videojuegos (The Assassin's Creed II), motivó a los alumnos, incluso a los menos interesados, que en mi opinión son nuestro principal reto como profesores. Por tanto, la aplicación de innovaciones en el aula sí que responde a las expectativas puestas en el sistema educativo, al menos desde mi punto de vista. El problema principal, como ya han comentado algunos compañeros, es la impertinencia de los problemas técnicos cuando apenas cuentas con 50 minutos de clase.
    A pesar de los inconvenientes, la experiencia me ha motivado a seguir por este camino. Durante el periodo de prácticas he confirmado la necesidad de cambiar la forma de trabajar las ciencias sociales en las aulas. Nuestro rol como profesores de Geografía e Historia no debe centrarse en impartir clases llenas de sucesos y fechas, o hacer que los alumnos memoricen nombres de ríos, provincias o afluentes, sino que debe ir más allá. Debemos motivar una conciencia crítica con la problemática actual, debemos de fomentar su sensibilizad hacia los problemas que les rodean y les afectan, bien sean sociales o medio-ambientales. Como aprendí en el IES Isabel de Villena, es posible trabajar la Historia y la Geografía a través de trabajos y debates basados en las problemáticas sociales, y no limitarse a las clases magistrales, que son muy útiles, prácticas y necesarias, pero que necesitan también apoyarse en otros métodos para motivar al alumnado. Con esto no quiero decir que haya que innovar siempre, la realidad muchas veces te obliga a ser práctico y sintético; es decir, innovar es necesario, pero no siempre es posible, ni recomendable (A través de la práctica debemos saber cuándo nos conviene).

    (continua en el siguiente comentario)

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  46. La diferencia de metodología entre ambos institutos me ha enseñado también que lo más importante a la hora de mejorar las clases de Geografía e Historia es la actitud del docente frente a la clase, su forma de interpretar la asignatura, así como los prejuicios del alumnado respecto a la misma. Como profesores debemos comprender las emociones de los estudiantes, conocer sus juicios preestablecidos erróneamente y por otro lado, ser capaces de atender a las necesidades de cada clase, de cada alumno y de la sociedad en general. Además debemos de trabajar para crear una visión alternativa de nuestras asignaturas, es decir, debemos hacer que la sociedad asimile que la Geografía y la Historia están estrechamente relacionadas con la sociología y que no son ciencias puramente descriptivas sino que van mucho más allá. Hablo de la Geografía y la Historia porque es el tema que nos supone objeto de estudio, pero pienso que esto es aplicable a todo el sistema educativo en general.
    Queda claro por tanto, que estoy a favor de la intromisión crítica en los conocimientos que se imparten, de lo contrario, la función de profesor perdería su sentido en la actualidad ya que nos limitaríamos a describir situaciones y hechos que los alumnos podrían encontrar en cualquier página de Internet.

    Por último, manifestar como la organización del centro y las metodologías empleadas influyen de forma directa sobre la comunicación entre las diversas personas que trabajan o estudian en un instituto. Personalmente destacaría la falta de comunicación y de interdisciplinariedad en los proyectos de los centros en los que he trabajado. A mi entender, la falta de diálogo y trabajo conjunto entre los docentes es un hecho innegable que, lamentablemente, influye de forma negativa en muchas actividades innovadoras. Es por tanto otra de nuestras obligaciones fomentar el trabajo en equipo junto al resto de profesores, siempre que sea posible. Esto, probablemente, nos ayudará a motivar el uso de nuevas metodologías entre los compañeros, así como a encontrar persona que compartan la misma visión de la educación; y en caso de que no la compartan, podremos aprender de su experiencia y ellos de la nuestra. Además, trabajar en equipo dará sentido y cohesión a lo que hacemos, ya que si cada profesor va por su cuenta, que es lo que suele suceder, el alumno ya no sabrá que se le pide, le liaremos y el esfuerzo habrá sido en vano.

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  47. Hola a todos, mi nombre es Javier Martínez Montoya, soy graduado en Geografía y Medio Ambiente y alumno del Máster en Profesor/a de Educación Secundaria de la Universidad de Valencia. Por ello, en este comentario voy a valorar mi primera experiencia como profesor mediante la realización del periodo de prácticas en el IES “La Sènia”, en la localidad de Paiporta (Valencia).
    En primer lugar, a diferencia de lo que han comentado otros compañeros, puedo decir que he tenido una experiencia muy completa como profesor en prácticas. Esto se debe a que repartí clases desde 1º de la ESO hasta 2º de Bachiller, realizando unas 15 clases, además de que participé y apoyé a los alumnos en muchas otras. Obviamente, esta valoración de mi periodo de prácticas se la debo a mi tutora, gracias a sus instrucciones, consejos y a que me dio total libertad para hacer las clases a mi parecer, eso sí, siempre tratando el contenido que determina el marco legal.
    Así pues, enseguida me di cuenta de la complejidad de la profesión docente, ya que por muy arraigado que está la homogeneidad en el sistema educativo actual, no hay alumno igual que otro, ni clase igual que otra. En nuestra idea de lo que es ser un profesor, la que concebíamos cuando éramos alumnos, no contemplábamos lo difícil que es esta profesión, desde la preparación de las clases, la socialización, la motivación, el control sobre los alumnos, la metodología de enseñanza, la aplicación de las objetivos, competencias y demás que marcan la ley, los derechos y deberes que debes conocer… Por lo que podemos afirmar que ser profesor poco tiene que ver con dominar un tema o un contenido, va más allá, donde la vocación y sobre todo la motivación son clave.
    Poco a poco descubrimos la situación sociocultural y económica de cada estudiante, a la vez de su progresión académica, y de las diferencias de repartir clase a la ESO y a Bachiller. Disfrutamos más en las clases con alumnos más jóvenes, en la ESO, ya que mostraban un mayor interés y eran más abiertos a participar y realizar diferentes actividades. En cambio, con los alumnos de Bachiller, aunque su conducta era más correcta, las clases eran más monótonas, se mostraban más reacios a salir de la rutina, y su participación era escasa y desmotivadora.
    En mi opinión, la innovación es clave para motivar a los alumnos y para desarrollar de una forma más eficiente el aprendizaje de diversos conocimientos. Además fomenta la creatividad, en contra de la memorización, que es la histórica base para obtener los títulos académicos. Desde nuestra parte, intentamos apoyarnos en los libros de texto lo menos posible, ya que nos dimos cuenta que la mayoría están obsoletos, no albergaban todo el contenido que marca la ley, y, sobretodo, hablan de conceptos que no reflejan la realidad. Están sujetos a una idea eurocentrista, aportando una serie de conceptos como países subdesarrollados, países desarrollados, etc. (CONTINUA)

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  48. Que no hacen otra cosa más que aumentar los clichés que tiene la sociedad en cuanto a otras culturas y países del mundo. Por lo que desde un primer momento tratamos de romper con estas ideas, y explicar a los alumnos el mismo contenido desde un punto de vista más real. Es decir, mediante fotos, imágenes y distintos debates ofrecíamos a los alumnos una visión diferente, en la que Europa no es el centro del mundo, y que vivamos en Europa no significa que seamos superiores cultural y económicamente del resto. Así pues, realizamos nuestras clases mediante el uso de diapositivas de Power Point y PREZI, apoyado siempre de imágenes, fotos, gráficos, mapas y todo el material que considerábamos oportuno. Es más, siempre dejábamos un tercio del tiempo de la clase, más o menos, para realizar diversas actividades, ya que los alumnos deben trabajar en clase y no en casa, donde los estudiantes pintaban mapas, ejes cronológicos, se abrían debates… También, a la hora de explicar la teoría, hacíamos preguntas constantemente a los alumnos e exponiendo varios ejemplos, para que así puedan estar más concentrados y entender mejor cada concepto. Nuestra tutora les dejaba consultar en internet desde sus móviles cuando era necesario, ya que el internet del IES no era muy efectivo, por lo que creo que es una buena iniciativa de innovación. Además, en contra de cargar a los alumnos de tareas y actividades, prefería mandarles la lectura de libros y la visión de películas o documentales en clase. Y todos los exámenes que realizaban los alumnos eran de desarrollar, ya que hoy en día los alumnos tienen muchos problemas en expresión escrita, están acostumbrados a un sistema de preguntas cortas y de memorización, cuando el razonamiento y la relación de ideas son mucho más importantes.
    En cuanto al papel de las ciencias sociales en las aulas, creo que es la asignatura esencial para tratar los problemas sociales que existen en el día de hoy en la sociedad. El profesor de ciencias sociales debe saber llevar el contenido de las aulas a la calle, es decir, explicar los distintos fenómenos sociales que envuelven a los alumnos y darles otro enfoque diferente al que reciben por parte de sus familiares, amigos y de los medios.
    Como conclusión, podemos decir que nuestra experiencia como profesores en prácticas en el IES “La Sènia” ha sido muy enriquecedora. Hemos visto de primera mano cómo trabajan los docentes, todas las funciones que han de desarrollar y todas las relaciones que existen. Por lo que hemos descubierto que el trabajo de un profesor es mucho más complicado de lo que desde un primer momento nos parecía, ya que no se trata de “dar” una clase o explicar un tema, es mucho más, se trata de “educar”.

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  49. Coincido con la mayor parte de lo expuesto anteriormente por otros comentaristas en este foro, no obstante me gustaría incidir en la necesidad de promover un aprendizaje más abierto, basado en elementos transversales que acerquen al alumnado a los diversos objetos de estudio de una forma diferente, y con una clara inclinación en aras de la interdisciplinariedad.
    Creo firmemente que la profesión docente debería abandonar estrategias preconcebidas y relativamente artificiales para optar por un modelo de enseñanza y aprendizaje más cercano y consciente, lo más parecido posible a cómo este tiene lugar de manera autónoma a lo largo de la vida de los individuos. Con esto me refiero a optimizar al máximo no tanto, o no sólo, los recursos de los que dispone el profesor para la enseñanza de su materia, sino más bien a aquellos de los que disponen los alumnos a través de sus propios intereses, y de su conocimiento "vulgar" derivado del imaginario colectivo de la sociedad en la que se inscriben. No digo con ello que los mismos deban ser tomados de manera acrítica o carente de matizaciones, al contrario, pero considero que mediante las concepciones espontáneas del alumnado podemos establecer una buena base de contenidos que nos permita después realizar las correciones o interrelaciones oportunas y necesarias para un aprendizaje eficiente de las ciencias sociales; al tiempo que se les dota de una capacidad de aprendizaje propio, que en cualquier caso es el que ejercerán fuera del sistema escolar, y a lo largo de toda su vida adulta.
    Las opciones y materiales de los que se dispone son diversos, y algunos más "tradicionales" de lo en principio podría pensarse, encontrándose entre ellos algunos como la literatura, sea esta o no de ficción, el cine, las redes sociales, o los videojuegos, así como de manera mñas que sugerente trabajan líneas de investigación como las propuestas por algunos autores como Diego Sobrino.
    Por razones prácticas y evidentes no existe la posibilidad de la innovación perpetua a un ritmo ininterrumpido, al menos en cuanto a los medios para llevarlo a cabo respectan, es por eso que considero que la metodología es la clave desde la cual poder rediseñar nuestras propuestas y trabajo como docentes.
    Javier Azañón Guzmán.
    Alumno del Máster de Profesorado de Educación Secundaria. Universitat de València (UV)

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  50. Hola, mi nombre es Helena Gomis Ribera, graduada en Historia del Arte por la Universidad de Valencia y en la actualidad estoy cursando el Máster en Profesor de Educación Secundaria también en la UV.
    He realizado mis prácticas como docente en el instituto "IES Campanar" en Valencia. Al igual que algunos de mis compañeros, esta ha sido una experiencia muy positiva y enriquecedora para mi futura profesión. A pesar de ser un centro bastante mal organizado y con una estructura poco clara, la libertad de los profesores y en concreto de mi tutor de prácticas, para desarrollar la actividad como docentes, permite que se puedan llevar a cabo proyectos en los que los alumnos se involucran por completo en las actividades, ya que el objetivo principal es provocar en estos interés por aquello que se está haciendo. Se les insta siempre a que participen en la medida en la que puedan, tanto en las clases como en las actividades.
    Gracias a la libertad que me dio mi tutor para desarrollar las actividades y proyectos que tenia en mente, he podido comprobar las dificultades en las que te puedes encontrar como docente. Por mi formación en Historia del Arte, me dediqué a la parte dedicada al arte dentro de las Ciencias Sociales. Pude comprobar que este aspecto de la materia siempre se trabaja de forma superficial o simplemente se obvia del currículum, pero con unas clases bien diseñadas y con el apoyo de las tecnologías se puede conseguir un gran interés por parte de los alumnos, que al abordar estos temas y hacerlos partícipes se dan cuenta de que tienen muchas nociones que quizás desconocían, gracias al bagaje su cultura visual identifican rápidamente elementos artísticos y diferentes aspectos, que en mi opinión se suele dar por sentado que les falta esta sensibilidad para el arte o es demasiado complicado para ellos, y todo lo contrario, vi que el interés por el arte era bastante elevado y quedó demostrado en los resultados de los exámenes.
    Además de las clases en las aulas, trabajé estos temas en visitas por la ciudad, dónde descubrieron que la ciudad en la que viven puede ser un museo reflejo de nuestra cultura. Quedé muy satisfecha por el interés y la curiosidad que tenían por detalles que ni siquiera yo me había parado a analizar. Trabaje estos temas sobretodo con alumnos de 1 de ESO, que puede ser que por su corta edad, aun se involucran en las clases con un gran entusiasmo. También trabajé con los alumnos de segundo de Bachillerato, que deben ceñirse más al currículum para las pruebas de selectividad, pero también se pueden hacer visitas y actividades para huir de las tradicionales clases siempre que se pueda. Hicimos una actividad que consistía en que ellos mismos tenían que hacer de guías por la ciudad para los alumnos de cuarto de ESO, previa visita la hicieron conmigo para darles las pautas básicas, el resultado fue muy bueno, ya que al ser ellos los protagonistas se implicaron mucho en la actividad y la diseñaron conmigo dándome su opinión en todo momento.
    En conclusión, pienso que el arte es un aspecto muy importante dentro de las Ciencias Sociales, y que a pesar de que suele pasar casi inadvertido, se debe trabajar más en él, promover la sensibilidad artística de los alumnos y dejar que ellos mismos analicen las obras, desde luego me llevé una gran sorpresa por los conocimientos previos y nociones que tenían, sin saberlo, sobre el arte.

    Helena Gomis Ribera.

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  51. Hola a todos, mi nombre es Francisco Manuel García Gutiérrez, soy graduado en Historia y alumno del Máster en Profesor/a de Educación Secundaria de la Universidad de Valencia. Con este comentario valoraré lo que ha sido mi primera experiencia como docente mediante el periodo de prácticas que realize en el IES “Beatriu Civera”que esta emplazado en la localidad de Aldaia (Valencia) en concreto en el Barrio del Cristo.

    En primer lugar, siguiendo alguna linea que han comentado alguno de mis compañeros, mis prácticas abarcaron varios cursos en concreto de 2 de ESO a 4 de ESO, aunque claro esta también asisti a clases de Bachillerato o 1 de ESO, ayude también junto a los compañeros del curso que también estuvieron en este centro conmigo al profesorado, incluso en una clase de 2 de ESO ayudamos a los alumnos a que realizaran resumenes adecuadamente,y no solo en lo anterior mencionado, también en clases en el aula de infórmatica en la que ayudabamos a los alumnos, en excursiones o salidas a Valencia o ayudando a los docentes en sus guardias.

    En segundo lugar, respecto al profesorado del centro, en muchas de sus clases, en concreto las de mi Tutor, he visto como el “Libro”, se utilíza solo como una base y que la mayoría de las explicaciones es con la pizarra, en algunos casos contandoles al alumnado “vivencias familiares” y como comento el Profesor Xose Souto, en una de las clases del Master, contandolo como si fuera una historieta, me parecio bastante interesante y veia que los alumnos prestaban atención y les interesaba, también tuvimos mucha ayuda de los profesores, nos integraron en las actividades, excursiones, en las clases que hubo y nos dieron mucha libertad para dar nuestras clases.

    En tercer lugar, dentro ya de las clases que he dado, inicialmente junto a mi compañero Carles Goméz Pablo, pudimos ver como comenta algun otro compañero, esa problemática de la falta de tiempo en algunos casos cuando las clases son de 50 minutos y tienes fallas técnicas, ya sea que el Power no funcione correctamente y llegando a extremos en los que no halla Internet, con lo cual es todo inoperante.

    Quitando este hecho, su uso es bastante interesante, en mi caso utilize Power Point, para explicarle a los alumnos, en el caso de 2 de ESO, la temática de la Reforma Religiosa y La Renovación Humanista (Imprenta) y en 4 de ESO, explique el Fascismo Italiano y los momentos anteriores a la II Guerra Mundial y que para apoyar lo que les daba utilizé cortos videos, en algunos casos para que vieran momentos puntuales importantes como (La Marcha de Roma), también en esta como en las otras clases dentro de mis explicaciones quise darles algun dato anecdotico o ameno, para que les entrara curiosidad y que se interesaran en el tema. Por supuesto intentaba que interactuaran ellos en la clase.

    Para finalizar, las prácticas me han sido muy gratificantes, interesantes y han provocado en mi una motivación extra y unas ganas de continuar este camino, por supuesto hay que innovar, o en el caso de no poder conseguirlo realizar las clases de una forma creativa, hay que motivar al alumnado y en algunos casos incluso se consigue que les entre el “gusanillo” o la curiosidad sobre temática histórica, y sobretodo dotarles de una conciencia crítica, que pueden y deben cuestionarse las cosas y por último al menos en algun caso he intentado que la visión histórica que les daba aún emplazada fuera lo más completa posible.

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  52. Buenas tardes, mi nombre es Bárbara Magro Hernández, graduada en Historia y alumna del Máster en Profesor de Educación Secundaria de la Universidad de Valencia. He realizado mi periodo de práctica docente en el Instituto La Florida, en Catarroja, y he de decir que mi experiencia ha sido muy positiva y aleccionadora, puesto que he podido aprender desde temas como la organización de un instituto – si bien, al ser un centro concertado, puede diferir en cierta medida de la de un instituto público -, hasta la metodología aplicada en la enseñanza de las Ciencias Sociales en diferentes cursos.
    La labor de un docente exige de una capacidad de adaptabilidad y respuesta inmediata considerable frente a los problemas o situaciones inesperadas que puedan surgir, puesto que de ello depende la formación de los adultos de mañana. El mismo nivel de adecuación ha de llevarse a cabo en el contexto de los contenidos y la metodología de enseñanza, pues no es lo mismo educar a los jóvenes de esta generación que a los de la nuestra cuando teníamos esas edades, nuestros contextos son diferentes en muchos aspectos pero, si cabe destacar uno, el que ha supuesto un mayor cambio es el campo de las nuevas tecnologías. Actualmente, la mayoría de los estudiantes están en contacto con elementos tecnológicos, de manera que el sistema educativo ha de aprovechar esto como una ventaja, y no como un obstáculo para el aprendizaje.
    Esto, aplicado a la enseñanza y el aprendizaje de las Ciencias Sociales, puede concretarse en introducir los recursos tecnológicos como apoyo a las clases teóricas como, por ejemplo, la página kahoot.it, en la que el profesor diseña un cuestionario online basado en preguntas con 2 – 4 posibles respuestas, que automáticamente se convierte en una partida a la que los estudiantes se unen desde sus dispositivos móviles o los ordenadores, y obtienen mayor o menor puntuación en función de la rapidez y la corrección de la respuesta elegida. Al responder todos o agotarse el tiempo, aparece la respuesta correcta y, públicamente, se observa quién ha acertado y quien no, por lo que da la oportunidad al profesor de resolver dudas y explicar, de nuevo, aquello que no haya quedado claro entre los alumnos.
    Esta fue una de las prácticas en las que participé durante mi estancia en el instituto, y concretamente se llevó a cabo en la asignatura de Geografía Internacional de 3º ESO. Evidentemente, el ejercicio no era evaluable, pero los resultados fueron excelentes en cuanto a que el índice de aciertos era muy elevado y la motivación de los alumnos, desbordante.
    Otro aspecto a destacar acerca de esa misma asignatura es que se empleaba la metodología CLIL que, resumidamente, consiste en adaptar el contenido de la materia con competencias lingüísticas, en este caso, inglés. Si bien considero que resulta interesante la docencia en lengua extranjera, reconozco que, a lo largo de las prácticas, detecté como principal problema, que los alumnos no contaban con el nivel necesario para poder asumir de manera exitosa todos los conocimientos que el currículum establece para su curso. En efecto, el material de la asignatura consistía en dossiers de información muy simplificada, estructurada en unidades didácticas de larga duración, de manera que los alumnos no obtienen todo el beneficio que podrían de este método de enseñanza – aprendizaje.
    A modo de conclusión, reitero que es necesario que tanto la metodología como los contenidos de una asignatura se ajusten a las condiciones del grupo clase puesto que, de lo contrario, el proceso de enseñanza – aprendizaje será divergente, seguirá ritmos diferentes y conducirá al alumnado que no se ajuste a las características impuestas a una situación de frustración e impotencia, en lugar de hacia un contexto de motivación deseable por ambas partes.

    Bárbara Magro Hernández

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  53. Salutacions! Me llamo Dani Vila y soy alumno del máster de profesor en Secundaria de la Universitat de València, y me gustaría compartir dos reflexiones en torno a mi experiencia práctica.
    En primer lugar, al no poseer una sólida formación académica en Geografía, opté impartir un tema que me resulta cercano: La contaminación del suelo por el uso agrícola.
    En este sentido, y dado que el tema se presta a ello, es posible llevar a cabo muchas actividades prácticas en el aula. Me gustaría compartir dos de ellas ya que, además de gozar de gran aceptación entre el alumnado, son muy instructivas y a la vez fáciles de realizar.
    La primera es la elaboración de un insecticida para uso de jardinería doméstica. Se elabora con hojas de “Milenrama” y/o Hisopo, cortadas y maceradas en agua. Una vez la mezcla ha reposado, filtramos la solución y la vertemos en un recipiente con dispensador.
    La segunda es la elaboración de compost a base de desechos orgánicos que generamos en el hogar cada día. Se trata de fabricar una compostadora a partir de un cajón agujereado de plástico o madera, en el que vertemos, entre dos capas de tierra, restos orgánicos como posos de café, pieles de frutas y/o verduras, cáscaras de huevo etc. En el instituto donde realicé las prácticas disponíamos de un pequeño huerto donde enterramos la compostadora. Entre 3 y 4 meses después, el compost se puede utilizar como abono en el mismo huerto sin dañar el suelo.
    En segundo lugar me gustaría reflexionar sobre el sentido histórico de la formación del docente en España.
    Los alumnos del máster nos encontramos en un periodo de formación “pedagógica”, es decir un curso en el que no se nos enseña tanto “Qué enseñar” sino “Cómo enseñar”. He de decir que es necesario, puesto que a lo largo de la carrera de Historia no hemos dedicado un solo minuto a los aspectos pedagógicos.
    Pero, ¿siempre ha sido así? Un breve repaso por la historia de la formación docente en España nos demostrará lo contrario.
    En 1931, tras proclamarse la II República Española, el gobierno anunció la creación de 27.000 escuelas necesarias para atender a la totalidad de población en edad escolar. La medida conllevaba crear otras tantas plazas de docente, ¿cómo?
    Se concibió un plan de estudios para seleccionar a los enseñantes de mayor aptitud, que por sí mismo garantizase la solvencia del docente en el aula. Tamaña empresa se realizó en un plan de 4 años de duración, llamado Plan Profesional por estar orientado no tanto a la formación curricular (Qué) como a la pedagógica (Cómo).
    El último año de este plan constaba de un curso completo de prácticas (remuneradas, por cierto) al final de las cuales, si el aspirante resultaba apto, obtenía directamente una plaza en el cuerpo docente del Estado.
    Esta medida tuvo como objetivo en primer lugar preparar y seleccionar docentes con vocación, y en segundo lugar puso de manifiesto la obsolescencia del sistema de oposiciones en las cuales, según escribió el ministró Marcelino Domingo en el BOE “ predomina el recelo, la desconfianza y los ejercicios memorísticos y verbalistas” .
    Creo que un trabajo o una reflexión es buena si acaba generando más dudas que respuestas. Las mías son las que siguen : Si hace 85 años que un Gobierno alertó de la necesidad de aumentar la formación pedagógica del docente, Si hace 85 que se demostró de forma palmaria la ineficacia de un sistema de oposiciones, ¿Por qué 85 años después continuamos exactamente igual?
    Espero que esta entrada les haya sido de provecho. Salutacions!

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  54. Buenas tardes, mi nombre es Ion Andoni Sánchez Baqueriza. Soy graduado en Historia por la Universidad de Valencia y actualmente soy alumno del máster de profesor de educación secundaria. En este comentario quisiera compartir con vosotros mi experiencia durante la estancia de prácticas en el instituto Juan de Garay en Patraix. Como ha señalado el compañero Pablo Aznar en un comentario anteriormente, es un centro que resulta muy poco conflictivo y en el que, en líneas generales, hay un buen ambiente académico tanto entre los profesores, como entre los propios alumnos.
    Mi experiencia personal en el centro resultó muy positiva, ya que me permitió aproximarme a la realidad docente de una manera imposible de llevar a cabo en las clases teóricas del máster, y por lo que pude ver, al menos en ese centro, la realidad educativa no es tan negativa como se me había planteado.

    Pero en mi aportación me gustaría discutir brevemente sobre la problemática de los grupos plurilingües, ya que fue una de las cuestiones que trabajé durante mis practicas. Y es que durante mi estancia en el instituto asistí, entre otras, a clases de Historia en 2º de ESO y Geografía en 3º de ESO, ambos grupos plurilingües en los que la lengua vehicular era el inglés. Mi primera impresión al conocer la existencia de estos grupos fue positiva, ya que la profundización del estudio de idiomas como el inglés puede reportar grandes beneficios a los alumnos. No obstante mi opinión cambió radicalmente en las primeras semanas de clase. Y es que la utilización del inglés como lengua vehicular en historia dificulta enormemente la comprensión por parte del alumnado de los contenidos históricos que se abordan en el aula.
    Es cierto que, en líneas generales, los alumnos que forman parte de grupos plurilingües tienen un elevado nivel de inglés para su edad (sinceramente me sorprendió como algunos de mis alumnos se desenvolvían con relativa facilidad en el idioma con apenas trece años) no obstante a la hora de abordar problemas históricos en el aula, o simplemente explicar los contenidos del temario, el uso del inglés supone constantemente un grave retraso.
    En muchas ocasiones se dedica excesivo tiempo a la gramática y especialmente al vocabulario, hasta el punto de que a menudo no parece una clase de historia.
    En este sentido, la metodología que a menudo utiliza el profesorado de grupos plurilingües es la de alternar el inglés con el castellano o valenciano para asegurar que los alumnos comprenden lo que se da en clase. Pero ello deriva en un problema más grave, y es la de la escasa participación que los alumnos realizan en el aula. Ya han hablado mis compañeros como siguen predominando las clases de tipo “magistral” en la que los alumnos se convierten en receptores-pasivos de los contenidos que explica el profesor, y las intervenciones que realizan se limitan a la corrección de actividades. Esa desmotivación y el poco interés en participar en clase, puede verse agravado si la lengua que se utiliza en clase es el inglés ya que los alumnos tienen lógicas dificultades para hablarlo. Problemas similares encontramos a la hora de encontrar un manual que se adecúe a las necesidades del alumno y a la utilización de una metodología que pueda compaginar la enseñanza del inglés con el aprendizaje de la historia y la geografía. (continúa)

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  55. Por otra parte, pude ver con desilusión como la gran mayoría de los alumnos de las clases a las que asistí conciben la historia como algo aburrido y que no les sirve para nada. Creo que es fundamental llevar a cabo dinámicas innovadoras o más interactivas con el alumnado para combatir esa desmotivación de cara al estudio de la historia (el uso de videojuegos, películas, webquest, etc. mediante los cuales se puedan abordar problemas históricos en el aula). En mi caso, durante las prácticas realicé una actividad, que mis compañeros y yo aprendimos en el máster, que se conoce como “el puzzle de aronson”. Esta dinámica en la que los alumnos pueden potenciar habilidades sociales, al tratar ellos los contenidos y compartirlos con sus compañeros, resulta muy interesante y divertida para ellos, y que además resulta relativamente sencilla de aplicar en clase.

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  56. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  57. ¡Hola! Mi nombre es María Llorens Lucas soy Licenciada en Historia del Arte por la Universidad de Valencia y actualmente estudiante del Master de profesorado en la especialidad de Geografía e Historia en dicha universidad. Comentaré varios aspectos en relación al período de prácticas como el tratamiento por parte del instituto, la relación con la tutora y con el departamento y con los alumnos, las expectativas que tenía y la evolución de las prácticas.
    Mi periodo de prácticas se desarrolló en el IES San Vicent Ferrer de Algemesí (Valencia). Decir que tanto por parte del centro educativo como de la tutora y de los miembros del departamento me recibieran de forma abierta haciendo posible mi integración en todas las actividades que han comprendido mi practicum. Me gustaría resaltar la disposición de la tutora por hacerme aprender, permitiendo que alcanzara yo el ritmo de las clases, realizando todo el proceso de evaluación de la unidad pertinente. Pude desarrollar una unidad didáctica completa en la asignatura de Historia del Arte de 2º de bachiller, el Quattrocento italiano, donde me salí de la rutina que llevaban los alumnos haciéndolos partícipes de la clase. En la última sesión realizamos una actividad para el estudio de la obra de S. Botticelli “El nacimiento de Venus” realizaron un mural entre todos, donde trabajamos diferentes disciplinas como es la Geografía para localizar la obra, mediante mapas, también la Historia para el estudio de su contexto, así como el resto de puntos para su estudio artístico e iconográfico. El mural quedó expuesto en la clase y los alumnos encantados, ya que la clase no era nada acogedora, así la hacían más suya, como anécdota decir que cuando acabo la clase a la profesora le dijeron que podrían trabajar de esta forma que era más divertido. La profesora aceptó y les sugirió preparar una parte para el siguiente tema, en la que fui invitada y pude compartirlo con ellos tras finalidad el periodo del Practicum. Desde este punto de vista, queda manifiesto que los alumnos necesitan y piden un cambio y que es posible innovar en las aulas y romper esta enseñanza tradicionalista. También tuve la suerte de estar en Geografía de España de 2º de Bachiller y en 3º de ESO, donde me lancé en este último con el tema de la población, donde los alumnos trabajaron recogiendo ellos los datos estadísticos de la población de Algemesí y reflexionar y trabajar con ellos.
    Por otro lado, pienso que la evolución de mi destreza en las aulas en cuanto a control de la armonía en clase, el dominio del tiempo por impartir unos conceptos determinados y el trato con los alumnos ha sido creciente. Cada vez me sentía más segura de aquello que hacía y trataba de transmitirla a los alumnos.
    El Practicum como ha asignatura, ha sido desde mi punto de vista la materia más provechosa del Máster hasta el momento, ya que se ha entrado en contacto directo con los alumnos y se ha conocido cuál es la realidad de las aulas. Ha sido una experiencia muy enriquecedora y satisfactoria como futura docente y pienso que debería tener más peso como materia dentro del currículo del Máster.
    Un saludo
    María Llorens Lucas

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  58. Hola buenos días, mi nombre es Silvia Climent Castelló y soy licenciada en Historia del Arte y alumna del Máster en Profesor/a de Educación Secundaria de la Universidad de Valencia, en la especialidad de Geografía e Historia. Me gustaría comentar mi experiencia dentro del período de prácticas que realicé en el IES Beatriu Civera de Aldaia.
    Ha habido algunos aspectos que me gustaría recalcar. Me ha llamado mucho la atención la educación que tenían la mayor parte de los alumnos respecto al profesorado y respecto a ellos mismos, ya que se protegían entre ellos, ayudando en la mayoría de los casos a los más desfavorecidos. Siempre había algún alumno que no tenía interés en estudiar e interrumpía la clase, pero en general había un buen ambiente entre los alumnos y los profesores, y considero que es importante un buen clima para conseguir un aprendizaje optimo de las materias. En la clase el papel de los alumnos era activo, tenían una gran motivación y generalmente se entusiasmaban por las actividades que les proponía el profesor, actividades que eran próximas a métodos innovadores en los cuales el libro de texto, aunque presente, quedaba en un segundo plano. Los profesores hacían hincapié en cuanto a la importancia de reflexión de los alumnos, y les proponían como métodos de evaluación exposiciones sobre un tema visto en clase, e incluso, en los cursos de 2º ESO, donde la mayoría del alumnado no tenía ninguna motivación aparente ni interés por la escuela, reflexiones sobre las salidas a Valencia y su actividad en ellas.
    En cuanto a los profesionales que hay en el centro, tanto mi tutora como el resto de profesores del departamento de geografía e historia así como algunos profesores de otras materias me han instruido positivamente y me han facilitado continuamente materiales para preparar mis clases.
    En conclusión, la experiencia que me ha aportado este periodo de prácticas ha sido satisfactoria porque me ha permitido aprender y formarme como futura enseñante, he tenido la suerte de intervenir en todas las áreas (geografía, historia e historia del arte) y me ha proporcionado nuevos puntos de vista en la consecución de mis clases. Considero que este período de prácticas dentro del máster debería de ampliarse ya que concede una importante experiencia a los estudiantes que desean ejercer esta profesión, la cual ha de ser vocacional, ya que al fin y al cabo nuestra actuación en el aula va a influir tanto positivamente como negativamente en el discente.
    Un saludo,
    Silvia Climent.

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  59. Hola a todos, soy Jose Hernández Ruiz, alumno del Máster en Profesor/a de Educación Secundaria de la Universidad de Valencia, y graduado en Historia del Arte por la misma. Después de haber leído algunos comentarios aquí publicados, no tengo mucho más que añadir que no se haya dicho ya, la verdad.
    En mi experiencia personal, el periodo de practicas lo realicé, al igual que el post original de este foro, en el IES Lluis Vives de Valencia. El resultado fue gratificante, a pesar de que mi tutora únicamente impartía clases en segundo de Bachiller, pude asistir a aulas de todos los cursos, y de este modo, pude ver también de todo tipo de clases impartidas. Desde aquellas más “a la antigua” hasta innovaciones que no me esperaba encontrar.
    A mi tutora le estoy muy agradecido, y aunque ella no innovaba mucho en el aula, sus clases eran dinámicas, hacía participar al alumnado y les situaba relacionando lo que estudiaban con ejemplos de su presente, aunque todo era a partir de una clase magistral, eso si, sin ceñirse al libro de texto. No obstante, podría afirmar que su falta de innovación se debe a la presión que supone llevar el curso de segundo de bachillerato, donde hasta el alumno ejerce presión al profesor para poder impartir todo el temario que se exige para la selectividad. Fue en los cursos de la ESO donde vi algo de innovación, por parte de docentes jóvenes, así que espero que eso signifique que las nuevas generaciones de profesores cambiaran el modo de impartir las clases que impera hoy en día en el sistema educativo.
    A pesar de que yo no pude innovar mucho, ya que las clases que impartí fueron en segundo de bachiller, si que se me dio vía libre enseñar la unidad didáctica a los estudiantes, siempre y cuando que me ciñera al temario que tocaba para la selectividad. Esto deja ver lo difícil, y prácticamente imposible, que resulta innovar teniendo una prueba, que está al caer, la cual puede determinar el futuro de los alumnos.


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  60. Buenas tardes. Soy Rita Pons, graduada en Historia y estudiante del Máster de Profesor/a en Educación Secundaria de la Universidad de Valencia.
    Tras mi experiencia en el instituto como alumna en prácticas, al igual que la mayoría de vosotros, no he podido ver en la práctica lo que es trabajar con Unidades didácticas innovadoras, ni mucho menos lo que es trabajar por Proyectos innovadores. Tampoco lo he podido poner en práctica en las pocas sesiones que he tenido la oportunidad de impartir, pues no es mi programación, sino la de otro profesor con una metodología tradicional, por lo que lo único que se puede hacer en estas pocas sesiones es enfocar el tema de un modo diferente utilizando otros recursos innovadores como algunas TICs y haciéndoles reflexionar a partir de cuestiones que se les plantea, y no una renovación completa de la metodología. Por lo tanto, coincido con mi compañera Maria Grueso cuando dice que dista bastante lo estudiado en el máster con la realidad, y que estos intentos de renovación se quedan en una mera utopía.
    En mi caso, durante las sesiones que dediqué a 1º de Bachillerato para tratar la Primera Guerra Mundial, expliqué el temario apoyándome en un Power Point donde destacaban la presencia de imágenes impactantes, esquemas sencillos y textos con los que pretendí crear debates de opinión entre los alumnos. Sin embargo me sorprendió, a pesar de que manifestaran que les gustaba más estos recursos que el libro de texto, la gran pasividad del alumnado a la hora de participar. Por otra parte, les hice trabajar el tema a partir de una cuestión con la que tendrían que reflexionar, pero para responderla la mayoría acabaron por copiar el primer párrafo que encontraron en el libro de texto, aunque poco tuviese que ver. Al preguntar a los alumnos la dificultad que habían encontrado para acabar haciendo esto, contestaron con toda sinceridad que siempre había sido así, que si no lo copiaban tal cual del libro,lo copiaban tal cual de Internet, pues no conocían otras formas, y que ahora no les podía pedir otra cosa, que no daban para más. Esto me preocupó; me parece un grave problema que los alumnos no sean capaces de reflexionar, aún teniendo la posibilidad de acceder a varias fuentes para consultar ; aunque puede que sea simplemente desinterés. Por otra parte, a pesar de que pedían actividades innovadoras, les planteé realizar un debate, y no querían saber nada de algo que tuvieran que trabajar previamente en casa.

    Como otros compañeros han comentado, también he podido ver la diferencia de conducta entre los alumnos de la ESO y Bachillerato con lo que respecta a que, en las clases de bachillerato, a pesar de que no había discusiones entre alumnos, los murmullos eran menores, no faltaban el respeto a la profesora, etc.; era mayor el problema de la falta de participación activa, y no porque la profesora no lo intentara; llegaron a confesar que no contestaban no porque ella se explicara mal, sino porque no estaban atendiendo, les aburría la asignatura. Aquí está el principal problema que he visto durante mi periodo de prácticas: la falta de interés y la desmotivación del alumnado.

    (...)

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  61. (Continuación del comentario..)

    Contrastando con este grupo, pude ver que en 3º de la ESO si que había una alta participación activa de los alumnos en la clase; puede que fuese por el tema a tratar, el sistema político
    español, pero los alumnos mostraban su opinión libremente, defendiendo sus argumentaciones mejor o peor; observé que tenían una capacidad más crítica que el resto de cursos, o al menos, ellos la manifestaban: se implicaban en la clase, respondían, preguntaban, tenían curiosidad (también en saber que opinaba la profesora; siendo este otro problema que me parece se tendría que tener en cuenta: el rechazo, no se por qué, que tienen algunos profesores para decir lo que piensan). La mayor participación puede deberse a que era un grupo más reducido y tenían más confianza entre ellos, o posiblemente porque el tema sobre el sistema político actual les interese más al ser más cercano a su propia experiencia. Por esto, me parece fundamental que a la hora de impartir clases de ciencias sociales, se relacione todo lo posible el tema a tratar con un tema actual o con los problemas sociales que viven los alumnos en su contexto, para que así puedan comprender mejor el tema y desarrollar una opinión crítica sobre este.

    Una de las experiencias que mas me ha gustado fue la de aprovechar dos guardias para hablar con los alumnos de 3º de la ESO y 1º de Bachillerato y realizarles entrevistas sobre cómo valoraban ellos sus años de formación en el IES, qué les había servido y qué no, qué les motivaba, qué cambiarían, qué problemas veían, por qué actúan de una manera u otra, en fin, la opinión del alumnado, la cual no parece interesar mucho a los profesores, y en cambio deberían tener en gran consideración, ya que los alumnos son los protagonistas y no tienen que olvidar que su trabajo en conseguir que ellos aprendan, estudiando las dificultades de cada uno de ellos y poniendo todo su empeño en encontrar una solución para hacer que el proceso de enseñanza-aprendizaje se produzca de forma eficiente.

    Al margen de todos los problemas que se plantean sobre el sistema educativo actual, que ya hemos estudiado en el máster y que posteriormente he podido ver en las aulas durante el prácticum; quiero decir que mi experiencia en el instituto ha sido muy gratificante, pues además de sentirme acogida por los profesores y alumnos, las prácticas han hecho que me motive más para querer formar parte de este cambio que tanto necesita el sistema educativo, en el cual a los profesores y futuros profesores nos queda mucho trabajo por hacer, pero que poco a poco, iremos reconstruyendo para aportar así nuestro granito de arena para la mejora de esta sociedad que tanto cambio exige a gritos.

    Rita Pons.

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  62. Saludos a todos. Soy Carles Gómez Pablo, graduado en Historia y estudiante del Máster de Profesor en Educación Secundaria por la Universidad de Valencia. Tras el periodo de prácticas en el IES Beatriu Civera, situado en el Barrio del Cristo, mancomunidad adscrita a Aldaya, y habiendo leído los comentarios de los compañeros, hay varias cosas a constatar:

    Como se puede ver a través del escrito de la compañera Nerea Bautista, en un centro convive todo tipo de profesorado, desde el más cercano al más áspero, desde el más concienciado al más dejado con sus alumnos.

    Esta cuestión fue tratada en el periodo de prácticas con mi tutor, cuya reflexión andaba en torno a la coyuntura histórica en la que la mayoría de ellos había entrado en la profesión docente. En un periodo de crisis económica, en la que formar parte del funcionariado les aseguraba una plaza fija y un salario estable, la profesión de docente prometía ser una salida laboral. Por tanto, había profesores que se definían como tales, amando la labor que desempeñaban, mientras que otro tipo de profesores “hacían su trabajo”, echaban unas horas, cobraban a fin de mes y volvían a casa sin pretensión alguna de mejorar la experiencia docente.

    Éstos últimos no estaban representados, ni mucho menos, por el grupo de profesores con el que tuvimos el gozo de hacer las prácticas. En las clases que vimos, el papel del docente era cercano a los alumnos, interpelaban a éstos, generaban la duda y contaban con el libro de texto como simple material de apoyo, llenando pizarras enteras con términos, mapas, relaciones de hechos, etc… Otra cosa es cómo los alumnos estudiaban las asignaturas. Había un grupo de ellos que prestaba atención a las clases y bebía de ellas, mientras que otro simplemente pasaba la escueta hora de clase en otras cosas y usaba el manual como libro de estudio. Los primeros tendrían respuestas más críticas, elaboradas y pertinentes, mientras que los segundos memorizaban el texto del manual y lo copiaban en un folio a la hora del examen.

    “Son memorísticos”, decía mi tutor. Por mucho que se insista en enseñar de otro modo, la necesidad de hacer exámenes con varios niveles – definiciones, relación de términos, uso de mapas, valoración de un periodo – asegura que los alumnos de aprendizaje memorístico aprueben los mismos. Por tanto, el alumno acrítico sobrevive en el aula, del mismo modo que los profesores desmotivados “hacen su trabajo”.

    Me parece, por tanto, que el tema debe tratarse de un modo bidireccional. Ni se puede juzgar únicamente la actitud del profesor, ni la del alumno. Una clase requiere de buenos usos, respeto, un saber hacer y un interés mutuo por ayudarse. En el momento en que la confianza se pierde por una de las dos partes, la clase se convierte en inviable.

    ¿Qué se puede hacer al respecto de las Ciencias Sociales?
    Teniendo en cuenta que pretendemos acceder a la profesión docente, creo que deberíamos hacernos una serie de preguntas:

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    1. (Continuación)

      ¿Cómo voy a enseñar distinto de como he aprendido?

      Esta es una de las dudas más fundamentales a las que se enfrenta un profesor. Somos producto de un sistema educativo y tendemos a reproducir aquello que hemos visto.

      Podemos intentar formar un alumnado crítico, pero como licenciados o graduados en una carrera de Ciencias Sociales me temo que no serán pocos los casos en el que implicarse personalmente en un trabajo y hacer una crítica ideológica suponía exponerse a una mala nota por parte de un profesor que no coincidiese con nuestros términos. Esto habla muy negativamente del profesorado de Universidad, de su formación pedagógica y su neutralidad a la hora de evaluar.

      Para que las aulas de escuela dejen de ser púlpitos quizá el mejor remedio es que las aulas universitarias que forman a los especialistas también dejen de serlo.

      No quiero decir con esto que el profesorado no pueda dejar claras sus posturas, sino que debería existir una Universidad en la que mojarse no fuese motivo de riesgo para la nota del alumnado. En Ciencias Sociales la opinión personal, bien fundamentada, supone la adquisición de una serie de conceptos, términos, teorías con las que el alumno trabaja.

      Si el examen en Universidad es memorístico y aséptico, no debería sorprendernos que “la generación mejor preparada” no tenga discurso propio.

      ¿Cómo separar aquello que pienso y siento como justo de la materia que enseño?

      Algunos de nosotros nos sentimos un tanto cohibidos, ya en cualquier conversación con los compañeros, ya en las prácticas, a la hora de ver que las opiniones que vertemos divergen del discurso bondadoso y feliz tanto de la situación actual como de las pasadas. Cuando uno tiene una forma de ver el mundo, es difícil no hacer crítica en cuanto a ello a la hora de enseñar algo tan maleable en el enfoque como las Ciencias Sociales.

      Dejando a un lado la preclara necesidad de justificar los argumentos, no creo que las Humanidades deban estar exentas de ideología, ya que en tanto que constructo, dejar a un lado las inquietudes y los valores en las cosas que atañen al género humano, teniéndolos por falsarios de partida es lo que realmente acaba con la rama por entero. Somos humanos y tenemos inquietudes e ideología. Podemos – y debemos – ser sinceros, pero ser imparcial en tanto a lo que atañe al hombre es simplemente imposible.

      Por tanto, no queda otra que enseñar siendo sincero desde el primer momento respecto a nuestra ideología. Puede que esto cause conflicto con los alumnos o sus progenitores, pero entra dentro de la lógica de un maestro ser sincero con su clase si espera la respuesta de la misma. Enseñar, a su vez procurando no ideologizar a los alumnos, dándoles opiniones contrastadas, acudiendo a las fuentes primarias para que los alumnos saquen sus propias conclusiones.

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    2. (Continuación)

      ¿Cómo hacer entender a los alumnos de la importancia de la Historia?

      En un mundo en el que la razón instrumental se ha convertido en hegemónica, no son pocas las veces en las que al decir la carrera que estábamos cursando hemos tenido que escuchar “¿Historia? ¿Y eso para qué sirve?”

      Esta frase, y junto con ella la creencia de que la carrera de Historia es aprenderse de memoria todo el anecdotario mundial, es moneda común hoy día. ¿Qué podemos hacer para que los alumnos entiendan que el nivel de conocimiento del mundo en el que viven es directamente proporcional a su capacidad para ubicarse y para defenderse en ese mismo mundo?

      Ninguno de los estudiantes brillantes que conocí en las prácticas iba a tener su salida en Humanidades. Cuando a una persona se le dan tan bien los números como las letras, rara vez escoge las segundas. Los motivos son fáciles de explicar: las ciencias tienen una mayor relevancia social, basada en la creencia de que posibilitan una carrera profesional más exitosa – teniendo en cuenta que el concepto de éxito es ganar dinero, claro –. El problema es que, en un siglo XXI en el que la plusvalía ya no está indexada a la productividad y el ejército de reserva – la cantidad de especialistas en paro – no deja de aumentar, la lógica de buscar una carrera de prestigio económico tiene menos cabida.

      ¿Qué puede hacer la Historia por sus alumnos?

      Si bien es cierto que la enseñanza tradicional parece lejana, no es menos cierto que la difusión histórica popular sigue por derroteros muy tradicionalistas, ya que revistas, programas de radio y videojuegos insisten en las mismas figuras, civilizaciones y aspectos de la Historia. Teniendo en cuenta que las publicaciones históricas se someten a su capacidad de venta, suelen hacer un totum revolutum de tópicos y curiosidades varias.

      Podemos decir cuanto queramos, pero la Historia a la venta en librerías – manuales escolares – y quioscos no es la Historia crítica que se pretende inculcar en las aulas. Tenemos un serio desacople entre lo que se enseña – por algunos profesores – en la Universidad y lo que se vente en el revistero, no por la fiabilidad del producto, sino por los temas tratados.

      Todas las evidencias apuntan a que no queda otra que enseñar una Historia crítica. Quizá en sus clases sea en el único sitio donde no escuchen glorias y batallitas varias, si se me permite la familiaridad. Es el momento de hacerles partícipes de una Historia distinta.

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  63. Buenos dias, mi nombre es Vicent Chaquet y soy estudiante del Màster en Educacion Secundaria en la Universitat de València.
    Realicé mis prácticas en el IES La Garrigosa de Meliana, y esas semanas supusieron mi primera experiencia dentro del mundo docente, permitiendome realizar un esbozo de lo que es la profesión. El periodo de prácticas y los meses previos de clases han confirmado la manera en la que concibo la profesión, creo que como el resto de compañeros y compañeras. De esta manera, opino que el papel de docente no ha de estar limirado a ser un simple recipiente y trasmisor de conocimientos, sino que tiene que ser una persona que consiga motivar e implicar a los alumnos (y también a si mismo) en un proceso de enseñanza-aprendizaje que sea bidireccional, y que sirva para realizar una reflexión crítica del mundo que rodea y afecta a los alumnos, y no para que estos sepan al detalle y de forma textual todos y cada uno de los contenidos (tanto en las Ciencias Sociales como en el resto de asignaturas).
    Al mismo tiempo, las prácticas me han permitido poner en práctica conocimientos asumidos en el Máster durante los meses anteriores. Así, he podido conocer de primera mano como es el dia a dia con grupos de entre 30 y 40 adolescentes, como se organiza burocráticamente un IES, cual es el curriculum vigente para ESO y Bachillerato en el País Valenciano, como se preparan y se llevan a cabo las clases, la puesta en práctica de un Proyecto Curricular, o el trato con el resto de compañeros y compañeras docentes, por ejemplo. En este sentido el ambiente y el trato recibido han sido excelentes des de el primer dia hasta el último, tanto por parte del profesorado como por el personal no docente del instituto, como por parte de los alumnos y las alumnas, y caracterizado por la ausencia de conflictos de carácter importante.
    Pero aquello que ha sido más iteresante han sido la preparación de las clases que había que impartir y la respuesta de los alumnos. Coincido con mi compañera Rita, considerando que los alumnos en prácticas estamos un tanto encorsetados a la hora de aplicar nuestra metodologia, con una programación ya configurada y una manera de trabajar, a la que nos tenemos que adaptar al llegar al instituto. Aún así, esto no ha impedido que incorporara a las clases actividades como encuestas iniciales para trabajar las ideas previas de los alumnos, o debates, así como echar mano de distintos recursos audiovisuales, que considero juegan un papel muy interesante a la hora de motivar al alumnado. Este aspecto de la experiencia de las prácticas también ha hecho que me diera cuenta de que el trabajo de los profesores no termina cuando suena el timbre del instituto, sino que esta continua en casa durante el tiempo libre, acompañada por un continuo planteamiento y replanteamiento de los recursos a utilizar, contenidos a tratar, actividades, etc. Al mismo tiempo, el realizar ya clases ha supuesto el mayor reto para mi, especialmente la vertiente artística (situarse delante de un público e intentar hacer entender lo que sabes) a la que hace referencia continuamente el profesor Carles Bordes, pero considero que he salido airoso y reforzado. Además, la respuesta del alumnado ha sido ecelente, y observando su participación, seguimiento de las clases, y el hecho que la profesora me pidiera el material que habia preparado para utilizarlo ella en sus clases, opino que han sido unas clases enriquecedoras tanto para ellos como para mi.
    El balance general de las prácticas es, pues, muy positivo, y me han confirmado que este es el mundo al que quiero dedicarme, aunque también considero que el periodo de prácticas es demasiado corto, ya que cuando has entrado en la dinámica del centro es ya casi el momento de despedirse.

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  64. Saludos, soy Amanda Giménez, licenciada en Historia del Arte y alumna del Máster de Profesor/a de Educación Secundaria por la Universidad de Valencia. He realizado las prácticas en el IES Beatriu Civera, Aldaia.

    Intentando responder a las preguntas suscitadas por el comentario del foro 18 y plasmando generalmente como ha sido mi experiencia en las practicas, diré, para empezar, que ha sido una experiencia mucho más gratificante de lo que esperaba en un primer momento.

    He tenido la oportunidad, a diferencia de las otras experiencias comentadas, de dar clase a una amplia variedad de cursos, siendo así una experiencia muy enriquecedora y completa. Considero relevante aquí la cuestión que plantea Nerea Bautista en su comentario; La importancia de las actitudes de los docentes hacia sus discentes y sus clases son cruciales, a mi parecer, para los resultados académicos de los alumnos. Creo que todos recordamos con cariño y nostalgia algún antiguo profesor, que consiguió originar en nosotros un gran interés por su asignatura. Y ese debería ser, el objetivo de cualquier docente, para conseguirlo es necesaria la implicación y el interés de éste. En este aspecto puedo decir que tuve la suerte de conocer a unos grandes profesores en el IES Beatriu Civera.

    La visión que tenía en mente de lo que era un instituto era mi propia experiencia como estudiante de instituto, pese a la insistente necesidad de innovación con la que nos impregnan en el master noté que las prácticas se asemejaron más a como recordaba yo el instituto que a como nos los plasmaban en el master. Eso sí, sobretodo noté un aumento del uso de las TIC para dar las clases, tecnología de la que se carecía anteriormente. Un recurso muy útil, más visual y cercano para el alumno, y que usado correctamente facilita la asimilación de conceptos más rápidamente. Sin embargo, hoy por hoy, es una moneda de doble cara, los sistemas de acceso a la red de muchos centros (el mío entre ellos) son bastante precarios y dan muchos problemas, dificultando así la realización de las clases, por no hablar de la dificultad que crea un sistema como el Lliurex, cuyos programas en no pocas ocasiones muestran problemas de incompatibilidad con el material que los profesores pueden traerse hecho de casa.

    Los profesores del instituto tenían experiencia suficiente como para usar las TIC de una manera moderada, no teniendo que recaer el protagonismo de la clase en la tecnología, sino en el profesor. En una ocasión el sistema informático estaba colapsado, el profesor tenía preparado en ese momento una serie de vídeos para ver y frente al imprevisto convirtió la clase en una charla con los alumnos. ¿Qué habríamos hecho nosotros en la misma situación?

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  65. Hola, soy Violeta Arnau, estudiante del Máster de Educación Secundaria de la Universidad de Valencia, y he tenido el placer de realizar las prácticas en el Instituto de Secundaria de Campanar.

    Como para la mayoría de mis compañeros, estos meses de acercamiento a la práctica docente, han sido los más fructíferos del curso. Si bien es cierto, que todos los conocimientos adquiridos a lo largo de las clases teóricas han sido útiles y necesarios, las prácticas permiten ver cómo sería su aplicación real en el contexto de un aula. Es aquí donde aparecen los problemas y donde se observa el abismo existente entre las teorías pedagógicas y las diferentes corrientes frente a la realidad escolar.

    Mientras que la innovación con TICS, la necesidad de cambio frente a la tradicional forma de evaluar y practicar la profesión, o el trato más individualizado con los alumnos, han sido algunas de las máximas del Master; la realidad muestra la dificultad de poner esto en práctica.

    Para empezar, el instituto donde yo he estado no contaba con unas infraestructuras bien equipadas, las clases no tenían ordenador ni proyector, lo que hacía imposible el uso de nuevas tecnologías, y por supuesto, el uso de móviles estaba prohibido. Así mismo, las ratios de alumnos por profesor dificultaban una relación personal estrecha, y la posibilidad de no realizar exámenes era impensable en cualquier caso. Con esto quiero decir, que el margen de innovación y originalidad dentro de las aulas era realmente estrecho.

    A pesar de todo esto, las ganas del personal docente con el que he estado trabajando durante este periodo, hace que no se pierda la esperanza en una mejora paulatina dentro del sistema. El optimismo, el amor hacia la profesión y por los estudiantes, las perspectivas de mejora y las ganas de enseñar y crear personas dignas y críticas. Todo esto es con lo que me quedo yo de este periodo de prácticas, una ilusión contagiosa por la profesión que me infunde fuerzas para seguir investigando y formándome en este sentido, para que finalmente, todas estas trabas existentes que limitan y suponen un impedimento para una mejora en la docencia y en el sistema educativo, sean superadas.

    Por último remarcar la necesidad de un buen clima de aula, donde profesor y alumnos se entiendan y convivan en un ambiente relajado y agradable. Desde mi punto de vista, esta es una condición indispensable para que se dé un aprendizaje real. Esto es en gran parte responsabilidad de los alumnos, pero es el profesor quien en última instancia debe asegurarlo. En este sentido, cobra gran importancia el papel de las tutorías como espacios donde solucionar los problemas que puedan existir entre compañeros, trabajar el respeto y la tolerancia, el compañerismo y al fin y al cabo, la formación de ciudadanos.

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  66. Hola,soy Sandra Conca, graduada en Historia del Arte y actualmente estudiante del Máster de Educación Secundaria en la Universitat de Valencia. Me gustaría dedicar una entrada en este apartado del geogoforo para compartir mi experiencia en las prácticas.

    Mi período de prácticas fue en el instituto Juan de Garay, ubicado en Safranar, que forma parte del distrito de Patraix en Valencia. Ciertamente, el período de prácticas ha supuesto la definición total de mi vocación, pues cuando entré al máster no tenía demasiado claras mis intenciones profesionales futuras, pues lo única que sabía era que me gustaban las materias de Geografía, Historia, y por supuesto, Historia del Arte, pero la realidad es que nunca había tenía práctica impartiendo alguna clase o algo similar con ello. Tuve mucha suerte en el Juan de Garay, no solo al nivel personal del que hablo, sino con todo el entorno del instituto, con el personal, en especial con el tutor que me tocó, el cual amaba su profesión y lo que ello implicaba. Me parece de suma importancia amar tu profesión y más tratándose de una profesión como es la de ser docente, al fin y al cabo estamos formando a personas, no sólo mediante la transmisión de unos conocimientos teóricos, sino inculcando unos valores morales que ayudarán a los alumnos a insertarse en una sociedad.

    Si nos paramos a pensar en todo el contexto actual y las deficiencias que caracterizan nuestro sistema educativo suena bastante desalentador ejercer esta profesión, pues por una parte la legislación vigente que no permite dejar atrás los métodos tradicionales de enseñanza que han quedado obsoletos y provocan en gran parte el fracaso académico existente junto con la falta de iniciativa para llevar a cabo cambios verdaderos en la praxis docente provocan esta espiral sin salida en la que se repiten una y otra vez los errores que caracterizan nuestro sistema educativo.

    En este aspecto juega un papel crucial la figura del docente, porque la imagen que el emana se proyecta en sus alumnos, evidentemente no se pueden cambiar las decisiones autónomas de una persona, y en el caso de los alumnos que no sienten interés alguno por conseguir un Graduado escolar o un Bachiller, poco se puede hacer, pero si es cierto que el docente puede despertar esa motivación que consiga hacer un ligero cambio en el chip del alumnado. Un alumno motivado se esforzará más por conseguir aquello que desea, pero para ello se necesita profesores con vocación y también motivados, que claro esta no serán los ingredientes necesarios para acabar con los baches de nuestro sistema pero si al menos paliar ligeramente algunos errores desde las aulas.

    Para ello me ha servido el máster y en especial el período de prácticas, para definir mi vocación y para concienciarme acerca de la importancia que tiene la figura del profesor y la relación con el alumnado.

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    1. Hola, mi nombre es Paola Aqueveque soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena en Chile. Me parece interesante tu experiencia, ya que fue enriquecedora para comprender qué la pedagogía era lo que querías estudiar. En relación al contexto actual complejo que vive la educación se desprende que éste es transversal en casi la mayor parte del mundo, lo cual llama mucho la atención. ¿Por qué aún siguen permaneciendo los cánones tradicionales de la enseñanza, provenientes del siglo XVIII, sabiendo que ya están obsoletos?
      Es necesario una reformulación del sistema educativo, pero que ésta no sea producto de cambios gubernamentales; es necesario que se aplique una buena reforma desde el Estado. Ya que sí se realizan, como en el caso chileno, reformas en cada cambio de gobierno las instituciones escolares y los docentes no son capaces de comprender cada uno de los objetivos propuestos por dichas reformas impuestas. Por lo tanto, además de una reformulación del sistema se requiere que haya una transformación en la labor docente, específicamente en los métodos y técnicas para el proceso de aprendizaje y enseñanza.
      Hay que erradicar en nuestras prácticas la frecuente utilización de un método expositivo, pues éste no es malo, sin embargo se cae en el error cuando se sobreutiliza. Es relevante que combinen distintos métodos y técnicas que permitan que el docente facilite el aprendizaje de los estudiantes haciendo que éstos últimos se vuelvan el centro del proceso de enseñanza y aprendizaje.

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    2. Saludos a todos los participantes. Mi nombre es Christopher Flores Cortés, estudiante de pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, ubicada en la región de Coquimbo, Chile.
      Coincido contigo Paola, puesto que la enseñanza debe ir modificándose en sincronía con los cambios sociales, culturales y tecnológicos que ocurren tanto en el país, como a escala global. De esta forma, la educación tendrá un énfasis mayor en lo que el alumno requiere según su contexto. Por otro lado, el sistema actual educa en todas las disciplinas a los alumnos, pero no para que estos sean personas con conocimientos íntegros, sino para que estos se desempeñen en el campo laboral, es así como gran parte de los alumnos, una vez egresados, no poseen objetivos educativos en sus vidas, porque no desarrollaron las habilidades sobre las disciplinas que podrían haber sido de sus gustos. De esta forma, el cambio educativo que debe experimentar Chile, debe ser una reestructuración completa del sistema educativo, enfocándose en las potencialidades que poseen los alumnos. Esto generará alumnos con mayores objetivos a la hora de egresar del colegio y con mayor interés tanto por la enseñanza que le será entregada, como por sus futuros estudios. Si bien es una idea que se ve imposibilitada por el contexto neoliberal en el que estamos inmersos, es un cambio que es fundamental para el desarrollo de cada sociedad.
      Saludos cordiales, Christopher Flores. Estudiante pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía, Universidad de La Serena.

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  67. Buenas tardes, mi nombre es Antonio Valero Alonso, licenciado en Historia y actualmente alumno del Máster de Educación Secundaria por la Universitat de València.
    Estuve realizando las prácticas en el IES La Sènia de Paiporta durante dos meses a principios de 2016 y debo de confesar que ha sido un auténtico placer el poder practicar como docente. El trato con niños lo tenía dominado, al tener experiencia en trabajo con ellos a nivel de educador-monitor. Con lo que esta vez mi experiencia ha sido a nivel docente, cosa que no dominaba.
    Pues bien, he podido trabajar desde dentro del departamento y he estado viendo el funcionamiento del centro. Me he quedado con ganas de más! En dos meses no se llega a saber si es lo que te esperas, pero si que te puedes hacer una ligera idea. Me gustaría que se pudiera participar también en la programación del curso, cosa que sucede a principio cuando el Máster todavía no ha empezado, con lo que no creo que sea posible, pero considero que sería una ayuda positiva.
    Sin embargo, esto también me ha servido para darme cuenta que ser licenciado en historia, no quiere decir que ya sepa ser profesor de historia. Deberé de dedicarle tiempo a prepararme las clases, pero antes de ello a saber el currículo que debo de seguir en clase. Como le comentaba a mi tutora de prácticas, tengo claro que el día que consiga ser profesor deberé de dedicarle muchas horas los primeros cursos...
    "Elige un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar ni un día de tu vida", Confucio.

    Antonio Valero

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    1. Saludos a todos los participantes. Mi nombre es Christopher Flores Cortés, estudiante de pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, ubicada en la región de Coquimbo, Chile. Al leer tu experiencia Antonio, me sentí muy identificado, pues yo también realicé una práctica de ayudantía (como se denomina en mi universidad), en esta, el alumno debe elaborar material didáctico para el docente guía y también realizar como mínimo una clase. Sin embargo, al tener como profesor guía a un docente que me hizo clases durante mi periodo escolar, por lo que ya me conocía, la exigencia fue mayor, a partir de lo cual, realicé aproximadamente medio semestre de clases. Durante este proceso pude afirmar que tenía un gran dominio en el aula y que las asignaturas de pedagogía me sirvieron para enfocar los contenidos de la disciplina. Sin duda creo que, tanto la docencia como el desarrollo de la disciplina son fundamentales, y lograr emplearlas sincrónicamente generará un aprendizaje significativo en los alumnos, y una gran satisfacción en el docente.
      Saludos cordiales, Christopher Flores. Estudiante pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía, Universidad de La Serena.

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  68. Las realidades que se presentan en el lugar de trabajo después que un docente o estudiante de educación se dirige a la práctica, no compagina mucho con la teorías que llevan desde la Universidad o la institución que lo formo profesionalmente, así el educador sale con una serie de conocimientos académicos que al llevarlos a las aulas de clase se consigue con una realidad diferente, debido a determinados factores: Sociales, Económicos, Políticos, Distribución del espacio etc.

    La Educación necesita una serie de recursos y espacios adecuados para el desarrollo del acto educativo. En nuestro país hay fallas, ya que un porcentaje elevado de los planteles educativos no poseen la planta física idónea para llevar a cabalidad la actividad docente en asignaturas que se dictan, unido a lo anterior los problemas que se presentan con los estudiantes.

    En Venezuela docentes y estudiantes, en la mayoría de los casos no tienen acceso a diferentes bienes y servicios ocasionado por el alto costo de la vida que conlleva a una problemática que afecta a toda la familia: pues a los representantes se les hace difícil al no tener recursos para cumplir con los diferentes requisitos que ello implica. La formación en el hogar es una gran influencia en el desarrollo educativo. Es hacer notar que el inicio educativo se inicia en el hogar, con la formación de sus padres, la escuela termina de modelar e impartir conocimientos

    La educación se ve afectada cuando la población no tiene medios adecuados como son: alimentos, transporte, vivienda, libros, cuadernos etc. por ello los docentes tienen dificultad para desarrollar sus actividades en todos los niveles desde pre- escolar(educación inicial) hasta el nivel superior, lo que trae consecuencias que afecta a nuestra sociedad tales como deserción escolar, ausentismo laboral, dificultad en el aprendizaje, bajo rendimiento académico, desnutrición ocio y por ende aumento de la delincuencia, toda esta serie de factores y consecuencias afectan la labor de los docentes quienes , al salir de las instituciones que los han formado e ir a la práctica docente, se ven frustrados al no poder cumplir con los objetivos planificados de acuerdo con los diferentes programas.

    Un pueblo que no recibe la educación adecuada, es una sociedad que no avanza, que lamentablemente retrocede con respecto a otros países y es lo que vemos con mucha tristeza la mayoría de Venezolanos por esto relacionándolo con el geoforo n:18, se puede desarrollar las cátedras compaginándolas con las realidades sociales, culturales, económicas se hace necesario un proceso de adaptación previo de los docentes, incluso antes de comenzar sus pasantías en la práctica docente para que tenga una idea, a lo que se enfrentaran. Tratando de esta manera de disminuir la problemática del estudiante en educación, al ir a ejercer más adelante como profesional de la educación al poner en práctica todo lo aprendido
    En fin el geoforo n: 18 nos habla de las experiencias de los docentes en su ámbito laboral y al relacionarlo con el caso Venezuela se hace más evidente la diferencia de una teoría con el aula de clase y la realidad educativa de nuestro país, pero esto lo podemos mejorar tomando reflexiones de todos los que participamos en la educación del país tanto estado como docentes y alumnos en vías de construir una mejor sociedad

    Br. Juan Carlos Ramírez Vanegas
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  69. Las prácticas profesionales en los estudiantes de educación resultan ser una herramienta verdaderamente importante, dado que es allí, precisamente en el aula de clase, donde se adquieren todas las experiencias y conocimientos indispensables que requiere un docente para ejercer a cabalidad su profesión, dichas experiencias y conocimientos deben ir acompañados de las fortalezas, oportunidades, debilidades y obstáculos que se presentan durante este proceso profesional, para hacer énfasis se habla de la indisciplina de los estudiantes, la falta de interés, la irresponsabilidad de algunos, las faltas de respeto y muchos otros que a diario se presentan en el aula.
    Es por esta razón que desde la práctica profesional se debe dar un adecuado seguimiento a los problemas que pueden impedir un enriquecido y significativo proceso de enseñanza-aprendizaje en los estudiantes, es la etapa de estudiante de educación en la cual debe percibir y adoptar las diversas estrategias, técnicas y dinámicas en función de transmitirle a sus alumnos un aprendizaje valorativo, así mismo se debe realizar con la intención de extraer de cada grupo, mas experiencias, vivencias y demás que fortalezcan y mejoren la labor del educador.
    Por otra parte es importante resaltar que los docentes de hoy y del mañana, deben tener muy en cuenta la innovación al momento de la planificación, ya que es un reto y un desafío que se asume con los jóvenes, los cuales se encuentran inmersos en la sociedad de la evolución tecnológica y requieren de estrategias metodológicas y evaluativas que incluyan estas tecnologías, para motivar e incentivar al estudiante durante su proceso formativo, es decir que no resulte aburridor, monótono y por ende muy tradicional
    Sin embargo y para finalizar cabe destacar que la innovación no solo depende de la implementación de las TIC sino también recae sobre la predisposición y vocación que exista en cada educador, por ejemplo: el libro es una valiosa herramienta, pero en muchos de los casos el profesor cae en el paradigma tradicional y repetitivo, en vez de orientar los contenidos y objetivos del libro hacia un constructivismo donde el educando pueda ser partícipe de su formación, crítico y reflexivo.

    Br. Maryeling Santos
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  70. Se vive un momento educativo en el que las necesidades han cambiado, por supuesto, no se debe ser solo transmisores de información como si de un cable se tratará y esa es la cuestión principal, por su parte, los formadores ya no son simplemente eso, son educadores y por lo tanto guías, o al menos se debe exigir, por la falta de figuras de referencia de nuestros alumnos. Po consiguiente, clasificar a un maestro como “bueno” o “malo” implica muchos factores, sobre todo si se toma en cuenta quién es el que evalúa, por ejemplo, si un maestro “motiva” a sus alumnos regalando calificación en forma de puntos extras, por supuesto que los alumnos van a coincidir en que es un buen maestro. Es por ello que es inevitable realizar comparaciones que a veces nos hacen darnos cuenta como docentes de nuestros errores, o bien, reconocer los aciertos y continuar haciéndolo de esa manera, manteniendo la auto-crítica y así analizar qué y cómo lo estamos haciendo y si realmente estamos logrando nuestros objetivos.
    Estoy de acuerdo con los demás que dicen que una de las cosas más difíciles cuando uno inicia en la docencia es lograr la motivación de los grupos o de alumnos específicos, aunque no existe un manual para esto, me parece que no hay mejor manera de motivar que educar con el ejemplo, si uno es constante y congruente con lo que uno hace, si uno prepara adecuadamente la clase, busca ejemplos de la vida cotidiana para ilustrar algún tema, se preocupa por conocer las habilidades e intereses de los alumnos, les hablamos en términos coloquiales, nos expresamos correctamente, no cometemos faltas ortográficas; si hacemos estas cosas yo creo que nosotros le podemos transmitir a los alumnos un buen modelo de trabajo que ellos pueden ir imitando y desarrollando, ya que cuando uno hace lo que le gusta y le gusta lo que hace, como docente uno lo demuestra cuando está dando la clase y los alumnos lo pueden percibir.
    Para llegar a ser un buen educador en un principio depende de los conocimientos que se han dado en la universidad, además de las competencias y habilidades que uno se ha ido forjando en la medida del crecimiento de ser docente dependiendo del perfeccionamiento y de la práctica que va dando los años. También otro punto importante pienso que son los alumnos ellos cada día son diferentes ya sea por sus conocimientos tecnológicos que cada día se van innovando permitiendo que el conocimiento este abierto a quien lo desee ocupar para un desarrollo de su potencial, como persona.
    Es por esto que se docente, requiere de ser apasionado por lo que se hace, sin temor alguno a equivocarse, pues somos perfectibles en la vida, no perfectos, no hay que caer en esa trampa, se debe ser muy autodidacta, leer todo el tiempo, otra características es el saber dominar el arte de hablar, de comunicar, de transmitir, pensar, hay que estar abiertos al cambio, como aprender a utilizar las herramientas tecnológicas, (el uso de las tic), y todos aquellos instrumentos que sirvan como herramientas para enseñar a los alumnos y profesionistas del mañana.

    Keila Contreras
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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    1. Hola Keila, mi nombre es Paola Aqueveque y soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de La Universidad de La Serena. Me pareció acertado tu comentario y quisiera agregar que, dentro de las prácticas que realicé en la Universidad me di cuenta que los docentes deben tener una base teórica, entregada por la Institución que los forma para enfrentar las diversas situaciones que se generan en el aula. Pero, muchas veces lo teórico queda en nada, porque éste no se lleva a la práctica. Por lo que se hace urgente que el profesor se perfeccione, para poder enfrentar con mayor ahínco las diversas situaciones que se generan en la práctica educativa real. Pude observar que este “perfeccionamiento”, se realizaba aplicando lo teórico de la metodología de la enseñanza en la práctica. Ya que, cuando se generaban contextos difíciles en el aula para generar los procesos de aprendizajes, la docente utilizaba su experiencia durante años en aula para llevar las técnicas y metodologías, que son teóricas, a la práctica generando instancias didácticas de aprendizajes, donde los estudiantes jugaban un rol fundamental, puesto que ellos mismos eran participes de su proceso de enseñanza y aprendizaje.

      El perfeccionamiento del profesor no, necesariamente, ha de ser teórico, puesto que en la Universidad ya se recibió el material suficiente, pero sí es necesario actualizar los conocimientos. Sin embargo, la clave para el perfeccionamiento del profesor es la experiencia de lo que él vive en clases, para así emitir autoevaluaciones, meta-cogniciones y reflexiones personales sobre su propia práctica. Cuando uno logra realizar esto va a estar capacitado para enfrentar cualquier situación de conflictos y de mejoramiento de aprendizajes en el aula. En relación a ello no estoy de acuerdo en tratar a los profesores sólo cómo especialistas en una materia que deben perfeccionarse para que puedan afrontar las situaciones que suceden en la práctica educativa real como un objeto de conocimiento, ya que hay que enfocarlo al lado de lo práctico y buscar un término medio, pues lo teórico no lo es todo. Es muy importante, tal como lo plantea Margalef (1996), buscar alternativas a la tradición académica y tradicional que se centra en brindarle las herramientas a los docentes para que sepan qué hacer y cómo hay que hacerlo.
      Margalef, L. (1996). Una propuesta de desarrollo profesional para los profesores de Educación Secundaria. Revista Complutense de Educación, vol. 7, n°2. Recuperado el 08-06-16 desde: http://revistas.ucm.es/index.php/RCED/article/viewFile/RCED9696220081A/17534

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  71. En el debate 18 del Geoforo , nos encontramos con el trabajo realizado por un alumno del maestrado.Este con el fin de que los profesores y futuros docentes puedan aportar sus ideas para mejorar la relación entre docentes y futuros colegas , esta investigación está proyectada para q los profesores puedan manifestar sus opiniones ,independientemente del nivel de educación en el que se encuentran y así den a conocer sus experiencias profesional. Para esto se necesita formular una serie de preguntas o dudas que sean las más comunes en la labor de la enseñanza, estas pueden ser: observaciones de las instituciones, expectativas como docentes, propuestas, criticas, entre otros. Tema importante también para debatir también es las grandes diferencias que hay entre la teoría y la práctica.
    En relato del licenciado ya mencionado, donde expresa sus comienzos, sus temores al empezar a ejercer, donde nos cuenta que fueron superados satisfactoriamente y se siente muy cómodo con esta profesión, allí plantea un modelo de enseñanza muy distinto a las propuestas innovadoras, tampoco tuvo grandes limitaciones, en las cuales expuso y explico el tema proyectado, aclaro dudas y realizo debates obteniendo unos muy buenos resultados.
    En cuanto a los conflictos con los estudiantes, no tuvo mayores sobresaltos, solo los llamados de atención casi normales a los alumnos debido a algún tipo de distracción que se producen cuando se trabaja de forma grupal en el aula de clase. Plantea una docencia innovadora, que esta se puede lograr siempre y cuando cuente con el apoyo de trabajo en equipo y la participación del profesorado con el fin de tener una mejor preparación y una buena gestión de la clase.
    En el trabajo realizado se pudieron identificar algunas dificultades, inclinándose así a la parte cognitiva del estudiante, buscando crear o potenciar la conciencia crítica de nuestro alumnado, siendo muy importante en su desarrollo en la actual sociedad, siendo una educación más productiva, alejándose así de los tradicional , ya que esta tiene como finalidad la formación de hombres de futuro laboral y ciudadano.
    Iván A. Carvajal
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  72. En este geóforo se nos habla claramente de la importancia que tiene la práctica docente y de que nosotros como futuros docente debemos ser transformadores e innovadores a la hora de ir al aula ya que, hoy en día existen muchos docentes de enciclopedia que no se interesan por investigar más haya de lo que le ofrece el libro convirtiendo de esta manera la forma de enseñar en las aulas en algo supremamente rutinario y poco interesante para sus alumnos que cada día se interesan menos por los contenidos recibidos y mas por sacar un simple diez.
    Es por ello que este material nos invita a que seamos los docentes del futuro, docentes transformadores de un sistema educativo que va cada día mas en decadencia y contribuyendo de manera sínica a la mediocridad del país y los docentes que son los encargados de preparar a esos futuros profesionales no están haciendo nada que ayude a mejorar la educación en sus liceos o colegios. Simplemente se están adaptando al sistema que les exige cada día menos tanto al alumno como al docente.
    Es por ello que cada día vemos mas docentes con el mismo problema a la hora de dar clases y ese problema no es nada más y nada menos que la falta de estrategias con el fin de lograr un aprendizaje significativo en sus alumnos pero, por el contrario encontramos cada día mas docentes en las aulas dando su clase a los alumnos de bachillerato como si fuesen alumnos de segundo grado de primaria aplicando solamente la técnica del dictado para, luego simplemente enviarles hacer un ensayo, trabajo o una evaluación referente al tema que de seguro se lo aprenderán algunos para pasar el examen pero dentro de tres semanas ese concepto se les borrara de su memoria.
    Para finalizar yo pienso que deberíamos en nuestro país hablar menos y trabajar más por que como lo dice en el geoforo gran parte de nuestro tiempo nos la pasamos criticando lo que ya existe pero no creamos nosotros mismos absolutamente nada nuevo y mucho menos innovador. Sin duda a mi criterio es un problema de ética que como futuros docentes debemos ir enfrentando para ser esos docentes transformadores e innovadores o simplemente quedarnos en ser uno más del montón.

    Br. HAROLD BONILLA
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  73. En mis practicas docentes lo que he observado en el liceo es un mundo totalmente diferente al que me imagine en el trascurso de la carrera, un mundo de personas con contextos, con necesidades, con ambiciones totalmente diferentes, donde yo como futuro docente (hoy practicante) tendré que tener bien claro mi rol de docente y mi ética profesional para así poder lograr un método claro en función de unificar la heterogeneidad del grupo con la finalidad de llevar a cabo el proceso educativo.
    Ahora bien, siempre será factible aplicar un docencia innovadora, como futuros docentes, tendremos que dejar a un lado las improvisaciones y ser grandes planificadores; son muchas las herramientas disponibles hoy en día para innovar en el aula de clase, como docentes, hay momentos en los que toca ser autodidacta, dejar los miedos a un lado y adentrarse en las tecnologías disponibles hacer uso de ellas y gracias a esta, estar a la altura del sistema educativo, aunado a esto, poder responder a la expectativas y necesidades del alumnado.
    Como futuro docente de mi país, me preocupa el bajo nivel en nuestro sistema educativo; han sido muchos los factores que se han conjugado para que esto sea así, por eso hay que tener bien claro nuestro rol de docente, hay que entender las necesidades actuales en las cuales se desarrolla nuestra sociedad; en el actual contexto (capacitados o no) tendremos que saber lidiar con los problemas que azotan a nuestra juventud, ya sea drogas, consumo de alcohol, embarazos precoz, entre otros, es por ello la necesidad de innovar en el aula de clases, atraer al estudiante por medio de estrategias didácticas y TICs que nos faciliten el proceso de enseñanza-aprendizaje y con esto, alejarlos de aquellos problemas ya mencionados.
    En cuanto a qué papel puede darse hoy en las asignaturas de las ciencias sociales, pienso que se deben problematizar los contenidos, ampliarlos y desarrollarlos en los contextos y necesidades actuales, asimismo, hay que manejarlos desde enfoques interdisciplinarios, donde estos les permitirán entender mejor las asignaturas y con esto, mejorar en menor escala por medio de nuestro granito de arena el sistema educativo actual.

    Br. Kendry X Arcia P..
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  74. La docencia innovadora es posible, pero como ya concluimos en otros foros, requiere del trabajo en equipo y de la disposición del profesorado para trabajar más duro en la preparación y gestión de sus clases los libros de texto son sin duda espacios de confort que anulan la creatividad docente al menor descuido. Las dificultades que he visto, aun siendo consciente de que el IES Luís Vives no presenta ni de lejos las dificultades que encontraría en otros centros, sí me animan a lanzarme a la profesión docente, cuyo rol no es otro que activar o afilar, en el mejor de los casos la conciencia crítica de nuestro alumnado.
    Una reconfiguración a los planes curriculares de ciencias sociales en donde las temáticas de la relación tiempo, espacio y sociedad sean cercanos y compatibles con el uso de nuevas didácticas, medios interactivos virtuales, y la vida cotidiana de los estudiantes (sin perder importancia las temáticas académicas).
    El diálogo con los estudiantes debe ser una constante sin perder el rol del docente, pero si siendo un orientador cuando sea necesario, de esta manera considero que al momento de planear clase se hace más sencillo crear didácticas para un curso en específico, pues se conoce las necesidades desde una lectura amplia.
    Los estudiantes deben ser críticos no criticones, por eso ellos también deben tener la responsabilidad de organizar clases en donde el docente fomente un juego de roles, así la docencia se hace democrática en la práctica y en la formación de ciudadanos.
    El trabajo docente debe ser interdisciplinario, por ello debe haber un constante diálogo en los colegios de los profesores de todas las asignaturas, para trabajar en equipo en las actividades programadas. La innovación es una triada entre docentes, el colegio y la familia.
    Las clases de ciencias sociales deben involucrar observaciones y consultas, es decir ampliar el salón a diferentes espacios aledaños o no al colegio. La imaginación en todos los cursos debe ser una constante, tanto en los estudiantes como en los docentes, pues si nosotros no somos capaces de imaginar, como vamos a pretender conocer espacios lejanos, por esto es importante la lectura amigable en las clases.

    Br Mary Zambrano S.
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  75. En la educación bien sea del nivel secundario, superior los docentes tiene como objetivo, principal destacarse, en las diferentes ramas de la educación partiendo de cualidades propias para colocar en práctica sus destrezas y capacidad de nivel intelectual competitiva con las los demás profesores de diferentes áreas, en el cual se lleva a cabo mediante concursos, congresos, debates y foros que son adquiridos en cualquier parte del mundo.
    En el caso del GEOFRO reciente del año 2014, se congregaron docentes debatiendo propuesta, y opiniones para el beneficio de los profesores activos y futuros, teniendo en cuenta la comunicación y la buena relación con los estudiantes para mejorar el dialogo de ambos se puedan entender para mayor beneficio, para esto se hicieron preguntas como lo es las experiencias de cada uno de ellos planteado sus interrogantes.
    La finalidad de tal debate, es la integración de los docentes y las especialidades de las diferentes ramas en especial de las CIENCIAS SOCIALES, teniendo como eje fundamental las experiencias de cada uno en las aulas de clases y que papel juega en su rama de asignaturas así poder incentivar el interés que pueda tener el alumno en la asignatura bien sea de cualquier ares de ciencia social.
    En conclusión son prácticas didácticas y metodológicas, que se implementa como parte fundamental para tener resultados a todos la interrogantes que allí se expusieron dentro de un ámbito profesional, no en todas las instituciones se vive la misma experiencia ya que el entorno ni la cultura es la misma dentro de una sociedad y su educación no es tan influyente para poder manifestar dicha, inquietudes que se viven el día a día en el aula.

    Br. Yuleisi María Guerrero Ríos
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  76. En las instituciones o colegios vemos realidades que muchas veces no esperábamos encontrar desde mi caso particularmente porque actualmente trabajo en un instituto que implementa el aula activa donde se integran niños con diferentes necesidades con condiciones de aspecto autista, trastorno de hiperactividad, problemas motores, dislexia y digrafía, entre otros, para mí es un reto y un desafío diario poder ayudar a todos mis estudiantes de la manera correcta cuando lo necesitan y me encanta hacerlo con mucho amor.
    En realidad si se parece a lo que esperaba encontrar en el campo educativo es un reto y un compromiso que debemos asumir a diario con amor y estamos en esta hermosa carrera y debemos hacerlo por convicción con mucha entrega. Si es posible aplicar estrategias innovadoras ya que los estudiantes están abiertos a construir su propio conocimiento y hacer su aprendizaje significativo, es oportuno innovar para hacer más dinámicas los contenidos educativos.
    Desde mi perspectiva me siento comprometida con las futuras generaciones, porque deseo ser una docente innovadora capaz de ayudar a mis estudiantes de diferentes maneras. Los retos que se me presentan a diario si me motivan puesto que dicen que cuando el camino que transitamos es difícil es porque vamos por el camino correcto y estos retos me motivan a ser cada día una excelente docente y a no desmayar ante las adversidades.
    El rol es de orientador y de guía de nuestros estudiantes debemos ayudarlos no solo en el ámbito escolar, sino también en lo personal cuando estos lo ameriten, ya que ellos vienen con muchas necesidades y carencias afectivas desde sus hogares. El papel de las asignaturas de ciencias sociales debe ser principal o prioritario porque abarcan temas esenciales para nuestros estudiantes que muchas veces estos desconocen hasta hacerse profesionales.
    Muchas veces las asignaturas de ciencias sociales pierden el contexto por la falta de motivación de algunos profesores. Es oportuno nuestro punto de vista ya que podemos cambiar para bien la perspectiva que nuestros estudiantes tienen para ver la educación y en especial el área de ciencias sociales como aburrido, debemos cambiar eso, pero debemos hacerlo desde nosotros mismos principalmente, hacer todo los que hacemos diariamente con amor, y de esta manera dejaríamos de verlo como trabajo y comenzaríamos a verlo como algo que nos gusta y nos apasiona.

    Br. María G. Hinojosa Hernández
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  77. La educación es un proceso por el cual todo ser humano debe pasar, no sólo para mantener un comportamiento adecuado ante la sociedad, sino; para servirle a ésta. Son así como todos los factores que intervienen en ella forman parte de su evolución, sin duda, una cualidad muy importante de resaltar son las estrategias de aprendizaje, con ellas se puede lograr fijar un aprendizaje significativo en los estudiantes cuando logran relacionar los conocimientos adquiridos con las ideas previas, por consiguiente, hay una integración de información para construir un nuevo concepto.
    Actualmente la geografía es una ciencia que ha logrado importantes avances teóricos y prácticos, sin embargo estos avances no se han podido incluir en el ámbito escolar, por tal razón se evidencia la actual problemática que se presenta en las aulas de clases con respecto a esta asignatura. La problemática erradica en la constante elaboración de planificaciones tradicionales, donde la mayor parte de educadores se ha quedado estancada, sin tomar en cuenta la variedad de opciones que existen para impartir y transmitir conocimientos geográficos a través del uso de estrategias constructivistas que dejan como resultado, individuos con aptitudes y actitudes necesarias para construir conocimientos a partir de la información que se les ha dado como aporte.
    Las estrategias constructivistas son las actuales alternativas que ofrece el sistema educativo como metodología, instrumentos y recursos para aportar al eficaz desenvolvimiento de las clases en cualquier asignatura, sin duda, son una adecuada elección para incentivar a los estudiantes a crear y producir novedosos conceptos de manera didáctica; integrando su formación como individuo en la sociedad, donde adhiera cada contenido y técnica de forma favorable para su crecimiento personal, social, académico y cultural. Actualmente, se puede evidenciar como la presente generación se adapta perfectamente a los cambios producidos por el ingenio humano, especialmente en el área tecnológica, debido a que está viviendo en un mundo cada vez más dependiente de los avances tecnológicos, y sí se lleva esto al ámbito educativo, el interés y la curiosidad por parte del estudiante aumenta de forma considerable.
    Una alternativa factible para impulsar la enseñanza de la geografía es a partir de la realización de salidas de campo, donde los estudiantes a través de la observación directa pueden palpar la realidad y deducir así las problemáticas y los elementos que posee el espacio geográfico. Asimismo, se puede incentivar a los educandos que de acuerdo a su experiencia en el área de investigación, planteen los diferentes rasgos analizados mediante composiciones escritas, tomando un perfil reflexivo y crítico. Es necesario construir un sistema educativo activo, donde todos sus representantes tengan una participación igualitaria y se pueda evidenciar un proceso de enseñanza y aprendizaje novedoso, logrando captar la atención de los involucrados, minimizando así las actuales problemáticas en las instituciones educativas.

    Br. Alba Orjuela
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educació

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  78. En las practicas docentes se observa, un ambiente donde los alumnos son bastantes indisciplinados creando molestias incluso para desarrollar una clase, más sin embargo el docente emplea su clase adecuadamente más fácil y entendible, incluso colocando ejemplos del día a día, asimismo, en algunos casos el docente da su clase de manera tradicional, investigaciones del libro haciendo uso de ello para desarrollar una clase. De la misma manera, es una realidad totalmente diferente a lo visto en el aula de clase como futuros docentes, en el aula lo plantean de manera diferente mientras que al salir al campo laboral; se encuentra con infinitos pensamientos y opiniones diferentes.
    Por otra parte es de pensar que ya las clases tradicionales o tediosas donde no permiten la participación de los alumnos y donde no se coloca en práctica las herramientas innovadoras, pues no permite que el alumno no cumpla con la satisfacción de sus conocimientos para un aprendizaje optimo, pues tal vez algunos alumnos coloquen en práctica las herramientas innovadoras, mientras que un porcentaje pequeño no tenga acceso a ellas, más sin embargo el sistema educativo hoy en día permite herramientas como la Canaima, para hacer uso de ella y logrando un aprendizaje visto de una manera más innovador, en cuanto a su enseñanza, aunque de manera social se incorporaría muy bien formando parte de las TIC, haciendo investigaciones vía internet permitiendo un libre conocimiento y un pensamiento crítico.
    Como futuro docentes sentimos que es un reto hoy en día formar ciudadanos, más sin embargo no es algo imposible si se sabe llevar las cosas y tratar a los alumnos de una manera donde allá comunicación, de ambos y de permita las clases de manera interactiva, también afrentan problemas en los centros educativos, lo cual son más latentes en este siglo por eso el decir que es un reto, para el que quiere y ama esta profesión, por otra parte, el docente hoy en día debe ser crítico, innovador investigador, tener una realidad de la sociedad cambiante en el área de la informática o del conocimiento y así guiar al alumno de manera creativa, ahora bien, desde el punto de vista de la geografía se debe plantear de manera más practica clocando en uso ejemplos de nuestros días, siendo más práctica y menos teórica, más innovadora y menos tediosa, más de investigación y así logrando ciudadanos con valores responsables, críticos, creadores, de su propio conocimiento y así tener ciudadanos decisivos para el futuro.

    Br. María Alcira Parada Sánchez
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  79. Particularmente, pienso que realizar las prácticas docentes no es una tarea fácil, pues lo aprendido con la teoría no llega a abarcar lo que es la realidad escolar y en lo que a la práctica se requiere; mis prácticas docentes las he realizado en el Liceo Nacional Pedro María Morantes, ubicado en la Concordia en San Cristóbal – Estado Táchira, Venezuela. Y, aunque al principio sentía nervios, debido a que no sabía si lo iba a hacer bien o no, con el pasar de los días todo fue fluyendo.
    Tuve la oportunidad de estar con dos grados, en una primera oportunidad estuve con estudiantes cursantes de 3er año y la experiencia fue muy enriquecedora, pues a pesar de estar con jóvenes “difíciles” en cuanto a la indisciplina, la experiencia obtenida fue muy agradable ya que con el pasar de los días el ambiente se amenizo y todo fluyo normalmente; por otra parte, en otro momento compartí con estudiantes del 7mo año, con estos chicos se trabajo con más facilidad pues son jóvenes tranquilos y más llevaderos.
    Ahora bien, a pesar de todas las adversidades que se presentan actualmente en el país en cuanto a la educación, estoy completamente segura que la carrera que elegí y que estoy terminando fue la correcta para mí, pues con la experiencia obtenida en las prácticas mi vocación aumento y pienso que eso es lo que quiero hacer durante mi vida. Ya que, como futura docente la satisfacción de saber que depende en gran parte de mi el futuro profesional de muchos jóvenes, me hace sentir que vale la pena seguir estudiando lo que empecé hace ya algunos años e impartir ese conocimiento a las generaciones venideras.
    Finalmente, pienso que los docentes al aplicar actividades innovadoras, los contenidos dados van a darse con más facilidad además de lograr el interés de los estudiantes hacia la clase. Y así mismo, incentivarlos al uso y desarrollo de la investigación para de esta manera ayudarlos a que estén en la capacidad de resolver cualquier problema en cualquier contexto de la vida diaria.
    Br. Nelcy Daniela Martínez Sayago
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  80. La práctica docente es un gran reto a enfrentar por parte de todos los estudiantes de educación que se encuentran finalizando su carrera, debido a que allí pasan de un mundo de teorías a un mundo de prácticas, en el cual se debe aplicar toda la formación obtenida en las aulas de clase y sobre todo pasar de ser un alumno a un docente, adquiriendo a su vez distintas responsabilidades que implica el rol como maestro. De igual forma cabe resaltar que la práctica docente de ciencias sociales se enfrenta con una juventud difícil de satisfacer con respecto a los métodos de enseñanza, puesto que para muchos alumnos esta asignatura resulta aburrida e innecesaria y está entre las responsabilidades del docente cambiar esa forma de pensar y hacer la asignatura dinámica e innovadora, para lograr así en el estudiante un aprendizaje significativo.
    Por otra parte desde el sexto semestre de la carrera geografía e Historia he tenido la oportunidad de poner en práctica los conocimientos que el equipo docente de la Universidad de Los Andes Táchira me inculco, en donde resaltaban la importancia de planificar para todos los estilos de aprendizaje (visual, auditivo y kinestésico) a igual que nos impulsan aplicar diferentes dinámicas de grupo para motivar a los educandos a que se interesen por aprender las ciencias sociales, lo cual no es una tarea fácil para los docentes, asimismo experimente todas las expectativas e interrogante que un estudiante de docencia se puede hacer en el momento que le corresponda ejecutar su rol de maestro en un aula de clase, es decir su práctica profesional, donde en ellas se puede responder a preguntas como: ¿eso era lo esperado? y si ¿eso es lo que quiere como trabajo?.
    Por último se puede decir que la práctica profesional para el estudiante es de fundamental importancia, la cual no se puede evadir por su grado de experiencia y conocimiento que contrae para el futuro profesional, ya que allí enfrentara sus miedos y le ayudara a decidir o a darle la razón si eso era lo que él quería o como también si se equivocó de carrera, ya que estará enfrentando el mundo real de la docencia con una juventud cada vez más difícil de motivar por el aprendizaje de las diferentes asignaturas.

    Br. Stefany Briceño Alfonso
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  81. Las prácticas docentes son un proceso donde confluyen las diversas áreas de aprendizaje tanto de los docentes como de los dicentes, en ellas el ser humano es considerado un ser armónico donde los valores físicos, psíquicos, intelectuales, morales y sociales se equilibran para formar un ser integro, instruido esencialmente para responder a las necesidades que le presente su ámbito; por lo tanto las prácticas educativas tienen en cuenta los diferentes aspectos del proceso de aprendizaje, siguiendo ante ellos los lineamientos del planteamiento programático, el cual concibe que las soluciones o perspectivas deben estar orientadas al ajuste de las necesidades locales, por medio de sugerencias y aportes creativos, encuadrado todo dentro del marco significativo de la actividad humana.
    Del mismo modo se puede decir que, los docente centrados en el quehacer educativo diario, son capaces de focalizar la didáctica de cada nivel educativo, adaptando cada instrumento de trabajo a los diversos proceso experienciales que pueden ser practicados, a fin de abordar el proceso de aprendizaje de una manera sencilla, activa, alegre y dinámica, donde se le permita al educando expresar sus características evolutivas, a través de la formación de un criterio pedagógico independiente, en el cual resaltará los intereses y necesidades suyas y de la sociedad en general. Las practicas docentes están estructuradas dentro de un enfoque sistémico que trata de perfilar un modelo ajustado a particularidades específicas de cada grupo de estudiantes, y que engloban una serie de parámetros como: objetivar lineamientos para el desarrollo del planeamiento programático, consolidar aspectos para emprender el proceso pedagógico y ajustar recursos didácticos para abordar el proceso de enseñanza y aprendizaje.
    Asimismo se afirma que dentro de las prácticas educativas se encuentran incluidos una serie de factores que las influencias y muchas veces determinan el curso de las mismas, uno de estos factores es la institución educativa como escenario eventual y campo de desenvolvimiento laboral. Definir el rol que debe cumplir la institución escolar en cuanto a la formación y perfilamiento del docente, estará identificado en la misión de hacer comprender al docente el desarrollo humano de manera integral vinculado con los procedimientos necesarios el conocimiento y atención de los estudiantes, ya que estos procesos conforman una gama de interacciones ofertadas en diversos entornos natural, social, familiar, educativo y espiritual, que a su vez exploran y afloran una matriz de interacciones de las dimensiones biológicas, intelectual, socioafectiva y hasta del lenguaje tanto como verbal como corporal.
    En conclusión se acota que las practicas van orientadas en diversas direcciones, que influirán directamente en los docentes y por ende en los estudiantes pues una de las misiones de las prácticas educativas es la de contribuir en la organización de la acción educativa, para que sea la más favorable al crecimiento y educación del grupo, asimismo en el cómo orientar a los padres y adultos para que comprendan el sentidos de los actos de sus hijos y procuren adaptarlos de acuerdo a sus necesidades. Todo ello contribuirá a alcanzar conjuntamente los objetivos de la acción educativa y por ende se podrá realizar sagaz y finamente la tarea integradora.

    Br. Alejandra Morales
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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  82. En las practicas docentes, en los centros educativos se logra observar desmotivación en los estudiantes, la gran mayoría no quiere trabajar, se observa un alto nivel del indisciplina, carencia de valores; existe la necesidad de aplicar una docencia innovadora, aunque no parece factible, y esto se debe a que no existen los recursos necesarios para llevar a cabo la mayoría de ideas de innovación de un docente, las instituciones no cuentan con recursos que respondan a las necesidades sociales en nuestros días, ya que estamos en constantes avances tecnológicos, y es en donde nuestros jóvenes demuestran mayor interés.
    En tal sentido, resulta para el docente un poco difícil hoy en día tratar de buscar llamar la atención de sus pupilos a través de recursos innovadores, pero no es imposible, la idea de formar ciudadanos y ciudadanas críticos. Las asignaturas de ciencias sociales siguen siendo de gran importancia hoy en día para la sociedad, resulta necesario que los alumnos aprendan a relacionar lo que aprenden con su propia realidad, con lo que se vive día a día, en nuestras cotidianidades, se trata de llevar la teoría a la práctica y no solo quedarnos en el aula de clases sino de ir más allá, y así los estudiantes pueden adquirir conocimientos más significativos.
    También es importante lograr que los estudiantes trabajen dentro del aula y no se lleven las tareas para sus casas, y como docentes no debemos quedarnos solo con lo que nos aporta el libro, sino diseñar actividades que aunque requieran más trabajo el resultado sea de calidad, para que los estudiantes se motiven y obtengan mayor aprendizaje a través de estrategias didácticas; se trata de hacer del ambiente de clases un lugar más dinámico y ameno.

    Br. Marianyi Duque
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Licenciatura en Educación Geografía e Historia
    Venezuela

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    1. Hola, mi nombre es Paola Aqueveque soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena en Chile. Es relevante conocer que el sistema educativo está viviendo una decadencia no sólo en Chile, sino que en América Latina y el resto del mundo y frente a esta situación se complejiza la labor docente y las perspectivas que tienen los estudiantes de pedagogía. Ante esto, los profesores deben generar instancias de cambio, a pesar del contexto en el que se encuentran, utilizando recursos didácticos que sean atractivos para los estudiantes, tales como aplicaciones móviles, software, foros educativos, entre otros. De esta forma, se puede llevar recursos al aula independiente de que el establecimiento cuente o no con ellos, pues la idea es dejar los métodos tradicionales de enseñanza para captar la atención de los alumnos. Por otro lado, otra herramienta en el caso particular de la disciplina histórica alude a la utilización de la geografía para complementar la enseñanza de esta asignatura, generando que el estudiante localice y trabaje el pensamiento geográfico a medida que se enseña Historia, lo cual diversificaría la enseñanza y generaría un aprendizaje más significativo.

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  83. En la dinámica educativa del mundo actual, se vienen promoviendo una serie de cambios curriculares en el ámbito de la formación docente. La formación inicial docente ha estado asociada a un conjunto de acciones organizadas y estructuradas a las cuales se les denomina prácticas. En tal sentido, la formación docente es un campo explorado y estudiado ampliamente desde diferentes puntos de vista. Así tenemos que los actuales enfoques sobre la enseñanza y el aprendizaje, son medios de formación para incentivar el interés sobre las actividades críticas e investigativas. De este modo, se asume a las practicas docentes como espacios formativos del ser, saber y saber hacer del futuro docente un guía en el proceso de enseñanza y de aprendizaje. Por ello, la pertinencia de emprender acciones orientadas a la mejora de la formación en el ámbito educativo.
    Por otra parte, desde la perspectiva sociocrítica, se privilegia el crecimiento y desarrollo de los docentes; por tal razón, para que se lleve a cabo la práctica docente, es imprescindible la actuación en el escenario educativo de dos sujetos, el maestro y los estudiantes, los cuales forman parte del proceso educativo. De este modo, los docentes son los encargados de articular y llevar a cabo procesos de aprendizaje y generación de conocimientos, a través de la comunicación directa con los estudiantes en formación en las aulas de clase. Pues tras sus prácticas docentes, está el propósito de formar un determinado tipo de ser humano y modelo para la sociedad. Es allí, en ese escenario, en donde el maestro se convierte en una réplica escolarizada de las normas y valores socialmente determinados que controlan y orientan el contexto laboral y aspectos de la vida social.
    Bajo estas consideraciones, podría asegurar que la teoría es la manera de cómo pensamos asumir la educación, el proceso formativo, y la práctica docente en la educación es la forma de aplicarla, de hacerla evidente en el aula como lugar simbólico. En la práctica docente, se han de desarrollar soluciones espontáneas, funciones pedagógicas y un escenario social. En todo caso el interés de estas opiniones apuntan al compromiso del educador, del profesor, del docente, del maestro en la tarea de contribuir a la formación de las nuevas generaciones de ciudadanos y si su práctica es un acto consciente y bien fundamentado.
    En síntesis, la práctica docente como acto eminentemente profesional, es más que una permanente tarea de reconstrucción del rol profesional pedagógico, de cada uno de los que intervenimos en el proceso de formación de las nuevas y futuras generaciones. La práctica docente no es más que aquello que nos conlleve desde el diario accionar en cada salón de clase, a la crítica, al cuestionamiento, a la duda de si lo que estamos haciendo es lo adecuado o lo más idóneo.

    Pahola Nazareth Montañez
    Cursante del 7mo semestre de Educación Mención Geografía e Historia.
    Universidad de los Andes
    Núcleo Universitario Dr. Pedro Rincón Gutiérrez
    Venezuela

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  85. Visto este tema desde la experiencia personal, como estudiante en curso en el área pedagógica e podido ser participe, tanto de la practica de Observación, como la practica de Ayudantía impartida por la carrera de Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, si bien, el transcurso en el cual se llevo a cabo la participación e intervención en las aulas de clases, dista mucho de la verdadera realidad en la que enfrenta el profesor una vez egresado y en pleno ejercicio. Esto nos lleva a preguntarnos, cual es el verdadero enfoque que se les da a las practicas por parte de las carreras docentes, donde el futuro profesor solo debe replicar lo que el tutor debe dictar, o bien, dejar una estampa de participación e innovación en los espacios educativos. Preguntas planteadas en el presente articulo como " ¿Qué sentimos como futuros docentes? ¿Nos animan las dificultades que vemos se afrontan en el día a día educativo de los centros? ¿Cuál sería el rol del docente en el actual contexto? ", resultan fundamentales al momento de revisar cual es el objetivo a alcanzar con el desarrollo de las practicas dentro de las mismas aulas, donde la participación interactiva entre los distintos agentes que son parte del proceso educativo, tengan la capacidad de integrar ideas y desarrollarlas en conjunto con el alumnado, donde los mismo educandos a su vez, logren generar una experiencia mucho mas enriquecedora en los futuros docentes, tal como lo menciona el profesor Araya et Al; "No solo los estudiantes deben ser agentes de investigación,sino que también los profesores deben tenerla como práctica constante [...] Los profesores no deben ser solo reproductores de aprendizajes, sino que generadores de investigaciones que sustenten nuevos conocimientos." Esto plantea, por ejemplo, los cambios que puedan llevarse a cabo en distintas escalas, desde su realidad educativa vista tanto desde el área local, regional continental y mundial, con el objetivo de ir logrando incluso hacer comparaciones entre las diversas realidades que se manifiestan en los curriculum en distintos modelos educativos en el mundo, para alcanzar una mirada holística y a la vez complementaria de los temas o unidad a tratar, siendo elaborada desde los diversos agentes educativos y construido de forma pluralista desde los propios alumnos en conjunto con los profesores guia como en practica, con el fin de abrir espacios a la construcción de unidades o contenidos que aborden tematicas que se relacionen directamente con el desarrollo del estudiantado como del mismo establecimiento, en la participación e irrupción activa en la comunidad en la que se desenvuelven y son parte, con el fin de dar vida al ejercicio de llevar a la practica y compartir el conocimiento adquirido generando nuevos espacios de debate, investigación, trabajo en terreno e interacción interdisciplinaria tanto dentro como fuera del aula.

    Cristián Palma Gómez
    Estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía, Universidad de La Serena, Chile.
    Estudiante

    Bibliografía utilizada:

    - Fabian Araya et Al, ,Formación ciudadana desde la educación geográfica, 2013, Universidad de La Serena, Chile.

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  86. Estimada comunidad de Geoforo:
    Quisiera ir respondiendo una a una las preguntas planteadas, basándome en mi experiencia como docente de un establecimiento con modalidad nocturna durante el primer semestre de 2015.
    Sin haber culminado mis estudios de pedagogía en Historia y Geografía y habiendo incluso postergado mi educación, me atreví a aceptar el desafío de realizar clases en un C.E.I.A (Centro Educacional Integral de Adultos). En él estuve a cargo de 2 cursos, cada uno con modalidad “2x1”, es decir se realizaban dos años académicos en uno.
    Mis alumnos eran mayores de 18 años, algunos casados, otros mucho mayores en edad que yo, varias alumnas asistían a clases con sus hijos recién nacidos, otros simplemente no llegaban en condiciones de aprender. Sin embargo el desafío era grande, debía cumplir y no defraudar la confianza que la directora del establecimiento había depositado en mí.
    ¿Qué vi en el colegio?
    Vi alumnas que sin importar el llanto de sus hijos, permanecían en clases intentando poner atención, a veces preocupadas por la reacción de alguno de sus compañeros, pero siempre firmes con su hijo en una mano y su lápiz en la otra copiando la materia.
    ¿Se parece a lo que esperábamos ver, tras acercarnos al mundo de la educación?
    No, uno sólo conoce la educación desde la mirada del alumno, pero es difícil estar en el lado opuesto. Creo que jamás vemos lo que esperamos porque cada curso es un espíritu diferente, en cada curso hay aproximadamente 30 alumnos con diferentes sueños, diferentes habilidades, actitudes y capacidades que se conjugan también con la época que les toca vivir. Yo esperaba cursos más cercanos a la realidad que yo viví como alumna, pero jamás se repetirá esa fórmula, cada curso es un mundo nuevo.
    ¿Es factible, por lo que hemos apreciado estos meses, aplicar una docencia innovadora, que llegue a todos y responda a las expectativas sociales puestas en el sistema educativo?
    Quizás es factible aplicar una docencia innovadora, pero al menos en el sistema educativo en el que estoy inserta, que debe cumplir con planes y programas enfocados en el rendimiento de pruebas estandarizadas, creo que es difícil.
    ¿Qué sentimos como futuros docentes?
    Ansiedad, por salir luego a vivir esa experiencia de vida que por vocación he elegido.
    ¿Nos animan las dificultades que vemos se afrontan en el día a día educativo de los centros?
    Si, haber visto pobreza y marginalidad combinada con las ganas de salir adelante, me motiva a querer más aún la carrera que elegí.
    ¿Cuál sería el rol del docente en el actual contexto?
    El docente es una persona integral que no solo entrega conocimientos sino que enseña a vivir, a prepararse para la vida, entrega valores, anima cuando es necesario y corrige cuando debe.
    Mi experiencia fue corta pero enriquecedora, me enfrenté a mis propios prejuicios y superé mis propios límites entregando más de lo que creía era capaz de dar.
    Aconsejo a todos a no quedarse en un mismo sistema de enseñanza, a variar, a enseñar a niños, jóvenes y a adultos, a estudiantes libres y a aquellos que están privados de su libertad por situaciones lamentables de la vida, a no abrumarse porque una o dos alumnas están en clases con sus bebés llorando, a hacer su trabajo con vocación esperando sólo el reconocimiento de sus alumnos a lo largo de las generaciones, así como yo veo que mi madre a pesar de los años sigue siendo reconocida y querida por la labor que cumplió por más de 40 años en el aula. Solo eso es la certificación de que la labor docente está bien cumplida.
    Sara Vega Alvarado
    Estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía
    Universidad de La Serena, Chile.

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  87. Buenas a todos, soy Wanda Sánchez, estudiante del máster de secundaria en la universidad de Valencia. Quería aprovechar este Geoforo para compartir mi experiencia en las prácticas, así como mis dudas de cara a la futura docencia.
    Ha sido en el máster cuando he visto por primera vez editoriales innovadoras, ya que durante mis años de estudio siempre he tenido manuales tradicionales, y el único problema que les veo es el tiempo. Me parece que son una forma efectiva de enseñar, ya que hacen que el alumno se posicione, piense, pero para tratar un tema hay que dedicarle muchísimo tiempo y el problema son las pocas horas con las que se cuenta en secundaria para Geografía e Historia.
    En el instituto donde estoy haciendo las prácticas no se usan manuales innovadores y el uso de las TIC tampoco es algo muy frecuente. Pero ello no impide que las clases sean dinámicas: el profesor no hace leer el manual, comienza las clases con preguntas para la activación de conocimientos previos, acompaña su explicación con esquemas para clarificar la información, está toda la clase realizando preguntas a los alumnos, recalcando conceptos importantes, relacionando lo que se está dando con el mundo actual,… Esta experiencia me está ayudando a resolver dudas que tenía, ya que había llegado un momento en que no sabía cómo podía hacer las clases más atractivas con los alumnos trabajando con las editoriales tradicionales, y al fin y al cabo más que del manual, depende del profesor, del interés que ponga en que los alumnos no sólo reciban datos, hechos, sino que reflexionen sobre ellos y se pregunten el por qué de las cosas.
    No es lo mismo la teoría que la práctica cuando estás estudiando el máster, aunque te puedan comentar situaciones con las que te vas a encontrar no es lo mismo que tenerlas delante y estar viviéndolas (alumnos con problemas de aprendizaje, familiares, contratiempos en el aula, etc.), por suerte el centro donde estoy no es para nada conflictivo y se dan los problemas que podía recordar de mi época de secundaria, y esta experiencia no ha hecho más que reforzar la idea de que quiero ser docente. Además, destacando la importancia de la enseñanza no como mera transmisión de conocimientos, sino con la intención de formar personas críticas, capaces de tomar decisiones importantes razonadas.

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  88. MARIA RIBERA ALBERO7 de abril de 2017, 1:17

    Buenas tardes, me llamo María Ribera y soy estudiante del master en formación al profesorado en la universidad de Valencia. Hace una semana que he acabado las prácticas en un instituto en Torrent, de las cuales he salido muy contenta.

    Si digo la verdad mi primera idea en el mundo laboral no era la enseñanza, he estudiado historia del arte también en la UV, y mi primera opción era el mundo de los museos. Por ello, empecé a trabajar en este mundo con una beca que me dieron llamada el Salari Jove, durante los 7 meses de trabajar en los museos me di cuenta que cuando más disfrutaba era cuando venían los colegios y los institutos a visitarlos y les hacía las visitas, por ello decidí hacer el master para saber si era lo que yo quería. Durante los primeros meses del master no lo tenía aún claro, pero ha sido gracias a las prácticas cuando he descubierto mi vocación, así que para mi la experiencia ha sido perfecta.

    En cuanto a la primera pregunta, lo primero que observe durante la realización de las prácticas es que de cuando yo estaba en el instituto a ahora ha cambiado mucho (aunque solo hace 7 años) ya que ni la motivación de los alumnos es la misma, ni la responsabilidad de los mismos a la hora de cumplir con sus obligaciones como alumnos, ni el respeto tanto entre ellos como al profesor era el mismo. Así que eso fue lo primero que observe, otra cosa que observe fue la falta de interes por las asignaturas historia, geografía e historia del arte, ya que no las ven necesarias, de hecho llegue a escuchar un comentario que decía asi: “la historia, ¿para qué? si siempre es lo mismo”. Probablemente esta sea la causa de la falta de motivación de los alumnos por dicha área del conocimiento, que no entienden la necesidad de conocer el mundo que los envuelta. Y esa es la primera cosa que debemos de cambiar como futuros docentes. Además, en el master si que se nos comentó la necesidad de hacerles entender a los alumnos la importancia de dichas asignaturas para su futuro, para fomentar su pensamiento crítico. Por ello pienso que si que sería factible el darle la perspectiva innovadora partiendo de problemas relevantes de la actualidad o de su propio entorno, para fomentar la implicación de los alumnos.

    Por lo que respecta al pensamiento que tengo de mi futuro como docente, creo que es una profesión que necesita mucha dedicación y concentración, al contrario de lo que la gente piensa. Además, los alumnos cada vez están más rebeldes, pero por ello me anima más a ejercer la profesión docente, por intentar cambiarles la forma de mirar la vida, simplemente acercándoles estas asignaturas a sus vidas diarias, ejerciendo de guía del aprendizaje, pero que el conocimiento lo construyan ellos mismos mediante las herramientas obtenidas en las clases, que luego puedan aplicar a su realidad.

    Por último, la pregunta 3 creo que a lo largo de mi humilde opinión se han ido contestando, de la importancia de estas asignaturas para la formación de futuros ciudadanos que van a tener unas responsabilidades, tanto cívicas, económicas, políticas…que en la situación actual deberían tener mayor relevancia por todos los cambios que estamos viviendo, y no es así. El enfoque que daría sería acercarles los problemas humanísticos a sus vidas.

    Para concluir, me parece una muy buena idea el tener un geoforo para compartir nuestras experiencias, ya que con la práctica es como más aprendemos, así es una manera de ver la realidad de otros centros.

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  89. Juan Camilo Pérez Martínez9 de abril de 2017, 11:37

    Buenas tardes,

    Mi nombre es Juan Camilo Pérez Martínez y soy estudiante del Máster de Profesor en Educación Secundaria de la Universidad de Valencia en la especialidad de Geografía e Historia.

    He realizado las prácticas en el IES Massamagrell durante los dos últimos meses obteniendo una grata satisfacción personal.

    Durante estos dos meses que he tenido la posibilidad de observar el día a día del alumnado y del profesorado del centro he comprobado como la motivación por parte de ambos grupos es muy dispar y tiende principalmente hacia la baja. Me he encontrado con muy pocos alumnos con ganas de aprender conocimientos. La mayor parte de ellos se centra única y exlcusivamente en obtener un buen resultado académico que les permita pasar de curso. El resto es secundario. Por su parte los profesores con los cuales pude conversar durante las prácticas presentan una gran variedad de opiniones al respecto de que hay que hacer para aumentar la motivación del alumnado. Opiniones que iban desde el total desprecio y pasotismo a opiniones que reclamaban la participación de alumnos, padres, profesores y sociedad en general para aumentar la motivación del alumnado de cara a la educación. He observado como en niveles bajos de secundaria la educación del alumnado deja mucho que desear. La falta de respeto hacia el profesorado era continua y aplaudida por el grupo. He encontrado más cosas interesantes en mi período de prácticas como puedan ser la cooperación entre algunos profesores o la preocupación de algunos profesores o alumnos por ayudar al alumnado con dificultades.
    Sí que es lo que me esperaba. Hace muy poco que terminé mi etapa en el instituto y me imaginaba que sería más de lo mismo. Señalar que he observado un alumnado más irrespetuoso verbalmente con el profesorado y con un mayor pasotismo que el de mi época. En estos dos meses que he podido estar en el centro creo que la docencia innovadora debe ser un proyecto a largo plazo ya que cambiar la dinámica de un grupo acostumbrado durante años y años a trabajar de una determinada manera es muy complicado. Es fundamental la cooperación entre diferentes profesores para lograrlo.

    Respecto a mi futuro como docente me veo completamente capaz de trabajar con el alumnado para conseguir desarrollar en ellos una visión crítica de la realidad y otorgarles una educación en valores plena para vivir en sociedad con un respeto mutuo. Durante las prácticas tuve la posibilidad de trabajar con el alumnado mano a mano y comprobé como la conexión entre ellos y mi figura era una conexión que hubiese invitado a trabajar en proyectos muy interesantes. Creo que este hecho se relaciona con la idea de que el alumnado me observaba como una persona más cercana a sus realidades y a sus intereses que los profesores que veían a diario. En estos dos meses me interesaba ayudar a que aquellos que aprobaban con su profesor correspondiente aumentasen su conocimiento conmigo pero me apasionaba conducir a aquellos que tenían serias dificultades en su día a día y que veía como eran apartados por el profesorado por el simple hecho de no conseguir aprobar. Creo que el docente debe estar más pendiente del todo que rodea al alumno y no únicamente en la nota que saque en un examen ya que si buscamos y ayudamos al alumnado a estar mejor consigo mismo y con sus compañeros la nota en el examen aumentara.

    La visión del alumnado con el cual he tenido la posibilidad de trabajar estos dos meses tenía una visión muy pesimista en relación con las asignaturas de Geografía, Historia e Historia del Arte. Sin embargo creo que esta visión negativa de las asignaturas estaba en relación con el hecho de que siempre han sido materias que se les ha intentando meter sin ningún tipo de sentido. Creo que habría que hacer clases más entretenidas con el alumnado. Resulta clave en mi opinión invitar al alumnando a que sean ellos quienes construyan su conocimiento a partir de la investigación y la relfexión guiados siempre por el profesor.

    Espero que siga la actividad en este Foro18.

    Un saludo,

    Juan Camilo Pérez Martínez

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  90. Buenas noches, mi nombre es Víctor Navarro y soy estudiante del Máster en Profesor/a de Educación Secundaria por la Universidad de Valencia. Hace una semana que acabe mi período de prácticas.
    Cuando empecé las prácticas, mi primera intención era contestarme a la pregunta de si quería ser profesor, la cual ahora mismo puedo responderme “SÍ” sin lugar a dudas. Este período de me ha abierto los ojos en muchos sentidos. Yo siempre he criticado aquellas formas en que a mi me dieron las clases pero cuando he tenido la oportunidad de dar yo las clases, he caído en el mismo error dándome cuenta que repetía la misma metodología de aprendizaje que practicaron conmigo. Entonces me pregunte, ¿Cómo cambio esto? Y en ese momento entendí la importancia de aprender nuevas metodologías de enseñanza que me hicieran ser capaz de adaptar, cambiar o simplemente usar diferentes metodologías de enseñanza dependiendo de la diversidad de los alumnos para llegar hasta ellos.
    Yo si que pienso que la educación ha cambiado, ya que tuve la oportunidad de hacer las prácticas en el instituto donde estudie la ESO, y vi un cambio muy grande en cuanto a las metodologías de aprendizaje. Estos cambios metodológicos o innovación vi que son posibles siempre y cuando, el equipo directivo y los compañeros de departamento, entiendan la educación como el agente o potenciador del cambio. Es necesario que entiendan todos la educación y el aprendizaje como algo vivo y que varia, donde lo que ha dado buen resultado hoy quizás mañana ya no lo de y en ese momento dependerá el grado de responsabilidad del profesor con sus alumnos, y con su responsabilidad de guiarles hasta ser personas criticas que formen parte de manera activa en la sociedad, de introducir diferentes metodologías o formas distintas con las que formar los conocimientos entre todos.
    A partir de mi experiencia en las prácticas observé como dando de manera útil los conceptos es decir, usándolos en situaciones de la vida cuotidiana del alumno, estos muestran más interés en la asignatura así como también vi como estos son más receptivos a la materia si el profesor es más cercano y fomenta el intercambio de conocimientos entre la clase, dando igual de importancia el conocimiento del alumno que al suyo.
    Un saludo.

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  91. Tras leer detenidamente vuestros comentarios me lanzo a la aventura de contaros mi experiencia, prometo no extenderme demasiado jeje.

    Mi nombre es Ricardo Arastey, actualmente estoy estudiando el Máster de Secundaria en la rama de Geografía e Historia. Anteriormente estudié una Licenciatura de Humanidades y un Grado Superior de Educación Infantil. Antes de nada, contaros un poco mi historia como estudiante porque puede dar un poco pistas de mi forma de abordar la docencia. Nunca fui estudiante brillante, de hecho, era de los que estaba al fondo y me limitaba al aprobado porque consideraba que los institutos son centros de internamiento que se limitan a limitar (valga la redundancia) a la persona, a tener una idea o una solución válida (la del libro) frente a la inmensidad y mundo cambiante en el que vivimos. Así pues, por convicción y por mi pasión de transmitir me embarqué en este máster con el claro objetivo de dar una vuelta de tuerca a todo lo que la docencia y la forma de abordar las ciencias humanas, que poco a poco son menos humanas, escondidas bajo definiciones confusas, fechas, estadísticas y esquemas que poco tienen que ver con la grandeza del ser humano y todo lo que le rodea.

    Respondiendo a las preguntas del compañero del primer mensaje, estuve 2 meses en el IES Fuente de San Luís en Valencia. Desde luego es un instituto situado en una zona periférica y marginal que, a pesar de los intentos de edificar y revalorizar la zona, la crisis del ladrillo de 2008 dejó el barrio bastante tocado y con calles que hasta hace unos escasos meses estaban sin asfaltar. Hay un porcentaje de alumnos de etnia gitana, musulmana (en especial pakistaníes), rumana y africana (destacar la comunidad nigeriana), es un centro con un alto porcentaje de diversidad, pues también hay alumnos de conservatorio musical que vienen de una clase medio-alta. El centro se reformó hace escasos años, cuando en el gobierno regional se derrochaba el dinero, así pues, se trata de un instituto totalmente nuevo (contrastando con lo que le rodea), con cafetería, un gimnasio enorme y una arquitectura moderna que permite disfrutar de la luz solar y los espacios abiertos.

    Yendo al grano, en estos dos meses apenas pude desarrollar mi metodología pues las clases fueron escasas, sólo di un temario, en concreto la Guerra Fría. La realidad que me encontré en el aula fue muy dispar, desde luego la primera reacción de la gente fue de rechazo, pero en el momento que vieron que las clases eran dinámicas, interactivas y en las que se mezclaba la explicación del profesor, la intervención-opinión del alumno y el poder de las imágenes/archivos multimedia (canciones, fragmentos de películas y documentales) el alumno se sumerge en un espacio en el que interactúa con la historia y en el que cuando se quieren dar cuenta ya ha acabado la clase. Respecto a si es factible aplicar este tipo de metodología, pienso que es complicado porque el tiempo de las clases es muy reducido, una clase estándar durante estos meses ha sido:

    - 3 minutos entre que se sientan, sacan el material, tu vas preparando los vídeos, el power y se pasa lista con la aplicación.
    - 3 minutos de repaso de la clase anterior.
    - 10 minutos de explicación.
    - 7 minutos de intervención del alumnado (2 o 3 cuestiones).
    - 8 minutos de multimedia para introducir el siguiente bloque o cerrar el anterior.
    - 10 minutos de explicación.
    - 9 minutos de intervención del alumnado o dinámica grupal relacionada con el temario.

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  92. 50 minutos en total, de los cuáles sólo son 23 de explicación, 8 que dedicas a un material multimedia y sólo 16 que realmente el alumnado pueda interactuar. Desde luego es muy poco tiempo y hace que el profesor tenga que gestionar muy bien su tiempo para poder dar protagonismo a sus alumnos y al temario. Pienso que más de un 50% hablando es demasiado para un profesor. Creo que una clase de 90 minutos, permitiría presentar un mejor material multimedia a los alumnos, las explicaciones serían menos del 50% del tiempo, aumentando el tiempo de las dinámicas y debates, que tendrían un mayor protagonismo y mayor repercusión en la evaluación. A parte del tiempo veo que el alumnado está muy desmotivado a participar, un miedo escénico a expresar su opinión o a expresar sus conocimientos acerca de una materia, no creo que sea algo casual. Básicamente porque el alumnado desde su infancia se le ha ido coaccionando poco a poco y creo que esto es algo que el profesor debe cambiar a cualquier precio, como docentes nos interesa incentivar que los alumnos sean despiertos y con un propio criterio acerca de las cosas, con ganas de participar activamente en el conocimiento, pues serán los futuros ciudadanos de nuestra sociedad, aunque si lo que queremos son muebles del Ikea con nombres impronunciables y sin personalidad, creo que vamos hacia el camino correcto limitando su opinión y su libertad de pensamiento/expresión.

    El sentimiento general es de satisfacción, porque al principio he de reconocer que tenía cierta inseguridad (¿estoy listo? ¿se burlarán de mí? ¿si les meto este fragmento será algo que les interesará o les aburrirá?) pero con el paso de los minutos y con sus miradas poco a poco me di cuenta que estaban disfrutando de la experiencia de conocer la historia. Claro que a todo el mundo no le puede gustar la historia (¡faltaría más!) pero es algo natural, al igual que cuando entramos en una discoteca es imposible gustarle a todo el mundo, el ser rechazado es algo con lo que hay que aprender a convivir. Aquí pasa lo mismo, poco a poco si las clases son buenas (dinámicas, interactivas y visuales) y el alumnado “rebelde” se da cuenta del ambiente general de la clase (participativo, ameno) se integrará porque será la fuerza grupal la que lo integrará sin darse cuenta en la rueda. Respecto al rol del profesor, lo veo como un guía, que ni es un sargento militar, ni un chabacano dictador bananero, ni tampoco un personaje edulcorado sacado de Disney. Es un guía que aporta datos y te intenta encauzar hacia un lugar (el conocimiento) que considera favorable para ti, en manos del viajero (alumno) está el seguir o no su sendero, pero en todo caso debe ser una referencia y un motor de nuevos conocimientos/inquietudes.

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  93. Cerrando con el punto 3, las Ciencias Sociales tienen un destino bastante negro, básicamente porque están totalmente desprestigiadas. No hacemos robots, no somos algo que haga millonario a nadie, no salimos en la tele, ni tampoco tenemos un reconocimiento social favorable al no ser un elemento de alta productividad de nuestra sociedad capitalista, más bien somos “unos getas con 2 meses de vacaciones y sueldo para toda la vida”. En nuestras manos está darle un enfoque que haga crear ciudadanos que el día de mañana recuerden nuestras asignaturas como algo divertido, interesante y que le permitía conocer mejor el mundo que le rodea. Desde luego, en el contexto en el que estamos, si hay alguna esperanza puesta hacia los poderes políticos neoliberales creo que estaremos cavando nuestra tumba, hay que revalorizar y poner en valor que las Ciencias Humanas no están enfocadas hacia la potenciación de la memoria y la repetición, sino hacia algo más complejo e interesante como son las altas capacidades cognitivas, la capacidad de relacionar, reflexionar, exponer y dominar el lenguaje para elaborar un discurso propio que nos permita entender mejor el mundo pasado, presente y futuro que nos espera. Algo que sea tan valioso que sea hasta inmoral debatir borrarlo de los currículums de los sistemas escolares.

    Lo siento, porque no quería mentir y os he mentido. A pesar de deciros que sería breve, me he extendido más de la cuenta, pero uno no puede evitarlo cuando le apasiona sobre lo que escribe… jajajaja

    Un saludo y seguid comentando ;)

    (3/3)

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  94. FRAN AGUADO. 1
    Hola soy Fran Aguado, estudiante del Máster de Secundaria en la rama de Geografía e Historia, en la Universidad de Valencia.
    Aquí os dejo mis impresiones y comentarios al respecto sobre el foro formulado, espero que nos sirvan de ayuda. Pasaré a comentar las cuestiones planteadas directamente una tras otra sin escribir la pregunta en cuestión.

    Empezamos....

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  95. FRAN AGUADO. 2

    PREGUNTA 1

    Sinceramente sí que es lo que me esperaba ver, vengo de familia de maestros y aunque los profesores van más a su “rollo” que los maestros, no es tan diferente a lo que en casa me habían transmitido. En el master se tiende a la idealización de la profesión, es una profesión gratificante pero verdaderamente dura de desempeñarla si quieres hacerlo bien.
    No he visto muchas diferencias a mi etapa estudiantil, me identificaba a la perfección con los alumnos y me veía reflejado en ellos, sentado en el aula pasando del profesor, sin interés ninguno y deseando que sonara el timbre para salir al patio o irme a casa. Hay un desinterés general abrumador, a excepción de dos o tres alumnos por clase que pelean por la nota e incluso lloran porque un 8 les baja la media. Aunque si es cierto que el verano se me hacía muy largo y estaba deseando volver a clase. Fuera por lo que fuese hay que intentar captar esa ilusión y esas ganas de vuelta a clase como enganche para la educación.
    Considero que hay que hacer algo para que esto cambie, que los alumnos vayan a gusto al instituto seria enorgullecedor para los docentes, habría mucho mejor clima (aunque el que me he encontrado no es malo), se podrían trabajar más cosas y de forma diferente. He podido observar como alumnos entraban al aula cantando, fomentado claro está, por el buen clima del aula que transmitía mi tutora y espero q yo aportara mi granito de arena a esa ilusión y energía.
    La innovación depende de los docentes y no todos están por la labor.
    En el centro que he estado de prácticas, hay un elevado nombre de personal definitivo que considera este centro su lugar definitivo y con ello, el grado de implicación con el proyecto educativo del centro que manifiesta es importante. Así mismo, también encontramos a un sector del profesorado sobrecargado, desmotivado e indiferente hacia los proyectos de innovación y de formación que se plantean en los claustros, (resistencias al cambio).
    Del mismo modo hay un grupo, reducido, pero muy activo del profesorado, que intentan movilizar una renovación pedagógica y procedimental, desde dentro. De este grupo nacen ideas que están en marcha como el aprendizaje cooperativo y el enriquecimiento curricular, la mediación y ayuda entre iguales, el trabajo por proyectos y otros…
    Como en otros centros, las rutinas cuestan mucho de cambiar y normalmente los problemas diarios superan las expectativas y difuminan las acciones de renovación pedagógica a medio y largo plazo. El actual equipo directivo, intenta liderar los movimientos del cambio, pero hay que reconocer que sus máximas preocupaciones son el correcto funcionamiento diario del centro, dedicándole mucho tiempo al control de ciertas actitudes “violentas” y “complicadas” de un grupo muy reducido y localizado de alumnado con riesgo de exclusión social y que encaja difícilmente en el actual sistema educativo.
    En mi centro no había primaria, he podido comprobar que el clima del centro en general es correcto, pero predomina un sector importante individualista. También hay mucha disparidad de intereses entre el profesorado de ciclos y los de ESO y Bachillerato.
    Estoy muy de acuerdo con mi compañero Ricardo en cuanto a la duración de las clases, pienso que sería mucho más provechosa una clase de 90 minutos o incluso más, para poder enfatizar con la problemática tratada, presentar de forma adecuada las fuentes y tener un mínimo imprescindible de tiempo para trabajarlo.

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  96. FRAN AGUADO 3

    PREGUNTA 2

    Soy una persona muy segura de mi misma y en ningún momento se me paso por la cabeza el miedo al fracaso, al rechazo a la incertidumbre, a la ignorancia, me he hecho al centro, a los docentes, a la tutora y sobre todo y lo que considero más importante a los alumnos, supongo que por el hecho de no ser yo el principal responsable y aunque en menor medida subordinado a la tutora. Sé que lo que hago lo hago bien y estoy casi seguro que les va a gustar, prueba de ello han sido todas las clases que he podido dar, desde los inicios de la cultura griega y romana hasta hacer cómica e intrigante la muerte de Hitler, con sus respectivos aplausos al acabar la clase, congratulaciones de la tutora e instancias de los alumnos a que siga yo dándoles las siguientes clases, y he de reconocer que eso me gusta y mucho. Ver que cala el mensaje y como decía anteriormente, que gracias a poner todo de mi parte voy a sacarles una sonrisa y van a querer venir el próximo día. Me gusta la idea de que el alumno hable más que el profesor, nos cuente sus inquietudes, sus pensamientos tanto si son de la materia como sí lo son propios. Todo es importante, no hay que ceñirse a unos contenidos gigantescos enormemente alejados y desvirtuados de las personas y lo que les rodea de más cerca.
    Tenemos la misión, transmitida y metida en nuestros cerebros desde que abrimos la puerta del master de hacer ciudadanos críticos, cosa que estoy totalmente de acuerdo, pero mi pregunta es ¿cómo?. Está claro que, a través de contrastar infinitud de fuentes, pero la verdad, me resulta difícil cambiar la idea tradicional de clase. ¿Queremos hacerlo así? ¿Creemos importante esta concepción? ¿Verdaderamente estamos preparados para la ansiada innovación? ¿conocemos que es la innovación o “nos suena a chino”?
    Tuve la inmensa suerte de acceder a un grupo llamado TALLER, aula compartida donde predomina el alumnado de etnia gitana, desmotivados, inquieto, sin poder prestar atención más de 5 minutos y “picándole el culo”, no pudiendo estar sentado en la silla, levantándose constantemente a no saber ni que. Alumnado con conductas disruptivas en el aula al cual se le han aplicado diferentes medidas educativas y disciplinarias en el centro sin ningún éxito; alumnos con desfasamiento educativo con riesgo de exclusión social y conductas violentas; con tendencia al abandono prematuro y absentismo escolar; con escasas expectativas respeto sus estudios y baja motivación y, sobre todo alumnado perteneciente a minorías étnicas desfavorecidas sin soporte ni control suficiente y con un contexto socio familiar desestructurado.
    En esta aula pude ver la enorme calidad humana que desprendían estos alumnos, simplemente por mostrar un mínimo interés hacia ellos, pero lo que me resultó más agradable fue ver que se podía trabajar con ellos. No tienen casi ningún conocimiento, de hecho, algunos no sabían leer ni escribir, pero por medio de un “juego” conseguí que se aprendieran los continentes y me resultó muy gratificante y por lo que vi en sus rostros a ellos también. Lo que quiero decir con esto, es que no hay que tirar la toalla, hay que seguir poniendo todo de nuestra parte, para llegar a todas partes.


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  97. FRAN AGUADO. 4

    PREGUNTA 3

    Pienso que se está perdiendo muchísimo el papel de las ciencias sociales y en especial la rama que estamos estudiando en el máster. Empezando porque ni Historia, ni Geografía, ni Historia del Arte son asignaturas reconocidas por las PAU, siendo estas asignaturas no obligatorias. En las aulas, pues bueno, los profesores ponen poco entusiasmo en transmitir su amor por las asignaturas, simplemente se limitan a seguir el modelo de las PAU, en bachiller, sabiendo que además probablemente sus alumnos no hagan el examen de estas asignaturas en las pruebas de selectividad. Además, se le augura un futuro bastante más negro…Necesitamos que científicos, políticos y altas autoridades pongan en valor estas ciencias y les den el reconocimiento que verdaderamente merecen.
    Nosotros los futuros docentes junto con los antiguos o más recientes debemos formar una argamasa que cimente la nueva educación.
    Activar los conocimientos de estos alumnos para hacerles ciudadanos críticos, que recuerden las ciencias sociales como interesantes para conocer el mundo, ubicarse y saber desempeñarse en él. Ciudadanos que conozcan mejor el mundo que les rodea.
    Las ciencias sociales son complejas capacidades cognitivas, capaces de relacionar, reflexionar, exponer y dominar el lenguaje para elaborar un discurso propio que nos permita entender mejor el mundo pasado, presente y futuro que nos espera. “Algo que sea tan valioso que sea hasta inmoral debatir borrarlo de los currículums de los sistemas escolares”.
    Activar la conciencia crítica de nuestro alumnado, es la más importante de las ideas que aquí podemos exponer; algo vital para su libertad Individual en la actual sociedad de información y consumo. “Una cosa es adoctrinar, y otra que nuestra función se limite a acostumbrar a nuestros estudiantes a las jerarquías y a las frías "cifras de valor" evaluadoras”

    FRAN AGUADO
    ESTUDIANTE MÁSTER PROFESOR DE SECUNDARIA EN GEOGRAFIA, HISTORIA, HISTORIA DEL ARTE

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  98. Hola, mi nombre es Vicent y debido a que recientemente he terminado mi período de prácticas, he podido comprobar el trabajo que algunos de los profesores y profesoras realizan a diario en los centros. Me gustaría, aunque sea un poquitín extenso, aportar un poco más al foro. Y es que aunque todavía exista una parte relegada del personal docente con ganas de ser perennes en el tiempo y de seguir realizando lo que se conoce como clase magistral que obliga al alumnado a memorizar los contenidos para después verterlos el día del examen y ya no trabajarlos más, hay otra parte de la que he podido ser testimonio directo y practicante, que utiliza todos los recursos que el tiempo y la sabiduría le ofrecen para tratar de acercarse al alumnado en un intercambio de "tú a tú". Ese intercambio tiene como base la continuidad en el trabajo que se realiza día a día, tanto por parte del profesorado como por parte del alumnado y este trabajo continuo se consigue gracias al acercamiento máximo a nuestros alumnos y alumnas, ya que cuando se les plantea el tema desde la visión a partir de la cual van a mostrar interés, su mente trabaja en torno al mundo que el/la docente le está queriendo transmitir y es entonces cuando empiezan a florecer los beneficios que aporta el relacionar el tema que se esté explicando con su entorno más cercano.
    Otro aspecto que considero fundamental para la educación del presente y del futuro es la preocupación. Cuando hablo de la palabra preocupación no me refiero a que nosotros, los docentes o futuros docentes, estemos “malamente preocupados” por el alumnado. Me refiero a que sepamos establecer una relación de amistad con ellos y ellas, ya que por mi experiencia como profesor en prácticas y como muchos otros trabajos o voluntariados que he realizado con niños y adolescentes se observa continuamente que las incertidumbres, los problemas que empiezan a tener, los cambios personales que conlleva la etapa de la adolescencia, los miedos e incluso la confianza o desconfianza les van a condicionar su capacidad crítica ante los retos sociales; por lo tanto, les condicionarán también el estudio, la indagación y la participación activa en los procesos educativos tanto los de dentro como los de fuera del aula. Cuando he comentado que deberíamos relacionar trazos de amistad con el alumnado, lo he dicho serenamente y apoyado en numerosos amigos, amigas y familiares, dedicados al mundo de la docencia recientemente, que han visto como en poco tiempo, ha mejorado de una manera fascinante el rendimiento académico y personal de un alumno o alumna con problemas de aprendizaje que derivan de otros problemas muy serios de autoestima, abusos, adicciones o enfermedades y que no han sido escuchados en sus hogares pero si por algunos de sus profesores o profesoras.
    Pienso sinceramente que un/una profesional de excelencia de la docencia debe reunir las dos fortalezas que he comentado y que se basan en la inmediación del temario y en el trato con el alumnado. Algunos /as creerán que es imposible acercarse a 100 alumnos/as o más a los que les puedas impartir la asignatura en tu centro, pero es más fácil de lo que creemos. Simplemente basta con realizar de vez en cuando una clase integral en la que florecen todo tipo de problemas, preguntas e inquietudes, y dejar la clase o el temario para otro día. Si algún alumno o alumna lo considera oportuno, ya buscará al profesor para hablar personalmente y más a fondo.

    VICENT SORIANO REYES,
    ALUMNO DEL MÁSTER DE FORMACIÓN DEL PROFESORADO DE SECUNDARIA EN GEOGRAFÍA, HISTORIA E HISTORIA DEL ARTE

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  99. Aprovechando mi cercana experiencia con las prácticas docentes y muy breve, me gustaría añadir mi opinión sobre el futuro de las ciencias sociales ya que considero una disciplina muy importante y muy relacionada con otras, así como con la historia y evolución que nos permiten saber porque somos como somos, lo que hemos sido y hacia dónde vamos. Pienso sinceramente que el toque personal que le de cada profesional de la docencia es el que permitirá la creación o no de una ciudadanía crítica y cívica, arraigada en unos valores que oscilan entre el pasado, el presente y el futuro.

    Pienso por tanto que la Geografía, la Historia y la Historia del Arte son fundamentales para la construcción de auténticas “generaciones actuantes”, y para ello hace falta un personal docente de calidad cosa que hay desde hace tiempo y continuará habiendo, mejorándose todavía más con la implantación del máster en formación del profesorado de secundaria.

    “Quién vale, vale y quién ama lo que hace, hace lo que quiere”.

    VICENT SORIANO REYES,
    ALUMNO DEL MÁSTER DE FORMACIÓN DEL PROFESORADO DE SECUNDARIA EN GEOGRAFÍA, HISTORIA E HISTORIA DEL ARTE

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  100. Bom dia,

    Meu nome é Tayná e gostaria de deixar minha opinião sobre o artigo publicado por Santiago Herrero Gea.

    Primeiramente, eu acredito que a teoria vista durante as aulas na faculdade e a prática como docentes se diferenciam e muito no âmbito escolar, desde os conteúdos, a docência (independente de qual matéria será aplicada), o comportamento dos alunos e o ambiente da qual a escola está cercada, e dentre vários outros fatores que desencadeiam uma expectativa diferente da qual esperávamos ter como resultado. Eu adquiri essa percepção após começar a trabalhar como assistente de professora em uma escola privada da minha cidade e juntamente com o estágio que concluímos a cada semestre pela faculdade. Nem sempre o que pensamos ou que planejamos para ser dado em sala de aula sai exatamente como queríamos, ou como está em livros e estudos de docência, e muita das vezes requer que você trabalhe além disso.

    Segundo, que atualmente na educação brasileira vivemos uma questão muito triste em relação ao ensino de História, Geografia e Ciências nas escolas publicas e também nas privadas, que é a priorização das matérias de Língua-Portuguesa e Matemática no ciclo do Ensino Fundamental, não que eu discorde que tais matérias devam ser priorizadas, mas, que ocorra de uma maneira que não inferiorize o ensino de História, Geografia e Ciência, matérias que são úteis e importantes tais como Língua Portuguesa e Matemática. E voltando a questão da prática e teoria visando esse ponto levantado, é de que na faculdade nesse primeiro semestre de 2017, tenho aulas sobre Metodologia do Ensino de Geografia e Historia e Ciências, onde são levantados pontos dos quais e dos motivos que devemos aplicar essas matérias nas escolas e a importância de tais conteúdos para a formação do aluno, contudo a prática que vemos sendo posta nas escolas não condiz em nada com a teoria que vemos e temos o desejo de aplicar em sala de aula, devido a grade horária dos alunos que priorizam os estudos de Língua Portuguesa e Matemática.

    Concluo, que o trabalho e os desafios que temos que superar dentro e fora da sala de aula como docente são muitos, mas, que não devemos desistir e lutar por aquilo que acreditamos ser o melhor para formação de nossos alunos, do nosso futuro.

    Tayná de Souza Aragon, aluna da FACULDADE DE FILOSOFIA. CIÊNCIAS E LETRAS DE RIBEIRÃO PRETO/ UNIVERSIDADE DE SÃO PAULO, BRASIL.

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  101. Olá, meu nome é Jéssica e eu sou estudante do 5º semestre de Pedagogia.
    A respeito do FORUM 18: As práticas de ensino: visões e experiências para inovar, acredito que as maiores dificuldades no ensino que um professor encontra começa no início de sua docência, quando ele acaba de concluir a faculdade e é colocado dentro de uma sala de aula. Daí surgem várias perguntas como “O que fazer?”, “Como ensinar?”, “Como trabalhar determinado tema com os alunos?”. Essas dúvidas só poderão ser esclarecidas conforme o professor for conhecendo seus alunos e adquirindo experiências, e tudo isso se faz na prática. O professor precisa estar munido de estratégias e alternativas, pois na sala de aula encontramos alunos de diferentes personalidades e contexto histórico-familiar, e muitas vezes não podemos prever seus comportamentos e reações diante das atividades e discussões propostas na aula.
    Minhas experiências em sala de aula foram com alunos do ensino fundamental I e aconteceram em forma de estágios supervisionados, onde realizei uma intervenção didática. Ainda não tenho experiência com o ensino de História e Geografia, mas acredito que a vontade de ensinar e fazer uma boa docência, junto com o planejamento, seja o primeiro passo. Digo isso pois foi assim que realizei a intervenção, e o resultado, embora que não tenha acontecido exatamente como o previsto, foi muito satisfatório.
    O que não pode acontecer, é o professor cair no erro de se prender ao livro didático, que o limita e massifica seus alunos. O professor que se deixa dominar pelo livro, empobrece sua aula e perde a autenticidade de sua profissão. O livro didático não conhece os alunos e não leva em consideração a diversidade da sala de aula, quem tem que se atentar a isso é o professor, por isso ele deve sempre inovar seu ensino e se preocupar com seus alunos em um todo e individualmente também. A profissão docente é muito desafiadora e contemporânea, por isso o professor deve se desenvolver junto com seus alunos, atendendo suas demandas, inovando suas práticas e usando suas melhores estratégias para realizar um bom trabalho com seus alunos.

    Jéssica Jabor Dias, aluna da Faculdade de Filosofia Ciências e Letras de Ribeirão Preto / UNIVERSIDADE DE SÃO PAULO, BRASIL.

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  102. Estudante do 5º semestre de Pedagogia da Faculdade de Filosofia, Ciências e Letras de Ribeirão Preto, Universidade de São Paulo, penso que mesmo uma pessoa que está "de fora" percebe que a situação da qual encontra-se a educação é de verdadeira lástima, e além disso, particularmente, acredito que o curso do qual faço parte, coloca a atividade docente como algo ainda muito romantizado, apesar de dia após dia estar em período de desconstrução da imagem desta profissão ser um "mar de rosas", afinal, sabemos que não é. Quando ressalto esta problemática não tenho como objetivo criticar o curso em si, os docentes e/ou o material que nos é passado, mas sim todo um meio no qual somos inseridos com o objetivo de aprendermos como posicionarmos diante de uma sala, incluindo, de certa forma, os citados.
    Houve algumas situações, particularmente de desconforto, da qual docentes nos apresentavam uma imagem de prática profissional, infelizmente, diferente da qual nos é imposta na prática, por outro lado, temos docentes que nos abrem os olhos, evitando assim um forte impacto quando nos deparamos com a prática.
    Devemos compreender que o indivíduo é um ser único, nunca podendo ser generalizado, a partir disto já sabemos que aquilo que é absorvido por alguns, por outros já não é. Tudo e todos são diferentes, principalmente dependendo de onde encontram-se. Partindo à algo material, podemos usar de exemplo a escola, que mesmo sendo "escola" é diferente em cada local, os indivíduos alunos/professores/demais funcionários, são outros, a condição financeira também, dentre tantas coisas. Digamos também que outros fatores externos afetam, como a qualidade no transporte, alimentação, materiais escolares, entre outros.
    Infelizmente, encontro-me em uma posição de constante busca de respostas para a desvalorização que é nítida dentro deste âmbito, pensando até em alguns momentos trancar esse curso e procurar novos meios de socialização ao redor disto, podendo assim contribuir de outra maneira, pois em breve não restará a esperança de uma educação melhor e justa para todos.
    Apesar de escrever voltado ao que observo no Ensino Infantil e Fundamental I (levando em consideração estar cursando Pedagogia) acredito que o mesmo se engloba em diferentes níveis como o Fundamental II, Médio e Superior, pois de qualquer maneira, em todos os casos, nos deparamos com tais acontecimentos.
    Apesar do dito anteriormente, ainda persisto em concluir o curso para tornar-me uma futura pedagoga e contribuir para a diferença na educação e continuar com a luta pelos direitos que nos são podados, além disso tenho a pretensão de cursar outras Licenciaturas, tais como a de Matemática, não desistindo assim tão fácil de fazer da Escola, um lugar igualitário e de fácil acesso.
    Mariana Costa Invernizzi, discente da FACULDADE DE FILOSOFIA, CIÊNCIAS E LETRAS DE RIBEIRÃO PRETO / UNIVERSIDADE DE SÃO PAULO, BRASIL.

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  103. Buenos días, soy Arhoa Rodrigo Muñoz, estudiante del Máster de Profesor de Educación Secundaria en la Universidad de Valencia.

    En principio quería decir que mi experiencia se parece mucho a la que comentan Santiago Herrero y Wanda Sánchez, en cuanto a cuestionarme las mismas preguntas que el primero, y la dinámica de las clases de ambos.

    Realicé mis prácticas en el IES La Morería, en Mislata, una ciudad dormitorio del área metropolitana de Valencia, que tiene una gran densidad de población formada, en gran cantidad, por extranjeros, especialmente armenios y pakistaníes.

    Lo primero que me llamó la atención en este centro fue, a diferencia de lo que ocurría cuando yo iba al colegio y al instituto, que los inmigrantes estaban muy bien integrados con el resto de compañeros y que, excepto en algún caso puntual, nadie se metía con ellos respecto a esta condición. Creo que esto es un importante avance para nuestra sociedad que ya se viene notando en los centros educativos y que espero que se extienda rápida y ampliamente en las calles.

    Lo segundo que me llamó la atención (tenía clases en 1º de la ESO y en 2º de Bachillerato), fue que sólo tenía motivación por los estudios un escaso porcentaje de alumnos. En el Bachillerato no suspendían muchos, pero no paraban de decir que tenían que estudiar mucho y que las materias eran difíciles. Incluso una alumna, al final de mis prácticas (finales de marzo), cuando ya le quedaban pocos meses para finalizar estos estudios, los abandonó por falta de motivación y por pensar que no era capaz, pese a las insistencias de mi tutor y mías de que no tirase la toalla.

    Pero lo peor fue ver a los alumnos de 1º de la ESO. Cuando entrábamos en esta clase, empezaba la batalla. Los alumnos no paraban de molestarse entre ellos, hablando, levantándose, mirando por la ventana; hacían de todo excepto atender a las explicaciones del profesor. Esto hacía que tuviésemos que disputarnos muchas veces entre dar clase y pedir silencio y orden, con lo cual era muy complicado avanzar. Como los compañeros que he citado anteriormente, mis clases (y las de mi tutor) consistían en que nosotros explicábamos lo que decía el libro de una manera un poco más atractiva. Yo impartí el tema llamado “De Iberia a Hispania”, que cuenta lo que ocurrió en la Península Ibérica hasta la “invasión” musulmana. Por ello, comencé preguntándoles lo que creían que íbamos a dar en ese tema, a partir de su título. Luego, hice un eje cronológico con los pueblos y sucesos que ocurrieron desde el siglo VI a. C. hasta el siglo VIII d. C. Cada vez que añadía algo, les hacía preguntas sobre cómo podía ser eso posible y, así, veíamos las diferentes páginas del tema en las que podíamos encontrar estas preguntas generalmente expresadas en los mapas. Con esto, pretendía que los alumnos tuviesen una visión general sobre la Historia de ese momento, que les ayudase a entender todo lo que iban a estudiar y a poderlo ubicar en el tiempo y en el espacio; lo consultaríamos siempre que viésemos un pueblo nuevo. Las clases siguientes comenzaban con un repaso de lo visto el día anterior, para ubicarnos dentro del tema, y la corrección de las actividades propuestas. Después venía la explicación del nuevo temario, que lo hacía mediante preguntas a la vez que iba explicando y haciéndoles ver los mapas y recursos disponibles, los cuales les permitían elaborar su propia explicación a través de las preguntas que yo les formulaba.

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  104. Con esto, creo que, si por imposición tenemos que utilizar un manual tradicional, tenemos opciones de no hacer clases magistrales, sino de hacerlas un poco más innovadoras, hacer que los alumnos participen, relacionar la historia con hechos actuales o incluso con cosas cotidianas que ellos viven.

    De hecho, en mi opinión y por lo experimentado en las clases, creo que es más fácil innovar con libros tradicionales que con los manuales innovadores, aunque todo depende del contexto en el que nos movamos. Me explico. En mis prácticas, de unos 25 alumnos en cada clase de 1º de la ESO, en una clase sólo cinco realizaban las tareas y en la otra como máximo 10 alumnos, el día que más habían trabajado. Creo que, si a estas dos clases les damos materiales innovadores en los que sean ellos los que tengan que trabajar para extraer a partir de las fuentes la explicación de la Historia, serían sólo cinco o diez los que se enterarían. De la otra manera, los alumnos que no trabajan, teniendo un manual tradicional pueden leerlo y enterarse más o menos de algo. Es decir, el material innovador requiere gran cantidad de trabajo para el alumno, que creo que no están dispuestos a realizar (los alumnos con los que yo me he encontrado). Mientras que, realizando clases amenas, participativas y conectadas con la realidad, pese a tenerlo todo escrito en el libro de texto, se puede llegar a la gente trabajadora y también a aquellos a los que no les importa la asignatura, porque se sienten parte de ella y se involucran.

    Por último, quería comentar una última cosa, aunque igual excede del asunto de ese foro. Esta cuestión es que pienso que en el Máster para el Profesorado hemos aprendido muchas cosas sobre la innovación y la investigación docente. Creo que esto es muy útil, sobre todo al relacionarlo con las prácticas, como ya he dicho antes. Pero creo que nos falta también aprender cosas sobre el componente humano. Hay que recordar que estamos trabajando con adolescentes, otros seres humanos que son muy moldeables y, por ello, creo esencial que sepamos cómo tratarlos.

    Por ejemplo, en mi instituto teníamos varios alumnos diagnosticados de TEA (Trastorno del Espectro Autista). Yo no conocía nada sobre ellos, sobre cómo los podía tratar (a muchos les molesta que les toques, no entienden el doble sentido de la frase y lo toman como literal, etc.) ni qué podía esperar de ellos hasta que fui a hablar con las profesoras del Aula CyL, que me orientaron sobre sus características (aunque cada uno es muy diferente del resto de TEA) y sus necesidades educativas. También teníamos otros muchos con TDA-H (Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad). Y también había una alumna que siempre quería ser el centro de atención y se ponía agresiva, se enfadaba si no le dejabas que corrigiese ella el ejercicio el día que lo traía hecho... A mí me interesa mucho la atención a la diversidad, de la que también se habla mucho en nuestras clases, pero realmente no tenemos suficiente información para saber cómo tratar estos y otros muchos casos de personas “diferentes”, con sus propias singularidades. Por ello, me gustaría que, en el máster, además de aprender mucho sobre didáctica de nuestras materias, también se nos enseñase a tratar con las diferentes modalidades de humanos que podemos tener como alumnos.

    Aun así, tengo muchas ganas de seguir con la docencia y ayudar a muchos otros niños a ser mejores personas. Para ello, nos viene muy bien foros como los de este tipo.

    Saludos,
    Arhoa Rodrigo Muñoz.

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  105. Buenos días,
    soy Miquel Fuertes, alumno del máster de profesor en educación secundaria en Valencia.
    Durante mi experiencia en las prácticas he podido comprobar la existencia de dos modelos contrapuestos de docente. El primero se plantea las clases como una tarea monótona y repetitiva que se desarrolla de forma ajena a los alumnos, incluso ignorándolos, y su única finalidad es avanzar y cumplir con el temario. El segundo modelo de profesor se preocupa mucho más por los alumnos y el proceso de aprendizaje, lo cual hace la tarea del docente mucho más compleja y laboriosa, pero a la vez más gratificante. Este modelo implica preparar muy bien las clases y preparar en profundidad las actividades para que estas impliquen al alumno en el proceso de aprendizaje.
    De manera que a partir de la reflexión durante las práctica y la preparación de algunas clases he podido advertir que la tarea docente si se quiere hacer de forma inclusiva y dinámica requiere un gran esfuerzo por parte del profesor. Ya que en las clases que he diseñado he tardado mucho más en prepararlas y confeccionar los materiales que en trabajarlas en clase. Un hecho que no hace más que destacar como de difícil es la tarea docente y el gran esfuerzo que exige si se quiere hacer de manera dinámica y diferente.
    Así mismo, me gustaría destacar que el profesor no solo tiene que conocer la materia a impartir, sino que tiene que tener una serie de conocimientos sobre como trabajarlos desde distintas perspectivas, lo cual exige un esfuerzo de reflexión, lectura y preparación de las clases, unos sacrificios que no todos los docentes están dispuestos a hacer.

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  106. Hola a todas y todos. Soy Rubén Bella, alumno del Máster de Profesor de Educación Secundaria en la Universidad de Valencia, especialidad de Geografía e Historia. Querría compartir con todos ustedes mi experiencia en las prácticas del máster, remarcando en primer lugar la buena consideración sobre ellas que he adquirido. En mi opinión, las prácticas son el período del máster más aprovechable y rico en cuanto a adquirir conocimientos y habilidades sobre la profesión docente, y creo sinceramente que deberían alargarse más allá de los dos meses de duración que presentan actualmente, dándonos la oportunidad de inmiscuirnos todavía más en la labor docente de forma directa con los alumnos.
    El momento en el que te enfrentas a una clase por primera vez te cambia la perspectiva más de lo que me podría haber imaginado: no es solamente un cambio de espacio en el aula, donde pasas de la posición de alumno a la de profesor, sino también un gran cambio personal que hace que te plantees la responsabilidad que tienes sobre las nociones y costumbres que estás compartiendo y exportando a otros sujetos humanos. Muchos han sido los problemas con los que me he encontrado: medir el tiempo de las clases, la preparación de parte del temario para impartir en niveles altos como en bachillerato, cuidar del orden de la clase y del ritmo de cada uno de los alumnos, la adaptación especial que merecen todos y cada uno de ellos... Una posible solución, a la que no estamos nada acostumbrados pero la cual, en mi opinión, ayudaría mucho al ritmo del curso, sería no limitar cada aula a un único profesor. Mi tutor en el centro donde las he realizado no había estado todavía en este programa de prácticas, y él mismo reconoce las facilidades que le ha ofrecido la presencia de alguien más con él en el aula; del mismo modo, cuando llegó el momento de encargarme de las clases, él ha hecho posible que en ciertos momentos no tuviera que prestar atención a todo el alumnado, con las dificultades que eso comporta -y más a un alumno en prácticas sin experiencia previa-, ya que él ayudaba a los alumnos con más dificultades, y yo podía centrarme en atender al resto.

    (sigo)

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    1. Considero que he tenido muchas suerte en la elección del centro donde he realizado las prácticas, por muchas razones. En primer lugar, es un centro con mucha diversidad entre su alumnado, sobretodo étnica y cultural, por lo cual he podido observar y poner en práctica estrategias con tal de trabajar -y aprovechar- esta diversidad. Además, he podido tomar parte muy activa en las clases, impartiendo muchas más sesiones de las que nos orienta el máster, por lo cual valoro muy positivamente el aprovechamiento de este período del curso. He tenido ocasión no solo de impartir clases sueltas, aisladas, sino temas enteros que he podido programar y organizar durante un seguido de sesiones de la manera que valoraba más convenientemente, gracias también a la libertad que me ha dejado mi tutor de prácticas. Esa libertad de trabajo me ha ofrecido la posibilidad de darme cuenta de muchos errores y corregir hábitos antes de que fuera demasiado tarde. He intentado innovar todo lo posible, dentro de mis limitaciones como alumno todavía en prácticas y sin experiencia dentro del aula. En el grupo de 1º de bachillerato al que he impartido clases intentaba que la participación de los alumnos fuera lo más notable posible, y que tuvieran presente que todos podemos aprender de los comentarios y aportaciones de los demás, incluso el propio docente. Así, por ejemplo, al final del tema que impartí sobre la Revolución Rusa propuse a dos alumnos de origen rumano una actividad voluntaria a la cual accedieron encantados: preguntaron a sus familiares por el pasado soviético de su país de origen, como vivieron la etapa comunista y los cambios que experimentaron con la caída de este sistema y la entrada del capitalismo. Así, estos dos alumnos pudieron preparar unas breves exposiciones muy bien pensadas y organizadas, con información provista directamente de sus propios familiares, y les sirvió para acercarlos de forma muy sumaria al trabajo del historiador. El resto de alumnos se mostraron muy participativos con el debate o puesta en común de ideas que tuvo lugar después de la exposición de sus dos compañeros. Este es uno de los ejemplos de los cambios que he intentado introducir durante mi período de prácticas, con tal de huir en cierto modo del libro de texto y de las rutinas que van aparejadas al hecho de utilizarlo como única herramienta sobre la cual se estructuran las clases.
      En conclusión, de las prácticas extraigo que, para un docente, es muy importante el control de la materia y la preparación de las clases, tanto en contenido como en programación. Pero observo otros aspectos más importantes todavía: la forma de transmitir adecuadamente esos conocimientos y como motivar a los alumnos para que les resulte menos costoso adquirirlos. Para eso será esencial adaptarte a las necesidades y carencias de cada alumno, y para que estos objetivos puedan cumplirse, en todo momento tendremos que mantener el control del aula. Para este aspecto he observado que necesitamos ser expeditivos desde un primer momento, sobretodo con aquellos alumnos más problemáticos, pero al mismo tiempo el interés por ellos y sus problemas, tanto académicos como personales, ayuda a que tomen confianza contigo y, en última instancia, un respeto que te ayude a controlarlos cada vez mejor.

      Saludos cordiales,
      Rubén Bella Català.

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  107. La experiencia del prácticum ha sido enormemente constructiva y enormemente positiva. Por una parte, es cuando he podido apreciar los diferentes aspectos teóricos vistos a lo largo de los meses en el máster de educación secundaria, en los cuales siempre me quedaba la sensación de que nos faltaba ver como dichos aspectos se plasmaban dentro de las prácticas reales. Por ello mismo, considero que el periodo de prácticas es demasiado breve, en primer lugar, porque es donde realmente, por lo menos en mi caso, se puede llegar a tomar la decisión final de ser profesor o no serlo. En segundo lugar, porque es en este periodo cuando de verdad aprendes las situaciones reales diarias de un centro y también como solucionarlas, aunque es innegable la necesidad de una base teórica a la hora de aprender a ser docente, también creo en la necesidad de un periodo de prácticas más largo para profundizar ese aprendizaje antes de encontrarse directamente en un centro habiendo tenido únicamente dos meses, en los cuales, se encuentra de por medio fallas, en el caso de Valencia, de experiencia en las aulas. Por último, también que justo cuando el alumno se encuentra plenamente integrado en la dinámica del centro es cuando el periodo de prácticas llega a su fin.
    Por otra parte, he podido comprobar de primera mano el tiempo y esfuerzo extra que se requiere para ser profesor. Se repite como un axioma la frase de que los profesores tienen mucho tiempo libre, sin embargo, con esta experiencia he aprendido, de verdad, aunque ya tuviera conocimiento, el esfuerzo temporal que exige el hecho de ser profesor, ya no solo con la preparación de las clases, que de por sí solas requieren una gran cantidad de tiempo, si no, además, la corrección de exámenes, las reuniones con los padres, el hecho de estar formándose constantemente, factor fundamental para ser profesor, etc. en definitiva una gran cantidad de cosas que no se tienen en cuenta a la hora de valorar el trabajo del profesorado.
    Además, pese a que en el máster hablamos de la necesidad de innovación y las experiencias innovadoras que hay, he visto lo difícil que es romper ciertas tradiciones instauradas en la enseñanza, ya no solo con los profesores que puedan llevar años de experiencia realizando un tipo tradicional de enseñanza, si no con los nuevos profesores, quienes si en la práctica no aprenden estas técnicas innovadoras es difícil aplicarlas desde un primer momento, ya no solo por romper el ritmo que el profesor titular ha establecido si no porque es difícil romper las tradiciones que tienen los alumnos, acostumbrados a un tipo de enseñanza desde pequeños. En definitiva, he aprendido en este aspecto que el profesor debe ser una persona flexible, debe saber adaptarse al tipo de aula que tiene, en unas ocasiones podrá o, de hecho, deberá utilizar una serie de técnicas consideradas más innovadoras, mientras que en otro tipo de aula, el profesor deberá o podrá recurrir a metodologías más tradicionales, también siempre teniendo en cuenta en el campo donde el profesor se encuentre con más comodidad, ya que al final, entiendo que va a ser mejor para el aprendizaje del alumno.

    Saludos Cordiales,

    Aleix Carsí.

    Máster de educación secundaria, Universitat de València

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    1. Hola, mi nombre es Alain Monárdez Barrios estudiante de cuarto año en la carrera Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile. Comento esta reflexión al estar en completa concordancia con el comentario realizado por Aleix Carsí en el hecho de considerar los periodos de práctica como uno de los momentos determinantes en la experiencia universitaria (tanto en pregrado como postgrado) de los estudiantes de pedagogía, como futuros profesores es necesario conocer el ambiente real de los centros educativos, aun más especifico, el ambiente de un aula, sitio donde pondremos en acción todos los conocimientos adquiridos durante nuestros años de estudiantes, si bien hay carreras y universidades que ofrecen buenos sistemas de practicas en escasas ocasiones destinan el tiempo suficiente para empaparse de las culturas escolares y desprenderse de la experiencia propia que tenemos como estudiantes.

      En el caso de Chile, las realidades de los colegios privados y municipales son muy distintas entre si, necesitando y exigiendo cada uno diferentes habilidades y competencias por parte de los profesores (quizás podría resumirse aquello en el termino "adaptación") pero, ¿cómo nosotros podemos estar preparados para ingresar a estos contextos sin conocerlos?, ¿cómo preparar material para una clase si no sabemos realmente lo que significa realizar una y no ser el receptor de la misma?, la respuesta a estas interrogantes desde mi punto de vista son las practicas, la inserción temprana en escuelas, colegios y liceos, junto al apoyo constante de los profesores universitarios en dichos procesos.

      Se exige que los profesores sean profesionales flexibles a la hora de ejercer, que estén preparados para todo tipo de desafíos y problemáticas, que obtengan resultados óptimos y respondan de manera positiva a la presión incluso cuando se está recién egresado y repleto de dudas. Sin embargo, como en toda actividad es necesario el "entrenamiento", es decir, prepararse en terreno para un posterior buen desempeño en la actividad, en la profesión. Entre más familiarizado estemos como futuros profesores con nuestro medio, cuanto más nos actualicemos y mejor nos preparemos, mejores herramientas le vamos a entregar a nuestros alumnos.

      Saludos cordiales.

      Alain Monárdez Barrios
      Universidad de La Serena

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  108. Javier Pla Catalán13 de mayo de 2017, 4:13

    Buenos dias a todos y a todas. Soy Javier Pla Catalán, alumno del Màster en Professor d'Educació Secundària en la Universitat de Valéncia y me gustaría compartir con ustedes mi experiencia de prácticas.

    Des de mi punto de vista, este periodo de prácticas ha sido una experiencia enriquecedora como estudiante, como futuro profesor y sobretodo como persona. Me ha permitido observar como se organiza un instituto público, los diferentes proyectos que se pueden realizar y su filosofía por lo que respeta a la relación con los alumnos: su tratamiento a la diversidad, los diferentes problemas sociales, etc.

    Además, he tenido la oportunidad de aprender a través de una verdadera profesional lo que implica hacerse cargo de un grupo de estudiantes, así como de las otras responsabilidades que pueden surgir como profesor/a de instituto. Me ha ofrecido una visión clara de cuales son las posibilidades a las que puedo aspirar en mi camino hacia la docencia. Por otra parte, me ha permitido no solo poner en práctica el bagaje teórico que he recibido durante las clases del máster sino también crear y utilizar mis propios recursos.

    Pero a pesar de todo esto, el aspecto más satisfactorio de este prácticum ha sido para mi el hecho de poder convivir con alumnos y alumnas que me han mostrado la mejor parte de la enseñanza: el orgullo de ver como dedican sus esfuerzos a realizar las tareas que les propongo, sentir su motivación respecto a mi trabajo, pero sobretodo, aprender y crecer junto a ellos a lo largo del camino. Para mi, intentar entender estos adolescentes y compartir momentos de simpatía con ellos ha sido la mejor experiencia de estos dos meses.

    Saludos cordiales.

    Javier Pla

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    1. Hola, me llamo Janina Craviolatti, estudiante de la carrera de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena.
      En relación al comentario de Javier Pla, considero que como el muy bien refleja en su comentario, las prácticas pedagógicas son las instancias más enriquecedoras de la formación docente puesto que es una oportunidad única para aproximarse, aunque sea un poco, a la realidad de los estudiantes de nuestro país, y sobre todo para cuestionarse a sí mismo como estudiante y futuro profesor sobre cual es la mejor manera de enseñanza, que estilos de evaluaciones y métodos de enseñanza debiesen aplicarse. y fundamentalmente cómo realizar una transposición didáctica de los contenidos que se aprenden en la universidad a la educación escolar. Y es en este punto en que los futuros docente deben lograr innovar en el proceso de aprendizaje-enseñanza con los estudiantes, es decir, en las nuevas formas en que los profesores puedan plantear un contenido que sea atractivo para los estudiantes, y sobre todo que favorezca el desarrollo de un aprendizaje significativo. De esta manera, sera posible la motivación, y el deseo de aprender.
      Saludos Cordiales.

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  109. Virginia Marzal Morente15 de mayo de 2017, 11:36

    Buenas tardes a todos/as. Soy Virginia Marzal Morente, alumna del Master en Profesor/a de Educación Secundaria en la Universitat de València.
    En primer lugar, me gustaría resaltar que, para mí, las prácticas han sido la mejor experiencia del Máster en Profesor/a de Educación Secundaria, ya que, en mi opinión, la profesión docente se aprende en la práctica -siempre contando con una base teórica-. Aprendes cuando debes adecuar tu discurso al ámbito escolar, cuando te enfrentas a una clase llena de gente con diferentes actitudes e intereses, cuando creas materiales y piensas si lo seleccionado es lo más acorde para aquello que quieres trabajar, si todos lo van a entender o buscas aquello que puede ocasionar más problemas para intentar solucionarlo de diferentes maneras.
    Por otro lado, mi estancia en el centro de prácticas me ha permitido conocer a otros estudiantes del máster de diferentes especialidades, compartir experiencias y opiniones, no solo con ellos, sino con otros docentes en activo, lo cual ha sido muy enriquecedor. Dentro de esto no podemos olvidarnos de la relación con los alumnos, a muchos de los cuales acabas teniendo en alta estima, resaltando así una de las facetas más bonitas de la docencia, las relaciones personales que estableces.
    Si bien es cierto que durante las prácticas lo aprendido en el máster me ha servido de referencia teórica y lo he tenido presente, la verdad es que ciertos aspectos de los trabajados en él no me han resultado útiles -incluso me han creado cierta presión a no estar a la altura-, dado que en mi opinión o bien no se ajustaban a la realidad o bien no eran aplicables en un periodo de tiempo tan reducido como el que tienen las prácticas, en el que además te tienes que ajustar al sistema de trabajo de otra persona.
    Es por esto que las prácticas son tan necesarias en un máster de estas características puesto que es realmente allí donde aprendes como funciona un centro, a relacionarte con otros docentes que pueden compartir o no tu misma visión pedagógica, a conectar con los intereses de los alumnos, etc. Es constatable, cuando entras en el aula, que muchos de los alumnos no sienten que lo que se les enseña tenga sentido o utilidad para sus vidas, muchos se sienten encerrados, como en una cárcel y agobiados por toda una carga de trabajo que les impide disfrutar de sus vidas. Es por esto que creo que la educación debería ser por y para los alumnos, los alumnos con los que trabajas realmente cada día y no unos alumnos estándar a los que se les debe enseñar un temario cerrado y establecido. Además, el problema no reside solo en los alumnos, sino que los propios profesores también se ven influidos por toda la problemática existente en torno al sistema educativo. Muchos se encuentran desmotivados, no ven sus esfuerzos valorados ni por los alumnos ni socialmente, por lo que entran en una espiral de desánimo o incluso frustración que acaban por extender a sus alumnos, fomentando así un mal ambiente en los centros. Con esto, no podemos pasar por alto que se deben cambiar las cosas y nosotros, como futuros docentes, deberíamos ser parte activa de ese cambio.
    En definitiva, el estar en un centro en calidad de alumna de prácticas, me ha permitido observar muchas de las dinámicas del mismo sin estar directamente implicada, percatándome así de los principales problemas existentes. Es por esto que consideramos que las prácticas son tan necesarias y deberían tener una mayor duración, ya que mejoraría enormemente la formación de los futuros docentes y, por ende, el del sistema educativo. Por ello, su brevedad es uno de los aspectos que considero podrían ser mejorables, ya que cuando más implicado estás en la dinámica del centro, con los alumnos y el resto de docentes y personal, es cuando se acaba el período de prácticas. Así mismo, me parece interesante que en el momento de la elección de los centros se supiese el programa que ofrece cada uno, que cursos imparte el tutor y otros datos que pueden ser de utilidad para llevar a cabo una selección consciente.
    Un saludo.

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  110. Buenas, soy Aarón Sánchez Matamoros alumno del Máster en formación del profesorado de Educación secundaria. Respecto a mi experiencia personal, me gustaría empezar por destacar que ha sido la mejor experiencia del Máster de Ed. Secundaria ya que es donde más aprendes, porque creo que es a partir de la experiencia donde nosotros vamos moldeándonos como docentes debido a que nos vamos también adaptando a las circunstancias, a las nuevas experiencias que antes no nos habíamos enfrentado y que por mucho que teoricemos, no sabemos cierto como reaccionaremos a estas experiencias hasta que las vivimos. Respecto a aplicar una metodología innovadora lo veo bastante complicado ya que nosotros vamos a un centro de prácticas a medio curso bajo la supervisión de un tutor que tendrá su metodología y nosotros tendremos que adaptarnos a él. En estos dos meses de prácticas intentamos enriquecernos lo máximo posible, aunque cuando vemos que estamos empezando a notarnos bien y entrando en la dinámica se acaba las practicas, ya que al principio está muy bien observar las dinámicas del grupo , ver y aprender todo lo que podamos de cada docente.
    Aunque es necesario conocer las diferentes metodologías y tener una base teórica des de la cual partir, son las practicas donde empezamos a entender que es un docente, ya que no es solo dar clases, sino empezamos a entender el funcionamiento del centro a relacionarnos con otros docentes y con los alumnos. Es aquí cuando tienes que intentar conectar con los alumnos, ya que ellos van a aprender de ti y muchas cosas de las que hagamos como docentes les marcaran en futuro, por eso tenemos que mostrar interés en ellos para que muestren interés en nosotros. Por eso creo que debería haber un cambio respecto a la manera de dar clases, ya que lo mayoritario es abrir el libro hacer la misma explicación para todos y después calificar con un examen igual para todos. ¿Y dónde está aquí la atención a la diversidad?.¿Donde está nuestra preocupación para que los alumnos aprendan? Esto es simplemente un prueba donde queremos que los alumnos metan la máxima posible información en sus cabezas y después la escupen en el examen. Esto no es un buen método y creo que en el máster no han enseñado diferentes metodologías, pero que después dependerá de nosotros y de muchas circunstancias de cómo lo aplicaremos.
    Para concluir quería volver a destacar lo satisfactorio que me resulto el periodo de prácticas, el poder aprender de los docentes, su diferente manera de trabajar, ni mejor ni peor, todo depende de las circunstancias, poder observar las dinámicas de clase ,etc… Realmente pienso que debería tener más carga las practicas que las clases teóricas, porque ser docente es como cualquier profesión, como enfermero por ejemplo, hay que saber los fundamentos teóricos, pero realmente se aprende en la práctica, en las aulas, luchando por esos alumnos para que aprendan.
    Un saludo. Gracias por vuestra atención.

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  111. Hola, mi nombre es Emilio Sales, y soy estudiante del Máster de Profesor de Educación Secundaria en la Universidad de Valencia.
    Aunque contaba con mi experiencia como alumno y conocía diversas anécdotas que de la vida escolar me refería mi padre como docente, los dos meses de prácticas en un instituto de Torrent me han permitido descubrir que la docencia puede depararte cada día muchas sorpresas: unas mejores y otras peores. Con esto último sentido no solo me refiero a la desmotivación o el pobre rendimiento del alumnado, sino también a diversos aspectos vinculados con el trabajo de los docentes o la gestión del centro.
    Quizá la cuestión que más me sorprendió fue la dificultad de trabajar con alumnos de etnia gitana, así como la actitud un poco discriminatoria que reciben. Por un lado, la implicación de este grupo en el proceso de aprendizaje es muy pobre: cuando se consigue involucrarlos en el desarrollo de las clases, se limitan a copiar fragmentos del libro de texto en su libreta y apenas se detienen a reflexionar sobre las actividades que se les pide que hagan y prefieren sonsacarles la respuesta al docente, posiblemente porque su nivel académico les impide encontrar por ellos mismos una solución a las cuestiones formuladas. Por otro lado, he percibido en el centro cierto rechazo hacia las personas de esta etnia, a las que se suele responsabilizar de los actos de vandalismo. En el mismo sentido, una profesora nos confesó que a su grupo se le asignado durante el curso un aula peor dotada, tratándose de un grupo de alumnos que necesitan de un mayor grado de recursos y una mayor atención.
    Con respecto a la aplicación de prácticas innovadoras, desgraciadamente no he visto cómo pueden desarrollarse actividades de tipo inclusivo más acordes con los intereses del alumnado o planteamientos de tareas grupales, por lo que no soy capaz de valorar su efectividad en el aula. Solo basándome en el hecho de que entre el profesorado existe la misma diversidad que entre los alumnos, me imagino que es posible hallarnos con docentes que ni modifican ni se preocupan por cambiar la metodología tradicional, pero también con otros profesores que, influidos por la actitud del alumnado y teniendo en cuenta su pobre rendimiento, se sienten impulsados a plantear otro tipo de actividades más innovadoras que nunca se sabe si acabarán recompensando el esfuerzo realizado. Personalmente considero que el cambio de hábitos es una forma de combatir la desmotivación del alumnado y, además de la posibilidad de obtener mejores resultados, una forma para no caer fácil y rápidamente en la monotonía diaria que convierte al profesor en una figura predecible.
    Frente a nuestra tendencia general a centrarnos en los aspectos negativos, merecen ser destacados algunos aspectos positivos de la experiencia del practicum. En este sentido, me ha resultado ejemplar el ímpetu de mi tutora, interesada en elaborar sus propios materiales didácticos como alternativa al seguimiento del manual fijado por su departamento, y como opción para suplir las posibles carencias del libro escolar con el manejo de diversas fuentes complementarias. También considero digna de mención su actitud con el alumnado, pues en lugar de recurrir al grito y a la amonestación reiterada, optaba por una postura más comprensiva, tratando de captar la atención general de formas distintas, sobre todo a través del diálogo, de conversaciones que no solo estaban centradas en los contenidos sino que pretendían dar entrada a las experiencias cotidianas del alumno. La suya ha sido una actitud paciente y de cercanía con sus alumnos, y en ella reconozco una fórmula interesante de luchar contra la desmotivación.
    Continuo más abajo…(x)

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    1. (x) Continuación…

      A partir del ejemplo comentado, me parece que las dificultades que comporta la práctica docente en la actualidad solo pueden ser superadas haciendo uso de mucha dedicación, de una enorme paciencia y mucha empatía para contactar con el alumnado y también con los otros docentes. Estas exigencias son necesarias para salir airosos ante el reto en que se ha convertido esta profesión. Hoy en día el papel del docente no puede limitarse a ser un simple transmisor de contenidos e informaciones que el alumno puede fácilmente localizar en la red. Hay que ser conscientes de que la sociedad moderna espera del profesor que se convierta en educador y muchas veces que sustituya en esta tarea a los propios padres. Sobre él recaen nuevas obligaciones continuamente, y en ocasiones se siente incapaz de encarar problemas en los que no puede mediar (problemas económicos, drogas, debilitamiento de los vínculos familiares, etc.) o ante los que se siente indefenso (falta de apoyo de la administración, diferencias de criterio en el centro, etc.). En esta situación debería aprender a valorar los pequeños éxitos que depara el oficio, interesarse por reciclarse continuamente y buscar estrategia para que los alumnos adquieran las herramientas necesarias para participar en la construcción del aprendizaje.


      Desde luego, el esfuerzo que se impone puede ser titánico. En especial como docente de asignaturas de ciencias sociales en las que es posible que el alumno vea los contenidos como algo ajeno a su experiencia diaria. Si además, por ejemplo, pensamos que en materias como la enseñanza de la Historia nos enfrentamos con otros inconvenientes que escapan a nuestro control, el reto se hace más complejo. En una sociedad donde los medios de comunicación de masas obedecen a intereses políticos y económicos, y muchas veces tienden a hacer una reinterpretación de los sucesos del pasado, no solo es conveniente sino necesario despertar en los alumnos una conciencia crítica para que no se limiten a memorizar la información recibida y sean capaces de relacionar determinadas circunstancias históricas con procesos políticos, sociales y económicos que se repiten constantemente. Tal vez, cuando la sociedad actual se deja influir tanto por las opiniones de los políticos, la tarea de fomentar una conciencia crítica resulte muy difícil. No obstante, se trata de un compromiso al que no deberíamos renunciar para conseguir que determinados valores queden arrinconados en una sociedad que, pese a su evolución tecnológica, suele repetir conductas más propias de otros siglos.

      Saludos cordiales.

      Emilio Sales
      Alumno del Máster de Profesor de Educación Secundaria, Universidad de Valencia.

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  113. Hola a todos. Mi nombre es Angels Roig, soy alumna del Máster de Educación Secundaria de la Universidad de Valencia y me gustaría compartir mi experiencia en las prácticas.
    Tras la experiencia del prácticum de este año 2017, debo decir que muy pocos profesores en el Instituto donde he estado utilizan métodos de innovación, la mayoría lleva a cabo una enseñanza tradicional basada en el libro de texto. Pero esto no quiere decir que los profesores no tengan una actitud buena hacia el alumnado, es decir, comprensión, empatía etc., que des de mi punto de vista es un factor fundamental en la enseñanza. Creo que en este período de prácticas, no sólo aprendemos los alumnos si no también los profesores, porque en mi caso, pude compartir experiencias, métodos, actividades…que había aprendido en el Máster y hacer ver al profesor otra manera de enseñar donde se lleve a cabo el aprendizaje significativo.
    Otro factor importante que me gustaría comentar son las dificultades que nos podemos encontrar como futuros docentes. En mi experiencia he podido tratar con varios alumnos problemáticos o conflictivos que no tenían ganas ni interés por aprender. Mayoritariamente estos alumnos eran de los primeros cursos de la ESO y mientras veía como algunos profesores ponían soluciones como mandarlos al aula de convivencia, alzar la voz…yo intentaba acercarme a ellos y hablarles, comprender ese comportamiento e intentar razonar.
    Por último, el papel que tienen las asignaturas de Ciencias Sociales en la actualidad, y teniendo en cuenta lo que he vivido en el prácticum, podría decir que pierden importancia en el contexto actual porque no se enseña a los alumnos aspectos verdaderamente importantes de nuestra sociedad, no analizan diferentes tipos de fuentes hasta que llegan a bachiller, no trabajan con mapas, tablas, datos actuales…ya que la mayoría de profesores, tal y como he dicho, se ciñen al libro de texto.
    Para concluir, pienso que es necesaria la continua formación del profesorado para mejorar la enseñanza y es especialmente valiosa esta etapa de prácticas, tanto para los alumnos y futuros docentes para entrar en contacto en los centros de enseñanza secundaria como para los profesores, ya que entran en contacto con alumnos que reciben en el máster una formación y pueden aplicarla en las aulas.

    Saludos cordiales,
    Angels Roig. Máster en Educación Secundaria, Universidad de Valencia.

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    1. Hola, mi nombre es Paola Aqueveque soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena en Chile. Quisiera complementar el comentario de Angels Roig, puesto que me parece interesante el análisis que realiza, con respecto a la poca innovación y el uso constante de un método tradicional de enseñanza. En relación a ello, propongo que como practicantes en el ámbito de la educación, utilicemos los espacios que se nos entregan para generar cambios en los establecimientos educacionales, potenciando el uso de recursos didácticos para la enseñanza de diversas disciplinas, pero específicamente en el ámbito geográfico. Para ello, es necesario que llevemos nuevas ideas y propuestas a los docentes que actualmente se encuentran ejerciendo para que éstos cuenten con más recursos, lo importante es que nosotros como practicantes orientemos a los profesores en la utilización estas herramientas. De este modo, se busca que el profesorado, en la actualidad, se transforme en un facilitadores de enseñanza y contenidos, para convertir al estudiante en el centro del aprendizaje cumpliendo un rol activo en su proceso de enseñanza-aprendizaje.

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    2. Buenos días.Mi nombre es Álvaro Castillo, estudiante de pedagogía en Historia y Geografía en la universidad de La Serena, Chile. Considero muy relevante el comentario de mi compañera, pero me gustaría comentar que nosotros como estudiantes en práctica no debemos ser sujetos pasivos en el proceso de enseñanza, sino que debemos utilizar los contextos de práctica profesional para llevar a cabo espacios de dialogo que nos permita a nosotros como estudiantes expresar nuestros conocimientos y habilidades en función de que el docente en ejercicio pueda aprender también de nosotros. Debemos dar cuenta de nuestro valor, pues fuimos instruidos en contextos diferentes y poseemos conocimientos diferentes que no fueron enseñados en los contextos donde se formaron los profesores guías.

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    4. Saludos a todos los participantes. Mi nombre es Christopher Flores Cortés, estudiante de pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, ubicada en la región de Coquimbo, Chile. Al igual que en tú prácticum del presente año, yo experimenté aspectos similares a los que tu comentaste, por mi lado, el año 2016 realicé mi práctica de ayudantía en un colegio municipal de la comuna de Coquimbo, en la Región de Coquimbo, colegio en el cual estudié desde kínder hasta 4° Medio. Durante mi proceso de práctica, 3 años posterior a mi egreso de tal institución, observé como un gran número de docentes mantenían los mismos métodos de enseñanza que se me aplicaban hace ya 5 años, métodos que en cuyo tiempo ya se encontraban obsoletos. No obstante, mi profesor guía evidenciaba un intento por renovarse en su disciplina. Ante esta situación negativa del colegio, intenté aplicar ciertas herramientas y recursos didácticos que aprendí o que desarrollé por cuenta propia durante el periodo universitario con el objetivo de generar un mayor interés en los alumnos, objetivo que se llevó a cabo de forma exitosa. A partir de esta experiencia que viví durante mi práctica y de lo que comentaste tú, podemos comprender que somos parte de una experiencia generalizada a la que se enfrentan los alumnos en práctica en los distintos colegios en los que se integran, sumado a esto, los métodos y estrategias de los docentes que se desempeñan actualmente en los diferentes colegios, deben renovarse para que los alumnos sientan una atracción mayor por la disciplina, en esto, nuestro papel es esencial, puesto que somos los profesores en formación que poseen un mayor acercamiento a los recursos didácticos de carácter tecnológico, por lo tanto, nosotros podemos ayudar a renovar las estrategias de los docentes para que logran un mejor proceso de enseñanza-aprendizaje. Como último punto, se deben desarrollar políticas educativas de carácter nacional, que permitan a los profesores entrar en un proceso de actualización tanto en la disciplina, como en los métodos, estrategias y herramientas, sin que estos sientan la presión de una desvaloración de sus experiencias.
      Saludos cordiales, Christopher Flores. Estudiante pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía, Universidad de La Serena.

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  114. Hola, mi nombre es María Paula Botero, estudiante de licenciatura en artes de la Universidad de los andes, actualmente me encuentro cursando mis practicas formativas en el colegio Montessori Ekiraya, en la ciudad de Bogotá, Colombia. Considero que soy una persona muy afortunada al tener la posibilidad de asistir a un colegios de tan alta calidad, que tiene como prioridad formar ciudadanos íntegros, individuos autónomos, solidarios y conscientes. Creo que me hace creer que es posible… que la pedagogía no esta del todo subestimada, que existen esos pedagogos que luchan sobre las injusticias y problemáticas sociales que pueda vivir un país para despertar en las nuevas generaciones un sentimiento intrínseco de motivación, un hambre de aprender y más allá de eso una conciencia social, de esta forma, muy de la mano a la reflexión que invita esta publicación desde mi perspectiva el rol actual del docente debe ir más allá de la impartición de conocimiento (hablando de una perspectiva contextual). Como formadores de seres humanos debemos procurar brindarles diversas herramientas para superar las diferentes eventualidades de la vida, sin embargo, como constructores de paz tenemos un gran compromiso moral frente la importancia de la interiorización de los valores humanos, todo esto enfocado en un progreso social. De esta forma me entusiasma compartir que bajo las circunstancias actuales y retos que presenta la educación hoy en día no veo un imposible, veo un reto y compromiso social que me ha cautivado cada día un poco más desde que tome la decisión de ser licenciada. Gracias por la oportunidad de reflexión.

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  115. Hola, mi nombre es María Paula Botero, estudiante de licenciatura en artes de la Universidad de los andes, actualmente me encuentro cursando mis practicas formativas en el colegio Montessori Ekiraya, en la ciudad de Bogotá, Colombia. Considero que soy una persona muy afortunada al tener la posibilidad de asistir a un colegios de tan alta calidad, que tiene como prioridad formar ciudadanos íntegros, individuos autónomos, solidarios y conscientes. Creo que me hace creer que es posible… que la pedagogía no esta del todo subestimada, que existen esos pedagogos que luchan sobre las injusticias y problemáticas sociales que pueda vivir un país para despertar en las nuevas generaciones un sentimiento intrínseco de motivación, un hambre de aprender y más allá de eso una conciencia social, de esta forma, muy de la mano a la reflexión que invita esta publicación desde mi perspectiva el rol actual del docente debe ir más allá de la impartición de conocimiento (hablando de una perspectiva contextual). Como formadores de seres humanos debemos procurar brindarles diversas herramientas para superar las diferentes eventualidades de la vida, sin embargo, como constructores de paz tenemos un gran compromiso moral frente la importancia de la interiorización de los valores humanos, todo esto enfocado en un progreso social. De esta forma me entusiasma compartir que bajo las circunstancias actuales y retos que presenta la educación hoy en día no veo un imposible, veo un reto y compromiso social que me ha cautivado cada día un poco más desde que tome la decisión de ser licenciada. Gracias por la oportunidad de reflexión.

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  116. Gracias por compartir tu experiencia Santiago. Antes de comenzar con la reflexión, que en parte posibilitó leer tu texto, quiero presentarme. Soy Valentina Ramírez, estudiante de sexto semestre de los programas de física y licenciatura en matemáticas de la Universidad de los Andes (Colombia), también me encuentro cursando materias de la maestría en educación de dicha Universidad.
    Ahora bien, quiero compartir con ustedes un par de experiencias personales que se relacionan directamente con el tema en cuestión.
    Constantemente ronda por mi cabeza la pregunta sobre el tipo de profesora que deseo ser; en parte porque comparto fielmente la idea que propuso Gandhi en torno a que si deseamos ver cambios en el mundo, estos cambios deben empezar por nuestros propios actos. Me considero una persona inacabada, de acuerdo, pero dotada con muchísima esperanza y, por tanto, estoy muy segura que los cambios en educación son posibles. En este sentido, en mi rol como maestra, es de suma importancia no solo considerar qué tipo de ser humano quiero formar sino también qué tipo de ser humano soy y de qué manera puedo mejorar a diario, de modo que pueda enseñar a mis estudiantes a partir del ejemplo propio y, no única y exclusivamente, a partir de lo que espero de ellos y ellas. Para ilustrar la razón de ser de la anterior reflexión, dado el espacio de confianza que me brinda este blog, quiero compartir algunas experiencias del pasado que me llevaron a dotar de sentido dicho planteamiento.

    A la edad de cuatro años, mi sueño era ser astronauta. Tenía una fascinación gigante por saber cómo era el espacio exterior, cómo funcionaba, que había en él. Así, como toda niña curiosa preguntaba a mis papás sobre los fenómenos naturales que más me llamaban la atención. Sus explicaciones ―dotas de un lenguaje sencillo y entendible para mí― promovían y fortalecían el interés por querer hallar una respuesta a todas mis interrogantes. Por ejemplo, mientras pasábamos nuestras vacaciones en Neiva solía caminar con mi papá por las noches, e insistentemente le preguntaba: ¿Por qué la luna siempre nos persigue cuando caminamos? La respuesta de mi papá era: “porque la luna nos quiere cuidar y proteger a lo largo de nuestro camino”. No obstante, este tipo de respuestas, ¡no me convencían del todo! Creía que detrás de tanta majestuosidad había algo más. Por tal motivo, mis papás y yo, nos vimos en la tarea de indagar en profundidad sobre mi gusto, lo que me permitió descubrir que en este caso la astronomía correspondía a una de las tantas ramas que la física se encargaba de estudiar; desde ese momento, la física se convirtió en mi motivación, mi alegría y satisfacción.

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    1. No obstante, conforme fui creciendo veía que mi sueño se reducía solo a la fantasía, que era muy poco probable que lo pudiera hacer realidad; en parte porque dejaba de sentir apoyo para cumplir mi sueño. En primer lugar, mi papá quería que mi vida la dedicara a la medicina y, en segundo lugar, en el colegio donde cursé mi primaria creían que vivía en un mundo de fantasía que nunca se haría realidad. Debido a que, mientras cursaba grado segundo ya cuando todos mis compañeros sabían leer de manera fluida y su proceso de escritura era acorde a lo que deberían saber, yo por mi parte no leía rápido, tendía a deletrear, y escribía letras con la orientación incorrecta. Esos primeros años de colegio no fueron nada buenos, fui víctima de un mal sistema educativo que por poco termina arruinando mis sueños. Como dijo algún día Albert Einstein: “Es un milagro que la curiosidad sobreviva a la educación formal”.
      Por otro lado, en el año 2008 al cambiar de ciudad, ingresé a una Escuela Normal, una institución de carácter oficial, cuyo énfasis es la pedagogía. Esta institución, me mostraría entonces un panorama de la educación que en su momento era desconocido para mí en todo sentido. Puesto que, pasé de un enfoque educativo totalmente tradicional a un ambiente de aprendizaje basado en la construcción cooperativa de conocimientos, en donde como estudiante era el centro del aprendizaje. Reconocieron que, si bien había llegado con ciertas dificultades de lectoescritura, con un fuerte trabajo de cooperación las podría superar, y efectivamente las superé. Después de poco tiempo, mi rendimiento académico en todas las áreas era excelente y así se mantuvo. Fue así, como empecé a ser consciente del sentido tan importante que el acto educativo tiene en la vida de cualquier persona.

      Sin embargo, conforme mi rendimiento académico iba en auge, el ambiente escolar se tornaba fuertemente competitivo; esto me llevó a siempre querer ser la mejor a como diera lugar; en parte porque la idea que circulaba en mi institución era que solo el/la mejor podía tener éxito en la vida. Así pues, me creía sola en una burbuja en la que nadie podía entrar, solo era yo, el mundo exterior me era totalmente indiferente porque actuaba de acuerdo a mis convicciones y mi propia percepción de la realidad. En consecuencia, mi identidad como persona y estudiante se iba construyendo sobre las bases del egoísmo y el no reconocimiento del otro, especialmente las personas próximas a mí, y que eran un componente fundamental de mi historia.

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    2. Ahora bien, como parte de mi proceso de formación en dicha escuela, durante grado once, tuve la oportunidad de realizar mi práctica pedagógica con niños y niñas de escasos recursos, que cursaban quinto grado en una institución educativa de la ciudad de Neiva.

      Al principio de esta experiencia mi objetivo estaba fundamentalmente enfocado en solo cumplir mi deber como practicante―llevar un planeador ordenado con las actividades de la clase, orientarlos en sus procesos de aprendizaje y desarrollar un proyecto de aula innovador―. Sin embargo, con cada uno de los encuentros, mi compromiso con la práctica iba tomando sentido más allá de un simple deber. Así, entré en un proceso reflexivo de autoconocimiento para resaltar mis cualidades y paulatinamente corregir tantos aspectos negativos, que ahora se mostraban claramente evidentes en el quehacer pedagógico. De esta manera, comencé a reconstruir mi imagen personal a través de los niños y niñas, de lo que ellos esperaban de mí, porque en esos momentos empecé a ser consciente del rol social tan importante que todo profesor está en la tarea de asumir―puede motivar o simplemente coartar la curiosidad innata de niños y niñas, frustrar deseos y anhelos. Paralelamente, mientras desarrollábamos nuestro proyecto de aula encaminado al fortalecimiento de los lazos de amistad, nos vimos en la necesidad de pensar al otro, y más aún, ser con el otro, lo que implicaba un profundo reconocimiento de parte y parte; ya no era solo mi voz, ni mis percepciones, éramos un todo. Por lo anterior y de acuerdo con Ortega (2012), “la pedagogía para estos tiempos requiere producir la comprensión del otro desde prácticas reflexivas, hermenéuticas y de compromiso, en ese sentido la pedagogía introduce el cuidado formativo del otro, es una pedagogía de la solicitud, es una pedagogía de la alteridad” (p.87). En este sentido, nuestro rol como docentes, más allá de ser un simple trabajo, debe partir del reconocimiento acerca de que nuestra experiencia se nutre a partir del trabajo que hacemos con seres humanos, seres con vidas completamente distintas, seres que sienten y tienen emociones, seres que requieren atención y cuidado.

      A partir de la anterior reflexión sé que el tipo de ser humano que quiero formar es una persona que reconoce a sus semejantes, tolera y, sobretodo, acepta las diferencias —vistas éstas como oportunidades que enriquecen el aprendizaje de todo tipo. Un ser humano que más allá de preocuparse por los problemas que involucran algún tipo de injusticia hacia las personas más cercanas a él(ella), tenga el impulso de actuar y querer ayudar a las personas menos cercanas (simpatía), con quienes no comparte usualmente, pero que también son parte fundamental dentro de su contexto (ej. escuela, familia, barrio, ciudad, país).
      Gracias por leerme.
      Referencias

      Ortega, P. (2012). Pedagogía y alteridad. Una Pedagogía del Nos-Otros. Revista Virtual Universidad Católica Del Norte, 1(35), 128–146.

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  117. Buenas tardes, mi nombre es Natalia Galvis Cárdenas, actualmente me encuentro cursando cuarto semestre de la Licenciatura en educación para la primera infancia en la Universidad de los Andes (Bogotá, Colombia). Mi práctica formativa la realizo en aeioTu – Fundación Carulla. Durante el tiempo que he estado allí me he dado cuenta de cosas que por más simples que sean influyen en el manejo de aula, por ejemplo, el tono de voz con el que se le hable a los niños, las palabras se utilizan para transmitir ideas, las emociones que transmitimos y generamos a los demás. No me esperaba que mi experiencia en la fundación fuera tan significativa, que me llenara de nuevos aprendizajes y metodologías innovadoras para luego poner en práctica. El elemento más importante que resalto de la fundación es, el hecho de considerar a los niños como co-constructores de su proceso de aprendizaje y tomar el rol de las maestras como de acompañantes en dicho proceso. Por otro lado, como futura profesora pienso que la educación es el motor de cambio de la sociedad, es aquella herramienta que nos permite reflexionar sobre nuestras acciones, comportamientos y conocimientos adquiridos. La educación es el camino para salir del conformismo y sedentarismo en el que la actual sociedad se encuentra.

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    1. Buenos días Natalia, mi nombre es Juan Araya Montenegro, soy estudiante de cuarto año de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, Chile.

      En estos últimos 4 años, he realizado 2 tipos de prácticas de 3, las cuales son "práctica de observación" y "práctica de ayudantía", quedándome a realizar solamente la práctica profesional para poder optar a mi título de Profesor de Estado en Historia y Geografía y Licenciatura en Educación. Concuerdo mucho contigo en el tema del manejo de la voz, tener una buena impronta y tono para dar realce a distintos temas, son relevantes al momento de realizar una clase, los estudiantes generalmente ponen atención de 10 a 15 minutos, por lo que hay que mantenerlos concentrados y mejor si con la voz se puede hacer las pausas, subidas y bajadas de voz e incluso cambios en el tono de grave a agudo. Todo servirá como una forma de hacer manejo del grupo-curso.
      Las palabras construyen realidades por lo que, como docentes, debemos saber elegir qué palabras ocupar para ciertos acontecimientos que muchas veces debemos sacar nuestra ideología política para hacer una clase lo mas objetiva posible. Por ejemplo, en el año 2012 bajo el gobierno del ex Presidente Sebastián Piñera, Joaquín Lavin, su Ministro de Educación en aquel entonces, hace cambios en los libros de clase de historia, cambiando el nombre del periodo 1973-1990 de Dictadura Militar a Régimen Militar. Por este cambio en los conceptos se ocupa un eufemismo, para denominar a uno de los períodos mas nefastos en nuestra historia política y con ello no mostraría realmente lo que fue. Sin embargo, se dejó en libertad a los profesores de Historia y Geografía denominarla por cualquiera de los dos términos por esta suerte de "autonomía en el aula".

      Estoy muy de acuerdo contigo en que la educación es el motor de cambio de las sociedades, sin los conocimientos que podams hacer llegar a nuestros estudiantes, estaríamos entregando una sociedad ignorante y que se dejaran gobernar fácilmente, pasivos políticos y sin autonomía en sus propios actos. Sueño con un Chile donde todas y todos, tengamos las mismas oportunidades de educarnos y ser una nación políticamente activos.

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    3. Muy buenas tardes estimada Natalia. Es un gusto poder saludarte y comentarte desde Chile. Mi nombre es Óscar Saavedra Parra, soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena. Durante el último tiempo, he tenido algunas experiencias en el aula y me han sido muy significativas para mi proceso de formación docente. Estoy a punto de egresar, y a diferencia tuya siento que la educación en Chile es demasiado conductista, tomando como eje central el paradigma cognitivista, donde la memoria cumple un rol fundamental, puesto que le memorización de contenido se hace mucho más importante para el proceso de enseñanza-aprendizaje. Si bien, es importante, no es del todo esencial. Por lo mismo, comentarte que la justificación en base a dicho paradigma se hace con la medición y cumplimiento de ciertos estándares relacionados periódicamente a la aplicación de pruebas como lo son el SIMCE (Sistema de Medición de Calidad de la Educación) y PSU (Prueba de Selección Universitaria). Está demás comentarte que lo estudiantes estudian (y se ven obligados) para obtener una nota que "avala" y "califica" su aprendizaje.

      Nuestra realidad educativa se aleja bastante del paradigma constructivista, en donde los estudiantes pueden crear y obtener el conocimiento a partir de sus propias experiencias. Como un ejemplo, me gustaría comentarte acerca del desinterés y de la poca importancia que tiene la Geografía en nuestros planes y programas de estudio, considerando nuestra variada geografía, además del complejo escenario que cada año vivimos debido a diversos fenómenos naturales que nos aquejan. El escaso contenido que se aborda en torno a esta temática se desarrolla de una forma memorística, en donde los estudiantes solo adquieren el conocimiento para rendir una prueba, pasando por alto la comprensión, aplicación y valoración que sería lo más adecuado para entender la complejidad de dicha ciencia. Por ello, está en nuestras manos hacer frente a estas problemáticas, y cambiar el rumbo que durante el último tiempo está adquiriendo la educación.

      Saludos cordiales.

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  118. Buenos días, mi nombre es Juan Araya Montenegro, Estudiante de pregrado en Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile. Mi participación dentro del Geoforo busca hacer un aporte a la enseñanza-aprendizaje de los participantes de este.
    En la pregunta referida al papel que juegan las asignaturas de Ciencias Sociales en las aulas, creo que son de vital importancia para la formación de ciudadanos comprometidos con la sociedad, sobre todo en un mundo en donde la globalización y los cambios sociales, están viviendo cambios sustanciales, los cuales necesitan de una base teórica para ejercer la práctica. La ciudadanía conlleva tantos derechos y deberes que deben estar arraigados en todas las personas a las cuales se les pueda hacer llegar el mensaje.
    Los derechos de las personas, deben ser enseñados y comprendidos por la ciudadanía para que no sean pasados a llevar por ninguna institución pública, ni privada, es por ello que como docentes de Historia, Geografía y ciencias sociales, tenemos el deber de formar estudiantes con pensamiento crítico, laboriosos, activos políticamente y sobre todo, curiosos.
    Actualmente las ciencias sociales han perdido importancia en la sociedad y esto se ve reflejado en las horas pedagógicas que fueron quitadas de las mallas curriculares en los colegios a nivel nacional. Otra forma en la que se ve reflejada la baja importancia que tiene para la sociedad las ciencias sociales son la baja participación ciudadana en las votaciones para elegir a sus representantes. La sociedad ha perdido la esperanza y ya no cree en la política por culpa de los grupos dominantes que han desvirtuado la lucha por el pueblo y sus desventajas.
    El mejor enfoque que se le puede dar a la enseñanza de las ciencias sociales es la intromisión directa política de las masas populares en los gobiernos y por ello, educar a los estudiantes para tener una mayor participación dentro de sus comunidades, salvaguardando el respeto por su entorno y por las leyes que los rigen, conociendo los canales de comunicación tanto directa como indirecta para dar a conocer sus problemáticas y generar los espacios de participación entre sus pares y llevar el mensaje a su comunidad externa.

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    1. Hola, mi nombre es Tomás Cáceres, también soy estudiante de pregrado en Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena. Estoy de acuerdo en que las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación han dominado la práctica pedagógica e indudablemente, poseen un lugar predominante en la enseñanza de las Ciencias Sociales, la cual si bien se ha aprovechado de esta situación ha perdido la capacidad narrativa que posee respecto a la enseñanza de otras disciplinas.

      Se supone que la enseñanza de las Ciencias sociales propone la creación de racionamientos complejos, lo cual conlleva a la realización de textos y argumentos elaborados. Lo anterior se ve impedido por la inmediatez de las TIC's y su capacidad de reemplazar este tipo de argumentación con otras habilidades menos complejas y más rápidas de aplicar.

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    2. Hola Juan, mi nombre es Montserrat Ulloa, estudiante de pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena. Con respecto a tu comentario, las Ciencias Sociales sí han perdido territorio dentro del curriculum de estudio, ya que se le ha dado más énfasis a otras asignaturas que se consideran más "importantes" para un futuro trabajador, como lo es matemáticas y lenguaje.

      La falta de las Ciencias Sociales en el curriculum se ha podido evidenciar en las actitudes que ha tomado la sociedad frente a temas importantes como la elección de mandatarios, la cual se ha traducido en una gran cantidad de abstención por parte de la población, o el cuidado del medio ambiente, la responsabilidad social, rol ciudadano, entre otros. En otras palabras, la falta de Ciencias Sociales en la educación se traduce en un cambio dentro de la sociedad, debido a los cambios individuales de cada sujeto que la compone.

      Concuerdo contigo con respecto al establecimiento de espacios de participación, pero debería estar contextualizado a la realidad actual, debido a que se sigue intentando aplicar modelos antiguos que no son viables en la sociedad actual, caracterizada por la globalización, los medios de comunicación y su papel protagonista dentro de nuestra cotidianidad. Deberían surgir nuevas propuestas y estrategias para poder aplicar de manera fructífera las Ciencias Sociales, adaptando metodologías para los jóvenes en las salas de clase, para los adultos que ya ejercen algún trabajo, etc.

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  119. Buenas, mi nombre es Álvaro Castillo y soy alumno de octavo semestre de pedagogía en Historia y geografía en la Universidad de La Serena, Chile. He estado leyendo los comentarios que se han publicado en este espacio y he podido sentirme reflejado en algunas experiencias que han comentado. Angels Roing, se refiere a las dificultades que enfrentamos los futuros docentes en los contextos actuales y cómo las ciencias sociales han perdido importancia dentro del escenario actual. Y a partir de este comentario llegue a una serie de conclusiones que me gustaría compartir.
    Primero que todo considero que, es cierto que como practicantes y futuros docentes en el área de las ciencias sociales nos enfrentamos a un contexto complejo, determinado por una serie de factores intrínsecos a los ambientes educacionales, pero considero que nosotros como profesionales tenemos la responsabilidad de enfrentarnos con entusiasmo y empoderamiento ante estos fenómenos, entregando todos nuestros conocimientos en función de poder llevar a cabo un proceso de aprendizaje óptimo, mediante la utilización de nuestro conocimiento, ligado a la pedagogía, que nos permita mediar conflictos en los ambientes educacionales.
    Considero, además, que existe la necesidad de que, al momento de entrar al contexto educativo, como docentes participemos y actuemos en la cultura escolar, y no seamos absorbidos por ella al adoptar posturas de pasividad ante sucesos conflictivos. Tengo la esperanza de no ser el único futuro docente con el empuje de lograr insertarme en un establecimiento, para generar cambios, no sólo en relación al contenido, sino también al ambiente educacional, en función de disminuir los hechos de violencia que existen en este medio.
    Por otro lado, creo que el hecho de dar por entendido que las ciencias sociales han perdido relevancia en el contexto occidental actual, es empezar la batalla desde una postura de derrota. Debemos ser conscientes que las ciencias sociales no solo están muy presentes, sino que permiten a los jóvenes comprender su contexto y adoptar las herramientas para tomar una postura crítica ante los hechos que ocurren a nivel global y local. Debemos ser conscientes que vamos a educar ciudadanos y ellos serán los que configuren el contexto político-social del futuro. Debemos guardar la esperanza de que educaremos a los próximos hombres y mujeres que pueden generar cambios, que pueden lograr una diferencia, y a estos futuros trasformadores necesitan herramientas, y ¿saben de dónde pueden sacar estas herramientas?, pues claro, que de las ciencias sociales. Considero que debemos partir desde este planteamiento; las ciencias sociales son indispensables.

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    1. Hola Álvaro, soy Francisca Arredondo. Debo señalar que comparto tu postura en ciertos puntos que has señalado, sobre todo la idea de que las Ciencias Sociales son indispensables para potenciar la capacidad crítica de los alumnos e impulsar su curiosidad por el conocimiento como un deleite y una forma de mirar el mundo. Sin embargo, plantearse desde la posición de que se exija y defienda de manera firme la presencia de las Ciencias Sociales, en específico la Historia y la Geografía -que para mí personalmente son indispensables- no significa hablar desde la derrota, sino que desde la realidad que se vive en el país.

      Año a año se ha visto como se ha buscado atentar en contra de las Ciencias Sociales -y de las Humanidades también- dentro del currículum nacional. Por mencionar un ejemplo, la Geografía, ciencia que debería ser preponderante en un país marcado por los riesgos y los desastres socionaturales es tratada de una manera muy superficial dentro de los planes y programas, y además, ha sido posicionada como un conocimiento auxiliar a la Historia, lo cual resta el valor intrínseco de esta disciplina en nuestro desarrollo como sociedad.

      Por otro lado, tenemos el ejemplo dado por las movilizaciones que se vivieron alrededor del año 2010 producto de las intenciones por reducir las horas de enseñanza de Historia, que se imparten como asignatura en los colegios, lo cual demuestra que hay una preocupación y una opinión pública al respecto, sobre todo dentro del gremio de docentes en general y de la disciplina, los cuales dan a conocer su postura. Y así como esta experiencia, no dudo en que en el futuro se presentarán muchos desafíos más frente a esta área de las Ciencias Sociales que en ocasiones ha sido considerada como peligrosa, debido a las herramientas intelectuales que entrega a los estudiantes.

      Te envío un saludo cordial y te leo atenta si gustas seguir ampliando esta discusión.

      Francisca.

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    2. Quisiera decir que estoy completamente de acuerdo contigo, sobre todo por las lindas palabras que escribes, pero no es así. Considero que abordas el tema de la profesionalización docente desde una perspectiva casi utópica, no es posible que el docente sea capaz por si solo de producir un cambio en el ambiente escolar, es decir, en las conflictivas relaciones sociales al interior de la escuela, así como tú lo planteas. Cuando hablas de responsabilidad, de entusiasmo y de esperanza agregas al rol de la docencia un sentido más amplio, abarcando preocupaciones sociales y emocionales, además de académicas, que aumentan la carga de trabajo y finalmente producen un desgaste en el profesor. Hargreaves (1998:pp. 143) sostiene que “la profesionalidad ampliada es simple retórica, una estrategia para que los docentes colaboren de buen grado con su propia explotación, dejando que se les exijan cada vez mayores esfuerzos”, en este sentido, creo que este sería tu caso.

      Es importante moderar el entusiasmo, la resolución de conflictos en la escuela es tarea de toda la comunidad educativa, no solo del profesor, en tanto “es preciso trabajar para equilibrar como es justo los derechos de unos y los deberes de otros” (Escudero, 2011: pp. 101).

      Saludos.
      Erica

      Hargreaves, Andy (1998). Profesorado, cultura y postmodernidad. Morata, Madrid.

      Escudero, Juan Manuel (2011). Dilemas éticos de la profesión docente. Participación educativa, (16), pp. 93-102.

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    3. Buenas, Soy Álvaro Castillo y quería responderte a ti compañera Francisca, diciéndote que realmente comparto tu perspectiva completamente, es cierto que en el contexto actual nos encontramos frente a un gran desafío como docente de las ciencias sociales, por lo cual considero indispensable enfocar nuestros esfuerzos como educadores en función de lograr ampliar los contenidos sobre geografía, en un contexto país marcado por la vulnerabilidad frete a los distintos riesgos naturales. Es debido a esto que realmente me parece bastante derrotista establecer que el docente no puede tomar una postura entusiasta en su labor, como lo estableces tú compañera Érica, pues creo rotundamente que pese a que todos tus argumentos son absolutamente válidos, uno como profesional de la educación debe poseer un deseo intrínseco por generar cambios sustanciales en la sociedad a través del proceso de enseñanza, es por esto que te invito a realizar un proceso de autocrítica a tu vocación profesional, para que al momento de llegar a instancias de aula, seas capaz de entregar más que contenidos teóricos a tus futuros alumnos.

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    4. Compañeros, soy Francisca Arredondo nuevamente. Aportando a la conversación me gustaría agregar que, en primer lugar, encuentro sumamente necesario que debe ser el mismo docente el que sebe estar convencido de la labor que está llevando a cabo, por lo cual es de gran relevancia que su motivación y compromiso con la profesión que este se encuentra ejerciendo sea completa, dentro de estos parámetros. Esto no quiere decir que deba llevar a cabo una labor mesiánica ni mucho menos moralista o casi paternal con sus estudiantes, sino que debe estar consciente de que la labor docente es una de las más relevantes, si es que no se puede decir que la más relevante para el desarrollo de las sociedades.

      Como futuros docentes, debemos hacernos a la idea de que el resultado de nuestra labor y de la enseñanza que le entregamos a los alumnos no es un producto que esté listo para entregar dentro de minutos, horas o meses; sino que es algo que lleva años de trabajo y esfuerzo, el cual solo se ve completado en el momento en que los mismos alumnos reconocen el aporte que tú has realizado en su desarrollo, ya se manifestándolo de forma directa, o realizando esta reflexión de manera interna.

      Por esto, no debemos quedarnos en la postura de un docente academicista que solo hace entrega de conocimientos. Y también debemos superar la idea de que todo lo que pasa en los establecimientos, más allá de la enseñanza en el aula, son problemas o “conflictivas relaciones sociales al interior de la escuela”, citando las palabras de Erica. De este modo, ¿qué harás cuando un estudiante que esté más entusiasmado que el resto de sus compañeros te plantee que le gustaría llevar a cabo una investigación sobre un tema de su interés?, o bien, ¿cómo actuaras como docente en el momento en que un estudiante sienta una mayor atracción por nuestra disciplina y te pida recomendaciones sobre bibliografía especializada? ¿Optarás por no prestar atención a este estudiante porque esa no es la labor para la cual nos han preparado en la Universidad?

      De manera personal, considero que el docente debe aventurarse a los desafíos que nos platea el camino de la enseñanza, manteniendo una postura amplia frente a estos, y no cerrándose bajo criterios impuestos y cerrando las puertas a alguien que por alguna razón u otra recurre a ti.

      Saludos a ambos!
      Francisca.

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  120. Hola, mi nombre es Tomás Cáceres, soy estudiante de pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, Chile. Pretendo responder la pregunta número dos.
    Mi intención como futuro docente es convertirme en un miembro útil de la comunidad educativa, no ser un agente de cambio por mí mismo, sino que formando parte activa de un sistema que requiere constante actualización. Lo anterior se debe a que cuando decidí estudiar pedagogía, lo hice pensando en que no me olvidaría de mi rol como estudiante, razón por la cual mis expectativas como profesional de la educación no son demasiado románticas, no planeo convertirme en un profesor "mesiánico" al estilo de Robin Williams en "La sociedad de los poetas muertos".
    La idea, en general, es hacer partícipe a los estudiantes de su propio proceso de enseñanza-aprendizaje haciendo que ellos mismos decidan cuál es la metodología adecuada, las técnicas y los recursos precisos, con el fin de facilitar el aprendizaje.
    A mi juicio, la principal dificultad que presentan los centros educativos (en Chile) es la reciente inserción de las políticas inclusivas, que si bien representan un avance en políticas educativas, también presentan un problema en cuanto a la formación inicial de los profesores, ya que a éstos no se les prepara en los Establecimientos de Educación Superior para afrontar el desafío de tratar con alumnos que presenten trastornos del aprendizaje o dificultades específicas del Lenguaje. Claro, existen los psicólogos y psicopedagogos para ayudar a enfrentar este problema, pero lamentablemente ellos no están permanentemente situados en el aula de clases.
    Lo anterior se debe, en gran parte, a que las políticas educativas no son ideadas por profesores, ni siquiera se les consulta a los docentes sobre cuáles son los aspectos que se deben mejorar en el sistema. Las investigaciones en educación por su parte, no son propagadas por la población general, lo que es grave considerando que ésta es la que conforma la comunidad educativa, especialmente a través de los padres y apoderados.

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    1. Hola Tomás, mi nombre es Juan Araya, estudiante de pregrado al igual que tu.

      Estoy de acuerdo en varios aspectos de tu comentario, sobre todo en lo de ser un miembro útil de la comunidad educativa. La necesidad que ha tenido hoy en día la educación, es el mejoramiento de sus actividades en la acción de la enseñanza-aprendizaje, por lo que nosotros como profesores de Historia y Geografía, tenemos un rol fundamental en la sociedad, teniendo un rol activo en la educación de los futuros ciudadanos.

      La inserión de las politicas de inclusión social han sido un importante avance en la educación formal, ya que para avanzar en una sociedad mucho mas democrática, los necesitamos a todas y a todos. Pero como bien dices, las casas de estudio, no forman a los profesores para enfrentarse a casos de dificil situación educativa, por lo que nos "atan de manos" al momento de querer educar a todos. Aunque no todo es malo, los establecimientos han aplicado los centros de apoyo pedagogico en el cual, los profesores pueden dirigirse buscando apoyo didáctico-metodológico con profesoras/es de educación diferencial, psicopedagogos y psicólogos educacionales, los cuales tienen el trabajo de dirigir una educación inclusiva en pro del apoyo al docente y facilitar en cierta forma, su proceso educativo.

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    2. Hola Tomás, soy Montserrat Ulloa, estudiante de pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena. Complementando tu respuesta, creo que no podemos considerarnos salvadores o cambiadores del mundo dentro del sistema educativo, primero que nada porque quizá simplemente no queramos serlo, y simplemente queramos remitirnos al rol de entregar información a los alumnos, o en segundo lugar, porque a pesar de que algunos aspiran a ser un agente de cambio, el sistema educativo limita de muchas maneras, por lo que nunca va a existir una real libertad dentro de dicho sistema, en especial si no se generan cambios.

      Como bien planteas, las reformas educacionales, y en general, todo este sistema educativo ha sido planteado por personas ajenas al proceso educativo, como ingenieros, economistas, estadistas, entre otros, que si bien en algún momento fueron parte del sistema educativo como estudiantes, no han tenido la formación necesaria para poder vislumbrar las necesidades que tienen otros actores de la comunidad educativa, tales como profesores y directivos, además de la descontextualización del actual sistema educativo. Los profesores y personas ligadas a la educación deberían ser quienes configuren dicho sistema.

      Por último, otras dificultades que he podido apreciar es, en primer lugar, la deficiente preparación que se nos da con respecto a la resolución de conflictos, por ejemplo, o de educación cívica o formación ciudadana. En segundo lugar, el papel que toman los medios de comunicación, tergiversando el rol del docente y de los estudiantes frente a la sociedad, los cuales se han encargado de presentar información que no es necesariamente fidedigna.

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  121. Hola, me llamo Janina Craviolatti y soy estudiante de cuarto año de la carrera de pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, Chile.
    Al entrar a la carrera e interiorizarnos cada vez más en el mundo de la educación, lo primero que nos podemos dar cuenta es de la profunda desigualdad que existe entre los diferentes contextos educativos, esto por lo general, es una problemática estructural de los países latinoamericanos. En Chile es muy diferente hacer clases en colegios privados que en los colegios municipales, muchas veces por la gran brecha en relación a los recursos y también por las diferentes condiciones socioeconómicas que forma la realidad de cada uno de los estudiantes. Es por eso que considero que la práctica docente se debe pensar a partir de la realidad de los diversos contextos y a las necesidades que posee cada una de ellas, lo que implica que los profesores sepan adaptarse a diferentes escenarios siendo flexibles en su ejercicio profesional siempre pensando en cómo orientar los conocimientos previos de los estudiantes al aprendizaje de la Historia y Geografía. Y eso se debe tener siempre presente, todos los estudiantes saben algo, y la labor del docente es que ellos puedan expandir su conocimiento mediante diversas estrategias, como por ejemplo, partir de lo local a lo global, es decir, que ellos identifiquen y reconozcan los elementos de su entorno. Y así posteriormente relacionarlo con elementos más globales.
    Saludos cordiales.

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    1. Hola, soy Erica Araya, estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena (Chile). Quisiera referirme al tema abordado en tu comentario con el que concuerdo totalmente. Quizás debido a mi experiencia como estudiante nunca me cuestioné cómo aprendían otros niños, con qué recursos o qué contenidos, solo asistí a dos establecimientos (uno en la enseñanza básica y otro en la enseñanza media, ambos de dependencia municipal), sin embargo, al ingresar a la universidad pude reconocer en mi muchos vacios de todo tipo, de modo que me fue realmente difícil obrar con perseverancia para ponerme al corriente.
      Es por eso que me preocupa de qué manera enfrentarme a eso, no tanto el cómo sortear la falta de recursos materiales (que ciertamente representan una gran dificultad), sino cómo hacer para que los estudiantes se sientan motivados a aprender, para que no los desanime su situación de desventaja que muchas veces no tiene que ver con sus capacidades físicas, intelectuales o emocionales, sino con un contexto mucho más amplio que ellos no han elegido… en fin, me cuestiono de qué manera desde la docencia se puede luchar contra esa desigualdad que la escuela, general y lamentablemente reproduce.
      En este sentido, creo que el docente también de be partir “desde lo local”, es decir, desde las condiciones mismas de cada estudiante, valorando sus fortalezas y acercando sus oportunidades.
      ¡Saludos!

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  122. Hola, mi nombre es Erica Araya y soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena (Chile). He leído con mucho agrado algunos de sus comentarios en cuanto coincido con los complejos escenarios educativos que exponen y, sobretodo, con sus entusiastas posturas para enfrentarlos.
    En esta ocasión quisiera referirles una situación que he detectado en la mayoría de los centros educativos de los que he sido parte (primero como estudiante, luego como docente en procesos de práctica y en otras intervenciones esporádicas) que tiene relación con la escasa motivación que demuestran los estudiantes hacia la enseñanza y el aprendizaje de las ciencias sociales. Puedo inferir que este desanimo puede deberse a muy diversas circunstancias que inciden directa o indirectamente al interior de la sala de clases (en este punto me gustaría conocer sus hipótesis), tales como la metodología utilizada por el docente inclinada generalmente hacia métodos expositivos centrados en un aprendizaje conceptual y memorístico o la amplia cantidad y complejidad de los contenidos de enseñanza.
    En general, me parece que existe todavía cierto recelo desde el mundo científico a reconocer en las Ciencias Sociales su destacable valor para la comprensión de la realidad en términos presentes, con reflexión hacia el pasado y proyección hacia el futuro, que se replica en el campo educativo y se evidencia en la actitud de los alumnos cuando se preguntan para qué. Si esta es la principal inquietud de nuestros estudiantes, si como docentes no somos capaces de responder a ella y si no velamos por el surgimiento de muchas otras inquietudes más, entonces hay algo que no estamos haciendo bien y es nuestro deber mejorarlo.
    “¿Para qué escribo tanto si no entiendo?” Dice un alumno de 8º año de enseñanza básica de 13 años de edad. Aquello me mueve a creer que los estudiantes esperan respuestas concretas y prácticas, en donde valga tanto el concepto como la manera de aplicarlo en su propia vida, y para ello no basta (y de hecho sobra) un discurso extenso, un texto intrincado, un ensayo de tarea… sea mucho mejor lo siguiente: que como docentes nos hagamos responsables de establecer en las aulas metodologías distintas (porque lo cambiante atrae y lo monótono cansa) de enseñar, que se alejen de lo tradicional, que implique el uso de nuevas tecnologías, que apunte al desarrollo de varias inteligencias, que permita al estudiante participar activamente de su proceso de aprendizaje.
    Existen tantos recursos que se pueden utilizar, tantas utilidades que se les puede dar a la Historia o a la Geografía en la vida cotidiana… quizás lo primero sea adoptar una actitud más positiva, defender el valor y la utilidad de las ciencias sociales, demostrárselo a los estudiantes con ejemplos prácticos y a través de metodologías más dinámicas y mas entretenidas…
    Agradezco la lectura y tanto más si comentan.
    ¡Saludos!

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    1. Hola Erica!
      Con respecto a lo que planteas sobre la falta de motivación de los estudiantes hacia el aprendizaje, concuerdo en que las causales pueden ser demasiado diversas, sin embargo acotándonos a las que se relacionan con el docente y sus prácticas, creo que debemos recordar que justamente "sus prácticas" no son tan suyas como se quisiéramos, ya que hay un enorme aparato que dirige y supervisa, desde el ministerio hasta los propios colegios, lo que se debe enseñar y como se debe enseñar, creo que al decir "hay algo que no estamos haciendo bien y es nuestro deber mejorarlo" deben incluirse también todos los agentes que influyen en lo que el profesor realiza en clases y no atribuirle todo el error a él, además no debemos olvidar el resto de actividades que un docente debe realizar en su trabajo que no son necesariamente parte de la "enseñanza". Lógicamente esto no le quita parte de la responsabilidad al docente, y concuerdo totalmente con la integración de metodologías que apunten al desarrollo de las diferentes inteligencias, a través del uso de las nuevas tecnologías, de técnicas innovadoras que acerquen al estudiante y le hagan comprender lo necesario de lo que está aprendiendo, pero creo que el docente no debe cargar solo el peso de idear e implementar estas innovaciones, sin embargo siempre será el principal actor del proceso, junto a los estudiantes.

      Maryory Carvajal Carvajal
      Estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía
      Universidad de La Serena. Chile.

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  123. Hola, mi nombre es Montserrat Ulloa y soy estudiante de cuarto año de la carrera Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile. Con respecto a la pregunta número 1, mis experiencias de prácticas en las aulas de clases han sido bastante interesantes por variadas razones.

    En primer lugar, a pesar de ser dos establecimientos educacionales de un contexto socioeconómico bastante diferente, las metodologías de la enseñanza de la historia y geografía son muy parecidas: clases expositivas, poca participación de los alumnos a lo largo de la hora, silencio y orden (o un intento de éste). Por otra parte, se puede apreciar una diferencia respecto de las proyecciones de los alumnos con respecto a la forma en la que se imparten los conocimientos en los establecimientos educacionales, ya que, por ejemplo, en un colegio se esperaba que los alumnos fueran a la universidad, por lo que su formación iba orientada a rendir una buena Prueba de Selección Universitaria, mientras que otro establecimiento orientaba su educación hacia un futuro laboral más inmediato.

    Sin duda se parece, en cierto sentido, a lo que se espera según lo aprendido durante la formación profesional, sin embargo existen algunas diferencias, ya que a pesar de que nos invitan a ser más innovadores en cuanto a metodologías, en algunos casos se hace insostenible debido a la naturaleza del establecimiento, a los recursos económicos a los que se pueden acceder, y a los requisitos que los directivos de dicho establecimiento imponen sobre los docentes. Es difícil, sin duda, aplicar una docencia innovadora que llegue a todos los alumnos y que responda a las expectativas sociales puestas en el sistema educativo, sin embargo, no es imposible. Gracias a las TIC's es factible acercar la educación a los alumnos de una manera que genere atención de parte de ellos, pero no hay que olvidar que la educación actualmente se aprecia más como un bien de consumo, debido a que los parámetros para decidir qué se enseña o qué no se enseña, está determinado según las habilidades y aptitudes que necesita el mercado para futuros trabajadores que tengan las capacidades mínimas para poder ocupar un puesto de trabajo determinado. Es por esto que la aplicación de la docencia en las aulas de clases es factible, pero no tan esperanzadora como nos pueden enseñar durante nuestra formación profesional, y a pesar de que tengamos las intenciones de cambiar la forma en que se entregan los conocimientos a los alumnos, siempre va a existir algún limitante.

    No es imposible llegar a tener una educación que realmente cubra todas las expectativas impuestas por la sociedad, pero requiere un gran esfuerzo por parte de todos los integrantes del sistema educativo.

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    1. Hola Montserrat, soy Tomás Cáceres y al igual que tú también estudio Pedagogía en Historia en la Universidad de La Serena. Quisiera complementar tu argumento acentuando en las actitudes de los establecimientos educativos frente a las metodologías de enseñanza y a los resultados de las pruebas estandarizadas.

      Mi principal queja es que, al igual que lo que tú mencionaste, los establecimientos educativos últimamente se han centrado solo en la especialización de pruebas como el SIMCE y la PSU, lo que conlleva a que la única metodología de enseñanza-aprendizaje sea pensada para ser aplicada usando un método expositivo. Ésto último provoca que los conocimientos (de cualquier índole) se conviertan finalmente en información, que no será nada más que replicada por los estudiantes, transformándose en una experiencia superficial, en términos educativos.

      Además rescato la idea de hacer saber a la comunidad educativa, que es la administración de los centros la que decide adoptar este enfoque, medida que es compartida por los apoderados, que en su ignorancia no pueden comprender el daño que se le está haciendo a sus pupilos al convertirlos en transmisores de información.

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  124. hola Mi nombre es Marcela Santibañez Diaz estudiante de pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile. Actualmente soy alumna de cuarto año de la carrera, por ende aún no he ejercido en su totalidad, pero he tenido experiencias de prácticas las cuales consta de casi un semestre entero a lo largo de la carrera y dos veces en los 4 años y medio, antes de la práctica profesional.
    Aludiendo a la pregunta 1:
    En mi primera experiencia en el aula de clases, fue en una Escuela Dagoberto Campos una localidad rural a 45 minutos de la ciudad de La Serena llamado El Molle. Una de las características que resalta de dicha escuela es que a primera vista da la impresión de una gran familia, todos se conocen entre sí y ninguno es pasado por alto, como suele ocurrir en liceos o colegios que albergan más de 1000 estudiantes. Por ello la relación entre profesor-alumno es mucho más cercana y personalizada en cierta medida cuando lo acercamos a la sala de clases. Ya que el control de grupo en algunos cursos no va a más de 15 estudiantes por sala dependiendo del nivel porque pueden ser menos. En cierto aspecto se podría decir que es un escenario ideal para para el proceso de enseñanza-aprendizaje ya que permite llevar un seguimiento del rendimiento de sus alumnos. Pero no en todos los casos es así, por ejemplo en mi segunda experiencia de práctica fue el Colegio Santo Tomas de La Serena, en este el contexto que se ve es totalmente diferente a mi primera experiencia, ubicado en la ciudad de La Serena. Donde los cursos están compuestos por más de 30 estudiantes y por cada curso hay dos letras (por ejemplo tercero A y tercero B). a una de las primeras conclusiones que llegue fue que entre más grande el colegio, más diversos lo tipos de estudiantes. En este punto es importante considera que en la diversidad esta la riqueza en retroalimentarnos como profesores en buscar diferentes estrategias para mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje de los alumnos y no recaer constantemente en las mismas prácticas, la idea es seguir innovando.

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    1. Hola Marcela, soy Paula Cortés, alumna de pre grado al igual que tú. Tengo una pregunta para formularte respecto a lo mismo que enunciaste anteriormente. Me gustaría saber ¿Qué tipo de dificultades evidenciaste en ambas experiencias respecto al sistema educativo propiamente tal, a las metodologías empleadas y que no hayan dado resultado o bien, respecto a qué dificultades crees que tienen los estudiantes para afrontar su proceso de aprendizaje en ambos contextos?
      Saludos y muchas gracias por tu experiencia :)

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    2. Hola Marcela, soy Erica Araya, estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena (Chile). Quería destacar en tu comentario el contraste que evidencias entre los contextos educativos rural y urbano, relevando las oportunidades que ofrecen para un mejor ejercicio de la docencia.

      Si bien en Chile la mayor parte de la población se concentra en las ciudades otra parte continua viviendo en zonas rurales, en donde las personas se dedican al trabajo del campo y poseen un acceso restringido a nuevas oportunidades o experiencias de alta calidad educativa (Fuica et al. 2014, p.144).

      Sin embargo, la escuela rural permite, además de una mayor cohesión entre los miembros de la comunidad educativa, una mayor relación de los estudiantes con su medio natural, lo que es una gran ventaja a la hora de enseñar ciencias sociales, especialmente geografía. Por otra parte, la escuela en contexto urbano también permite observar la mayor intervención del hombre en el medio, lo que puede ser utilizado por el docente para diversificar sus estrategias de enseñanza.

      Saludos!

      Fuica, P. Lira, J. Alvarado, K. Aravena, C. Lillo, G. Miranda, M. Pérez-Salas, C. (2014). Habilidades Cognitivas, Contexto Rural y Urbano: Comparación de Perfiles WAIS-IV en Jóvenes. Terapia psicológica, Vol. 32, Nº 2, 143-152.

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    3. Hola Marcela, mi nombres es Juan Araya, también soy estudiante de pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena. Me gustaría señalar que soy participante activo del Nucleo de Investigación Pedagógica que ha suscrito la Universidad de La Serena con colegios de 15 comunas de la Región de Coquimbo, Chile. Gracias a esto, me he podido dar cuenta de las diferencias que existen entre los colegios de la ciudad respecto a los de la ruralidad.

      Ambos tienen sus pro y sus contras, que no soy equiparables entre sí. Por ejemplo, la ciudad tiene una conexión con el mundo globalizado mucho mas efectivo y rápido que el mundo rural, una de las razones puede ser la poca señal de internet que llega a esas zonas o incluso la baja importancia que le han dado los gobiernos regionales a estas zonas de -a veces- difícil acceso. Sin embargo, los colegios rurales tienen un pro que para muchos que vivimos en la ciudad es bastante envidiable, el cual es la relación con su entorno medioambiental. El contexto rural puede servir para mucha mayor conexión con la tierra, así como la conciencia del cuidado de su comunidad. La ruralidad, tal como lo mencionas, Marcela, hace que las personas de las comunidades educativas se transformen en una verdadera familia, cuidandose unos a otros.

      En la innovación en nuestras prácticas educativas está la clave de como nosotros en un futuro nos desenvolveremos como docentes competentes y didácticos. Tanto los profesores de la ciudad como lo de la ruralidad tienen sus propias estrategias para sus estudiantes, sus contextos son diferentes, sus realidades son diferentes, pero no quiere decir que una sea menos importante que la otra.

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    4. hola Paula, efectivamente como dijo Juan una de las dificultades de los colegios rurales es la conexión a internet y por ende en cierta medida la variedad de recursos didácticos que se puedan utilizar igual es limitada. pero si bien sucede eso, en el tiempo que yo hice la práctica, el docente se las ingeniaba para llevar diversos recursos derivados de internet como por ejemplo traer videos descargados desde su hogar o la descarga de software educativos e instalarlos en los computadores del establecimiento. Como anteriormente dicho se adaptan a lo que tiene a la mano.

      Por otro lado en mi practica hecha en el colegio de ciudad, uno imagina que al tener la mayoría de recursos para utilizar en la clases en este caso no lo hace, por ende lo que más me llamo la atención es que a pesar de tener los recursos a disposición. No los utiliza, para la docente, es más que suficiente un plumón y la pizarra. Lo que más me gusto de vivir una de las clases de mi profesora guía, fue la cercanía y la oratoria para que los alumnos no se perdieran en su relato durante el desarrollo de la clase.

      Si bien, cada profesor debe adaptarse a su contexto y utilizar lo que tiene a mano, también debemos considerar el “estilo” del profesor.

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    6. Buenas tardes estimada Marcela. Al igual que tú, soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena. Respecto a tu experiencia en un colegio rural, considero que la labor que desempeñan los docentes es digna de admiración. Por ello, es necesario mantener y demostrar con incentivos, oportunidades de desarrollo profesional y financiamiento a sus iniciativas, la confianza en su gestión pedagógica, así como desarrollar oportunidades para la crítica y autocrítica del quehacer profesional.
      Por otra parte, en las universidades donde se forman profesores, particularmente de regiones con alta población rural, es necesario integrar disciplinas específicas y de modo transversal en otras, temas vinculados a la realidad rural y a la educación rural e intercultural bilingüe. Estos procesos deberían incluir aprendizajes respecto de los diversos subsectores del currículum, de cuestiones didácticas y metodológicas, de trabajo y participación de las comunidades, de la cultura indígena o local y su visión intercultural del conocimiento y de la historia, de crítica cultural y auto-crítica profesional.

      ¿Pudiste evidenciar alguno de los aspectos que mencioné? Me gustaría saber más acerca de tu trabajo y práctica en dicha escuela.

      Saludos cordiales.

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  125. Olá, meu nome é Taciana Cardozo Suarez, sou estudante do programa de Pós-Graduação (Mestrado) em educação, da Universidade de São Paulo - Campus Ribeirão Preto/SP. Minha pesquisa perpassa por este caminho, pois estudo os professores iniciantes na Universidade e alguns pontos levantados me chamam atenção, por exemplo, no Brasil é especificamente no mestrado que o aluno tem a chance de fazer disciplinas voltadas para os conhecimentos pedagógicos, aqueles necessários para a docência, no entanto, o que estou percebendo na prática (através de entrevistas), é que estes professores tem uma bagagem muito vasta de conhecimento específicos da sua área de atuação, mas em relação ao conhecimento pedagógico é mínimo. O que acontece portanto, são professores vivenciando um verdadeiro choque de realidade, tendo que lidar com a dicotomia entre a teoria e prática. Além disto, no contexto brasileiro os professores de universidades públicas, precisam exercer a pesquisa, o ensino e a extensão, o que percebo até o presente momento de minha pesquisa, é que a pesquisa se sobressai em relação ao ensino e a extensão, o que corrobora para que as aulas sejam cada vez mais reproduções, onde não há preocupação em inovar. Sendo assim é preciso que estes estudantes que serão professores, tenham garantido em sua formação os conhecimentos necessários para ser um bom professor.

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  126. Lucas Rosa, professor de História, Ribeirão Preto -SP, Brasil.
    A superação de práticas expositivas e centradas na exposição realizada pelo professor tem sido uma angustia que me acompanha desde do início de minha docência.
    Venho sempre me perguntando como ainda podem existir de forma tão consistente em diferentes salas de aula em várias cidades brasileiras (pelo menos nas que eu pude conhecer), a predominância de um modelo de aula estritamente expositivo.
    Não falo apenas a partir do que tenho visto ao longo dos dez anos de profissão, mas também do que já fiz. O meu primeiro ano como professor em nada se diferenciou das aulas que eu tive enquanto aluno na educação básica e no ensino superior: a predominância de aulas expositivas e focadas em "transmitir" detalhadamente e com profundidade os fenômenos e contextos históricos que estavam no currículo.
    Muito refletia sobre os motivos que me levavam a ter dificuldades em propor e também em executar com algum grau de assertividade aulas mais dinâmicas, reflexivas e interessantes aos alunos. Com maior experiência e estudos pude levantar algumas hipóteses: eu estava repetindo um modelo de aula que esteve presente durante toda minha vida de estudante, muito conhecia sobre história, sobretudo história do Brasil mas pouco sobre abordagens didáticas específicas da disciplina e por fim, as reuniões pedagógicas das escolas onde lecionei não eram destinadas para a formação continuada do corpo docente.
    Qual seria então o caminho para termos mais práticas inovadoras nas salas de aula? Ainda procuro esta resposta, talvez me aposente sem obter considerações plausíveis mas começo a esboçar algumas ideias a partir do pouco que pude aprender com Zabala, Novoa, Candau, Bitencourt e entre outros: precisamos resinificar a formação continuada de professores, aproximar as escolas das pesquisas sobre a docência, revisar nossas políticas públicas e etc.
    Além do mencionado, pondero se o modelo de ensino que obtive em minha graduação também poderia ser diferente, mais colaborativo, participativo e aproximando o que seria a minha realidade como futuro professor.
    Recentemente obtive um outro "insight" o de como poderíamos alterar o quadro supracitado. Me refiro a minha feliz experiência como aluno especial na disciplina "Geografia e História escolar e suas didáticas: práticas escolares, propostas curriculares, políticas públicas e pesquisas" na faculdade de Educação da USP de Ribeirão Preto.
    Nestas aulas todos os alunos são responsáveis por analisar e posteriormente compartilhar por meio de um debate dirigido uma dissertação de mestrado. O resultado tem sido uma experiência de aprendizagem estimulante e colaborativa. Os temas das dissertações são diversos e temos analisado a estrutura dos trabalhos, referências bibliográficas, relevância acadêmica e outras possibilidades de abordagem.
    Em vias de concluir a disciplina, me sinto com um ganho de aprendizagem grande, mais seguro de como desenvolver um projeto de mestrado (minha atual meta) sobretudo termos metodológicos e de tema de pesquisa, próximo dos colegas de disciplina e refletindo como uma experiência inovadora na licenciatura e pós graduação pode impactar na formação do professor.

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  127. Hola, me llamo Paula Cortés Pastén, soy alumna de cuarto año de la carrera de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile.
    Dentro de las experiencias obtenidas en mi proceso de formación docente, he podido evidenciar diversas realidades en las cuales la percepción de los estudiantes en relación a su educación y su propio aprendizaje ha cambiado enormemente, puesto que los docentes junto con los diferentes inconvenientes que deben afrontar que son propios del desigual sistema educativo chileno, también se enfrentan a un alumnado desinteresado en aprender. Sin generalizar, se puede decir que los estudiantes, debido a las influencias de los medios de comunicación, los avances tecnológicos y la globalización, propiamente tal, ya que eso ha desviado notoriamente los intereses de los alumnos y su aprendizaje no constituye una de esas prioridades. Lamentablemente esta situación es transversal a cualquier nivel socio-económico y de cierto modo complejiza la labor docente, razón por la cual se hace necesario implementar métodos innovadores para lograr llamar la atención de los niños, ya sea con usos de TIC's o sacándole provecho del mejor modo a las tecnologías que son tan propias de la actualidad.
    Ante estas dificultades, es complejo mantener una actitud 100% optimista, porque es nuestro deber como futuros docentes, otorgarles las herramientas a los estudiantes para su futuro, pero estoy al tanto de que muchos colegas, con tantos problemas en la educación actual, pierden el entusiasmo y el encanto por lo que llaman "la vocación docente". Muchas veces suelo cuestionarme lo mismo, me asusta la idea, más aún ad portas de ingresas al mundo laboral escolar.
    Como futura profesora de Historia, siento que se le ha restado notoriamente la importancia a las Ciencias sociales, pero no es algo que viene del alumnado, sino de las bases curriculares y programas de estudio que establece el Ministerio de Educación de Chile, se le han restado horas pedagógicas a Historia, la Geografía practicamente ha desaparecido de los contenidos que deben abordarse y los estudiantes cada vez más desconocen todo lo relacionado con las Ciencias Sociales, generando en ellos grandes vacíos.
    Lo demás, es fácil de inferir con tantos desajustes de nuestro sistema educativo.
    Esperando que mi experiencia haya servido para reflexionar, me despido, saludos cordiales.

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    1. Hola Paula, Mi nombre es Juan Araya, también soy estudiante de cuarto año de pedagogía en historia y geografía en la Universidad de La Serena.

      Estoy de acuerdo cuando hablas de las dificultades que debemos enfrentar como docentes, sobre la base que algunos alumnos (no todos obviamente) no se interesan por el aprendizaje. Pero es ahí donde como docentes debemos actuar para interesar al estudiante a aprender mediante, como tu bien dices, ocupar las TIC's y todo cuanto recurso didáctico esté en nuestras manos para lograr la atención en los 90 mínutos que se contempla una clase. Y referido a ese punto, me gustaría detener: Está demostrado que todas las personas, tenemos una concentración que dura alrededor de 10 a 15 minutos, donde debemos sacar el mayor provecho en este tiempo, para ir pasando de actividad en actividad, pero como tu mencionabas, la carga laboral que se le exige a un docente, a veces no da cabida para realizar actividades a curso por curso, pensando en un profesor con 45 horas semanales.

      Otro punto que quería tocar sobre el tiempo, es que las últimas investigaciones han arrojado que el cerebro humano comienza a trabajar a toda capacidad (suponiendo que tubo un descanso adecuado de 8 hrs de sueño) a las 10 am, por lo que cuando se hace clases a las 8 am, existe una poca recepción del estudiante, así como una baja capacidad de concentración del profesor.

      Volviendo al tema, como bien hablas de la perdida del entusiasmo sobre las clases y la "vocación docente" es menester que tanto el ministerio de Educación en Chile, como la sociedad en sí, dedique mas tiempo y no menos, como se hizo hace algunos años. Muchas de estas externalidades provocan esta falta de entusiasmo tanto entre profesores en funciones como en profesores en formación.

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    2. Hola Paula, Mi nombre es Marcela Santibañez Diaz estudiante de pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile. Actualmente soy alumna de cuarto año de la carrera el otro día Jorge Larrosa dio una charla para el alumnado en la Universidad, en la cual mencionaba que eso de la "vocación" es una palabra obsoleta, que en estos días se ha perdido un poco lo que es el sentido de esa palabra que tiene como trasfondo el amor por, en este caso, lo que una persona hará por lo que le resta de vida, y es por ello que me surge una pregunta ¿qué podríamos hacer como educadores en formación para que cuando salgamos al mundo laboral no perdamos ese encanto por enseñar, que en un principio nos llevó a estudiar una carrera que tiene que ver con algo tan importante como lo es la educación de los niños y niñas chilenos?

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  128. Hola a todos, mi nombre es Francisca Arredondo y soy estudiante de la carrera de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile. Como soy una alumna de 8vo semestre (4to año), ya he llevado a cabo dos prácticas por medio de dos acercamientos directos a los establecimientos educacionales, las cuales tuvieron una duración aproximada de 4 meses, en 2do y 3er año de la carrera respectivamente. Uno de ellos fue el momento en que realicé clases por primera vez a alumnas de primaria (8vo año), en un Liceo denominado como de alta vulnerabilidad por la Corporación Municipal de la cual se encuentra a cargo. A partir de esa afirmación, puedo señalar que la realidad con la cual nos encontramos al momento de realizar los primeros acercamientos por medio de las prácticas dista mucho de la que se encuentran en la teoría o de la que, en mi caso personal, poseía en mi imaginario.
    Lo anterior, debido a las conversaciones que pude mantener con mi profesora guía y a la realidad que yo misma pude constatar dentro de la sala de clases. En primer lugar, puedo señalar que la labor de un docente es en sí compleja, debido a la gran responsabilidad que conlleva llevar a cabo esta profesión y a la amplia variedad de realidades y contextos con las cuales entraremos en contacto. Frente a eso, estoy de acuerdo en aplicar una docencia innovadora, sin embargo, va a depender casi en un 100% en cómo el profesor sea capaz de llevarla a cabo dentro de la sala de clases, y del grado de impacto que logre en sus estudiantes. Además, el grado de compromiso que este demuestre con su labor será preponderante, producto del factor anterior, que es que no siempre nos encontramos con lo que teníamos pensado en nuestro imaginario, momento en que entra en juego la creatividad y la adaptabilidad del docente.

    Saludos cordiales a todos,
    Francisca.

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    1. Hola Francisca, soy Erica Araya estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena (Chile). Quería decirte que estoy muy de acuerdo con lo que planteas en los párrafos finales de tu comentario, me parece que la innovación en la educación parte desde la buena actitud que tenga el docente hacia ella.

      Ninguna estrategia ni ningún recurso didáctico puede obtener óptimos resultados en la mejora de los aprendizajes si el docente no cree en ellos y, sobre todo, en su propia capacidad profesional para implementarlos. Se puede poseer mucho conocimiento disciplinar pero también es necesario desarrollar habilidades intra e interpersonales que favorezcan la labor docente, especialmente como dices, cuando nos encontremos ante complejidades inimaginadas. Que cada dificultad sea bienvenida como un provechoso desafío.

      ¡SALUDOS!

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    2. Erica, te saludo y te doy las gracias por tu comentario, soy Francisca Arredondo otra vez.

      Estoy muy de acuerdo con lo que planteas, y complementando con lo que señalas, podría decir que muchas veces los profesores tienden a hacer un abuso de los recursos didácticos que utilizan dentro de la sala de clases. Lo cual demuestra que salir de la zona de confort es complicado para ellos.

      En primer lugar, los recursos didácticos deben ser pensados desde el profesor para ser trabajados con un grupo de alumnos (los protagonistas del proceso de enseñanza-aprendizaje) que él debe considerar como una realidad particular; se podría utilizar en primera instancia el ensayo y error, e ir probando cómo es la respuesta de los alumnos frente a los estímulos que entrega el profesor. Frente a lo anterior, se hace necesario que el docente posea una alta gama de opciones de las cuales se pueda valer para llevar a cabo sus clases. En mi caso personal, puedo señalar que desde que hemos realizado prácticas y nos hemos interiorizado en el contexto educativo, he pensado en proyecciones didácticas en el momento en que leo algún libro o periódico o veo una película, llegando a la idea de que aquello sería pertinente de utilizar en el aula.

      En segundo lugar, se deben dejar de lado los recursos didácticos que tradicionalmente se han utilizado dentro de la sala de clases. El docente debe poseer la iniciativa para innovar con sus alumnos y probar cosas nuevas y recursos que surjan desde su propia creatividad. Un ejemplo puede ser la utilización de elementos que no fueron diseñados en primera instancia para ser empleados como recursos o herramientas didácticas en el aula, haciendo que nazca desde uno mismo la utilidad pedagógica de dicho elemento.

      Saludos cordiales,
      Francisca.

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  129. Hola, mi nombre es Erica Araya y soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena (Chile). Deseo responder a la segunda pregunta acerca del rol docente en el contexto actual.
    En términos generales, percibo que tanto a nivel nacional como internacional se hacen presentes fenómenos económicos, sociales y políticos que inciden en la educación y en la forma en que nos relacionamos con el mundo. Muchos de ustedes han dado cuenta de escenarios de pobreza y desigualdad (en América Latina se refleja en desigualdad del ingreso y de la distribución de la riqueza) que generan mayormente consecuencias negativas como carencias materiales, físicas y emocionales que conllevan diferencias en el acceso a oportunidades que finalmente dañan la cohesión social y exponen a las personas a un ambiente de individualismo y competencia.
    Este mismo ambiente es posible descubrir en las escuelas, de modo que el papel que juega el docente y toda la comunidad educativa tiene que estar intencionado hacia la superación de las diferencias para lograr un objetivo en común, que según el Ministerio de Educación en Chile es “contribuir a la formación y el logro de aprendizajes de todos los alumnos”.
    Considero que para el logro de esos aprendizajes el docente puede valerse de múltiples estrategias que le permitan acercar el conocimiento a todos sus estudiantes, pues si bien es propio de América Latina un escenario de desigualdad también es cierto que es propio del mundo un contexto actual marcado por los avance en la tecnología. Un mundo globalizado no solo ofrece posibilidades de acceso a tecnología, ya se ha visto que no todas las escuelas cuentan con ella, pero si permite acercar y comprender de mejor manera las diferentes expresiones de las sociedades.
    Así, el rol docente deja su protagonismo como transmisor de conocimientos, sino como facilitador de su construcción, pero también de la comprensión y reflexión sobre el mundo, propiciando la colaboración y la convivencia armónica de sus estudiantes en la sociedad.
    ¡Saludos!

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  130. Hola a todos, mi nombre es Erica Araya y soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena (Chile).

    Sumándome a sus comentarios quisiera contribuir con mis experiencias en prácticas docentes anteriores.

    La primera de ellas la realicé en el Colegio Español ubicado en la ciudad de Coquimbo, de dependencia particular subvencionado, que imparte enseñanza media científico humanista a jóvenes y adultos, la matrícula de este establecimiento es muy reducida y cuenta con un promedio de 20 estudiantes por sala. En este colegio tuve la oportunidad de compartir con dos cursos de educación para adultos, de 15 y 17 alumnos respectivamente, en la asignatura de Estudios Sociales. Pese a la amplitud del título de la asignatura más que abordar de manera integral las ciencias sociales (como eran mis expectativas) los contenidos se concentraban en historia y geografía, sin embargo, no se realizaba un estudio profundo de estas materias y la mayor parte del semestre se dedicó a legislación laboral. La asignatura era impartida por una profesora de Historia (directora del colegio y profesora guía mía). Ella me contaba que esto está contemplado por el currículo escolar en base al perfil del estudiante adulto: principalmente jóvenes entre 18 y 20 años de edad que por algún motivo dejaron la enseñanza media incompleta y retornan a ella con el fin de cumplir con la educación obligatoria para salir a trabajar. Efectivamente, la gran mayoría de mis estudiantes estaban dentro de este rango de edad y el principal motivo de deserción era el embarazo adolescente, de modo que a su corta edad necesitaban sustentar a sus hijos.

    La siguiente práctica docente la realice en el Colegio Bernardo O’Higgins de Coquimbo, es particular subvencionado e imparte educación parvularia, enseñanza básica, enseñanza media científico humanista y enseñanza media técnico-profesional comercial e industrial para niños y jóvenes. Su matrícula es mayor y el promedio alumnos por curso es 31. En este establecimiento trabajé con estudiantes de 1º medio C-H (14,15 años de edad) y 3º medio C.H (16,17 años de edad), en la asignatura de Historia y Ciencias Sociales. Aquí los contenidos se inclinaban hacia la enseñanza de la historia (lo que también se explica por el currículo), pero además existía gran preocupación por el rendimiento de los estudiantes para enfrentarse a pruebas estandarizadas como el SIMCE o la Prueba de Selección Universitaria.

    Pese a que los dos colegios se encuentran ubicados en sectores relativamente próximos de la ciudad y los estudiantes comparten similares contextos socioeconómicos, las diferencias de edad y las historias particulares de vida marcan la dirección que los profesores y los propios alumnos dan a su proceso de enseñanza. No obstante, en ambos establecimientos pude notar la gran importancia que los estudiantes le otorgan al logro de resultados más que al aprendizaje en sí, lo que además implica reflexionar sobre cuál es la función de la educación media o secundaria en la actualidad. Olmeda (2011. p. 39) destaca “la necesidad de recuperar el valor del conocimiento (…), el afán por el saber, por el descubrimiento, por la literatura, la historia, el arte, las ciencias”. Este es, sin duda, un gran desafío.

    ¡Saludos!

    Olmeda, G. (2011). Funciones de la educación secundaria en la sociedad actual. Edetania, (39), 27-41.

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    1. Estimada Erica, en mis respectivas prácticas, pude observar y apreciar algo parecido a lo que te sucedió a ti, en los distintos establecimientos donde realice mis prácticas educativas, pude apreciar que los estudiantes privilegiaban el logro de resultados educativos, llámese calificaciones, por sobre el aprendizaje, lo que me llevo a cuestionar el rol del docente en el aula y el método evaluativo que se imparte hoy, dado ello creo que se debe modificar o implementar una evaluación distinta que componga el logro y el aprendizaje de manera que también permita evaluar conocimientos por sobre los resultados, permitiendo la mejora de la calidad educativa y facultando al docente de herramientas que le permita desarrollarse de mejor forma en el aula.

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  131. Hola a todos, mi nombre es Paola Aqueveque y soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía de La Universidad de La Serena. He realizado dos prácticas, una de observación y otra de ayudantía; fue en esta última que evidencie una problemática importante, relacionada con el agotamiento que genera en profesores y estudiantes la Jornada Escolar Completa. Mi práctica de ayudantía se efectúo en el Colegio Manantiales de Elqui en un horario de tarde (14:15 – 15:45) y durante todas las clases a las cuales asistí, percibí que los estudiantes se encontraban muy inquietos, distraídos, cansados, sin ganas de estar en clases y, ante esta situación, la profesora guía se veía imposibilitada para realizar clases más expositivas, por lo que durante la tarde la docente impulsaba actividades más didácticas para reforzar y retroalimentar los contenidos vistos durante las otras clases que eran realizadas durante la mañana (8:15 – 13:00). Sin embargo, luego de haber realizado mi primera clase, la docente me motivo a realizar otra, pero durante la mañana en un horario que iba desde las 9:30 hasta las 11:00 am. En este periodo de tiempo pude darme cuenta de que el comportamiento y la actitud de los estudiantes frente a la clase eran totalmente diferentes, estaban más despiertos, motivados y con ganas de aprender, lo cual es fundamental. Por lo que utilice un método grupal, explicando el contenido de forma expositiva, pero haciéndolos participar constantemente con la utilización de unas fichas que incluían conceptos, que estábamos viendo, precisamente, en la clase.

    Por lo que se puede concluir que desde el ingreso al sistema educacional de la jornada escolar completa, los estudiantes se ven sometidos a periodos extensos de “aprendizajes”, pero éstos terminan no siendo efectivos puesto que los estudiantes se sienten agotados debido a las extensas jornadas en las que sólo reciben información para rendir evaluaciones. Además de afectar a los alumnos, la Jornada Escolar Completa también genera efectos en la labor docente, puesto que los profesores se sienten igual de cansados que los alumnos, sin embargo, ellos deben dejar de lado sus sensaciones y sentimientos para ejercer su trabajo.

    Esto demuestra que existen muchas falencias dentro del sistema educacional y que la implementación de mayor tiempo en el colegio no implica que haya una mejor calidad en los procesos de enseñanza y aprendizaje.

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  132. Hola a todos, mi nombre es Montserrat Ulloa y soy estudiante de cuarto año de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile.

    Con respecto a la pregunta número 2, y tomando en cuenta que falta menos de un año para egresar de la carrera y ejercer como docente, siento que existe cierta incertidumbre respecto al ejercicio como profesora dentro del aula, ya que a pesar de haber participado en prácticas en dos establecimientos educacionales bastante diferentes entre sí, la experiencia va a ser diferente sin un profesor guía que esté presente durante la realización de las clases. Sin embargo, con respecto a contenidos y metodologías, siento más seguridad, ya que podría ser capaz de aplicar dichos conocimientos en el aula de clases, aunque no tenga, a mi parecer, los conocimientos necesarios para enfrentar algunas dificultades que se podrían presentar, por lo que podría aprenderlo durante el ejercicio docente a lo largo de los años escolares.

    Con respecto a las dificultades mencionadas anteriormente, podrían animarme para conocer de mejor manera la labor del docente, ya que podría aportar una mirada más profunda de las realidades y contextos de los diferentes niveles educacionales a los que tendré que hacer clases, sin embargo, al no tener las herramientas necesarias, genera incertidumbre, ya que afrontarse a estas dificultades será un aprendizaje constante mientras reconozca y analice las diferentes realidades.

    En este sentido, el docente debería tomar un rol activo dentro del aula de clases para poder comprender a cabalidad las diversas dificultades que se podrían presentar, además de tomar una actitud de comprensión, interpretación y análisis de las diversas vivencias que ayudarán al profesor a tomar las herramientas necesarias para adaptar sus metodologías a un determinado contexto y que el aprendizaje sea significativo para los estudiantes.

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  133. Saludos a todos los participantes. Mi nombre es Christopher Flores Cortés, estudiante de pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, ubicada en la región de Coquimbo, Chile.
    Mi comentario se desarrolla a partir, tanto de la propuesta de Santiago Herrero Gea para este foro número 18, como de sus interrogantes. Respecto a la primera pregunta que plantea; ¿Qué vemos en los institutos o colegios en los que estamos ejerciendo como profesores en prácticas? En mi cabeza, brotan una multitud de recuerdos, pensamientos y reflexiones como resultado, de las cuales, aquí solo desarrollaré algunas. A lo largo de mi carrera universitaria, he experimentado las vivencias de dos prácticas, la primera únicamente de observación, mientras que la segunda de ayudantía, con varias clases de por medio. A través de este proceso de inmersión en el campo educativo, logré comprender la complejidad de enseñar, y no solo por las tareas, contenidos, burocracia y metodologías de enseñanza, sino por la propia complejidad de tratar con alumnos de diversas esferas socioeconómicas, culturales y psicológicas. Pude observar como alumnos asistían a clases con grandes preocupaciones en sus cabezas (fallecimientos, maltrato, problemas de alimentación, económicos, de drogas), pese a este panorama, los docentes, tanto profesionales como en formación, exigen en el plano educativo, sin ir un poco más allá de estas problemáticas, si bien se acepta que el docente es profesor y no un cuidador o padre, me surge la pregunta que creo que a varios se les ha originado a lo largo de sus experiencias; ¿Hasta qué punto llega la tarea docente? Comprendo aquellos argumentos de que el docente no puede ser padre, pero ¿Es un buen docente, el que exige dos alumnos por igual, sabiendo que uno de ellos se encuentra inmerso en la drogadicción?, ¿Es un buen docente, el que exige dos alumnos por igual, sabiendo que uno de ellos durante una semana no ha desayunado? Creo que en este punto deberíamos reflexionar más, es que no son decisiones de los alumnos, no podemos responsabilizar a padres que en varias ocasiones no existen, pero ¿Qué hacemos?, los problemas de drogas en varias de las situaciones terminan con alumnos expulsados del colegio, o en el SENAME y al final del camino, terminan aún peor con este tipo de “soluciones”. Creo que este tema da para mucho, y que quizás no tiene solo una respuesta, o quizás una solución definitiva, pero sin duda, es necesario reflexionar para comprender hasta qué punto debemos exigir a todos los alumnos lo mismo.
    Saludos cordiales, Christopher Flores. Estudiante pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía, Universidad de La Serena.

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  134. Saludos a todos los participantes. Mi nombre es Christopher Flores Cortés, estudiante de pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía en la Universidad de La Serena, ubicada en la región de Coquimbo, Chile.
    Comenzaré exponiendo un pensamiento que me ha inquietado desde que entré a estudiar pedagogía y que aún lo mantengo, pues por ello quiero darlo a conocer, para conocer si existen otros casos similares. Mi periodo escolar, lo realicé en una escuela municipal pública, donde era común presenciar disputas o problemas delicados respecto a los comportamientos de los alumnos tanto dentro del aula, como en todo el sector de las dependencias del colegio. A partir de esto, es común pensar que si bien el contexto de mi colegio era delicado, existen otros con aún más problemas. Frente a esta problemática, al entrar a estudiar pedagogía me pregunté ¿Cómo puedo controlar eso en una sala de clases? ¿Qué herramientas me servirían para evitar tales problemas, o aún más complejo, para evitar que alguna disputa desencadene alguna situación trágica que lamentar? Una vez ingresado en la carrera de Pedagogía en Historia y Geografía, busqué la orientación de docentes, y pregunté, sin embargo, hoy ya en cuarto año, si bien tengo una firmeza y seguridad mayor para desenvolverme en el aula, siento que poseo falencias respecto a esa problemática ya expuesta, siento que faltan herramientas que me ayuden a evitar, solucionar o incluso a disminuir tales disputas que surgen en el aula y que pueden llegar a obstaculizar la tarea de la enseñanza-aprendizaje. Por ello he comentado esto, para saber si esta falencia sienten ustedes que también la poseen, o si es inseguridad y únicamente con la experiencia podré solucionarlo.
    Saludos cordiales, Christopher Flores. Estudiante pregrado de Pedagogía en Historia y Geografía, Universidad de La Serena.

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    1. Concuerdo contigo Christopher, la universidad entrega diferentes herramientas para el desarrollo teórico del alumnado, sin embargo, en el aspecto práctico, las clases simuladas son el único acercamiento al futuro laboral, apartando y no entregando las herramientas que permitan al docente intervenir en los diferentes problemas que surgen en las escuelas. Por otro lado, los docentes tanto del área pedagógica como de la propia disciplina, exponen y profundizan sobre las culturas que poseen los colegios y que son relevantes a la hora de entender las conductas que surgen en estos. sin embargo, no entregan pautas claras de como ingresar en tal cultura escolar. En síntesis, tanto la falta de herramientas para la solución de conflictos como la carencia en la entrega de información sobre como integrarse a las culturas escolares, generan una presión en los futuros docentes que conlleva al fracaso o que en gran medida genera pensamientos negativos sobre la tarea pedagógica. De esta forma es esencial que las carreras de pedagogías integren estos contenidos para que los alumnos, futuros docentes, se puedan desenvolver de mejor forma en el aula de clases.

      Saludos

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  135. Hola, muy buenas. Mi nombres es Oscar Ledezma y al igual que varios compañeros que han comentado aquí, soy estudiante de Pedagogía en Historia y Geogragía, de la Universidad de La Serena, Chile.
    Respecto a la primera pregunta, desde mi perspectiva, las expectativas que podamos tener sobre la realidad educativa de los establecimientos es relativa a diversos factores, entre los que podemos encontrar nuestra experiencia como estudiantes primarios y secundarios, y por otro lado, el imaginario que configuramos al respecto en nuestra formación inicial como docentes dentro de un contexto determinado. En mi caso, al considerar estos factores, contextualizado en las condiciones laborales de los docentes dentro del sistema educativo chileno de los últimos años, no he tenido muy buenas expectativas al respecto, aunque establecer esta visión negativa como algo absoluto y general a todas las realidades resulta ser un sesgo peligroso, con esto me refiero a que la realidad educativa es muy diversa como para establecer una expectativa y regir la percepción de nuestra experiencia a partir de ella; ya que ésta a su vez dependerá de los establecimientos en los que realicemos nuestras prácticas docentes, y las relaciones que sucedan en estos ambientes.
    En mi caso como estudiante de pedagogía he tenido la suerte de realizar mis prácticas y algunos reemplazos esporádicos en el Colegio San Lucas, de la ciudad de La Serena, Chile. Este establecimiento cuenta con pocas matrículas comparado con otras escuelas, de manera que solo existe un curso por nivel, desde primer nivel primario hasta el último secundario, y el promedio de estudiantes por curso no supera las 15 o 16 personas. Dadas estas condiciones, el desarrollo de prácticas docentes no resulta ser un trabajo tan complejo como en otros lugares, aunque no esté exento de problemáticas.
    Así, respecto a la aplicación de una docencia innovadora, puede que ésta esté condicionada al contexto en el que se busque aplicar, lo que me lleva a concluir que una innovación en la práctica docente debe ser atingente a la realidad de cada establecimiento y según los estudiantes que en él coexistan, y elaboradas desde el mismo establecimiento, más que aplicar reformas y consejos emanados desde la cúpula del sistema educativo, el cual ha demostrado en variadas ocasiones objetivos y políticas que distan mucho de las verdaderas necesidades educativas de la población, enfocándose en desarrollar prácticas atingentes al modelo económico imperante en el país.
    Es decir que los establecimientos, pero más aún los docentes, que busquen innovar en materia educativa, no necesariamente deben hacerlo a partir de lo que diga el Ministerio de Educación, sino que ellos de una forma proactiva pueden generar ideas atingentes a su necesidades sin depender de un ente que lo rija.

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  136. hola Mi nombre es Marcela Santibañez Diaz estudiante de pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena, Chile. Actualmente soy alumna de cuarto año de la carrera.

    con respecto a las ciencias sociales.
    Todas las ciencias sociales juegan un papel muy importante en el aprendizaje académico, puesto que construyen las bases del conocimiento con el cual percibimos el mundo y desde las cuales creamos el ideal de futuro.

    A lo largo de la historia hemos pasado varias veces por momentos de genialidad intelectual propiciados por distintos hechos como los nuevos descubrimientos, movimientos literarios, filosóficos y sociales.

    En las últimas dos décadas hemos vivido grandes cambios de transformación social como la conectividad global, avances en la tecnología y el auge de nuevas ciencias como la física cuántica que están cambiando los viejos paradigmas. Esto nos haría pensar que las ciencias sociales han crecido a la par en este contexto generando nuevos movimientos y visiones. Sin embargo, en la última década hemos visto una devaluación progresiva de las ciencias sociales, las cuales al parecer han perdido importancia o valor en este nuevo mundo tecnologizado, que busca mecanizar el aprendizaje, trabajos y actividades. Claramente las ciencias sociales no están consideradas como motor económico, por lo tanto son casi dejadas a su suerte. Hemos olvidado su importancia en la generación de la masa crítica frente a los problemas que vive la sociedad.

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  137. Buenas tardes mi nombre es Sergio Godoy M. soy estudiante de pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena Chile, mi comentario parte sobre el interés y el desafío de la evaluación docente en Chile.
    Actualmente, parece que en términos evaluativos se ha avanzado de manera correcta, en el proceso de que se debe hacer o evaluar, o la misma ejecución de la evaluación, como docentes en cualquier aspecto, debemos estar preparados y tener una formación académica que nos permita tener una visión objetiva sobre la importancia de la evaluación en el ámbito de todo proceso académico, siendo esta una evaluación completa, partiendo por los docentes, los estudiantes, las escuelas, los procesos académicos, la misma evaluación que se realiza, los contenidos que se imparten, de manera tal de comprender y tener una visión clara de los procesos, de los aspectos deficientes y de los puntos altos, de tal forma que se pueda mejorar o mantener los respectivos procesos eficientes del docente y de todo lo que involucre el proceso formativo. En este aspecto debemos comprender que herramientas se le entrega al docente en materia evaluativa, es verdaderamente importante que las políticas públicas educativas de Chile, estén en concordancia con quienes las ejecutan, que sean planificadas por docentes especialistas en la materia, y en apoyo de organizaciones relacionadas al área, preparando al docente desde sus inicios para poder realizar e implementar los procesos evaluativos, esto en un ámbito universitario previo, digamos una preparación universitaria para poder aplicar y medir los resultados, para así poder tener respuestas correctas y no sesgadas por errores de evaluación, teniendo en claro la planificación de las políticas educativas para no quedar desfasado o con una evaluación errónea, para ello se debe implementar un proceso independiente y distinto de las organizaciones políticas gubernamentales, que les permita libertad y no depender o tener una visión ideologizada que pueda interferir en la evaluación, para favorecer a los gobiernos de turno instrumentalizando las evaluaciones y los resultados, de esta manera la evaluación docente pasa a ser una herramienta muy valiosa a la hora de hablar de calidad educativa, que nos permitirá en el mediano plazo modificar a partir de las evaluaciones y resultados, las políticas públicas orientadas en la mejora de la educación, permitiendo orientar y sustituir medidas erróneas o procesos deficientes que empañen la calidad, de tal forma que permita la evaluación una mejora y no un castigo, fomentando incentivos entre las instituciones, docentes, estudiantes, etc. con quienes obtengan buenos resultados.

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  138. Hola, Tomás Cáceres nuevamente. Ahora pretendo responder la pregunta 3, referida al rol de las Ciencias Sociales en la Educación actual.

    Pienso que las Ciencias Sociales históricamente han ejercido una potente influencia en la Educación, razón por la cual esta última se mueve en función de los paradigmas que elaboran y establecen este tipo de ciencias. Últimamente la característica predominante en el ejercicio de las Ciencias Sociales es la especificación de las temáticas que éstas tratan, prefiriendo las investigaciones acotadas sobre aquellas enfocadas en proponer una explicación extensa y multidisciplinaria de algún problema. Esta disposición influye también en la investigación en Educación, provocando que los resultados no sean tomados en cuenta tanto por la población general como por aquellas personas que se dedican a recopilar información para realizar reformas en Educación ¿Cuál es el punto de investigar una problemática en Educación si los resultados están repletos de tecnicismos y aplicaciones que a nadie le interesa?

    Es por lo expuesto anteriormente que pienso que las Ciencias Sociales no han perdido importancia en el contexto de la educación, sino más bien sustancia: éstas ciencias deberían reinventarse con el objetivo de llegar a un mayor público.

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  139. Mi nombre es Alain Monárdez, como alumna de cuarto año de pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de La Serena he tenido la oportunidad de realizar dos prácticas en aula (próxima a realizar mi práctica profesional), con estas he podido confirmar que la realidad dentro de las salas de clase muchas veces difiere con lo que hemos aprendido durante los años que ha durado nuestra formación inicial en la universidad, teniendo en cuenta que contamos con una valiosa base teórica que en varias ocasiones no se complementa con herramientas técnicas para ejercer nuestra profesión. Se debe tener consciencia de la diversidad de alumnos que se pueden presentar dentro de las salas de clases, muchas veces influenciados por el contexto donde los establecimientos educacionales se encuentran ubicados, siendo factor determinante en varios casos para la forma en que debamos hacer frente a nuestro trabajo. Y qué ventajas nos entrega esto, el poder darnos cuenta desde nuestra formación temprana como al profesor hoy en día se le exige ser un agente innovador, capaz de concentrar la atención de un, en algunos casos, elevado número de estudiantes que piden diferentes estrategias para absorber el conocimiento que se les busca entregar.

    Hoy en día entregar información novedosa se vuelve un reto complejo para los profesores inmersos en un sistema donde los alumnos obtienen la información de manera instantánea gracias a los avances de la tecnología y aún más importante, al libre acceso que se tiene a las más diversas fuentes de información, por ende, la tarea de ejercer una docencia innovadora se vuelve cada día más difícil al considerar que el asombro no podrá ser fácilmente provocado en los estudiantes, pero de alguna manera como profesores es necesario ir absorbiendo las posibilidades que entregan estas nuevas herramientas, modificándolas y adaptándolas para hacer de ellas nuevas metodologías y técnicas que interesen y aún más importante enseñen de manera eficaz a los estudiantes. Puesto que, un buen profesor no será solamente quien maneje a la perfección el contenido que está enseñando sino también el que es capaz de trasmitir ese contenido a los estudiantes volviéndolo un aprendizaje significativo para ellos.

    Ahora bien, todo lo anterior de alguna manera se puede enlazar con otros de los cuestionamientos presentes en el geoforo, cual es nuestra percepción sobre la docencia, como futuros docentes recibimos un impacto negativo de la profesión, sobre todo en lo que respectan a las problemáticas y limitaciones dentro del aula y los establecimientos educacionales generando consigo una imagen negativa sobre la labor docente, sin embargo, desde mi punto de vista considero necesario estar dentro del sistema para poder emitir un juicio sobre ello puesto que las experiencias serán diferentes en todos los casos, siendo posible que así se pueda revalorizar la profesión, es más, si tenemos en cuenta que como profesores de Historia y Geografía tenemos la oportunidad de estimular un sinfín de capacidades en nuestros alumnos, en el afán de formar ciudadanos críticos que sea capaces de desenvolverse dentro de la comunidad agentes integrales, responsables y conscientes.

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  140. Leyendo las intervenciones de öscar, Tomás y Alain vemos que uno de los desafíos más grandes del docente de Geografía es enfrentarse a la diversidad de situaciones en las aulas.
    A mi modo de ver es preciso recuperar un principio de la Geografía, que explica las diferencias entre lo único y lo individual: las clases son individuales, pero no únicas. Hay aspectos semejantes a las de otras aulas y por eso podemos reflexionar teóricamente para buscar criterios que orienten nuestras decisiones. En esto estriba nuestra tarea docente: investigar cómo se produce el aprendizaje de otras personas sobre los problemas sociales y ambientales que están en su medio vivido.
    Si somos capaces de transformar los obstáculos individuales en problemas sociales hemos avanzado mucho.
    Ánimo
    Un saludo

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  141. Hola a todos los participantes, mi nombre es Diego López y estudio en la Universidad de La Serena, carrera de Pedagogía en Historia y Geografía. Por medio de este comentario me gustaría responder la segunda pregunta que se plantea en este foro, la cual apela directamente a nuestro sentir como futuros docentes y a la actitud con la cual afrontamos las dificultades que vemos día a día en los centros educativos.
    Frente a lo consultado, me gustaría señalar que mi sentir está enfocado a enfrentar los desafíos que nos plantea la docencia, y en lo personal, me siento animado por las dificultades que se puedan presentar dentro del contexto educativo. El rol docente, en el ámbito académico y del conocimiento, debe estar en constante actualización según los nuevos conocimientos que se estén produciendo dentro de las disciplinas a las cuales nos dedicamos. Esto quiere decir que se debe instruir consultando constantemente centros de producción científica como revistas especializadas, y al mismo tiempo, asistir a congresos y ponencias que nos instruyan sobre temas que a nosotros nos llamen la atención o que se encuentren en la palestra de los círculos intelectuales.
    Por otro lado, es responsabilidad del profesor informarse en cuanto a las nuevas propuestas metodológicas que se estén desarrollando, o bien acerca de recursos y herramientas didácticas que permitan un mayor acercamiento de los estudiantes al conocimiento, de la manera que estos estén preparados de la mejor manera frente a su proceso de enseñanza y aprendizaje.

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    1. Muy buenas tardes Diego, soy Francisca Arredondo. Me gustaría complementar tu comentario con un concepto que hemos revisado en clases sobre Metodología y Enseñanza de la Geografía, el cual corresponde al uso de los diversos lenguajes geográficos y cómo estos se relacionan con los recursos didácticos, lo que tiene que ver con el último punto que tratas en tu respuesta, lo que guarda relación con los planteamientos metodológicos, y en cierto sentido, la renovación y la constante revisión que debe hacer un docente sobre su propia labor.

      En este sentido, me gustaría señalar que una de las formas en las cuales me gustaría enfocar la enseñanza de la geografía en mi futura labor, es la de la utilización de los diversos lenguajes geográficos para la enseñanza, postura que me pareció sumamente innovadora, ya que permite la utilización de herramientas para la enseñanza variadas, que vayan en concordancia con la forma de aprendizaje que posee la amplia gama de estudiantes a la cual tendremos que enfrentarnos.

      La utilización de los diversos lenguajes geográficos nos permitirá tratar las temáticas que abordemos en la sala de clases desde diversas posturas, ya que estos poseen diversas aplicabilidades, las cuales van desde las inteligencias múltiples hasta la neurodidáctica y la semiótica; ya que los lenguajes geográficos como el matemático, el cartográfico, el literario, etc., transmiten códigos que emplean diversos medios de transmisión que finalmente se traducen en recursos didácticos para los estudiantes, los cuales no siempre están conscientes del ejercicio que hay detrás de la selección de los recursos que emplea el docente.

      Finalmente, las principales ventajas que puedo señalar sobre una buena utilización de los recursos didácticos se encuentran el alcanzar una mejor interacción entre los alumnos y el profesor y el desarrollar una clase dinámica y atractiva a la cual los alumnos no se encuentran habituados.

      Te envío un saludo afectuoso.
      Francisca.

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